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Nuevo Estadio de El Batán / Estadio Hermanos Antuña (1951-)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL CAUDAL DEPORTIVO. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CAUDAL DEPORTIVO. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN MIERES:
Cuentan las crónicas que a finales de la primera década del s. XX ya existía un club de fútbol en el concejo de Mieres que jugaba bajo la denominación de Turón Foot-ball Club. Este tuvo una vida efímera y no fue hasta 1913 cuando desde el colegio de La Salle se volvieron a dar patadas al balón formando sus alumnos un equipo denominado con el devenir de los años El Príncipe, quien vestía de rojinegro y el cual se convirtió en cantera de clubs que posteriormente se crearon en la ciudad. En 1914 aparece el primer club organizado, el Sporting Club de Mieres, entidad que a lo largo de su historial se caracterizó por sufrir abundantes derrotas, motivo que ocasionó su desaparición a principios de 1918 ante la dejadez de sus aficionados y simpatizantes.
HISTORIA DEL CLUB:
1918 – 1920
Es precisamente en ese año de 1918 cuando de la idea de tres aficionados, Joaquín Antuña, Jerónimo Ibrán y Luís Santiago Álvarez Casal, prende el nacimiento de un nuevo club. Los colores elegidos son los rojinegros del popular Arenas Club de Guecho, estandarte que quieren imitar los mierenses y el nombre queda en el aire, quedando tres opciones: Athletic Club, Mieres F.C. y Racing Club. Al final se quedan con esta última y con ello fundan el Racing Club de Mieres el dia 6 de julio de 1918. El club debuta el 16 de julio frente al Racing Club de Pola de Siero, venciendo los locales por 4-0. Su primer terreno de juego es el Campo de El Llosu, situado en el Batán, el cual será víctima de unas inundaciones en las postrimerías de ese año a causa del desborde del río Caudal.
Es en ese momento cuando la Fábrica de Mieres, empresa minera y siderúrgica establecida en la ciudad desde 1879, asume la dirección y apoyo hacia el deporte local volcándose en la construcción del Campo de El Batán, inaugurado el 15 de julio de 1919. La Fábrica contrata jugadores de primer orden y les da trabajo, creándose un binomio que fortalece una entidad que empieza a despuntar. Cambian su indumentaria a camisa blanca con franja vertical roja y pantalón negro que luego alternan con el blanco, por no gustar la anterior equipación.
1920 – 1930
En los años veinte nacen multitud de equipos en la ciudad como: el Bustiello, la Gimnástica de Ullón, el Fortuna, el Bachiller y se consolida el Príncipe. El Racing Club de Mieres, siendo presidente Víctor Méndez Trelles participa en Segunda Categoría, hasta dar el salto a la Serie B de Primera Categoría, y la sesión 27/28 milita ya en la Serie A de la Primera Categoría asturiana y empieza a codearse con los principales clubs de la región, tales como: el Real Stadium Club de Avilés, el Real Sporting de Gijón, Real Oviedo F.C., Club Gijón ó el Racing Club de Sama de Langreo. Sin embargo, una vez creadas las diferentes Categorías Nacionales, no es capaz de dar el salto a estas y pese a tener buenas plantillas se conforma con competir en Regional.
1930 – 1940
Paralelamente, surgen nuevos clubs como: el Comercial, el Titánico de los Pontones, el Sporting de Sobrelavega, el Athletic Club de la Pasera ó el Athletic Club de La Peña, todos ellos de escaso porvenir. En 1932, el club modifica su escudo suprimiendo la corona y adecuando un rombo rojo con la inicial de su nombre. A mediados de los treinta, el club encabeza la Primera Categoría Regional hasta que en 1934 surgen en las cuencas mineras locales los movimientos protagonizados por trabajadores mineros, resultando muchos de ellos fallecidos por la contundencia del ejército. El club presidido por Ramón Antuña Montoto altera de nuevo su escudo y sustituye el rombo rojo por uno negro en señal de luto, llegando poco después la Guerra Civil.
1940 – 1950
Una vez pasada esta, Ramón Antuña vuelve a hacerse cargo del club y con su labor se edifica el Campo de Las Moreras en 1940, inaugurado el 27 de septiembre frente al Club Hispania de Gijón, venciendo por 2-0. A finales de año surge la Ley que prohibe los extranjerismos y el 3 de enero de 1941 la entidad adopta el nombre de Caudal Deportivo. Su filial, el Racinguín Club, cambia así mismo su denominación a San Juan Deportivo. El club mierense, tras unos años duros de posguerra, empieza a tomar aire y gracias a la ayuda empresarial en la temporada 45/46 consigue ascender a Tercera División, recibiendo su presidente Ramón Antuña la Medalla del Mérito Deportivo. Instalado en un peldaño superior, permanece unos años acoplándose a la nueva categoría y en la campaña 49/50 se proclama Campeón de grupo, no superando la Fase Final al ser quinto.
1950 – 1960
En la temporada 50/51 es subcampeón de Liga, pero en la Fase Final es primero consiguiendo ascender a Segunda División. La ciudad entera se vuelca con su equipo y el club debuta en la categoría de plata durante la campaña 51/52 con un octavo puesto. Para tal debut se construye el Estadio Municipal de El Batán, inaugurado el 16 de septiembre de 1951 con un encuentro frente a la U.D. Huesca y venciendo por 4-0. Son años de esplendor y Mieres aumenta su población y productividad, surgiendo otros clubs como el Santa Marina C.F., en el popular barrio del mismo nombre. Pese a ello, no todo son flores y el club ha de luchar para conservar la categoría, ocupando puestos rezagados en la clasificación hasta el gran éxito de la campaña 55/56 en la que es cuarto.
Tras un par de temporadas más en Segunda División con Ángel Escobedo en la presidencia, la campaña 57/58 supone el adiós definitivo tras ser decimoquinto clasificado, a tan sólo un punto de la salvación. El club desciende a Tercera División y es subcampeón en la temporada 58/59, siendo eliminado en la Promoción de Ascenso por la U.D. Salamanca: 1-0 en Mieres y 2-0 en la capital charra. En la edición 59/60 es Campeón de Liga, pero en la Promoción es eliminado por el Pontevedra C.F.: 0-0 en Pasarón, 1-1 en casa y 0-1 en el desempate jugado en Santander.
1960 – 1970
La década de los años sesenta el Caudal Deportivo la pasa íntegramente en Tercera División intentando pelear por el ascenso, siendo sus intentos frustrados. Tres oportunidades tiene y las tres las desaprovecha. En la campaña 62/63 es Campeón de grupo, cayendo en la Promoción ante el C.D. Europa: 1-1 en casa y 6-2 en Barcelona. En la sesión 63/64 repite título de Liga y eliminación en la Promoción, ahora ante el C.D. Menorca: 2-0 en Mahón y 3-5 en casa.
En la edición 66/67 es subcampeón, cayendo de nuevo el equipo presidido por José Maria Rodríguez Hevia en la Promoción tras superar en principio al Lloret C.F.: 2-0 en casa y 1-0 en la localidad gerundense; y ser eliminado por el Real Unión Club: 1-0 en Irún, 1-0 en casa y 3-0 en el desempate disputado en Burgos. Destacar que desde el 9 de junio de 1964, el Campo de El Batán cambia su denominación y pasa a ser conocido como Hermanos Antuña.
1970 – 1980
La década de los años setenta es irregular para el club mierense. La economía de la ciudad tan boyante en tiempos anteriores con el auge industrial, empieza a decaer alarmantemente y las fábricas y operadores migran a otras ciudades de su entorno, como Gijón y Oviedo principalmente. El Caudal Deportivo se resiente de esta crisis y aguanta a duras penas en Tercera División. En la campaña 73/74 ha de defender su plaza ante el aspirante C.D. Granollers: 2-3 en la localidad barcelonesa y 0-0 en casa; descendiendo a Primera Categoría Preferente en la siguiente edición 74/75.
En la campaña 75/76, con Gustavo Losa Martínez como mandatario del club, asciende a Tercera División y desde esta categoría, gracias a la creación de la Segunda División B, a esta última al término de la sesión 76/77. Debutante en la recién estrenada categoría que se compone inicialmente de dos grupos, tan sólo resiste un par de temporadas debido a la carestía de la misma y a los grandes desplazamientos que se han de realizar, descendiendo a Tercera División al término de la campaña 78/79.
1980 – 1990
Con la llegada de los años ochenta, la temida crisis industrial se instala y apodera definitivamente de la ciudad asturiana. Su población disminuye considerablemente y su club más representativo sufre altibajos en sus participaciones ligueras. En la temporada 83/84 es Campeón de grupo, eliminando en la Promoción al C.D. Manchego: 2-1 en Ciudad Real y 3-2 en casa; y pasando por penaltis a la siguiente ronda, en donde cae ahora eliminado ante el Orihuela Deportiva C.F.: 0-1 en casa y 2-0 en la localidad alicantina.
En la sesión 85/86 es subcampeón de Liga, pero en la Promoción es eliminado por el C.P. Almería: 1-0 en casa y 4-2 en la vuelta disputada en la capital andaluza. En la temporada 86/87 asciende a Segunda División B gracias a la ampliación de esta a cuatro grupos tras una remodelación de la categoría, y al ofrecimiento de tres plazas que asigna la RFEF al grupo regentado por la Federación Asturiana. El club realiza un mal papel y desciende nuevamente a Tercera División tras ser decimoctavo en la edición 87/88.
1990 – 2000
La década de los años noventa trae un nuevo sistema competitivo en el cual los cuatro primeros clasificados de cada grupo de Tercera División entrarán a formar parte de un nuevo grupo de cuatro clubs, de los cuales el mejor clasificado mediante sistema de Liga a doble vuelta ascenderá a Segunda División B. Este sistema se convierte en un quebradero de cabeza para la entidad blanquinegra que ha de disputar hasta un total de siete Liguillas para poder conseguir ascender a Segunda División B.
En la campaña 90/91 es Campeón y en la Promoción segundo a tan sólo un punto del Fabril Deportivo, dejando por detrás a C.D. Fuenlabrada y S.D. Almazán. En la edición 91/92 es subcampeón, pero en la Liguilla es superado por el Racing Club de Ferrol, acompañándoles Cultural de León y el C.D. Móstoles. En la campaña 92/93 es nuevamente subcampeón de Liga y Promoción, superado en dos puntos ahora por la U.D. San Sebastián de los Reyes y dejando atrás a Viveiro C.F. y Club Atlético Bembibre. En la sesión 93/94 es Campeón de Liga, siendo superado de nuevo por dos puntos de diferencia en la Liguilla por el C.D. Móstoles. Les acompañan C.D. Salmantino y C.D. Endesa As Pontes. En la Liga 94/95 repite título por tercera vez de manera consecutiva, siendo tercero en la Promoción tras Real C.D. de La Coruña “B” y C.F. Rayo Majadahonda, mientras que cuarto es el Club Atlético Bembibre.
En la campaña 95/96 es cuarto en Liga y colista en la Promoción, superado por Real Club Celta de Vigo “B”, Zamora C.F. y C.F. Rayo Majadahonda. El merecido ascenso a Segunda B llega por fin en la temporada 96/97 tras ser tercero en Liga, siendo presidente de la sociedad Álvaro Fernández y Manuel Ángel Muñiz entrenador del equipo. Mentalizado para disputar la Promoción, consigue aventajar a C.F. Palencia Cristo Olímpico, C.F. Rayo Majadahonda y Viveiro C.F., ante la alegría de sus incondicionales que se libran de tanto sufrimiento acumulado.
Con este ascenso, el Caudal Deportivo consigue por fin alcanzar el reto propuesto años antes y se estabiliza en la categoría de bronce durante cinco campañas consecutivas aunque con bastantes problemas. En la temporada 98/99 ha de defender su plaza en Promoción de Permanencia ante el Algeciras C.F., superando la prueba al vencer 2-0 en casa y ser derrotado por 1-0 en la ciudad gaditana.
2000 – 2010
En la temporada 01/02 es decimonoveno con sólo cinco victorias y la realización de un pésimo campeonato que le hace descender a Tercera División. Su paso por esta categoría afortunadamente es efímero y al término de la sesión 02/03 se proclama Campeón y asciende de nuevo a Segunda División B, gracias al descenso administrativo del Real Oviedo por impago y ser los mierenses los mejores clasificados de los clubs astures para ocupar tal plaza.
A espaldas de este paso, en la Liguilla han sido terceros tras C.D. Fuenlabrada y Club Rápido de Bouzas, siendo colista el C.F. Promesas de Ponferrada. Su paso por la Segunda B de la temporada 03/04 es anecdótico, siendo decimonoveno con cuatro victorias en su haber. Desde entonces milita en Tercera División y sólo destaca su Campeonato de la temporada 06/07 en la que no puede ascender tras eliminar al C.P. Cacereño: 1-1 en la ida y 1-0 en casa y ser eliminado a su vez por el Cte. d’E. Sabadell F.C.: 4-0 en la Nova Creu Alta y 0-1 en los Hermanos Antuña.
El Estadio Hermanos Antuña recientemente ha sido remodelado en 2007 y se ha instalado césped artificial con una nueva gradería, afrontando el conjunto asturiano el reto de volver a Segunda B lo antes posible con José Manuel Martínez en el banquillo local. Sus intentos de las campañas 07/08 y 08/09 son baldíos, por cuanto queda en ambas séptimo clasificado, dándose el paso en la temporada 09/10 cuando se obtiene el Campeonato de Liga y en la Fase de Campeones elimina al Jumilla C.F.: 2-0 en casa y 1-1 en la localidad murciana, ascendiendo por quinta vez en su historia a la Segunda División B.
2010 – 2020
Sin embargo tanto sufrimiento no obtiene recompensa alguna en la campaña 10/11. Con poco poder rematador y acierto de cara al gol, el conjunto asturiano lucha dirante todo el campeonato en busca de asegurarse la permanencia, un objetivo que se alcanza en primera instancia tras ser decimosexto, pero que se dilapida en la Promoción de Descenso al ser superado por la U.B. Conquense; 2-0 en la capital castellano-manchega y un insuficiente 2-1 en casa. La edición 11/12 se presenta con el objetivo de recuperar la categoría recién perdida y con gran parte de los mimbres del ejercicio anterior, el conjunto blanquinegro consigue auparse al primer puesto al término del campeonato. En la Fase de Campeones logra superar al Yeclano Deportivo tras empatar 0-0 en la ida y vencer claramente por 3-0 en casa, consiguiendo retornar por la vía rápida y con total merecimiento.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
Nombre: Estadio Olímpico Municipal de L’Hospitalet
Año de inauguración: 1999
Cambios de nombre:
Estadio Olímpico Municipal de L’Hospitalet / Estadi Municipal de Futbol de L’Hospitalet (1999-)
Capacidad: 6.740 espectadores
OTROS ESTADIOS:
Campo Municipal de Deportes / Camp Municipal d’Esports (1957-1999)
Estadio Olímpico Municipal de L’Hospitalet / Camp de Futbol Municipal de L’Hospitalet (1999-)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL CENTRE D’ESPORTS L’HOSPITALET. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CENTRE D’ESPORTS L’HOSPITALET. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN L’HOSPITALET DE LLOBREGAT:
Conurbada con la capital Barcelona, la ciudad de L’Hospitalet de Llobregat inevitablemente pronto se vio seducida por el fútbol e influida por el gran éxito de los clubs barceloneses, apareciendo en 1909 la primera sociedad organizada, el Sport Club Hospitalenc. Esta entidad participó en innumerables torneos y partidos amistosos frente a clubs de la capital y de su entorno, surgiéndole en 1917 un rival desde el barrio de La Torrassa, el Club Deportivo Torrasense, federado en 1921 como Torrasense F.C. y que tiempo después pasa a denominarse C.D. Torrassenc, que con su camisa blanca y pantalón azul se convierte en el más importante, a los que se suma poco tiempo después la Unión Sportiva Eulaliense, federada como Unió Esportiva Eularienca. Inscritas las tres entidades en la Federación Catalana, compiten en las distintas categorías que esta organiza, destacando en 1927 la fusión entre el S.C. Hospitalenc y la U.S. Eulaliense dando lugar a la Unión Deportiva Hospitalet ó Unió Esportiva Hospitalet, que viste camisa blanca y pantalón azul, disputando sus encuentros en el Campo del Camí de la Fonteta.
Previamente, el 24 de junio de 1924 se funda el Club Recreativo de Sans, sociedad que más tarde cambia a Club Recreativo Coll-Blanch vistiendo camisa azul y pantalón negro. Sin embargo, a pesar de la existencia de varios clubs, el fútbol hospitalense llegados a los años treinta no consigue destacar, estando muy dividido y careciendo de una sociedad fuerte que compita con los grandes clubs catalanes del momento. Todos ellos participan en categorías demasiado bajas para una población que cuenta con cuarenta mil almas, añadiéndose al concierto el Athletic Club Eulaliense en 1930, llamado Athletic Club Eulalienc en la lengua autóctona. Poco después, a mediados de la década hace aparición el F.C. Marina y la Joventut Hospitalet, pasando este último a ser C.E. Hospitalet. Bajo esta tónica se llega al verano de 1936, año en el que la Guerra Civil paraliza las actividades.
Finalizada la Guerra, la mayoría de los clubs reemprenden su vida deportiva y continúan en los campeonatos catalanes, viendo modificados sus nombres en 1941 a raíz de la Ley del General Moscardó que prohíbe los nombres no castellanos. El Club Recreativo Coll-Blanch cambia a Unión Recreativo Coll-Blanch y el C.D. Torrassenc lo hace a Club de Fútbol Torrasense, quien viste camisa blanquiazul y pantalón azul. El 21 de enero de 1946 nace la Unión Atlética de Coll-Blanch, que viste camisa partida blanca y roja con pantalón negro, sumándose el 10 de septiembre la Sección Deportiva Tecla Sala e Hijos, un club empresarial que viste camisa blanca con pantalón azul formado por trabajadores.
Iniciados los años cincuenta, el fútbol hospitalense padece los mismos males que en las décadas anteriores y la fragmentación de sociedades aún se incrementa con la aparición del Club Deportivo Santa Eulalia en agosto de 1950, una sociedad presidida por Manuel Museras que viste de rojiblanco con pantalón azul. Llegados a 1953, esta tendencia parece que empieza a frenarse y en esa fecha tres clubs locales se fusionan en una sola entidad para confeccionar un club más fuerte y que aspire a cotas más altas: el Club de Fútbol Hércules de Hospitalet, conjunto originado de la fusión realizada entre Unión Recreativo Coll-Blanch, C.F. Torrasense y la Sección Deportiva Tecla Sala e Hijos. La novel sociedad presidida por Amadeo Canela Juvé que viste camisa blanca con franja diagonal azul y pantalón azul, juega en el Campo Pubilla Casas logrando en la temporada 53/54 ascender a Tercera División.
Pero no será el único, puesto que poco después al término de la campaña 55/56, tanto la U.D. Hospitalet presidida por Juan Solanas Casas, como el C.D. Santa Eulalia presidido por Pedro Guarro Moragas, consiguen el mismo objetivo dándose la circunstancia que en la temporada 56/57 las tres entidades militan en la misma Categoría Nacional. El C.F. Hércules de Hospitalet termina quinto dentro del grupo VI y fuera de los puestos de promoción a Segunda División, mientras que U.D. Hospitalet y C.D. Santa Eulalia encuadrados en el grupo VII de Tercera División, terminan decimotercero y vigesimosegundo como colista de grupo, respectivamente.
HISTORIA DEL CLUB:
1957 – 1960
Este encuentro en Tercera División provoca que los tres clubs mantengan reuniones y decidan el 7 de julio de 1957 fusionarse en una nueva sociedad, el Centro de Deportes Hospitalet, conjunto que vestirá camisa blanca con franja diagonal roja y pantalón azul, siendo elegido presidente Domingo Peiró Ribas, disputando sus encuentros en el Campo Municipal de Deportes Generalísimo Franco, el cual es inaugurado oficialmente el 15 de mayo de 1958 con un encuentro del Cto. de Dep. Hospitalet frente al C.F. Barcelona con resultado final de 2-5. El club debuta de forma preocupante durante la campaña 57/58 siendo decimoquinto, mejorando ostensiblemente en la 58/59 al ser cuarto y disputar la Fase de Promoción en la que cae por 3-2 en Las Corts frente al C.F. Amposta, y consiguiendo el Campeonato en la temporada 59/60. Este triunfo le permite promocionar a Segunda División pero es eliminado por el Hércules C.F.: 1-3 en casa y 3-1 en Alicante.
1960 – 1970
Con el cambio de década el Cto. de Dep. Hospitalet es un club potente y ambicioso que lucha por ascender a la categoría de plata, optando en la campaña 60/61 tras ser segundo. En la Promoción elimina al Cto. de Dep. Manresa: 2-2 en la ida y 2-1 en casa; siendo eliminado después por el C.D. Galdácano: 4-1 en la localidad vizcaína y 1-0 en casa.
En la temporada 62/63 consigue el ansiado ascenso a Segunda División con el técnico Zambudio Velasco tras eliminar a C.D. Alcoyano: 4-1 en casa y 4-2 en El Collao; al C.At. Malagueño: 0-1 en la ida, 2-3 en casa y 2-1 en el desempate disputado en el Campo de Las Corts de Barcelona; y al Real Jaén C.F. en la Final: 3-0 en Las Corts con goles de Mauri, Parés y Julián, y un adverso pero insuficiente 2-0 en La Victoria. El conjunto franjirojo con Emilio Huguet en la presidencia y Enrique Rabassa primero y Dagoberto Moll después en el banquillo, debuta en Segunda División la temporada 63/64 siendo decimotercero, puesto que le obliga a defender su plaza mediante Promoción ante el aspirante Club Gimnástico de Tarragona: 3-1 en la ida, 2-0 en casa y 2-0 con tantos conseguidos por Llorens en el partido de desempate disputado en el Estadio del C.F. Barcelona.
Durante la campaña 64/65 tiene los mismos problemas que la anterior para mantenerse, a excepción de que ahora resulta undécimo en un grupo muy igualado. La temporada 65/66 será la última comparecencia en la categoría de plata con Pedro Tort Vela en la presidencia, pues su incapacidad de sumar puntos a domicilio le condenan al decimoquinto puesto y al descenso. Por si no fuera poco, en la siguiente campaña 66/67 encadena otro campeonato horrible y pierde de nuevo la categoría descendiendo a Regional, empezando una crisis institucional, económica y deportiva de la que va a tardar mucho en recuperarse. Destacan en su paso por Segunda División jugadores como: Parcet, Pantaleón, Felipe Mesones, Julián, Arnás, Vancunin, Castaños, Poulsen y Chico Ramírez, entre otros.
1970 – 1980
Los años setenta empiezan con un equipo hundido y con problemas económicos fruto de su paso por Segunda División escasos años antes, iniciando una lenta mejoría a partir de mediados la década cuando en la campaña 74/75 bajo la presidencia de Antonio Jordán es subcampeón de Regional Preferente y promociona como aspirante ante el C.D. Salmantino, siendo eliminado: 3-0 en casa, 3-0 en Salamanca y 1-3 en el desempate disputado en Logroño. En la temporada 76/77 con la creación de la Segunda División B consigue ascender a Tercera División, manteniéndose en esta un par de campañas hasta que regresa a Regional una vez concluida la sesión 78/79 como colista. Tras una breve estancia en Preferente, regresa de inmediato a Tercera División la campaña 79/80.
1980 – 1990
La década de los años ochenta significa en la entidad del Llobregat un salto cualitativo y la superación de una crisis que durante muchos años ha asolado el club. En la temporada 81/82 consigue el Campeonato y logra el ascenso a Segunda División B tras eliminar en la Promoción a la U.D. Güímar: 4-0 en casa y 0-0 en la localidad tinerfeña; y al Pontevedra C.F.: 2-0 en casa y 2-1 en Pasarón. A partir de aquí empieza un nuevo ciclo que perdurará una veintena de años instalado en la categoría de bronce, aunque sus inicios no son nada brillantes pues en sus primeras campañas de los ochenta sufre bastante para mantenerse.
En la campaña 85/86 producto de la remodelación de la categoría, pasa de dos a un solo grupo, no supera el corte establecido por la RFEF y desciende a Tercera División, categoría en la que sólo milita un año al ser quinto y ocupar una de las plazas que le son asignadas al grupo catalán para formar parte de la nueva Segunda División B ampliada ahora a cuatro grupos, permaneciendo en esta de forma acomodada en lo que resta de década con David Lacruz Pedra en la presidencia y habiéndose convertido en filial del Real C.D. Espanyol, trato del cual se beneficia ampliamente al pasar por el viejo Estadio Municipal de Hospitalet grandes figuras en ciernes.
1990 – 2000
Los noventa los disfruta íntegramente en Segunda División B en una serie de campeonatos en los que pasa desapercibido, pues si bien nunca destaca demasiado y como máximo llega a aproximarse a los puestos que dan derecho a promocionar como la 90/91 entrenado por Jaume Sabaté, la sesión 91/92 por Alfonso Martínez Salinas ó la 93/94 dirigidos por Ramón Moya; en otras ocasiones es desplazado a clasificaciones en torno a mitad de tabla. Con todo significa el adiós al tratado que mantiene con el club “perico” mediada la década y a un esbozo de crisis solventada gracias a la intervención del Ayuntamiento y la llegada a la presidencia de Miguel García.
En 1999 se abandona el viejo Estadio Municipal y el club se traslada al moderno Estadio Olímpico Municipal, también llamado de la Feixa Llarga por su ubicación, un estadio que previamente había sido empleado como escenario de béisbol desde las Olimpiadas de Barcelona ’92, presentando una curiosa imagen. La inauguración del Nuevo Estadio Municipal se produce el 20 de marzo en un encuentro de Liga frente al C.F. Gavà con resultado de 2-0 para los locales.
2000 – 2010
Con el estreno del nuevo milenio el club cambia de nombre a Centre d’Esports L’Hospitalet, toma aire y tras realizar una buena campaña 00/01 con un sexto puesto a tan sólo un punto de disputar la Liguilla de Ascenso, en la temporada 01/02 es cuarto y consigue entrar en la Promoción de Ascenso a Segunda División A, siendo superado por Getafe C.F. y Motril C.F., mientras la Cultural y Deportiva Leonesa es colista. Sin embargo, en la campaña siguiente 02/03 se realiza un pésimo campeonato y después de ser decimonoveno desciende a Tercera División, categoría en la que es tercero en la temporada 03/04 y lucha por ascender, no consiguiéndolo después de eliminar al Mazarrón C.F.: 1-0 en casa y 0-0 en la localidad murciana; y ser eliminado en la Final por el Levante U.D. “B”: 0-1 en Valencia y 0-1 en casa tras prórroga y penaltis favorables a los valencianos.
En la campaña 04/05 conquistan el título de Liga y en la Promoción superan a C.F. Sporting Mahonés: 2-2 en Mahón y 3-1 en casa; y a Sangonera Atlético C.F. en la Final: 1-2 en Murcia y 3-0 en casa, ascendiendo a Segunda División B. Tras una inicial campaña 05/06 en la que son duodécimos, en la temporada 06/07 con Juan Carlos Oliva como entrenador consiguen ser cuartos y promocionar para dar el paso a Segunda División A, pero son eliminados por la S.D. Eibar: 0-0 en casa y 2-0 en Ipurúa. En la temporada 07/08 realizan un campeonato desastroso y pasan de un posible ascenso al descenso a Tercera División, categoría que tardan dos campañas en abandonar pues tras ser tercero durante la edición 08/09, son eliminados en la Promoción por el C.D. Santanyí: 3-0 en casa y 3-0 en la localidad mallorquina tras los penaltis.
Su retorno a la categoría de bronce se efectúa con el técnico Jordi Vinyals en la temporada 09/10 tras ser Campeón de Liga y no superar la Fase de Campeones, cayendo ante el Rayo Vallecano de Madrid “B”: 0-0 en la capital del país y 1-1 en casa. Estos resultados le hacen tener que disputar más eliminatorias, superando las dos restantes al imponerse a C.D. Azuqueca: 1-0 en la localidad alcarreña y 3-1 en casa; y a la U.D. Almería “B”: 1-1 en la capital andaluza con gol de Lucas Viale que a la postre será decisivo para L’Hospi, y 0-0 en el partido de vuelta disputado en La Feixa Llarga.
2010 – 2020
El reencuentro con la Segunda División B durante la campaña 10/11 es muy satisfactorio, yendo la plantilla de menos a más y realizando una notable segunda vuelta donde a punto se está de alcanzar un puesto en la Promoción de haber durado la Liga unas jornadas más para terminar plácidamente en sexto lugar. En la temporada 11/12 los franjirrojos se trazan como meta alcanzar uno de los primeros cuatro puestos que dan derecho a promocionar, no cumpliéndose las expectativas por poco al concluir sextos.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
Comunidad Autónoma: Comunidad Valenciana / Comunitat Valenciana
Fecha de constitución: 20 de diciembre de 1946
Fecha de federación: 26 de febrero de 1947
CAMBIOS DE NOMBRE:
Club de Fútbol Gandía (1946-)
TÍTULOS NACIONALES:
1 Liga en Segunda División B:
1999/00
3 Ligas en Tercera División:
1961/62
1994/95
2009/10
ESTADIO:
Nombre: Estadio Municipal Guillermo Olagüe
Año de inauguración: 1967
Cambios de nombre:
Estadio Municipal Guillermo Olagüe / Estadi Municipal Guillermo Olagüe (1967-)
Capacidad: 4.800 espectadores
OTROS ESTADIOS:
Campo del Bulevar (1946-1952)
Campo de Montdúver / Camp de Montdúver (1952-1967)
Estadio Municipal Guillermo Olagüe (1967-)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL CLUB DE FÚTBOL GANDÍA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CLUB DE FÚTBOL GANDÍA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN GANDÍA:
Situada en el sureste de la provincia de Valencia junto al mar y capital histórica de la comarca de La Safor, la ciudad de Gandía ha sido tradicionalmente un importante centro cultural el cual vio nacer en su término a grandes literatos que consagraron el núcleo principal del Siglo de oro de las letras valencianas. Dedicada durante muchos siglos al sector agrícola debido a su preciada huerta, la localidad nunca desvió su atención del comercio, una de sus bases financieras, combinando ambas con la pesca y actividad portuaria donde el núcleo marítimo de El Grau centra toda la actividad. A consecuencia de sus magníficas playas, desde los años sesenta el sector turístico ha experimentado un gran crecimiento hasta el punto de ser su más destacada fuente de ingresos, conllevando paralelamente un notable desarrollo urbanístico y demográfico, atrayendo a un buen número de inmigrantes y ciudadanos extranjeros para alcanzar su población los setenta y cinco mil habitantes.
Con algo más de dieciséis mil almas a principios de los años veinte, la irrupción del fútbol en la localidad se produjo en 1922 con la labor realizada inicialmente por los socios del Gandía Foot-ball Club, sociedad pionera que, vistiendo camiseta blanquiazul y pantalón azul, presidida por Miguel Pastor Gómez pronto despertó con su desbordante actividad el interés de otro grupo de jóvenes quienes, interesados en aquella práctica, constituyeron meses después el Sporting Club de Gandía siendo sus colores rojiblancos para la camiseta y azul para el pantalón. Rivalizando desde el principio por su opuesta ideología y distinto estrato social, ambas agrupaciones deportivas empezaron a repartirse la atención de los aficionados locales según su respectiva preferencia, inaugurándose el domingo 23 de diciembre de ese mismo año gracias a la cesión de unos terrenos propiedad de Luis Santonja sitos en lo que hoy es el Colegio de San Francisco de Borja, al final de la Calle Legionario Bernabéu, el denominado Camp de Les Ambrosíes donde se enfrentaron el Gandía F.C. y el Diana F.C. de la localidad de Dénia con resultado final de empate a tres tantos.
Alejadas las dos sociedades gandienses de la por entonces titulada como Federación Regional Levantina de Clubs de Foot-ball y sus campeonatos oficiales, la actividad de blanquiazules y rojiblancos se centró en la disputa de encuentros amistosos frente a clubs de las comarcas vecinas valencianas y del norte de Alicante, siendo también habituales las visitas de clubs procedentes de la capital valenciana quienes atraían a una considerable cantidad de público. Pese a la enconada rivalidad manifiesta entre unos y otros, a mediados de década el fútbol decayó considerablemente en la ciudad ducal hasta el punto de desaparecer ambas entidades, pasando la bandera de este deporte en torno a 1928 a estar representada por los jóvenes en edad estudiantil donde las Escuelas Pías, por obra de disponer de campo propio, prestaron un gran servicio dando lugar a equipos juveniles como la Sociedad Borgiana F.C., el C.D. Tròlec, el Patria Estudiantil, el Ouets de Trememba, el Cosmopolitan Club, el Albañil F.C. y el Beniopa F.C., de la localidad del mismo nombre conurbada con Gandía.
La eclosión del fútbol en esos tiempos no pasó desapercibida entre los exjugadores del desaparecido Gandía F.C. y en 1929 un nutrido grupo de ellos donde figuraban Voro, Albi y Miret, ya con cierta edad, compusieron la Peña Deportiva Azul-Grana con el ánimo de restablecer este deporte a un nivel superior y dar lugar a un club de fútbol que representara a la ciudad. Haciendo uso del Camp de Les Ambrosíes, la iniciativa de la P.D. Azul-Grana tomó auge y pronto se sumaron otras peñas como la del C.D. Comercial, la Merengue y el Sporting Club, constituyéndose el 1 de mayo de 1930 el Club Deportivo Gandía con una directiva donde José Román Martí y Joaquín Sendra Sendra eran elegidos presidentes honorarios mientras presidente efectivo resultaba Juan José Bernabéu estando acompañado por Ricardo Del Cerro en la vicepresidencia, Luis Pastor en la secretaría, Jesús Giner Ferrer como vicesecretario, Enrique Carreras como tesorero y Antonio Núñez en el puesto de contador.
Uniformado con camiseta y pantalón blanco, el 15 de julio fueron aprobados sus Estatutos por el Gobierno Civil, adquiriéndose unos terrenos muy próximos al antiguo recinto donde se levantó el nuevo Camp del Serpis, apto para la práctica de varias disciplinas deportivas y sobre el cual, con vistas a escoger a los mejores jugadores locales, se organizó entre agosto y septiembre un torneo donde se inscribieron un grueso número de peñas locales como el Sporting Club, la P.D. Azul-Grana, el Merengue y el Hércules, formando estos cuatro un grupo mientras, en otro, jugaban el Albañil F.C., la Unión Levantina que vestía de blanquiazul, el Serpis, el Ràpid y el Gimnástico. Tras una vibrante competición donde hubo de todo, el Sporting Club se alzó con el título, ingresando con un selecto conjunto de jugadores el C.D. Gandía en la Federación Valenciana para competir a nivel oficial.
Si esto sucedía en el núcleo histórico, en el marítimo de El Grau no se perdía ojo a los acontecimientos y también en 1930 se constituía el C.D. Mediterráneo, sociedad con un potencial equiparable al gandiense quien, desde su Camp del Cèntim y vistiendo camiseta con pantalón blanco, logró aunar a dos equipos completos, titular y reserva enfrentándose al propio C.D. Gandía en varias ocasiones y a conjuntos de las vecinas Pego y Dénia.
Teniendo su sede en el afamado Bar San Sebastián, foco de sus reuniones, el C.D. Gandía inició su aventura competitiva durante la temporada 31/32 enmarcado en el Grupo II de la Segunda Regional Ordinaria ocupando el segundo puesto tras el Onteniente F.C., logrando en la campaña siguiente 32/33 en el Grupo Sur el primer puesto por lo que ascendió a Segunda Regional. En esta categoría, con César Coll en la presidencia, los blancos se estrenaron en el Grupo Sur con un magnífico primer puesto dentro de la sesión 33/34 que no le valió el ascenso, debiendo esperar a la edición 34/35, nuevamente con la primera plaza en el bolsillo, para conseguir un meritorio y perseguido salto a la categoría superior que organizaba la Federación Valenciana, la Primera Regional. El debut en esta categoría donde jugaban las sociedades más destacadas del panorama valenciano y castellonense a excepción de los poderosos Valencia F.C., Levante F.C. y Gimnástico F.C. que lo hacían en Categoría Nacional, así como el grueso de los clubs alicantinos enrolados en la Federación Murciana, atrajo a un numerosísimo público al Campo del Serpis aupando a los de La Safor hasta el cuarto puesto, teniendo Joaquín Sendra el honor de reunir la mejor plantilla que se había visto en la ciudad en dos décadas.
Sin embargo la alegría duró poco pues, en julio de 1936, en plena pretemporada, la Guerra Civil se encargó de hacer añicos todas las ilusiones depositadas en el club y aquellos anhelos por optar en un futuro cercano con el bendito sueño de militar en superior categoría. Disputados algunos encuentros amistosos para recaudar fondos y otros en beneficio de los soldados destinados en el Frente, a partir de 1937 la situación bélica se agudizó en la zona víctima de los bombardeos aéreos en el puerto, por lo cual las autoridades suspendieron la práctica deportiva hasta que la situación fuera más propicia.
Dicho momento se alargó hasta mitad de 1939, pero en esas fechas el que fue club más representativo de Gandía no se volvió a recomponer por los desastres de la guerra, siendo los colegios y los órganos juveniles quienes se ocuparon de dicha faceta. En 1940 surgieron el Frente de Juventudes de Gandía y el Club Atómico, dos modestas sociedades que acapararon inicialmente las ganas de jugar al fútbol por parte de los jóvenes, siendo en 1941 y bajo la atenta protección de la Congregación Mariana local, con sede en el Palacio del Santo Duque, cuando al fin fue constituido un club con serios ánimos de representar a la ciudad dentro del mundo federado, la Agrupación Deportiva Gandía. Inscrito en la Segunda Regional valenciana, la A.D. Gandía inició su historial en la temporada 41/42 con el mejor de los propósitos concentrando a gran parte de los aficionados alrededor del Campo del Serpis cada domingo de partido pero, con el paso de los años, pronto se vio que las limitaciones económicas y sociales de aquel club no presagiaban una continuidad a corto plazo.
HISTORIA DEL CLUB DE FÚTBOL GANDÍA:
1946 – 1950
A partir de 1945, estando la A.D. Gandía en Segunda Regional y desviándose la atención deportiva en otras actividades como la desarrollada por el Club de Natación y Sports, los grandes aficionados y exjugadores de antaño una vez sobrepasados los primeros años de la cruda posguerra, empezaron a citarse en el tradicional Bar San Fernando, verdadero hervidero futbolístico gandiense, fabulando con la idea de constituir una nueva sociedad que se encargara de recuperar el prestigio ostentado en la década anterior. Fruto de las conversaciones y diligencias de un grupo de emprendedores, por fin el 20 de diciembre de 1946 quedaba constituido el Club de Fútbol Gandía, figurando como presidente Andrés Merí Puig mientras los colores elegidos fueron los antiguos del Gandía F.C., camiseta blanquiazul con pantalón azul. En cuanto a la plantilla de jugadores, la mayor parte fueron reclutados de la A.D. Gandía, reforzándose el total con algunos procedentes del Club Atómico y noveles valores que surgieron del fútbol local, adecentándose paralelamente unos nuevos terrenos que dieron como resultado el Campo del Bulevar, recinto que se empleó mediante usufructo.
Inscrito el 26 de febrero de 1947 en la Federación Valenciana, el conjunto blanquiazul fue catalogado como su antecesor de Segunda Regional, empezando su trayectoria en esta categoría durante la temporada 47/48 con buen ritmo puesto que, nada más surgir, se convirtió en uno de los gallitos. En la campaña 48/49 logró el Campeonato de Liga en su grupo pero en la Fase Final no pudo ascender, quedando apeado de dicha Promoción en la edición 49/50. Pese a ello, el C.F. Gandía contó con unas buenas plantillas y en 1950 obtuvo el título de Campeón Regional de Aficionados, teniendo además el fútbol cierto apogeo con la constitución en 1948 de una segunda iniciativa como fue el Club Deportivo Gandiense, sociedad filial del C.F. Gandía quien, en la misma categoría, lució así mismo los colores blanquiazules.
1950 – 1960
Con el cambio de década la ambición por militar en una categoría superior se convirtió en urgencia, sustituyendo en 1950 el empresario Miguel Boronad Monserrat a Andrés Merí en la presidencia. En su primera temporada, 50/51, no se obtuvo el éxito esperado, pero en la siguiente campaña, 51/52, con una plantilla reforzada para la ocasión fue Campeón en su grupo y segundo en la Fase Final tras el Albalat C.F., consiguiendo el ascenso a Primera Regional.
En 1952, con las gestiones del club se consigue estrenar un nuevo recinto, el Campo del Montdúver, desde el cual se consigue con la ayuda de una excepcional plantilla encadenar un nuevo ascenso, ahora a Tercera División tras conseguir brillantemente el primer puesto en la campaña 52/53 dentro del grupo único de Primera Regional y una posterior victoria en la ciudad de Cartagena ante la U.D. Cartagenera. La ciudad, muy afectada tras la guerra, empieza a recuperarse con el comercio de los cítricos, su exportación y la cantidad de puestos de trabajo generados, surgiendo varias sociedades con distinta trayectoria que son inscritas de inmediato en la Federación Valenciana destacando el Club Deportivo Ducal Borgia, mientras que menos relevantes son la Peña Deportiva Imperial y el C.F. Luis Belda, este último vinculado al Frente de Juventudes local.
Este éxito deportivo despierta la pasión por el fútbol en la ciudad y esta empieza a acudir cada domingo en masa al estadio, redundando en la trayectoria de la entidad ducal quien debuta en Tercera División durante la temporada 53/54 inmersa en un Grupo V donde coparticipan clubs de las federaciones Valenciana y Murciana ocupando la sexta plaza. En la campaña 54/55 a valencianos y murcianos se les adjudica respectivamente un grupo, siendo el Grupo IX donde los gandienses quedan cuartos. En 1955 Boronad abandona la presidencia y es relevado por Juan José Bernabéu quien ya fuese presidente del C.D. Gandía concluyendo tercero en Liga, accediendo al gobierno del club en 1956 José Sorribes Cuenca con quien, acompañado por el técnico José Llopis, se termina en segunda plaza tras el C.D. Alcoyano. Este segundo puesto le permite entrar en la Promoción de Ascenso a Segunda División, Fase en la que elimina al C.D. Atlético Baleares: 1-1 en Palma de Mallorca y 3-3 en casa con un desempate favorable por 2-0; y al C.D. Iliturgi: 3-1 en la localidad jiennense de Andújar y 8-2 en casa. Cuando todo le parecía favorable para alcanzar el ascenso a la categoría de plata es eliminado en la gran Final por el Alicante C.F.: 1-1 en casa y dolorosa derrota por 3-0 en la capital alicantina perdiendo una histórica oportunidad de acariciar el fútbol profesional.
En las ediciones siguientes, el C.F. Gandía conserva buenas plantillas que le aúpan a los primeros puestos de la clasificación siendo tercero en la edición 57/58 con Melchor Escrivá en la presidencia y cuarto en la sesión 58/59 bajo Ezequiel Faus, pero la fuerza de sus adversarios regionales impide que alcance el liderato o el segundo puesto en Liga que dan opción a promocionar. En la temporada 59/60 que cierra tan brillante ciclo será tercero, aunque sin opciones reales de alcanzar a los dos primeros clasificados.
1960 – 1970
A lo largo de los años sesenta el municipio y la sociedad gandiense experimentarán grandes cambios. Convertido en foco de atracción por la amplia oferta de trabajo para labores agrícolas y el nacimiento de un incipiente turismo que centrará su actividad en torno a las magníficas playas de su término, cautivarán a miles de personas que, en número superior a las quince mil, decidirán fijar su residencia en la ciudad.
En cuanto al aspecto deportivo, la década resultará notable aunque falte coronarla con un ascenso a Segunda División, sueño inalcanzable para un club al cual en el último suspiro siempre adolece de algo. Tras las presidencias de Miguel Vercher y Enrique Peralta en el puesto de presidente durante una sola temporada finalizándose la 60/61 con el quinto puesto, en la campaña 61/62 bajo el mandato de José Olivares Molla y la dirección técnica de José Luis Salinas el primer equipo blanquiazul se proclamará Campeón del Grupo IX con tan sólo cuatro derrotas y una holgura considerable sobre su inmediato perseguidor, el C.D. Alcoyano, levantándose la ilusión entre sus aficionados por lo que pueda ocurrir. En la Promoción, sin embargo, no obtiene demasiada fortuna y es eliminado de buenas a primeras por el Algeciras C.F.: 0-2 en casa y 1-1 en la ciudad gaditana, culminándose el segundo mandato de Olivares con un quinto puesto que no contenta a nadie.
Después del paso de José Andrés Morant durante la sesión 63/64 siendo sexto, clave en la evolución del club resultará la entrada del presidente Guillermo Olagüe Fatás en 1964 formando un maravilloso tándem con el entrenador José Arnau Serrano. El trabajo de ambos, muy presente en la memoria blanquiazul, traerá tardes de gloria empezando por el subcampeonato de la Liga 64/65 tras el C.D. Castellón y la disputa de una nueva Promoción de Ascenso a Segunda División, siendo eliminado en esta ocasión por el vizcaíno Sestao Sport Club: derrota por 4-0 en Las Llanas y un insuficiente 3-0 en casa. En las campañas 65/66 y 66/67 es tercero a tan sólo un punto del Onteniente C.F. que le arrebata en las dos ocasiones la plaza de Promoción, destacando en este periodo el abandono del vetusto Campo del Montdúver y la inauguración el día 31 de diciembre de 1967 del nuevo Estadio Municipal que será bautizado con el nombre de su presidente.
En la sesión 67/68, continuando con el arduo empeño de conseguir el ascenso de categoría, el C.F. Gandía será segundo clasificado tras el potente en esos tiempos Onteniente C.F., protagonizando una eliminatoria inolvidable frente a la sociedad menorquina U.D. Mahón, de San Carlos, en la cual se pierde 1-0 en la localidad balear y vence por 1-0 en casa precisando jugar un desempate disputado en Valencia en el que ambos quedan 1-1 y a la conclusión de la prórroga nadie ha conseguido marcar. Consensuado por árbitro y respectivos clubs proseguir jugando dos prórrogas añadidas de veinte minutos cada una pues el lanzamiento de penalti no era todavía oficial como en la actualidad, concluidas ambas sin variación en el marcador se decide ante la incredulidad de muchos considerar como vencedor a quien haya obtenido más lanzamientos de esquina, decantándose los mahoneses quienes suman once por seis de los valencianos.
Después de un cuarto puesto en la sesión 68/69 en medio de un sistema competitivo que está en plena fase de reestructuración de sus distintas categorías, en la temporada 69/70 compartiendo el Grupo VI con sociedades valencianas, murcianas, castellano-manchegas y andaluzas, el C.F. Gandía vuelve a la carga y tiene serias opciones de ascender a Segunda División protagonizando un memorable torneo donde, al final, un inalcanzable Hércules C.F., de Alicante, le supera por seis puntos privándole de disputar la Promoción.
Concluyendo la década y mirando hacia atrás, está época será sin duda una de las mejores de su historia, alternándola con otras sociedades locales que se asientan deportivamente como el C.D. Gandiense, filial que alcanzará la Primera Regional y el fútbol desarrollado en el núcleo de El Grau, localidad junto al mar donde desde el Frente de Juventudes se impulsará en primer lugar el León C.F., con vigencia durante los años cincuenta y en segundo lugar el C.F. Grao de Gandía, constituido en 1959 bajo la presidencia de José Mengual quien en 1965 se inscribirá en la Federación Valenciana y en la temporada 66/67, dentro de la Segunda Regional, cambiará su denominación a Unión Deportiva Portuarios vistiendo camiseta roja con pantalón negro. Jugando en el Campo de Escrivá desde su origen y luego en el Campo de Montdúver a nivel federado, los graueros se convertirán en una modesta sociedad que vitalizará gran parte del deporte y juventud de la barriada.
1970 – 1980
La década de los años setenta no será tan apasionante como la anterior a pesar de los innegables esfuerzos de las diferentes directivas blanquiazules. Continuando el odontólogo Guillermo Olagüe al frente del club, en la temporada 70/71 se milita dentro del Grupo III integrado por clubs valencianos, catalanes y baleares en una potente Tercera División que ha sido remodelada por completo quedando reducida a cuatro grupos sumando un total de ochenta participantes. Octavo clasificado, la campaña 71/72 siguiendo en el mismo grupo es un desastre y los blanquiazules sólo se imponen en ocho ocasiones ocupando la vigésima y última posición perdiendo la categoría.
Ubicado en Regional Preferente, una categoría recientemente creada entre la Tercera División nacional y la Primera Regional, la sesión 72/73 marca la despedida de Olagüe regresando a Tercera División después de ser segundo en Liga tras la U.D. Alcira y, mediante Promoción, superar como aspirante a la U.D. Poblense; 1-2 en la localidad balear de Sa Pobla y victoria por 2-1 en casa. Bajo la presidencia de Vicente Ribes Castelló, la campaña 73/74 en el Grupo III es irregular y se concluye decimoséptimo regresando a Regional Preferente, categoría en la cual a lo largo de la edición 74/75 se realiza un gran torneo obteniéndose el primer puesto y, con ello, el regreso directo sin Promoción mediante a Tercera División.
De vuelta al Grupo III de la Tercera División donde militan valencianos, catalanes, aragoneses, baleares y murcianos, los blanquiazules ocupan un discreto octavo puesto en la sesión 75/76 que les permite continuar una temporada más en la categoría, división que mantendrá el formato estrenado en 1970 hasta la temporada 76/77 en la que se anuncia una nueva reestructuración librándose los blanquiazules por los pelos de caer a la Regional Preferente. En 1977 Antonio Muñoz Escrivá releva a Vicente Ribes y los gandienses pasan al Grupo V compartiendo destino con valencianos, murcianos, manchegos y baleares siendo séptimos, realizando una magnífica temporada 78/79 dirigidos por Roberto Gil en la cual son terceros tras C.D. Eldense y Albacete Balompié quedando el ascenso directo a Segunda División B a un solo punto de distancia. En la edición 79/80 José Avaria Cabanilles sustituye a Muñoz Escrivá en un Grupo VI reducido a clubs pertenecientes a las federaciones Murciana y Valenciana donde el C.F. Gandía concluye séptimo.
1980 – 1990
Los primeros años ochenta se inician con el C.F. Gandía en el Grupo VI de Tercera División con participación enteramente valenciana, una categoría reconvertida artificialmente en el cuarto nivel nacional que, en realidad, es la primera de las categorías regionales y no arrastra tanto público al Estadio Guillermo Olagüe como antaño, salvo encuentros excepcionales. Con José Avaria al frente, los blanquiazules compiten con el ánimo de acercarse a los primeros puestos pero la existencia de clubs con mayor potencial les hace ser sextos de forma consecutiva en las ediciones 80/81 y 81/82, cerrando el máximo mandatario gandiense su proyecto con un notable cuarto puesto en la edición 82/83.
En 1983 accede al sillón Ignacio Avilés Rubio, gestor con el cual el club se rodea de excelentes entrenadoras que, por una serie de causas u otras, no dan con la tecla adecuada para ascender resultando Benito Floro quinto en la temporada 83/84 y Quique Hernández igualmente quinto en la sesión 84/85. En la campaña 85/86 Avilés repite su confianza en Hernández y se alcanza el subcampeonato quedando a un solo punto de la U.D. Alzira en un reñidísimo torneo, plaza que le permite promocionar eliminando a la U.P. Langreo en Semifinales; 3-1 en el Guillermo Olagüe y 1-0 en la localidad asturiana de La Felguera, consumando el ascenso a Segunda División B en la Final al superar al conjunto canario C.D. Maspalomas: 1-0 en Los Cristianos y 5-0 en casa.
El C.F. Gandía con este ascenso consigue entrar en una categoría de bronce que, para la temporada 86/87, ofrece un nuevo formato experimental de grupo único con veintidós participantes donde entra todo el territorio peninsular, los dos archipiélagos, incluso el norte de África, consiguiéndose bajo la tutela del técnico Óscar Rubén Valdez la decimosexta plaza en una competición repleta de clubs ilustres pero carísima por los desplazamientos. En 1987, debido a las quejas de los implicados, la RFEF vuelve al último formato con cuatro grupos y el club de La Safor es asignado al Grupo IV donde compiten valencianos, castellano-manchegos, andaluces, murcianos y aragoneses finalizando en octavo puesto con Luis Astorga en el banquillo, accediendo en 1988 Vicente Morant a la presidencia con quien se termina decimoprimero en la campaña 88/89 y tercero en la edición 89/90 con José Víctor Rodríguez en labores técnicas detrás del Orihuela Deportiva C.F., quien queda primero empatado con Barcelona Atlético y asciende directamente a Segunda División A al no existir Promoción.
1990 – 2000
Comenzados los años noventa la ciudad de Gandía sobrepasa los cincuenta mil habitantes orbitando su economía alrededor del comercio y del turismo mientras que la juventud, antaño fiel asistente al Estadio Municipal, fruto de las nuevas atracciones y ritmo de vida opta por otros entretenimientos dejando un tanto de lado el fútbol. En la faceta competitiva, el C.F. Gandía experimentará agudos e intensos altibajos que confundirán a la afición, saboreándose al principio y final de la década las mieles de la Segunda División B con un instante apoteósico en el último campeonato mientras en el ciclo intermedio cunde el desasosiego y la apatía.
En la primera temporada de la década de los noventa, 90/91, el equipo termina noveno bajo las órdenes de Fabriciano González “Fabri”, concluyendo en la sesión 91/92 decimosexto con tan sólo treinta puntos en su haber y con la pesada losa de ser el peor clasificado en ese puesto de los cuatro grupos existentes, condición del sistema competitivo que le acarrea quedar tras C.D. Logroñés “B”, C.D. Santurtzi y C.D. Maspalomas, descendiendo a Tercera División. En 1992 Francisco Sapena Tormo toma la presidencia y dentro del Grupo VI la campaña 92/93 se resuelve con un séptimo puesto bajando su nivel de manera escandalosa en la edición 93/94 cuando queda decimoséptimo y tan sólo una plaza por encima de los puestos de descenso directo a Regional Preferente. La intervención de nuevos directivos como Ignacio Avilés y el técnico Damián Castaño hace que se recupere terreno en la edición 94/95 y concluya la Liga como Campeón con una cualitativa plantilla que tan solo pierde tres encuentros en Liga. Este puesto le permite promocionar depositándose grandes esperanzas en conseguir el objetivo, pero el gol-average desfavorable frente al F.C. Barcelona “C” le impide el ascenso quedando segundos, sin premio, por delante de C.D. Atlético Baleares y Muleño C.F.
La temporada 95/96 es más gratificante y, casi con los mismos integrantes, tras ser tercero en Liga con Damián Castaño repitiendo en el cargo de entrenador se consigue el ascenso a Segunda División B al imponerse en la Promoción a C.E. Europa, C.D. Sóller y Águilas C.F. con tan sólo una derrota a manos de éste último. En la categoría de bronce iniciará un ciclo de cinco campañas consecutivas siendo titubeante la inicial 96/97 con un decimoquinto puesto todavía con Castaño y mejores las 97/98, acabando noveno y 98/99, concluyendo decimoprimero ambas bajo la dirección técnica del entrenador César Ferrando. Con Dionisio Ollero Muñoz al frente desde 1998, la temporada 99/00 se convierte en mítica pues en el tercer curso de Ferrando, el equipo blanquiazul se proclama Campeón de grupo contra todo pronóstico por delante de clubs de la talla de Real Murcia C.F., U.D. Atlético Gramanet ó Hércules C.F., disputando la Promoción de Ascenso a Segunda División A en la que, desafortunadamente para sus intereses y pese al aliento constante de la afición, no realiza unos buenos partidos y es superado por sus rivales Barakaldo C.F. y A.D. Ceuta, siendo el club valenciano colista y consiguiendo el ascenso el Racing Club de Ferrol.
2000 – 2010
La primera década del nuevo siglo XXI empieza con muy mal pie y de la peor forma posible pues ni Félix Ángel Arnáiz ni Paco Alfaro son capaces, desde el banquillo, de enderezar una plantilla floja radicalmente distinta del ejercicio anterior que termina decimonovena. El descenso a Tercera División supone un jarro de agua fría para la afición, sucediéndose a las siguientes campañas una serie de torneos donde los blanquiazules distan mucho de ser el equipo de apenas cinco años antes. Así pues en la edición 01/02 son decimosegundos, en la sesión 02/03 décimos y en la temporada 03/04 decimosextos con grandísimos apuros para eludir el descenso a Regional Preferente.
En la campaña 04/05, con Juanjo Juárez en el banquillo y continuando Dionisio Ollero al frente de la sociedad, el C.F. Gandía se rehace de la afrenta sufrida en la anterior edición y queda segundo tras el Valencia C.F. “B”. En la Promoción de Ascenso, de nuevo con un Guillermo Olagüe repleto, es eliminado en Semifinales por la A.D. Mar Menor al empatar 2-2 en casa y 1-1 en la localidad murciana de San Javier. Como ya sucediera apenas unos años antes, durante el verano de 2005 se desmantela medio equipo y los fichajes no cuajan resultando incomprensiblemente en la temporada 05/06 vigésimo tras una nefasta campaña que da con sus huesos en Regional Preferente, categoría en la cual lucha más de la cuenta por abandonarla y que provoca la fuga en masa de sus seguidores ante la escasez de atractivo que les ocasiona. Algunos de ellos, viendo la mala marcha del club, optan por constituir una nueva sociedad en 2005 para la formación de jóvenes jugadores, el Club de Fútbol Base Gandía que vestirá en adelante también camiseta blanquiazul con pantalón azul.
Al término de la edición 07/08 consigue regresar a Categoría Nacional tras superar en la Promoción a U.D. Cuart de Poblet y C.D. Buñol, resultando quinto en la sesión 08/09 dentro del Grupo VI de Tercera División donde se produce un hecho decisivo que va a resultar fatal para los intereses blanquiazules: el jugador Muiño, lesionado de gravedad en un encuentro liguero, tras ser tratado por varios médicos y dado de alta de oficio estando incapacitado para jugar y sin estar presentado su contrato en la Seguridad Social, denuncia al club siendo este condenado a pagarle mil ochocientos euros al mes de por vida, horrendo gasto que, en suma a los ajetreos ocasionados por la nefasta gestión de Ollero producen que se acumule una deuda estimada en seiscientos mil euros. Pese a todo, Ollero sigue al frente y en la campaña 09/10 todo transcurre con aparente normalidad hasta que el presidente dimite y es sustituido por Julio Santanadreu con quien el club se proclama Campeón de Liga. En la Fase de Campeones se enfrenta a La Roda C.F., el Campeón manchego, consiguiendo el ascenso a Segunda División B dirigidos por Toni Seligrat tras imponerse 2-1 en casa y conseguir el 1-1 final con un emocionante gol de Marcos Estruch en el último minuto del encuentro disputado en la localidad albaceteña.
2010 – 2020
Su reestreno en el tercer nivel nacional bajo la dirección de Vicente Medina en el banquillo durante la campaña 10/11 tiene como principal objetivo lograr la permanencia, consiguiéndola con antelación al hacerse fuerte en casa y sumar una buena cantidad de puntos a domicilio para terminar siendo decimocuarto clasificado. En la edición 11/12 el club de La Safor pasa por numerosos problemas económicos y la situación financiera se revela casi insostenible con alrededor de quinientos mil euros de déficit que propician la dimisión de su presidente y el relevo en la directiva entrando Benjamín Sanz, además de sembrarse una gran incertidumbre sobre su continuidad en el Grupo III. La marcha deportiva va a la par de la financiera y no se consiguen abandonar los últimos puestos además de presentarse quejas por parte de la plantilla, consiguiéndose no sin gran esfuerzo terminar la competición pese a que todo está perdido desde el punto de vista futbolístico al concluir decimoctavo, descendiendo a Tercera División con la soga al cuello.
En la temporada 12/13 Jesús Sendra Boix toma el testigo de un club económicamente casi inviable, con problemas de todo tipo y una plantilla a reconstruir, regresando a un Grupo VI de la Tercera División donde, con Vicente Medina, se ocupa el decimoctavo puesto encadenando un segundo descenso consecutivo, en esta ocasión a Regional Preferente. La amarga situación blanquiazul no se consigue enmendar y en la campaña 13/14 se concluye decimoséptimo descendiendo a Primera Regional, una categoría donde no se milita desde hace décadas.
La ciudad de Gandía, con su club más representativo e histórico entrando en barrena, da la espalda a tan ilustre miembro abandonándolo a su suerte y otras iniciativas constituidas a posteriori, sin tanto pedigrí, se vuelven de pronto punteras recabando la atención de los aficionados. Clubs como la U.D. Portuarios, con sede en el Grau y terreno de juego propio inaugurado en 1974 titulado Camp de Fort-Llopis, alcanzan la Regional Preferente al igual que el C.F. Unió Esportiva Gandía, una sociedad pujante constituida en 1997 como C.D. Ciudad Ducal que en 2012 cambia a C.D. Ciudad de Gandía y en 2013 a C.F. Playas de Gandía acordando su actual nombre en 2014 vistiendo camiseta blanquivioleta y pantalón violeta.
En cuanto al C.F. Gandía, con la impagable labor de Jesús Sendra por mantener la entidad a flote, en la temporada 14/15 se ocupa la decimotercera posición debiendo jugar una Promoción para no descender donde evita el caos, paso que no puede eludir en la campaña 15/16 cuando es decimosexto viéndose condenado a jugar en Segunda Regional, la categoría donde empezó su carrera y última de las que organiza la Federación Valenciana. El club de La Safor toca fondo y parece que su desaparición es inminente pero, a trancas y barrancas, consigue presentar un equipo que es cuarto en su grupo durante la sesión 16/17, puesto que repite en la edición 17/18. En la temporada 18/19 por fin, a base de mucho sacrificio, consigue abandonar la Segunda Categoría al resultar primero y campeón obteniendo el ascenso directo a Primera Regional, categoría donde ensambla una potente plantilla que, sin perder un solo encuentro, repite el primer puesto en Liga consiguiendo un nuevo ascenso, en esta ocasión a Regional Preferente.
La tendencia alcista del C.F. Gandía que recién acaba de encontrarse con el C.F. U.E. Gandía en Primera Regional, el criterio de que la localidad ha de contar con un solo club representativo a poder ser lo más fuerte posible y la voluntad por parte del consistorio para que todo se lleve a buen término, propician nada más iniciarse 2020 que los dos clubs mencionados en unión al C.F.B. Gandía dedicado a las categorías inferiores inicien una serie de conversaciones que en el mes de mayo están muy avanzadas siendo refrendadas en junio con la fusión de las res sociedades en una sola que seguirá compitiendo bajo el nombre de C.F. Gandía conservándose la plaza del C.F. U.E. Gandía en Primera Regional como equipo B.
Por las filas del C.F. Gandía han pasado jugadores tan relevantes como el delantero Paredes (jugador que recaló después en el Valencia C.F. y Real C.D. Espanyol de Barcelona), Fuentes, Serer (que jugó en el Real Zaragoza), Pepe Miñana, Pepe Bonet, Tonín, Salvador Castellà, Pepe Masó, Antoni Soldevila, y más recientemente el defensa Guijarro y el portero Espín.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Segunda División B “Historia de los clubs que nunca la sobrepasaron”. Vicent Masià Pous (2007).
Real Club Deportivo de La Coruña, S.A.D. “B” (1993-2017)
Real Club Deportivo Fabril (2017-)
TÍTULOS NACIONALES:
4 Ligas de Tercera División:
2005/06
2006/07
2009/10
2016/17
1 Liga de Tercera RFEF:
2023/24
ESTADIO:
Nombre: Ciudad Deportiva El Mundo del Fútbol (Abegondo)
Año de inauguración: 1 de mayo de 2003
Cambios de nombre:
Ciudad Deportiva El Mundo del Fútbol (2003-)
Capacidad: 3.000 espectadores
OTROS ESTADIOS:
Estadio Municipal de Riazor (1917-1944)
La Granja (1944-1948)
Anexo Estadio de Riazor (1948-2003)
Ciudad Deportiva El Mundo del Fútbol, Abegondo (2003-)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL REAL CLUB DEPORTIVO FABRIL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL REAL CLUB DEPORTIVO FABRIL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN LA CORUÑA:
La historia del fútbol herculino se remonta al año 1894 cuando en los terrenos del Corralón de la Gaiteira tuvo lugar el 3 de marzo un encuentro entre los miembros del British Lawn-Tennis Club, formado íntegramente por ciudadanos británicos frente a socios del Sporting Club local, entidad deportiva constituida el 16 de marzo de 1890.
De lo que sucedió entre 1894 y 1901 nada se sabe, aunque lógicamente debieron disputarse más encuentros que no requirieron de la atención periodística, siendo la segunda introducción balompédica, en esta oportunidad para quedarse, la formalizada por un muchacho nacido en la localidad pontevedresa de Vilagarcía de Arousa, José María Ábalo Abad, uno de los nueve hijos de un importante industrial, hacendado e inversor vilagarciano quien, después de regresar a su localidad natal en 1900 procedente del Reino Unido donde había perfeccionado durante dos años sus conocimientos de inglés en un internado londinense, se trasladó en 1901 a la capital coruñesa para cursar estudios de comercio. El joven Ábalo, prendado del fútbol como había quedado, en este nuevo destino no dudó en incorporar a su maleta un balón y flanqueado por sus nuevos compañeros de la Escuela Superior de Comercio que prontamente se dejaron influenciar por el embrujo de aquel deporte, reunidos en las tertulias del Café Universal decidieron constituir ese preciso año un club de sport al que denominaron Alfonso XII en alusión al rey fallecido años antes, sociedad pionera del fútbol coruñés y gallego a la cual aplicaron el reglamento de la británica Football Association realizando sus entrenamientos en el paseo central del Rellano para mitigar las frías temperaturas del otoño e invierno.
Aquel grupo de jóvenes fue creciendo en aptitudes y en número, despertando la curiosidad de distintos socios de la Sala Calvet, el más importante gimnasio herculino, quienes atraídos por lo que parecía una actividad interesante, no dudaron en incorporarse consagrando un club de cierta importancia. Llegados a 1903, la sociedad herculina alcanzó la mayoría de edad fijando su sede en el Cantón Grande y adoptando el nombre de la ciudad, aunque totalmente britanizado al adquirir la tan anglófila denominación de Foot-ball Corunna Club mientras José María Ábalo continuaba al frente. Si hasta la fecha se había venido practicando el fútbol dividiendo los asociados del club en dos bandos que vestían completamente de blanco distinguiéndose unos de otros por el color del cinturón, azul o rojo, con los cambios se adoptó como oficial el uso de una camisa gualdinegra con pantalón blanco, uniforme estrenado el domingo 20 de marzo de 1904 ante la oficialía de los vapores británicos Diligent y Newa con los que se concertó un encuentro en el interior de la Plaza de Toros que atrajo a multitud de espectadores y prensa. El acontecimiento, apasionado con victoria local por 3-0, supuso un empujón definitivo para la divulgación de este deporte siendo a partir de entonces habituales las crónicas periodísticas con todo lo relacionado con el club. A lo largo de 1905 los enfrentamientos frente a vapores británicos que recalaban en el puerto herculino fueron incrementándose, disputándose los primeros encuentros frente a clubs de otras localidades como los protagonizados ante las recién constituidas sociedades olívicas Vigo F.C. y Fortuna F.C., así como Pontevedra Sporting Club.
El papel de la Sala Calvet dentro de la sociedad deportiva local era comparable al que ejercían gimnasios como el de Zamacois en Bilbao, los de Tolosa o Solé en Barcelona, o como el de Martínez en Valencia por citar algunos de los más conocidos, surgiendo de él distintas iniciativas que solían culminar con la creación de otros clubs. A mediados de noviembre de 1905 quedaba constituido el Club Náutico, presidido por Ricardo Rodríguez Pastor, César Suárez de Centi como vicepresidente, Thomas Guyatt Deusto como secretario bibliotecario, Henry Guyatt Deusto como secretario contador, mientras vocales lo fueron Lorenzo del Villar, Henry Gilard, H.P. Long, Eduardo Baña. Juan Long, Enrique Estrader y Antonio Castelo, entidad que deseaba fomentar la afición a los deportes marítimos, efectuar regatas a vela y remo, y ejercitarse en la natación.
Iniciado 1906, distintos socios de la Sala Calvet habían sido partícipes en la constitución del Foot-ball Corunna Club -Corunna F.C.en prensa y Sociedad Deportiva Club Coruña desde 1906- y del Club Náutico, siendo capaces de reunir un potencial equiparable al del Sporting Club. La existencia de varias secciones y una demanda cada vez mayor por parte de sus asociados en regular su situación, dieron como resultado la constitución del Club Deportivo de la Sala Calvet el 2 de marzo de 1906, siendo elegido presidente Luis Cornide Quiroga, reputado empresario de la época.
El C.D. de la Sala Calvet, centrado en las competiciones de esgrima y carreras con traineras, apenas prestó atención al fútbol durante gran parte de 1906 hasta que, a finales de año y gracias a una porfía entre los miembros de la sección de remo y los de la S.D. Club Coruña por dilucidar cuál de los dos deportes era más completo, desembocó en la disputa de un encuentro a celebrar el domingo 10 de diciembre en el Velódromo del Corralón de la Gaiteira entre ambos grupos. Apurados por la falta de luz y con el resultado de 1-2 favorable a los deportivistas con tantos del capitán Manuel Álvarez y Virgilio Rodríguez, ambos contendientes decidieron seguir el lunes 11, pero sin marcar un solo tanto.
Animados por lo vivido, desde las más altas instancias del club se propuso oficializar ante el Estado la existencia de la sociedad, siendo presentados los Estatutos en el Gobierno Civil el 9 de enero de 1907, carta magna que sería aprobada el 11 de marzo por el Gobernador José Moyano. Esta primera junta directiva oficial quedaba definida por Luís Cornide como presidente, Rogelio Fernández Conde -expresidente del Club Náutico en 1906- como vicepresidente, Laureano Villanueva en puesto de secretario, José Longueira como contador y Emilio Alba como tesorero, estableciéndose siete secciones deportivas repartidas en fútbol, boxeo, esgrima, gimnástica, náutica, patinaje y ciclismo, cada una de ellas con sus respectivos capitanes. En cuanto al uniforme, los colores serían los de la bandera marítima provincial, blanco para la camiseta y azul para el pantalón.
Los equipiers de la improvisada sección de fútbol -hasta entonces remeros- junto a nuevos jugadores miembros del club, decidieron concertar un nuevo encuentro el 13 de enero de 1907, en esta ocasión frente a la tripulación del vapor británico General Gordon, imponiéndose los deportivistas por 6-1. La pujanza del fútbol representada por la S.D. Club Coruña y C.D. de la Sala Calvet junto a la posibilidad de acudir al Campeonato de España de Fútbol en Madrid, debilitó en exceso a los remeros del Club Náutico, disuelto a principios de mayo e ingresados muchos de sus miembros en el flamante C.D. de la Sala Calvet.
No había freno para el nuevo deporte y sociedades como el C.D. María Pita, presidido por Manuel Insúa, acabaron adoptándolo al mismo tiempo que surgían nuevas como el Hércules F.C. en mayo de 1907, el Reina Victoria F.C. en julio, el Bellas Artes, el España F.C. y el Club San Luís, mientras que en 1908 surgían el Liceo Herculino en marzo, el Alltheweek F.C. en abril, el Regional F.C., el Galicia F.C. o el Unión F.C., este último en noviembre. La pléyade de sociedades dedicadas al fútbol precisaba de nuevos espacios para su práctica, siendo el Campo de la Estrada un nuevo referente para todos ellos que se sumaba al Velódromo del Corralón y a los nuevos campos que iban a construirse en breve.
Si en algo lograron los club herculinos adelantarse en aquellos tiempos a los vigueses fue a la hora de obtener el título honorífico de Real, concedido por S.M. El Rey D. Alfonso XIII en primera instancia a la S.D. Club Coruña el 10 de diciembre de 1908 que le hizo cambiar a Real Club Coruña y, en segunda instancia el 4 de febrero de 1909 al C.D. de la Sala Calvet, quien adoptó el nombre de Real Club Deportivo de la Sala Calvet bajo el mandato de D. Laureano Martínez Brañas. Posteriormente, ya en 1912, el Club Deportivo modificó significativamente su denominación sustituyendo el del popular gimnasio herculino por el de la ciudad para ser identificado su lugar de origen por los rivales quedando en un definitivo Real Club Deportivo de La Coruña que ha perdurado hasta hoy.
HISTORIA COMO CLUB:
1914 – 1920
Paralelamente a estos acontecimientos, a finales de 1913 nace el embrión del que será el Fabril Club. El 23 de noviembre se disputa un encuentro en Riazor entre los componenetes del equipo fabrilista frente al Moka F.C., compuesto este último por elementos de la comparsa del mismo nombre. El 21 de febrero de 1914 se produce la constitución del Fabril Foot-ball Club al quedar el acuerdo de voluntades manifestado en la prensa local y dirigidos por D. Emilio Fernández, dueño de una fábrica textil de Cuatro Caminos, empleando como colores camisa azulgrana y pantalón negro. Esta sociedad realiza multitud de encuentros amistosos frente a otros clubs coruñeses, disputando su primer encuentro conocido el 29 de marzo de nuevo frente al Moka F.C., con resultado de 1-2 en contra. Poco después, disputa un match el 26 de abril frente al Hércules F.C. de La Coruña, destacando entre su jugadores la figura de Ramón González, componente de la Selección Nacional que compite en la Olimpiada de Amberes de 1920. Así mismo, el club fue inscrito en la Federación Gallega participando en Segunda Categoría junto a otros equipos como el conjunto coruñés del Club Oza-Coruña ó el Teis de Vigo.
1920 – 1940
Entre 1920 y 1930 despuntó el fútbol modesto coruñés con torneos organizados por cualquiera de los clubs existentes, los cuales más tarde se asociaron al margen de la Federación Gallega de Fútbol en la denominada Liga de Modestos. A partir de noviembre de 1926, el club fabrilista adopta la nueva denominación de Sporting Fabril albergando nuevas disciplinas deportivas. En el año 1930 la FGF confió a Ponte Patiño, ex jugador del Fabril F.C. en los años veinte, el organizar en serio la federación de todos los clubs gallegos, manteniéndose la sociedad coruñesa compitiendo en estos campeonatos hasta la llegada de la Guerra Civil en julio de 1936.
1940 – 1950
Tras la conclusión de esta en 1939, el Fabril F.C. se integra en la Primera División de Modestos destacando por la juventud de todos sus jugadores y jugando en el Campo de La Granja, inaugurado en 1944. En 1941 y en correspondencia a la nueva Ley que prohíbe los extranjerismos cambia de nombre a Fabril Sociedad Deportiva, pasando en 1948 a la Serie A de Primera Categoría Regional y a emplear como terreno de juego el Campo de entrenamiento anexo al Estadio de Riazor, todo ello bajo la presidencia de Daniel Cháver.
Los hermanos Vidal firman un convenio de filiación con el Real C.D. de La Coruña por mediación del presidente de éste, Daniel Cháver Gómez, y será este momento cuando Roberto Manuel Pérez Martínez, directivo del R.C. Deportivo, pasa a presidir el Fabril S.D.. Por contrato, el Real C.D. de La Coruña cede jugadores al Fabril S.D. y garantiza las aportaciones económicas necesarias en caso de déficit en las cuentas del club a fin de año. Las figuras de aquel entonces eran Arsenio Iglesias y Torres, entrenados por el mítico Chacho y Waldo Botana, los cuales no percibían cuantía económica alguna por sus enseñanzas a los jóvenes jugadores del equipo filial.
1950 – 1960
En la temporada 52/53 el equipo pasa a emplear pantalón azulino con la camiseta azulgrana a listas. El Fabril S.D. de la campaña 53/54 fue el primer equipo coruñés Campeón gallego de Aficionados al vencer al Turista Sociedad Cultural de Vigo, con Luís Suárez como figura destacada, ascendiendo a Tercera División tras ganar la Serie A y conquistar la Promoción de Ascenso al superar al equipo astur del C.D. Juvencia: 4-2 en casa y 1-2 en la vuelta. A Coruña pasaba a tener entonces dos clubs de la capital en Tercera División: el Fabril S.D. y el C.D. Juvenil. A Rafael Vacas Rodríguez le sucedió en la presidencia de la sociedad Don José Torres Mourelle, propietario de la sede del club y ex jugador del C.D. Coruña durante los años treinta.
Ante las penurias económicas de Fabril S.D. y C.D. Juvenil, el Real Club Deportivo de La Coruña propuso la fusión entre ambas sociedades, pero esta no llegó a producirse porque el C.D. Juvenil quería hacer prevalecer su nombre y el Fabril S.D. no se hacía menospreciar. En la sesión 59/60, el Fabril S.D. ganó 0-2 al C.D. Juvenil enviándolo a Regional y terminándose la rivalidad en Tercera División. Gracias al mister Henry y también al apoyo moral y económico de algunos de sus socios incondicionales se salvó el club azulgrana, cuyos ingresos no alcanzaban los de muchos otros clubs modestos. Pese a sus escasos recursos económicos, el club coruñés ya llevaba seis temporadas consecutivas en Tercera División, clasificado siempre en la zona media de la tabla.
1960 – 1970
La temporada 60/61 veía pasar por las filas del club al centrocampista Manuel Ríos Quintanilla “Manolete”, que al final de la misma daría el salto al primer equipo convirtiendose en futuro jugador internacional con la Selección Nacional Absoluta. El descalabro deportivo del C.D. Juvenil facilitó la entente en 1963 entre Real C.D. de La Coruña y Fabril S.D., club este último el cual se hizo filial deportivista ante la insistencia de los blanquiazules. Mientras Don José González Dopeso presidía el Fabril S.D., el club coruñés cambió de nombre y pasó a ser conocido como Fabril Deportivo, adoptando los colores blanquiazules propios del Real C.D. de La Coruña y conservando su denominación histórica y tradicional.
Su directiva pasó a ser una junta gestora por delegación de la del R.C. Deportivo y entre los acuerdos adoptados uno era el que los jugadores del Fabril Deportivo que sumaban un número de partidos con el R.C. Deportivo fichaban por éste, quien asumía todos los gastos del filial. Excelente fue la Liga 63/64 entrenados por Badás, promocionando a Segunda División tras ser segundo clasificado en Liga aunque sin suerte, pues a continuación de eliminar a la S.D. Ponferradina, empate 2-2 en Ponferrada y victoria 2-1 en casa, cayó ante la Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega tras varios partidos: 2-1 en casa, 2-1 perdido en Torrelavega, 2-2 en el desempate jugado en Gijón y derrota final por 2-1 en el segundo desempate.
Desde aquí hasta la campaña 67/68 participa en el grupo gallego, siendo siempre uno de los gallitos del grupo. Arsenio Iglesias se hace entrenador en el Fabril Deportivo y ejerce desde 1967 hasta que en 1971 pasa a entrenar al Real Club Deportivo de La Coruña. En la edición 69/70 debuta el Fabril Deportivo en la Copa, eliminando a S.D. Indautxu y U.D. Cacabelense, cayendo en la tercera eliminatoria ante el C.D. Mestalla. En el Campeonato de Liga pierde la Categoría Nacional al no poder superar la barrera que marca la RFEF para seguir en la categoría, enmarcado dentro del grupo astur-gallego.
1970 – 1980
Iniciados los años setenta, el mítico guardameta Rodrigo García Vizoso como entrenador del filial blanquiazul devuelve al club filial a la Tercera División en la campaña 70/71 pese a que Arsenio Iglesias se había llevado a Vales, Collazo II y Piño al primer equipo, ganando la Promoción de Ascenso a la S.D. Barreda Balompié tras empatar 0-0 en Santander y ganar 4-0 en Riazor, pero su paso es efímero y vuelve a Regional al término de la sesión 71/72 al ser penúltimo con tan sólo 23 puntos en su casillero. Sumido en Primera Categoría Regional, la sesión 74/75 pasa a formar parte de la nueva Regional Preferente durante unos años hasta que asciende de nuevo a Tercera División como Campeón gallego en la campaña 76/77.
La temporada de su regreso a Categoría Nacional, 77/78, el club filial se enfrentó tras eliminar al C.P. Cacereño en el Campeonato de Copa a un Primera División, el Hércules C.F., cayendo por 0-3 en Riazor y 4-0 en la vuelta. Desde 1978 será el técnico Luis Rodríguez Vaz quien ostentará el cargo durante diez años de manera consecutiva. Desde la campaña 77/78 a la 79/80 el equipo juega encuadrado en el grupo astur-gallego-leonés. En la edición de Copa de 1979 alcanza de nuevo la tercera eliminatoria siendo eliminado por otro club de Primera, la U.D. Salamanca, con el resultado de 1-3 en Riazor y un 4-0 adverso en el Estadio Helmántico.
1980 – 1990
Llegados a 1981, el Fabril Deportivo había conquistado 38 trofeos, empezando desde la temporada 80/81 a jugar en el grupo gallego, siempre en Tercera División. Durante esta década alterna puestos en cabeza como las temporadas 83/84 y 85/86 en que son terceros con Jesús Corzo Sierra en la presidencia, con otras temporadas en mitad de la tabla clasificatoria sin pasar en ningún momento por grandes apuros. Cabe destacar que la huelga de futbolistas profesionales de 1984 permitió que los fabrilistas jugasen el encuentro de Segunda División A entre R.C. Deportivo y el C.D. Tenerife, formando parte del primer equipo los siguientes: Joaquin, Chechu, Enri, Juanito, Suso, Ramón, Fisquelas, Pozas (Chema), Andrés, Castrejo (Fachal) y Pupi. En la temporada 86/87 se incorpora Francisco Javier González Pérez “Fran”, futuro capitán del primer equipo y que debutará la 87/88 con este, consiguiendo la internacionalidad con la Selección Nacional. En el año 1988, Francisco Delgado Melo llega al banquillo del Fabril Deportivo y la temporada 89/90 lo hace subcampeón tras la S.D. Compostela, que ascendería de forma directa a Segunda División B.
HISTORIA COMO EQUIPO DEPENDIENTE:
1990 – 2000
Con el cambio de década, en la edición 90/91 es cuarto en Liga y este puesto le da derecho a participar en la nueva y recién estrenada Liguilla de Ascenso, en la que llega el primer ascenso a Segunda División B tras superar a: Caudal Deportivo, C.D. Fuenlabrada y S.D. Almazán. Para el debut en el tercer nivel durante la campaña 91/92, el filial todavía entrenado por Melo se refuerza con jugadores oriundos pero no puede mantenerse, acabando decimoctavo y de nuevo con sus huesos en Tercera División. La sesión 92/93 traerá a Marcos Vales como jugador de la plantilla blanquiazul.
Tras un acuerdo entre el Consejo de Administración del ahora Real Club Deportivo de La Coruña S.A.D. y los diez socios del Fabril Deportivo, en 1993 éste últmo desaparece como club y se integra en la estructura del Real C.D. de La Coruña SAD en cumplimiento de la nueva Ley del Deporte, que entre otras cosas, provoca que los clubs hasta entonces filiales relacionados con clubs profesionales se extingan y sean asimilados por estos,de modo que pasa federativamente a denominarse Real Club Deportivo de La Coruña, S.A.D. “B” facilitando el intercambio de jugadores con el primer equipo. El Real C.D. de La Coruña “B” de la campaña 93/94 se proclama subcampeón de Liga a tan sólo un punto del C.D. Bergantiños, pero pierde el tren del ascenso en la Liguilla al caer ante Aranjuez C.F. y C.D. Lealtad, mientras cuarto es el C.D. Bembibre. La temporada siguiente 94/95 tras ser cuarto en Liga, llega el segundo ascenso a Segunda División B tras superar con holgura la Liguilla de Ascenso frente a C.F. Rayo Majadahonda, Caudal Deportivo y C.D. Bembibre.
En la sesión 95/96 del regreso a Segunda Division B con Carlos Ballesta como entrenador y un joven centrocampista como Emilio José Viqueira Moure dando el salto al primer equipo, es quinto igualado a 64 puntos con el cuarto clasificado Club Atlético de Madrid “B”, pero este le gana el gol-average y le quita la última plaza de Promoción, ascendiendo a la postre el equipo filial madrileño a Segunda División A. No sucede lo mismo en la temporada 96/97, cuando el Real C.D. de La Coruña “B” es cuarto de nuevo con Ballesta como técnico y se clasifica por primera vez para la Liguilla de Ascenso a Segunda División A, llegando al último partido de la Liguilla empatado a ocho puntos con Córdoba C.F. y Elche C.F., y aunque depende de sí mismo para lograr el ansiado ascenso, una derrota ante el Córdoba C.F. en Riazor por 0-1 lo deja relegado a seguir jugando en Segunda B. Finalmente, el equipo ascendido será el Elche C.F., dónde juega el carismático ex jugador del primer equipo Claudio Barragán, al vencer por 0-1 al Barakaldo C.F., último clasificado.
En la temporada 97/98 el filial blanquiazul de Carlos Ballesta se clasifica de nuevo para la Liguilla de Ascenso a Segunda División A tras ser tercero, pero en la Promoción es último superado por Real Club Recreativo de Huelva, Barakaldo C.F. y Real C.D. Espanyol de Barcelona “B”. En la edición 98/99 el filial cae en desgracia, empatando el último partido en La Grela contra el Real Madrid C.F. “B” y acabando la Liga en decimoséptimo lugar. Esta clasificación le hace descender a Tercera División tras cuatro temporadas de manera consecutiva en la categoría de bronce. A la primera de cambio es subcampeón en la temporada 99/00 con José María Blanco como técnico y en la Promoción de Ascenso se impone al C.D. Coslada por el gol-average particular a favor, pues están empatados a 11 puntos. Detrás quedan Club Marino de Luanco y C.D. Béjar Industrial.
2000 – 2010
Su permanencia en Segunda División B durante la campaña 00/01 es efímera, pues queda último en un torneo en el que de haber apretado hubiera podido salvar la categoría. Con el cambio de década sólo destacan inicialmente las temporadas 02/03 y 05/06. En la primera es subcampeón a un punto del C.C.D. Cerceda, cayendo en la Promoción ante la U.D. San Sebastián de los Reyes. Detrás quedan Real Sporting de Gijón ”B” y C.D. Guijuelo. En la segunda es Campeón de grupo pero en la Promoción, esta vez con eliminatoria directa, tras superar al C.D. Lealtad: 1-2 en Villaviciosa y 1-0 en casa; cae ante el C.D. Cobeña tras empatar 0-0 en la localidad madrileña y 1-1 en casa. En la temporada 06/07 se proclama Campeón de Tercera División con holgura mientras en la Promoción pone todo lo que tiene y en semifinales se deshace del C.D. Anguiano, derrota por 2-1 en la localidad riojana y 4-1 en casa. En la Final sufre menos y tras ganar 0-2 en la ida con el C.D. Don Benito como adversario, en casa le basta un empate 1-1 para ascender a Segunda División B.
Con una buena plantilla, durante la sesión 07/08 termina cuarto en Liga y entra en la Promoción de Ascenso a Segunda División A, siendo eliminado por el Écija Balompié: 1-0 en casa y 3-0 en la localidad sevillana. Tras este gran resultado deportivo, en la campaña 08/09 pierde a algunas de sus mejores piezas y desciende a Tercera División al ser decimoséptimo. Su paso por esta categoría como viene siendo habitual es efímero y al término de la edición 09/10 se proclama Campeón de Liga con 82 puntos. En la Fase de Campeones consigue regresar a Segunda B después de superar al Burgos C.F.: 0-0 en la capital castellana y 0-0 en casa pasando por penaltis, con un 3-0 a favor en la tanda y una gran actuación del guardameta Diego.
2010 – 2020
El paso por el tercer nivel durante la temporada 10/11 es efímero y el dependiente deportivista sucumbe de nuevo a Tercera División tras no ofrecer el nivel esperado y caer en el decimoséptimo puesto en una campaña horrible para el club coruñés que observa incrédulo el descenso de sus dos primeros equipos.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
82 años de historia: Real Club Deportivo de La Coruña. Pedro de Llano López y Eladio Muiños Díaz. Imprenta Mundo (1988).
El libro de Oro del Real Club Deportivo de la Coruña. Carlos Fernández Santander. La Voz de Galicia (2000).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Un club centenario: historia del Real Club Deportivo de La Coruña (1906-2006). Carlos Fernández Santander. Librería Arenas (2006).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
Segunda División B “Historia de los clubs que nunca la sobrepasaron”. Vicent Masià Pous (2007).
ESCUDOS DEL VILLARREAL CLUB DE FÚTBOL S.A.D. «B». EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL VILLARREAL CLUB DE FÚTBOL «B». EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN VILLARREAL:
La ciudad de Vila-real desde que en el año 1942 fuese constituído el Villarreal Club de Fútbol, una vez ya federado en el año 1947, siempre ha contado con diversos clubs que, de una forma u otra, han recogido lo más distinguido de los jugadores locales más sobresalientes que no han tenido cabida en la primera entidad. Bien impulsados desde el propio Villarreal C.F. como clubs canteranos especializados en la formación de jugadores o bien partiendo desde la iniciativa privada, han surgido sociedades como el Madrigal C.F. y la Peña Deportiva Villarrealense en los años cincuenta -ambos recordados por la afición local y que dejaron una notable impronta todavía hoy imborrable-, el Club Atlético Villarrealense en mitad de los sesenta, el juvenil Fundación Flors C.F. en los setenta y con equipo amateur en los ochenta, época esta en la que coincide con el Industrial Villarreal S.D., un proyecto de escasa duración que pretendió en su momento alcanzar altas cotas pero que se quedó en la mitad del camino, o recientemente el último de ellos, el C.F. Atlético Vila, el segundo club con importancia en la localidad todavía hoy humildemente en activo hasta que la directiva del equipo amarillo decidiese a finales de los noventa crear su segundo equipo.
HISTORIA DEL EQUIPO DEPENDIENTE:
1999 – 2000
Con la llegada del Villarreal C.F. a Primera División en la temporada 98/99 tras una escalada deportiva espectacular, la directiva encabezada por Fernando Roig traza el plan de organizar la entidad de forma estructurada y dotándola con unas instalaciones en las cuales fomentar el fútbol en sus categorías inferiores a semejanza de los clubs modernos. Dentro de esta reestructuración entra el Villarreal Club de Fútbol, S.A.D. “B”, baluarte creado en el verano de 1999 que albergará a las jóvenes promesas que destaquen en el ámbito regional valenciano y figuras procedentes incluso de otras comunidades. La cantera del conjunto de La Plana es en la actualidad, fruto de un gran trabajo y una gran cuidado, la más potente en la Comunidad, habiendo superado a la histórica del Valencia C.F. con quien mantiene un duelo en la sombra desde hace una década en cada una de sus categorías.
Deportivamente, el Villarreal C.F. “B” parte a competir en la temporada 99/00 desde Segunda Regional, la más baja de las categorías organizadas por la Federación Valenciana, alzándose con el título y consiguiendo ascender a Primera Regional.
2000 – 2010
Con una gran base y un buen plantel, arrasa en el campeonato 00/01 y al término del mismo consigue su segundo ascenso consecutivo, ahora a Regional Preferente. Paralelamente, el Villarreal C.F. establece un convenio deportivo de filiación con el club vecino C.D. Onda, quien se encuentra en Tercera División en esos instantes, rompiéndose a la conclusión de la campaña 00/01 con el ascenso de este último a Segunda B. El Villarreal C.F. “B” pasa las temporadas 01/02 y 02/03 en Regional, consiguiendo ascender a Tercera División al cabo de esta última sesión tras un gran campeonato sin apenas oposición y contando desde 2002 con las nuevas instalaciones de la Ciudad Deportiva.
La temporada 03/04 supone el debut en Categoría Nacional, finalizando en un magnífico tercer puesto que le permite disputar la Fase de Ascenso a Segunda División B por vez primera en su corta historia. En esta elimina en semifinales al C.E. Santanyí, 1-0 en casa y empate a uno en la población mallorquina. En la Final se encuentra con el C.F. Badalona, empatando a uno en casa y perdiendo en la vuelta por 3-2, con lo cual se desvanece el ascenso. En la campaña 04/05 tras un apretado final no consigue entrar en los cuatro primeros puestos que dan derecho a la Promoción, siendo quinto y empatado a puntos con el cuarto clasificado. En la temporada 05/06 configura una extradordinaria plantilla que resulta Campeona de la categoría, registrando unos números de récord, con cien puntos obtenidos y solo dos derrotas. En la Fase de Ascenso se impone en ambos partidos de semifinales al Cartagena Promesas C.F. por idéntico resultado, 3-1. En la gran Final es derrotado en la ida con el resultado de 3-1 por el Real C.D. Espanyol “B”, consiguiendo en casa un insuficiente empate a uno que le condena a seguir un año más en la categoría.
En la campaña 06/07 es subcampeón de su grupo de Tercera División superado por el C.D. Dénia, quien le saca cinco puntos de ventaja. En la Promoción elimina en semifinales a la U.D. Poblense, venciendo en la ida por 0-4 y en casa por 3-0. En la Final el rival es el potente C.D. Mirandés, venciendo en la Ciudad Deportiva por 3-1 y cayendo en la ciudad burgalesa por 2-1, resultados con los que de la mano del joven técnico Juan Carlos Garrido consigue ascender a Segunda División B. Instalado ya en la nueva categoría, el conjunto amarillo realiza un aceptable debut en la categoría de bronce obteniendo el undécimo puesto sin pasar por demasiadas complicaciones. Se traen nuevos refuerzos y el equipo afronta la temporada 08/09 con optimismo y con la idea fija de tratar alcanzar la Segunda División A.
Los resultados le acompañan y desde el principio se ocupa el liderato, manteniendo un gran duelo con el C.D. Alcoyano que finalmente se resolverá a favor de los alicantinos. La segunda plaza en Liga le permite promocionar, no desperdiciando la oportunidad y haciéndose con el ascenso tras eliminar a Zamora C.F.: 0-2 en la capital castellano-leonesa y 2-0 en casa; y al Real Jaén C.F.: 0-0 en la Ciudad Deportiva y un inimaginable 1-2 en la capital andaluza. Durante la temporada 09/10 se estrena en Segunda División A con su joven técnico Juan Carlos Garrido al frente y con el ánimo de realizar un buen papel que le permita mantener la categoría, además de seguir con su cometido de forjar buenos jugadores que sirvan para reforzar la primera plantilla. Sin duda no defrauda y tras practicar el mejor fútbol del grupo alcanza brillantemente el séptimo puesto, pese a un relevo mediada la temporada en el banquillo a consecuencia de la marcha de Garrido al primer equipo mientras se ocupaba puesto de ascenso. El filial amarillo acondiciona su terreno a la nueva categoría ampliando el recinto de las tres mil localidades que tenía a las actuales cinco mil en vistas a asentarse durante varias campañas en la división de plata.
2010 – 2020
La temporada 10/11 es su segunda presencia consecutiva en la categoría, no mostrando síntomas durante la primera vuelta de lo que va a pasar en la segunda, ciclo este donde encadena una serie de resultados negativos que a punto están de costarle el descenso y que su decimoséptima plaza no refleja, sobreviviendo gran parte del torneo gracias a los puntos cosechados en el primer tramo de Liga. En la edición 11/12 el club amarillo sufre la calamidad de ver descender a su primera plantilla a la categoría de plata. Este hecho emborrona la actuación del dependiente que tras más de vuelta y media pasando apuros en los puestos de descenso había conseguido una gran remontada y la salvación, cayendo arrastrado sin solución a Segunda División B.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Historia del Villarreal C.F. (1923-1994). Fernando Peralt Montagut. Aragón Ediciones (1994).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
ESCUDOS DEL FÚTBOL CLUB CARTAGENA S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL FÚTBOL CLUB CARTAGENA S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN CARTAGENA:
La ciudad y municipio de Cartagena nacida alrededor de un puerto natural y ubicada en la Región de Murcia, es una localidad varias veces milenaria con una antiquísima historia multicultural fruto de los diferentes pueblos que la tomaron. Capital administrativa de la región e importante centro cultural, universitario y socioeconómico, cuenta con un rico patrimonio histórico-artístico y monumental girando su economía en torno a la industria naval y militar debido a su situación estratégica portuaria contando además con una amplia red industrial energética de refinerías. Municipio extenso en dimensiones, en su término habitan cerca de doscientos veinte mil vecinos diseminados en varias áreas urbanas y núcleos periféricos concentrando el antiguo casco urbano sesenta mil habitantes seguido de San Antonio Abad con cuarenta y cinco mil, El Plan con treinta y cinco mil y Canteras con diez mil. Dedicada en parte a la agricultura con una fértil huerta, dado su carácter administrativo presenta una elevada población de funcionarios siendo el sector servicios considerable y empezando a destacar un crecimiento turístico.
Para saber cuándo fue practicado el fútbol por primera vez en la ciudad, según los datos recabados hemos de remontarnos al año 1902 en el que jóvenes de recursos iniciaron sus primeras actividades con la pelota en los terrenos de la Alameda de San Antón dando pie, ya en 1903, a la constitución de la primera sociedad organizada bajo el título de Cartagena Foot-ball vistiendo camiseta roja y teniendo como terreno de juego un campo sin las dimensiones reglamentarias en la misma Alameda. Uniformados con camiseta azul, en 1904 se constituyó por la iniciativa de algunos jóvenes que habían cursado sus estudios en la localidad francesa de Foix otra sociedad denominada Kugly recogiendo sus prácticas en los terrenos del Ensanche de la zona del Almarjal, nombre este último con el que se bautizó un campo con medidas reglamentarias levantado con su esfuerzo. Este hecho propició el nacimiento de una corta pero sana rivalidad entre ambos colectivos protagonizándose numerosos encuentros durante el verano de 1904 cuya continuidad, para lamento de este deporte, no trascendió más allá de 1905 debido a la inconsistencia y juventud que rodeó a las dos empresas.
Continuando en el tiempo en 1905 les sucedió el Sport Club Victoria, primer conjunto local que partió hacia otras localidades de la provincia a contender frente a sus respectivos clubs, siendo el año 1906 clave en el devenir del fútbol cartagenero con la constitución en fecha 6 de septiembre del Sport Club Cartagena en el salón de recreo del Teatro Circo cuya primera Junta Directiva estuvo compuesta por Miguel Sanz en la presidencia, Luis Cabrerizo en la vicepresidencia, Antonio Butigieg Conesa como secretario y Nicasio Santamarina en el cargo de tesorero. Vistiendo camiseta y pantalón blancos, esta sociedad habilitó un terreno junto a la Alameda de San Antón titulado Campo de Cuatro Caminos y también conocido popularmente como Campo del Ensanche, teniendo su aparición repercusión en la juventud local que acudía al Patronato con la constitución en marzo de 1907 del Juventud Católica presidido por Francisco Navarro Ruiz que se hizo acompañar de Juan Ros prieto como secretario y Salvador Luján Martínez como tesorero.
También en 1907 surgieron otros clubs como La Ibérica, sociedad vinculada a las Escuelas Graduadas y, desde enero, el Sport Club Carthago en el núcleo de San Antonio Abad, adaptando este último un recinto abierto conocido como Campo de Los Mayores. El fútbol cartagenero vivió durante estos años y los inmediatos una pequeña época de esplendor no limitándose este a las inmediaciones del casco antiguo o del barrio de San Antonio Abad, surgiendo también voluntariosas sociedades en los núcleos de Escombreras, Los Dolores, Alumbres y El Algar. Sin embargo, no todo fueron buenas noticias pues, ya en 1908, desaparecido el Sport Club Cartagena, el Sport Club Carthago se convirtió en el máximo representante local recibiendo en su feudo a los principales clubs de Murcia, Águilas y La Unión, incluso clubs extranjeros como el argelino Club Oranais, de Orán y el Británico formado por ciudadanos de esa nacionalidad con residencia en Cartagena.
El fútbol durante estos años no generaba beneficios teniendo los jugadores que pagarse generalmente sus propios gastos de desplazamiento y uniformes con graves problemas a la hora de disponer de terrenos de juego propios o de alquiler y de recursos que limitaban seriamente su tiempo de existencia condicionándolos en exceso. La carestía de los balones, entre once pesetas el más barato y veinte el más caro tampoco ayudaba así como no tener el campo cerrado con pared de ladrillo o vallado les alejaba de hacer taquilla. En esta situación tan penosa, la inmensa mayoría de los clubs cartageneros desaparecieron totalmente surgiendo aventuras con apenas recorrido como el Athletic Club Victoria en 1913 que alternó el uso del Campo de Cuatro Caminos y el Campo de Los Mayores o la también breve Gimnástica Molinense.
Tras una década de continuas apariciones y desapariciones con clubs emergentes que nunca llegaban a cuajar, en 1915 surgió una tentativa más seria con la constitución del Sporting Club Carthago, nueva sociedad que vistiendo camisa y pantalón blancos pareció ser la definitiva a tenor de sus mimbres disponiendo de un terreno en condiciones y cerrado como el Campo de la Alambrada -denominado también de Beltri- apto para hacer taquillajes. Presidido por el político José García Vaso, el Sporting Club Carthago creció rápidamente consiguiendo hacerse con un buen número de aficionados que, después de acudir a Beltrí, pasaron en 1917 al Campo de Aviación que no tuvo fortuna siendo arrasado por una riada. Siendo el club cartagenero uno de los promotores para constituir una federación interregional que agrupara a las sociedades futbolísticas de Murcia, Albacete, Alicante, Castellón y Valencia nacida en 1918 en principio con alicantinos y murcianos bajo el nombre de Federación Levantina teniendo sede en Alicante, a principios de 1919 su presión sirvió para que, desde la iniciativa privada, José Maestre Zapata construyera el Campo de la Plaza de España situado junto a la Alameda de Alfonso XIII, terreno de juego vallado con tablas de madera inaugurado con lleno total el 22 de junio en encuentro disputado frente al Murcia F.C. donde los locales se impusieron por el tanteo de 3-1.
Trasladado el Sporting Club Carthago al nuevo recinto, paradójicamente tan sensacional hecho coincidió con una repentina crisis en el club cuando su presidente, principal impulsor y mecenas José García Vaso, hastiado por disputas internas con parte de su Junta Directiva presentó su dimisión irrevocable dejando al club sin recursos y, por lo tanto, herido de muerte. Todavía enfadado y desaparecido el Sporting Club Carthago que tanto le había hecho padecer, en julio del mismo año un grupo de jóvenes se acercó hasta su persona presentándole un nuevo proyecto y convenciéndole de que era la persona idónea para llevarlo, máxime cuando la Federación Levantina iba a abrir el ingreso a los clubs valencianos y castellonenses, aceptando García Vaso encantado el nuevo reto ante la posibilidad de participar en el Campeonato de España que era uno de sus máximos intereses. Bajo estas promesas quedó ese mismo año constituido el Cartagena Foot-ball Club presidido por el propio García Vaso siendo redactados unos Estatutos que fueron entregados en el Registro de Asociaciones el 20 de enero de 1920 siendo aprobados por el Gobernador el día 24, contando con el club con el arriendo del Campo de la Plaza de España, siendo inscrito en la Federación Levantina y considerado como club de Primera Categoría.
Vistiendo inicialmente camiseta blanca con pantalón negro, el Cartagena F.C. se convirtió desde su nacimiento en el club más representativo de la ciudad compitiendo con acierto en la Serie A de los campeonatos organizados por la Federación Levantina al proclamarse campeón de la Sección Sur compuesta por alicantinos y murcianos en la temporada 19/20, sucediéndole otros campeonatos en los que no estuvo tan acertado ante la hegemonía mostrada primero por la Real Sociedad Levante F.C., de Murcia en las temporadas 20/21 y 21/22 y después Club Natación de Alicante en las campañas 22/23 y 23/24. Entregado el cargo presidencial a Carlos Ávalos Jorquera al cabo de un par de años, Cartagena F.C. junto a C.D. Mercantil fueron los dos únicos clubs locales inscritos en la Federación Levantina hasta que en 1924, hartos los clubs murcianos de la actitud mostrada hacia ellos por la sede federativa de Valencia, acordaron separarse y constituir el 27 de junio la Federación Murciana.
Llegados a 1925, siendo presidente Carlos Ávalos, por desavenencias entre jugadores del Cartagena F.C. se produjo una escisión traumática que desembocó en la marcha de este club a un nuevo campo situado cerca de la Estación del Ferrocarril todavía sin vallar que fue inaugurado oficialmente el 19 de septiembre bajo el nombre Stadium Cartagenero -posteriormente Estadio del Almarjal- y a la constitución de la U.D. Carthago, sociedad identificada también como Unión Carthago que vino a ocupar el Campo de la Plaza de España contando en sus filas con jugadores disidentes del Cartagena F.C. y otros procedentes en su mayoría del C.D. Mercantil, de Segunda Categoría.
Ese mismo año la Federación Levantina sufrió la escisión de los clubs murcianos y gran parte de los alicantinos hastiados de las manipulaciones y decisiones arbitrarias que decían ejercía Valencia en beneficio de los tres clubs de la Serie A de aquella provincia, los cuales junto a los albaceteños dieron pie a la constitución de la Federación Murciana. Tras este importante y definitivo paso, el Cartagena F.C. pasó a formar parte de esta uniéndose al panorama futbolístico local nuevos clubs como el Stadium Peral y el Sport Abad, nacido en 1922 y desaparecido a finales de 1925 basado en el popular núcleo de San Antón, a los que les siguieron otros como el Club Deportivo Comercial, el Arenas F.C. y el Centellas F.C.
A mitad de los años veinte nacieron dos clubs que a posteriori tendrían una significativa importancia como fueron el Club Deportivo Lisvert, constituido en 1925 y el Plus Ultra F.C., constituido en 1926 vistiendo casualmente los dos los mismos colores, camiseta blanquiazul con pantalón negro y manteniendo desde sus inicios una sana rivalidad como clubs de Segunda Categoría tanto dentro de los campeonatos locales disputados en Cartagena como en los regionales de la categoría.
Pocos años después, a consecuencia de la presión ejercida por los clubs profesionales, la Federación Española aceptó la idea de formar un Campeonato Nacional de Liga con dos categorías jerarquizadas por orden de importancia. Esta iniciativa se llevó a la práctica en la temporada 28/29 y el Cartagena F.C., por su corto historial y escasez de títulos nacionales, fue incluido en el Grupo B de Segunda División que en realidad fue un torneo eliminatorio para discernir qué clubs ascendían a la categoría de plata finalizando décimo. En la temporada 29/30 esta fase eliminatoria grupal fue suprimida y sustituida por eliminatorias territoriales bajo el nombre de Tercera División, consiguiendo los cartagineses acceder a unos de sus grupos proclamándose campeón.
Iniciados los años treinta el club más representativo de la ciudad, el Cartagena F.C., continuó asediando el ascenso a Segunda División sin fortuna tras fracasar en las distintas oportunidades que dispuso en los torneos de Tercera División a pesar de contar con buenas plantillas, produciéndose en julio de 1931 la fusión entre el Plus Ultra F.C. y el C.D. Lisvert que decidieron unir su futuro bajo una misma sociedad que fue titulada Plus Ultra-Lisvert continuando jugando en el Campo de la Plaza de España, vistiendo camiseta blanquiazul con pantalón negro y siendo elegido presidente José María Fructuoso. A mediados de enero de 1932 surgió una nueva sociedad titulada C.D. Los Tigres uniformada con camiseta blanquiazul y pantalón negro de gran animosidad convirtiéndose en poco tiempo en unos de los principales clubs cartagineses confirmándose que, a pesar de contarse con un escaso y solitario campo cerrado, había en la localidad una gran cantera de jugadores. En julio de 1936, tas estallar la Guerra Civil, el fútbol quedó paralizado en la ciudad y provincia no pudiendo acudir los clubs murcianos a competir con los clubs catalanes y valencianos en lo que se denominó Liga del Mediterráneo ante los elevados costes que el torneo requería además de la falta de seguridad que ofrecían los desplazamientos.
Siendo el puerto de Cartagena un objetivo militar preferente y habiendo quedando la ciudad bajo el mando de las tropas gubernamentales, durante el conflicto ésta fue seria y numerosamente bombardeada por la aviación alemana primero e italiana después produciéndose numerosas bajas y la destrucción de casi un tercio del casco antiguo, entrando las tropas nacionales a principios de marzo de 1939.
Finalizada la guerra y tras hacerse las depuraciones correspondientes de índole política en las directivas de los clubs, aquellos que sobrevivieron y se reorganizaron volvieron a la actividad en los meses de junio y julio como el Cartagena F.C. y los dos cartagineses de Primera Regional Plus Ultra-Lisvert y el constituido a finales de 1927 C.D. Gimnástica Abad, jugando el primero en el Campo del Almarjal y los otros dos en el Campo de la Plaza de España en unos momentos muy delicados donde apenas había medios, todo había de hacerse casi desde cero y el campeonato de Liga 39/40 estaba al acecho.
Compartido el Campo de la Plaza de España por diversos clubs que pagaban un arriendo como el C.D. Gimnástica Abad y el Plus Ultra-Lisvert entre otros, los plusultristas intentando resolver su futuro de la mejor forma de las posibles estudiaron la situación heredada buscando como alternativa poder jugar en otro recinto encontrando la horma de su zapato en el C.D. Los Tigres, conjunto de Segunda Regional que carecía de jugadores y era poseedor de un campo propio inaugurado el 8 de septiembre de 1934 en un encuentro ante el cartagenero Los Diablos Rojos F.C. con resultado de empate 2-2 aunque, a consecuencias de su abandono durante varios años, preciso de acondicionar para la práctica de fútbol. Cedida la sede plusultrista de la Calle del Aire a la directiva tigresista en agosto de 1939 para que celebraran sus reuniones, con el paso de los meses surgió una sólida entente entre ambas directivas con vistas a fusionar las dos sociedades en una sola comprobado que mutuamente se necesitaban, acuerdo que terminó fructificando el 25 de febrero de 1940 con la constitución de la Unión Deportiva Cartagenera siendo elegido presidente José Martínez Aznar.
En 1941, compitiendo el Cartagena F.C. en Segunda División, cambia de denominación con la nueva Ley que prohíbe los extranjerismos y pasa a ser Cartagena Club de Fútbol, denominación con la alcanzará su mejores momentos deportivos y también más bajos con una desaparición momentánea en 1942 aquejado de graves deudas. Tras volver a la actividad en 1943 presionado por la Federación Murciana para no perder una plaza concedida por la Federación Española para poder participar en el recién modificado e implementado campeonato nacional de Tercera División, el Cartagena C.F. es reorganizado progresando hasta alcanzar a finales de los años cuarenta la Segunda División, categoría la cual tras tres largas temporadas que le sumirán en un profundo caos económico provocará su derrumbe. El 10 de agosto de 1952, sin visos de solución y mediante Asamblea Extraordinaria, se decide hacer desaparecer una sociedad histórica que aglutina seis presencias en Segunda División y once en Tercera División.
En esos años la ciudad de Cartagena cuenta con otros clubs destacando el C.D. Naval, una entidad formada bajo el amparo de la Empresa Nacional Bazán que se encuentra en Tercera División pero en horas bajas, al igual que el C.D. Gimnástica Abad, deambulando por Primera Regional en similares condiciones. La afición, desconsolada y huérfana de un club que les represente, se fija en otro club que comparte terreno de juego en el Campo de El Almarjal. Se trata de la Unión Deportiva Cartagenera, una entidad de menor rango que compite en Primera Regional. La U.D. Cartagenera es un club saneado en el verano de 1952 y viste con camisa blanca y pantalón azul, aunque en su origen lo había hecho con camisa rojiblanca.
Una vez desaparecido el Cartagena C.F., la gran masa social y directiva del extinguido club pasa a formar parte de la U.D. Cartagenera, quien adopta los colores blanquinegros de estos y con su apoyo se proclama Campeón de Primera Regional en la temporada 52/53, consiguiendo ascender a Tercera División. Su estreno en Categoría Nacional durante la campaña 53/54 no es muy afortunado, aunque conseguirá subsistir hasta un total de ocho campañas consecutivas hasta que al término de la 60/61 ascienda a Segunda División. Recién ascendido a esta categoría y siendo presidente Herminio Campillo, el club cambia de nombre y pasa a competir con el nombre de Club Deportivo Cartagena. En la temporada de su debut 61/62, es undécimo, mientras que en la siguiente 62/63 es decimotercero. Este puesto le obliga a jugar la Promoción de Permanencia para conservar la plaza, perdiéndola ante el aspirante C.F. Badalona: 3-1 en la localidad barcelonesa y 1-1 en casa.
Descendido a Tercera División, el club intenta con todas sus fuerzas retornar a la categoría de plata pero sus intentos son siempre baldíos, permaneciendo en ella hasta el término de la campaña 79/80 en la que asciende a Segunda B. El 8 de abril de 1974 cambia de nombre a Cartagena Fútbol Club tras serle concedida dicha autorización federativa.
Los años ochenta son la época dorada del club cartaginés. Para empezar, es quinto en su debut en Segunda B durante la campaña 80/81, siendo subcampeón en la siguiente 81/82 tras el Xerez C.D. y empatado a puntos con C.F. Lorca Deportiva y C.D. Antequerano. El gol average hace que ascienda a Segunda División ante la desbordante alegría de sus incondicionales.
El Cartagena F.C. militará durante seis temporadas consecutivas en la categoría de plata. En las dos primeras, 82/83 y 83/84, queda decimosexto a poca distancia del descenso y manteniendo la plaza con muchos apuros. La temporada 84/85 es la mejor sin duda a nivel clasificatorio, terminando en octavo puesto aunque mirando de reojo los puestos de cola. Tras un par de temporadas en la zona media de la tabla desciende a Segunda B en la campaña 87/88 tras ser vigésimo y colista con ocho victorias y ocho empates. Esa misma temporada, concretamente el dia 7 de febrero de 1988, se inauguró de forma no oficial el nuevo Estadio Municipal Cartagonova en un encuentro frente al Real Burgos C.F. que acabó con un empate a cero goles.
Tras numerosas campañas intentando regresar a la categoría de plata el club se haya bastamente endeudado y una vez empezada la temporada 96/97, cuando se llevaban varias jornadas disputadas, se retira de la competición. El club permanece cinco temporadas consecutivas sin presentar equipo senior en competición, limitándose a equipos de fútbol base. En el año 2002, su presidente José Gómez Meseguer construye la Ciudad Deportiva que lleva su nombre y presenta equipo en Primera Territorial, compitiendo en Regional hasta que al término de la temporada 08/09 consigue ascender a Tercera División.
HISTORIA DEL CLUB:
1995 – 2000
El club que nos ocupa fue constituido el 25 de julio de 1995 por Florentino Manzano y otros socios como Cartagonova Fútbol Club con el ánimo de empezar de cero, comenzando a jugar sus partidos desde la Territorial Preferente murciana al adquirir la plaza que el C.D. Balsicas mantenía en la categoría. Subcampeón en la sesión 95/96, asciende a Tercera División esa misma temporada, disputando la campaña 96/97 como máximo representante ya del fútbol cartagenero, pues casualmente comparte grupo y categoría con el histórico Cartagena F.C., retirado en plena campaña de la competición durante la sexta jornada por graves problemas económicos. Precisamente se proclama campeón de Tercera División, ganándose el derecho a promocionar a Segunda División B, pero en la Liguilla, cuando era el claro favorito para el ascenso, un pobre balance deportivo le lleva a ser tercero, por detrás de F.C. Barcelona «C» y C.F. Sóller. Curiosamente durante la temporada, la Selección de España sub-21 inauguró el Estadio Municipal Cartagonova de forma oficial el 11 de febrero de 1997, en un encuentro frente a la Selección de Malta sub-21.
Aunque el batacazo es considerable, no cesa en su empeño y en la siguiente temporada 97/98 es nuevamente campeón, consiguiendo ahora a la segunda tentativa poder ascender al comandar su grupo de Liguilla en el que supera a Pinoso C.F., C.D. Tortosa y C.D. Constancia de Inca. En la temporada 98/99 debuta en Segunda División B con Jesús Aranguren como entrenador. El objetivo inicial era la permanencia, pero contrariamente a lo imaginado, poco a poco el equipo se encarama hasta las primeras posiciones de la clasificación. Finalmente queda segundo clasificado en el grupo III de Segunda B y juega la Liguilla de Ascenso a Segunda División A. El Cartagonova F.C. tenía el éxito en su mano, pues le bastaba un empate en un doble enfrentamiento con el Córdoba C.F., pero pierde ambos encuentros. Racing Club de Ferrol y Cultural y Deportiva Leonesa serían los otros clubs que disputaron la Liguilla. En la campaña 99/00 tras realizar una meritoria primera vuelta pierde gas en la segunda, desinflándose y acabando siendo octavo.
2000 – 2010
Peor resultará la siguiente, temporada 00/01, con la destitución del técnico y una caída libre que le deja en decimotercera posición de forma apurada. En 2001 cambia de indumentaria y se pasa a vestir camiseta blanquinegra con pantalón blanco. La temporada es parecida a la anterior, con la salvedad de que en la segunda vuelta solo se obtiene una victoria. Pese a todo esto es duodécimo. Tras un verano muy agitado llega la temporada 02/03 con nuevos dueños. Luís Oliver aterriza en Cartagena tras haber fracasado en su proyecto de ascender al Xerez C.D. a Primera División, y lo hace prometiendo el ascenso inmediato y formando una gran plantilla. La indumentaria vuelve a cambiar y se vuelve al modelo tradicional cartagenero de camiseta blanquinegra a rayas verticales y pantalón negro. La temporada fue muy movida: Pepe Murcia fue destituido como técnico antes del primer partido de Liga, Palomeque y Juan Señor intentaron llevar al equipo a lo más alto hasta que empezaron los problemas económicos. El club se hundió económicamente con Luis Oliver, no había dinero para pagar a los jugadores que estuvieron muchísimos meses sin cobrar, las oficinas se quedaron incluso sin línea telefónica, el caos era absoluto. Luis Oliver y su directiva desaparecieron del mapa y dejaron a César Traversone (director deportivo) como única cabeza visible del club. Miguel Rivera se hizo cargo del banquillo, y con él llego la salvación de la categoría en lo deportivo, dejando al equipo en una meritoria decimoprimera posición.
El Cartagonova F.C. estaba condenado a desaparecer, pues la deuda acumulada era astronómica. En la ciudad se movían políticos y otras entidades, se creó una plataforma de aficionados para la salvación del club, y cuando todo se veía muy negro llegó la mano salvadora de Francisco Gómez Hernández. La temporada 03/04 es la primera de Paco Gómez al frente del club. Se juega de nuevo en el grupo III de Segunda División B. A su llegada hace cambios bastante significativos, como son el escudo y el nombre del club tras solicitarlo a la RFEF, pasando el 21 de septiembre de 2004 a ser Fútbol Club Cartagena, ambos a semejanza del histórico Cartagena F.C. para acercar el club a la ciudad.
Machuca es el primer entrenador de la temporada, después lo serán Juan Francisco Alcoy (de forma temporal) y Pep Balaguer. Es una temporada irregular y solo al final se puede salvar la categoría con tres victorias consecutivas que dejarán al equipo en la decimoquinta posición. En la temporada 04/05, el F.C. Cartagena cambia otra vez de ubicación para jugar en el grupo IV de Segunda División B. Pep Balaguer inicia la temporada como entrenador, pero pronto será destituido por los malos resultados. Vicente Carlos Campillo y Juan Francisco Alcoy aumentan la nómina de entrenadores de esta temporada, pero el equipo sigue un rumbo irregular. En el último tramo de Liga llega Juan Ignacio Martínez, un técnico que hace un buen trabajo, salva al equipo del descenso y merece la renovación. Al final de la campaña, el F.C. Cartagena queda en decimotercera posición.
Tras los últimos fiascos, la afición no esperaba nada nuevo para la temporada 05/06. Juan Ignacio Martínez era el entrenador y Paco Gómez puso a su disposición a una gran plantilla a la que debía conjuntar. El resultado fue magnífico, el equipo blanquinegro arrasó en el grupo IV de Segunda División B y quedó Campeón desplegando un fútbol de superior categoría, siendo un auténtico bloque y modelo a seguir de cómo hacer bien la cosas. El conjunto blanquinegro se había ganado el derecho a jugar el Play-off de Ascenso y era favorito para lograr el objetivo. Sin embargo, a las primeras de cambio la sorprendente U.D. Vecindario lo elimina. Empate a dos en Santa Lucía y victoria en el Municipal de Cartagonova por 0-1.
En la temporada 06/07 el F.C. Cartagena intenta seguir la estela del año anterior, el bloque de jugadores es el mismo, y se vuelve a intentar el ascenso de categoría pero sin éxito. David Amaral empieza la temporada como entrenador pero dimite a mitad de competición siendo sustituido por José Luis Montes, que a su vez será destituido por los malos resultados, mientras Juan Francisco Alcoy toma las riendas en las últimas jornadas. La recta final del campeonato deja al club blanquinegro fuera de los Play-off de ascenso al ser quinto. La campaña 07/08 pese a la ilusión inicial resulta decepcionante y el cuadro cartagenero finaliza octavo alejado de los primeros puestos.
En el verano de 2008, Paco Jémez ocupa el banquillo y con él se consigue por fin el ansiado ascenso en una gran campaña 08/09 en el que el sistema competitivo varía. El F.C. Cartagena queda brillantemente Campeón de Liga y en la Fase de Ascenso se enfrenta al C.D. Alcoyano imponiéndose 2-1 en Cartagonova y empatando 2-2 en el último minuto de la vuelta ante la algarabía de su afición. El ascenso se ha conseguido y no hace falta jugar más eliminatorias. Como colofón disputa ante el Cádiz C.F. el título de Campeón oficial de Segunda B, pasando a manos de estos tras perder 1-2 en casa y empatar 1-1 en la capital andaluza.
La temporada 09/10 es la de su debut en Segunda División A con Paco Gómez en la presidencia, realizando un gran campeonato que tiene un inicio espectacular que le encarama a la cima y que durante muchas jornadas le contempla como aspirante al ascenso, con la etiqueta de ser la auténtica revelación de la categoría. El F.C. Cartagena es dirigido con gran acierto por su técnico Juan Ignacio Martínez y en las últimas jornadas del torneo mantiene la flama viva ilusionando a toda su afición hasta que, tras varios arbitrajes desfavorables y una derrota en casa ante el Levante U.D., cunde en su moral y pierde opciones quedando en las postrimerías en un meritorio quinto puesto que deja a la afición cartagenera un sabor agridulce.
2010 – 2020
Con el cambio de década y ajustándose a la Ley del Deporte, el 5 de agosto de 2010 el club se transforma en Sociedad Anónima Deportiva pasando a ser Fútbol Club Cartagena, S.A.D. después de reunir los 7,7 millones de euros exigidos por el CSD para su conversión tras depositar tal cantidad el empresario jacarillense Francisco Gómez Hernández, presidente de la entidad albinegra, pasando a ser propietario de la sociedad en su totalidad.
Yendo al aspecto puramente deportivo y siguiendo Juan Ignacio Martínez como entrenador, en la campaña 10/11 el resultado es bien distinto de su anterior comparecencia descendiendo el conjunto cartaginense bastantes plazas en la clasificación al ser decimotercero en un torneo donde pierde la fuerza de su feudo y tiene que conformarse con alejarse de la zona caliente de la tabla clasificatoria y cumplir lo más dignamente posible. La preocupante tendencia observada en la temporada anterior es confirmada en la sesión 11/12 donde el equipo, inicialmente dirigido en sus primeras cuatro jornadas por Paco López y en las siguientes catorce por Francisco Javier López Castro, ocupa puestos de descenso ya desde el inicio mostrándose incapaz de abandonarlos pese a los relevos sucedidos en el banquillo terminando, ya bajo las órdenes de Carlos Ríos, vigésimo tras un maquillaje de resultados final que no le impide perder la categoría.
Después de tan agria despedida de la categoría de plata en este ciclo que se alarga tan solo tres temporadas, en la edición 12/13 se regresa al campeonato de Segunda División B donde, como suele suceder, los blanquinegros son serios aspirantes al ascenso. Ubicados en el Grupo IV, el F.C. Cartagena entrenado primero por José Francisco Grao García «Pato» y en las veintidós últimas jornadas por José Rojo Martín «Pacheta» consigue ser subcampeón a dos puntos del Real Jaén C.F. en un reñido duelo por el título, clasificándose para una Promoción de Ascenso donde se depositan muchas ilusiones que serán rotas rápidamente en Cuartos cuando, en una intensa eliminatoria ante el Caudal Deportivo, de Mieres, después de empatar 0-0 en la localidad asturiana caen en casa con un inesperado 0-1 que los aparta de su camino. En la temporada 13/14 la plantilla es entregada a Luis García Tevenet siguiendo en el Grupo IV junto a los clubs andaluces, murcianos, extremeños, norteafricanos y castellano-manchegos terminando en tercer lugar precedido por Albacete Balompié y La Hoya Lorca C.F., obteniendo por segundo año consecutivo el pase a los Cuartos de la Promoción de Ascenso donde nuevamente ante un club asturiano, en esta ocasión el Real Avilés C.F., cae eliminado después de perder 1-3 en casa ante la frustración de sus seguidores y en la localidad industrial por 2-0.
Un intenso cambio en la plantilla de la campaña 14/15 y poco acierto a la hora de fichar, a punto estuvieron de causar a los blanquinegros un severo traspiés en Liga cuando, ni Simón Ruiz al cargo del equipo en sus primeras dieciocho jornadas ni Manuel Sánchez Palomeque en el resto, pudieron levantar una situación que parecía abocada al descenso. Afortunadamente para sus intereses, un cuádruple empate con La Roda C.F.,Córdoba C.F. «B» y Arroyo C.P. les dejó en decimosexto puesto escapándose del descenso directo por los pelos debiendo de defender su plaza en la categoría mediante una Promoción de Permanencia disputada y saldada con éxito ante Las Palmas Atlético en la que, después de empatar 0-0 en casa, un empate 1-1 en la capital canaria garantizó su continuidad a consecuencia del valor doble de los goles anotados a domicilio. Con el susto en el cuerpo la sesión 15/16 fue más llevadera ocupando los murcianos la séptima plaza aunque contando hasta con dos entrenadores como Víctor Manuel Fernández y Alberto Fernández Monteagudo.
En la edición 16/17 se mejoró ostensiblemente la plantilla con el ánimo de estar en los puestos de arriba e intentar promocionar contando con la presencia de Monteagudo al frente del timón, técnico con el que se consiguió la cuarta plaza no sin dificultades en un grupo muy igualado donde La Hoya Lorca C.F., Real Murcia C.F. y C.F. Villanovense estuvieron un paso por delante. Clasificados para la Promoción de Ascenso, el F.C. Cartagena al fin pudo remontar los Cuartos eliminando al C.D. Alcoyano con el que empató en casa 0-0 y al que venció en tierras alicantinas por 0-2, siendo sin embargo un infortunio las Semifinales cuando, tras perder 1-2 en casa ante el F.C. Barcelona «B», después de vencer 0-1 en la capital condal se demostró que podría haberse llegado más lejos. En la temporada 17/18 se le confió nuevamente el proyecto albinegro a Monteagudo quien no defraudó en Liga consiguiendo el primer puesto y título dentro del Grupo IV en un intenso duelo resuelto por un solo punto de margen ante el Marbella F.C., clasificándose como era su deseo para una Eliminatoria de Campeones donde había mucho en juego. En un par de encuentros muy intensos, los blanquinegros derrotaron en casa al C.F. Rayo Majadahonda por 2-1 siéndole el resultado favorable durante el encuentro de vuelta hasta que en el minuto 97 anotaron los madrileños el 1-0 que les privaba del ascenso directo ante su desesperación. Cariacontecidos y desmoralizados, los cartaginenses todavía superaron al Real Club Celta de Vigo «B» en Semifinales empatando 0-0 en la localidad olívica y 1-0 en casa plantándose en la gran Final, nueva oportunidad de ascender que se les escapó ante un rocoso Extremadura U.D., de Almendralejo, con el que perdieron en tierras pacenses 1-0 no pudiendo remontar en casa al empatar 0-0.
En la campaña 18/19 Gustavo Adolfo Munúa Vera fue el técnico elegido para realizar un nuevo intento por ascender perdiéndose el título de Liga y con ello primer puesto en beneficio del Real Club Recreativo de Huelva por escasos tres puntos, accediendo a Cuartos donde le esperaba un combativo Real Madrid Castilla que le derrotó en la capital por 3-1 siendo complicado el encuentro de vuelta, aunque resuelto positivamente al vencer 2-0. Clasificados para Semifinales, el rival si cabe fue más difícil pues la S.D. Ponferradina les derrotó en casa 1-2 y una semana más tarde en tierras bercianas por 1-0 zanjando su continuidad en la competición. Cerrando la década, la sesión 19/20 se empezó con Munúa en el banquillo siendo sustituido por Borja Jiménez Sáez en la Jornada diecinueve manteniéndose los blanquinegros en primer puesto hasta que, debido a la crisis sanitaria, en marzo la Federación Española suspendió la continuidad del torneo. Con el paso de los meses y viéndose la llegada de la nueva temporada, en el transcurso de julio se efectuaron los encuentros de la Eliminatoria de Campeones donde los cartaginenses apostaron decididamente por el ascenso no desaprovechando tan magnífica oportunidad ante el C.D. Atlético Baleares en una eliminatoria a encuentro único disputada en un terreno neutral como el Estadio de La Rosaleda, de Málaga, escenario en el cual después de empatar 0-0 en el tiempo reglamentario y prórroga, se llegó al lanzamiento de penaltis con resultado favorable a los cartageneros quienes, con el 3-4, ascendían a Segunda División por fin.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
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100 años de fútbol en Cartagena 1906-2006. José Monerri Murcia y Jaime Cros Gil. Asociación CAHFCT. Ediciones Corbalán (2006).
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Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
Archivo privado de Félix Martínez Martínez.
Anuarios de la RFEF.
La Tierra. Diario.
Balompié. Semanario.
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La Verdad de Murcia. Diario.
El Tiempo. Diario.
Murcia Deportiva. Semanario.
Levante Agrario. Semanario.
Línea. Diario.
www.cahfct.org Club de Amigos de la Historia del Fútbol en Cartagena.
ESCUDOS DE LA SOCIEDAD DEPORTIVA HUESCA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DE LA SOCIEDAD DEPORTIVA HUESCA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN HUESCA:
La ciudad aragonesa y bimilenaria de Huesca, situada al norte de la región en los límites de las sierras exteriores de los Pirineos y cruce tradicional de caminos, es la capital de la provincia homónima y de la comarca de La Hoya, habiéndose especializado en el sector servicios y preferentemente comercial como cabeza de una provincia de la que aglutina un cuarto de su población. Con cierta dedicación a la industria y conservación de labores agrarias debido a las características de su geografía, en los últimos tiempos la ciudad ha sabido dinamizarse y abrirse al turismo exponiendo su patrimonio cultural y proximidad a los Pirineos.
En cuanto al fútbol se refiere, es la ciudad de Huesca pionera a la hora de introducir la práctica de este deporte en Aragón, promoviéndose por miembros de la Sociedad Velocipedista Oscense en 1902 los primeros tanteos en el Campo de la Estación que, debido a la falta de interés por el resto de componentes, quedan en nada. Demasiado pronto para triunfar, el momento idóneo llegará apenas unos años después, concretamente en 1910 cuando, atentos a lo que ocurre en el resto del país y los distintos Campeonatos de España iniciados en 1903 que ocupan a la prensa, grupos de jóvenes locales decidan dar rienda suelta a una actividad deportiva que empieza a coger auge en institutos de secundaria como medida higiénica. De este modo el 10 de abril y en el Campo de la Cabañera, se dan cita dos contendientes que obedecen a los títulos de El Ideal, formado por alumnos de la Escuela Normal de Magisterio Oscense y Club Sertorius, formado por estudiantes del Instituto Provincial de Educación Secundaria en lo que es el primer encuentro formal.
De la unión de unos y otros, al poco tiempo se constituye la primera sociedad seria de la ciudad, el Huesca Sport Club, uniformado con camisa blanca y pantalón negro que concurre habitualmente al Campo de la Cabañera para realizar sus ensayos. Entrenados e ilusionados como pioneros en la provincia, fruto de sus inquietudes en el mes de agosto consiguen del ayuntamiento que se les incluya en el programa de las Fiestas de San Lorenzo, patrón local, convocándose un concurso de ámbito provincial al que, lamentablemente, no se suma nadie en unos tiempos en los que el balompié todavía es un desconocido abriéndose camino. Sin rival al que enfrentarse y obligados a cumplir con el compromiso adquirido, los miembros de la sociedad oscense optan por dividirse en dos equipos luciendo unos una banda diagonal roja mientras los otros eligen una banda diagonal morada. El fútbol da su pistoletazo de salida, surgiendo en 1911 el Hibernia Foot-ball que tendrá un carácter efímero.
A medida que avanzan los años, en Huesca comienza a despegar este deporte y para las Fiestas de San Lorenzo de 1913, el Huesca S.C. abre las puertas para la visita de clubs forasteros disputándose un memorable encuentro frente a la Sociedad Gimnástica Zaragozana, sociedad venida desde Zaragoza con la que se establece un resultado final de 9-0 favorable para los locales. En el año 1915 surgen otras dos entidades, el Atlético Osca y el Stadium F.C., sociedad esta última quien utiliza por primera vez los colores azul y grana en su camiseta. Antes de finalizar la década, después de haberse extinguido el Huesca S.C. y fruto del apogeo del fútbol en todo el país, surge el Club Deportivo España, sociedad que juega en el Campo de la carretera de Apiés y emplea camisa roja con pantalón blanco, recibiendo en 1925 gracias a la gestión de la directiva presidida por Manuel Banzo Echenique el título de Real por lo que cambia su denominación pasando a ser conocido como Real Club Deportivo España.
Casi de forma paralela a la carrera iniciada por los españolistas, transcurre la del Bosco F.C., subsistiendo en activo iniciado 1922 hasta cuatro clubs en la capital altoaragonesa; Atlético Osca, Stadium F.C., C.D. España y Bosco F.C. que contenderán en un torneo organizado con motivo de las fiestas locales en honor al patrón San Lorenzo. Fruto de estos encuentros y después de llegar a un acuerdo, el 20 de septiembre de 1922 queda constituido el Huesca Foot-ball Club, sociedad nacida de la fusión entre Atlético Osca y Stadium F.C. que, para su uniforme, emplea los colores azulgranas con pantalón negro de los stadiumnistas. Con Santos Solana Pérez como primer presidente electo del club, la nueva sociedd jugará en el interior del Velódromo de la Alameda protagonizando una gran rivalidad con el Real C.D. España. En 1924, bajo la presidencia de Lorenzo Fuyola y un plantel de jugadores nacidos todos en la localidad o localidades de su ámbito provincial, el Huesca F.C. se adjudica el Campeonato de Aragón de Primera Categoría Grupo B superando a la U.S. Aragón, de Zaragoza, título que consolida la práctica de este deporte e incita a muchos aficionados a seguirlo de forma apasionada.
En 1926, debido al incremento de sus seguidores, reducidas dimensiones y escasas condiciones del Velódromo de la Alameda abierto en 1897, los azulgranas inauguran el 12 de marzo el Campo de Villa Isabel situado junto a la carretera de Zaragoza en un partido donde se invita al potente F.C. Barcelona con resultado final de empate 2-2 que reúne una gran cantidad de espectadores por la fama del rival. Posteriormente, el 29 de octubre de 1927, este terreno de juego será inhabilitado por la Federación Aragonesa durante un periodo de tres meses a raíz de los graves incidentes acaecidos el 23 de octubre en un encuentro del Campeonato Regional frente al Real Zaragoza C.D. en el que es agredido por la afición local el colegiado Sr. Arribas tras un pésimo arbitraje y, fuera ya del recinto, se mantienen refriegas entre los aficionados locales quienes persiguen a los zaragocistas hasta la estación de ferrocarril donde deben ser protegidos por la guardia de asalto. El conjunto oscense, ante tal decisión que considera totalmente injusta por no poder controlar los ánimos de sus seguidores, decide retirarse del Campeonato y de la Federación Regional al entender cierto favoritismo federativo hacia los clubs zaragozanos y animadversión hacia el fútbol oscense, quedando libres todos sus jugadores los cuales pasan a engrosar las filas de otros equipos.
Llegados a 1929 los dos principales clubs locales, Huesca F.C. y Real C.D. España llevan años desaparecidos, surgiendo entonces el Club Deportivo Oscense, sociedad que nace con fuerza y desde el Campo de Villa Isabel, conquista el Campeonato Regional de Aficionados de 1931 brillantemente superando varias eliminatorias hasta alcanzar la Final del Campeonato de España, intenso evento que pierde el 21 de junio de 1931 ante el vigués Ciosvín F.C. por el resultado desfavorable de 1-4 en encuentro disputado en el Campo de Chamartín, de Madrid. Al igual que su predecesor, el Huesca F.C., el C.D. Oscense también vestirá camiseta azulgrana con pantalón negro. En 1931, movido por la presión popular, la directiva del club decide cambiar su denominación dejándolo en Club Deportivo Huesca y durante la temporada 32/33 incluso llega a participar en la Fase de Tercera División junto a Club Atlético Aurora, de Pamplona, Zaragoza C.D. y C.D. Alkartasuna, de Tafalla, un torneo por entonces eliminatorio de carácter suprarregional establecido por la Federación Española para dilucidar qué clubs ascienden a Segunda División.
Desde 1932, con un deporte más asentado que suma adeptos constantemente, el C.D. Huesca cuenta con un nuevo rival local titulado como Club Ciencia y Deportes, sociedad que emplea desde sus inicios el Campo de la carretera de Apiés, viste camisa grana con pantalón negro y acaba comiéndole pronto el terreno a los del Club Deportivo hasta el punto de que los azulgranas, concluida la temporada 33/34, entran en un profundo declive que se asevera mediado 1934 causando la desaparición del C.D. Huesca por causas fundamentalmente económicas debido a la escasa masa social que le apoya.
Avanzado 1935, tras varias conversaciones mantenidas por distintos aficionados, el fútbol parece renacer en la capital altoaragonesa quedando formada el 30 de octubre una comisión encargada de constituir una nueva sociedad. Presidido por Mariano Palacio, en fecha 17 de diciembre queda constituido el nuevo Huesca Fútbol Club -sin relación alguna con el club del mismo nombre existente entre 1922 y 1927-, sociedad que al igual que las anteriores, viste camiseta azulgrana con pantalón negro haciendo uso del Campo de Villa Isabel como feudo deportivo. Adherido a la Federación Aragonesa, el Huesca F.C. permanecerá alejado de las primeras categorías debido a su fragilidad competitiva y financiera durante su primer año de vida, dedicando su principal cometido a fomentar el fútbol y disputar encuentros frente a clubs de su zona de influencia y de la capital regional preferentemente hasta que en julio de 1936 estalle la Guerra Civil.
Dividido Aragón en dos frentes quedando la parte occidental en manos del Ejército Nacional y la parte oriental en las del Ejército Republicano, la práctica del fútbol y, por supuesto, a nivel oficial, fue imposible suspendiéndose todas las actividades durante un largo periodo de varios años. Tomada la ciudad por las tropas nacionales desde el principio, su interés estratégico ocasionó que durante 611 días consecutivos fuese hostigada por las tropas republicanas en lo que se convirtió en el asedio más prolongado a una localidad durante el conflicto, terminando todo en marzo de 1938 cuando cae el Frente de Aragón.
A finales de 1938, concretamente en diciembre, la capital altoaragonesa ha recuperado parte de su estabilidad y en medio de un ambiente de circunstancias, el Huesca F.C. empieza a reorganizarse quedando definida su nueva Junta Directiva en enero de 1939 con vistas a participar junto a Club Atlético Osasuna, de Pamplona, C.D. Logroño, Zaragoza F.C. y el militar Aviación Nacional, de Zaragoza, en un campeonato regional para restablecer la práctica deportiva lo antes posible.
Finalizada la guerra el deporte en Huesca, como en el general de las localidades españolas, pasa a estar tutelado por el Frente de Juventudes siendo los camaradas de Falange quienes se encarguen de movilizar a la juventud creando equipos y organizando torneos para el fomento físico. A lo largo de 1939 y 1940 nacerán Sporting, Nacional, Hispania del F.J., Juventud, Oscense, C.D. Español del F.J. y la Organización Juvenil del F.J., estableciéndose torneos locales de donde saldrán jugadores que ingresen en el máximo representante local. En noviembre de 1940 la D.N.D. nombra a Manuel Ezquerra Jiménez presidente del Huesca F.C., preparándose una plantilla competente para debutar en el Campeonato de Primera Categoría de la temporada 40/41. Prohibido por Ley el uso de extranjerismos en las denominaciones de las sociedades deportivas, siendo el club oscense una sociedad polideportiva que engloba varias disciplinas en el Parque Deportivo de Villa Isabel, a partir del 1 de enero de 1941 pasa a ser conocido como Club Deportivo Huesca.
El C.D. Huesca tendrá una vida tranquila durante las temporadas 41/42 y 42/43 siendo que, una vez finalizada esta última, se hace oficial la venta de la parcela que ocupa Villa Isabel para la construcción de un complejo de viviendas. Amenazada la ciudad de quedarse sin recinto deportivo, el delegado provincial de Educación y Descanso, capitán Gaspar Lahoz Martín, asume el mando reclamando a las autoridades nacionales fondos para construir un nuevo campo. Para tener más fuerza, nada más empezar 1943 Lahoz cita a los dos clubs locales federados, C.D. Huesca y C.D. Español, con el fin de constituir una nueva sociedad polideportiva donde tengan ambos representación y, de paso, se alberguen otras disciplinas necesitadas de un espacio público, quedando el 19 de enero definitivamente constituida la nueva Unión Deportiva Huesca.
Presidida por el capitán Lahoz, la U.D. Huesca adopta los colores azulgrana con pantalón azul del C.D. Huesca y el escudo del C.D. Español, un club dedicado exclusivamente a la práctica de baloncesto que había sido constituido el 22 de noviembre de 1941 y competía en el campeonato regional con éxito gracias al trabajo de Anselmo López Martín, inspector de hacienda y amante de este deporte que, natural de Ávila y procedente de Barcelona donde se había instalado su familia durante los años veinte, antes del conflicto había militado en la sección de baloncesto del R.C.D. Español.
Haciendo uso inicialmente del Campo de Villa Isabel, esta entidad se convertirá en la más exitosa de cuantas han existido en la ciudad hasta esa fecha, inaugurando en 1945, gracias a la intervención de Educación y Descanso quien se declara propietaria, el Campo de San Jorge bajo usufructo para permanecer diez temporadas en Tercera División, sumando dos títulos de la categoría y consiguiendo debutar en Segunda División durante la campaña 50/51, división en la que resistirá tres temporadas consecutivas hasta que descienda al término de la sesión 52/53. A partir de este descenso se luchará por recobrar la categoría recién abandonada, invirtiéndose grandes sumas de dinero que no darán los resultados apetecidos y, arruinado y una deuda de seiscientas mil pesetas, consumarán la desaparición del club en el verano de 1956. Entre 1956 y 1960 será el modesto Agrupación Deportiva Santiago quien represente a la ciudad en competición oficial.
HISTORIA DEL CLUB:
1960 – 1970
Después de varias conversaciones mantenidas a lo largo de marzo en el Bar Flor, por fin el 31 de marzo de 1960 se conseguía constituir un nuevo club, la Sociedad Deportiva Huesca, entidad que vestiría como sus antecesores con camisa azulgrana y pantalón azul. El viernes 8 de abril el club se inscribe en la Federación Aragonesa y el martes 12 se reúne la junta directiva dirigida por Patricio Funes. En la primera temporada de la S.D. Huesca en competición oficial, 60/61, se juega en Primera Regional Preferente, consiguiendo ascender como Campeón a Tercera División. En la temporada 61/62 se obtiene el undécimo puesto, salvándose con apuros del descenso y gracias a resultados de otros equipos. En la campaña 62/63 acaba en segunda plaza, pero en la Fase de Ascenso a Segunda División son eliminados por el Arenas Club de Guecho de “Piru” Gainza. Pese al 1-0 obtenido en el partido de ida, en la vuelta pierden por 5-1. En la campaña 64/65 se juega de nuevo la Fase de Ascenso al ser segundo en Liga. Esta vez será la S.D. Eibar el que impide el cambio de categoría ya que ganará ambos encuentros: 0-3 en San Jorge y 4-1 en Ipurúa.
En la campaña 66/67 se logra el Campeonato en la Tercera División, pero en la Fase de Ascenso el Bilbao Atlético le priva de nuevo del éxito. Empate a cero en San Jorge y derrota por 1-0 en San Mamés. En la siguiente temporada 67/68, se repite la conquista del título, pero una vez más en la Promoción resulta eliminado. En esta ocasión con más sufrimiento, pues se vence a la Cultural y Dep. Leonesa por 2-1 en casa y se pierde 1-0 en León. El partido de desempate disputado en León se pierde por 2-0. En esa misma temporada se comprarán 26.000 m² para la ubicación del nuevo campo, gracias a la venta del jugador Porta al Granada C.F. por el montante total de trescientas cincuenta mil pesetas.
1970 – 1980
Desde la temporada 68/69 hasta la 72/73, la S.D. Huesca va poco a poco de mal en peor. En la campaña 70/71 es decimotercero y se juega la permanencia con la S.D. Ilintxa, la cual se gana pese a los apuros del partido de vuelta: 5-1 en San Jorge y derrota por 3-0 en Legazpi. En la sesión 71/72 se salvará al final de disputar la Promoción y del descenso, hasta que finalmente en la campaña 72/73 se desciende al ser decimotercero y perder la permanencia con el C.D. Guadalajara, quien le derrota 2-0 en la ida y al que gana por un insuficiente 2-1 en casa. El 16 de enero de 1972 se inaugura frente al Deportivo Aragón con resultado final de 2-1 para los oscenses el nuevo Estadio El Alcoraz, campo que viene a sustituir el vetusto San Jorge. Durante la temporada 73/74 se consigue de nuevo el ascenso a la Tercera División tras ser Campeón de Regional Preferente. Ese mismo año se juega la Copa de España de Aficionados, eliminando a equipos de la talla del Barcelona Atlético y llegando a la Final disputada a doble partido contra el Deportivo Aragón, quedando en la ida empatados a cero en La Romareda con arbitraje del recordado Guruceta Muro. El partido de vuelta se disputa el 6 de junio de 1974 con un lleno hasta la bandera, y finalizará con un resultado de 3-0 a favor del equipo azulgrana. Llegaba así el primer trofeo a nivel nacional del club.
En la temporada 74/75 se salva la categoría gracias a la eliminatoria de permanencia que se juega contra el C.F. Sporting Mahonés: 4-1 en casa y derrota por 2-0 en Mahón. Durante la temporada 75/76 se es subcampeón, mientras que en la Fase de Ascenso cae eliminado ante la U.D. San Andrés: empate a uno en la ida y derrota por 2-1 en Barcelona. En la edición 76/77 se produce de nuevo un cambio de presidente, siendo Joaquin Sarvisé el nuevo responsable azulgrana. La S.D. Huesca alcanza la séptima posición que le permite subir de categoría gracias a la remodelación del fútbol español, accediendo a la Segunda División B. En la temporada 77/78 se mantiene la categoría con Luis Costa como entrenador. Al inicio de la campaña 78/79 tiene que despedir a los jugadores más caros por la grave situación económica que atraviesa el club. En esta misma temporada llega a la S.D. Huesca el meta Paco Buyo, que posteriormente jugará en el Sevilla F.C. y Real Madrid C.F. de Primera División, siendo además internacional absoluto. El conjunto azulgrana obtiene la decimotercera posición.
1980 – 1990
Llegados a 1980 la ciudad altoaragonesa casi ha duplicado su población respecto a las últimas décadas acercándose a los cuarenta y cinco mil habitantes. Futbolísticamente su máximo representante, la S.D. Huesca, vive al hasta entonces mejor momento deportivo acomodado en el tercer nivel nacional, la Segunda División B, deseando alargar todo lo posible su estancia en esta categoría en la cual, dada su condición de club modesto, debe luchar cada temporada al máximo de sus posibilidades para mantenerse. De este modo, en las campañas 79/80 y 80/81 se aguanta la plaza acabando en el puesto decimocuarto y decimoséptimo respectivamente, mientras que en la edición 82/83 se mejora la clasificación ocupándose un discreto decimosegundo puesto. En el aspecto financiero, los costes que le acarrea militar en una categoría tan exigente en lo económico y en lo deportivo como es la Segunda División B, inevitablemente le pasa factura acumulándose una deuda que ronda los cerca de cuarenta millones de pesetas. Los acreedores, deseosos de cobrar lo que les corresponde, exigen al club azulgrana que se cumplan los pagos, circunstancia ésta que asfixia por completo la tesorería hasta el punto de no haber dinero para pagar los emolumentos de una plantilla que es, en la práctica, totalmente profesional.
La temporada 83/84 comienza con un nuevo presidente, Juan Luis Larrosa, quien ha de hacer frente a un imposible económico que deriva, como se temía, en la pérdida de la categoría debido a la confección de una plantilla que no está a la altura, se debate en muchos problemas y concluye en decimonoveno puesto. Por si fuera poco, para subsistir, se ha de subastar el Estadio de El Alcoraz para saldar, en la medida de lo posible, una deuda que extraordinariamente se ha disparado hasta los cincuenta millones de pesetas, salvándose milagrosamente los muebles gracias a la intervención plausible de los socios quienes, en una derrama extraordinaria, consiguen la titularidad de los terrenos.
Arrastrado a competir en Tercera División, el club oscense ingresa durante la sesión 84/85 en el Grupo IV en el cual militan los clubs pertenecientes a la Federación Aragonesa, donde tienen cabida también los clubs sorianos y los de la Federación Navarra que incluye, además de los propios, a los riojanos por entonces aun no segregados. Cambiados los papeles, a diferencia de la Segunda División B donde es uno más, en esta categoría los azulgranas se convierten en un equipo a batir por su potencial resultando, como se esperaba, Campeón con holgura respecto al segundo y tercer clasificados. Clasificado para disputar la Promoción de Ascenso, se elimina en primera instancia al C.D. Cieza: 2-0 en El Alcoraz y derrota por 1-0 en la vuelta; pero no puede con el Real Burgos C.F.: 1-0 en la ida y empate 0-0 en Huesca perdiéndose la oportunidad de regresar a la división de bronce. En la edición 85/86 es subcampeón de Liga tras el Club Atlético Osasuna Promesas con Néstor Gavín de presidente, pero en la Promoción cae eliminado en Primera Ronda ante el C.D. Maspalomas, conjunto canario con el cual empata 0-0 en El Alcoraz y cae derrotado por 2-0 en el encuentro de vuelta.
En 1986 la R.F.E.F. decide dar autonomía propia a los integrantes del Grupo IV y reasigna respectivamente el Grupo XV para los clubs pertenecientes a la Federación Navarra y el Grupo XVI para los de la Federación Aragonesa perdiéndose un tanto por cien de potencial competitivo. A pesar de que la S.D. Huesca sale beneficiada con esta medida teóricamente al quedar su camino expedito de posibles rivales, lo cierto es que no se aprovecha tal circunstancia favorable puesto que la temporada 86/87, cuando además se le otorgan a la Federación Aragonesa tres plazas para cubrir puestos en la recién ampliada Segunda División B, los azulgranas en un mal año quedan séptimos. En medio de una situación deportiva que no es la mejor, en la campaña 88/89 se alcanza la cuarta plaza en Liga, aunque muy alejado del primer clasificado, U.D. Barbastro, revertiendo todo en la edición 89/90 cuando, con una excelente plantilla, ahora sí se consigue el ascenso directo, sin mediar Promoción, a Segunda División B gracias a ocupar el primer puesto con relativa holganza.
1990 – 2000
Rebasado 1990 la ciudad de Huesca supera escasamente las cincuenta mil almas presentando, acorde a los nuevos tiempos, una imagen más cosmopolitana. Más dinámica que antaño, la sociedad oscense desea que su primer representante haga un buen papel en el tercer nivel nacional y no se sufra tanto como en el pasado reciente, sueño este último difícil de cumplir en una categoría atractiva en lo deportivo, pero excesivamente cara en lo económico que causa estragos en el bolsillo de los club modestos.
El reestreno en Segunda División B, campaña 90/91 en lo que es su segundo ciclo dentro de esta categoría, resulta bastante discreto finalizando en decimotercero puesto pero con la satisfacción de haber cumplido con la permanencia. En la siguiente campaña, 91/92, sin embargo, el torneo no es tan halagüeño y con un plantel que no rinde como se esperaba, el club oscense desciende a Tercera División con un triste balance de siete victorias. Vestido con el traje de equipo ascensor, la S.D. Huesca vuelve una vez más al cuarto nivel nacional compitiendo en el Grupo XVI aragonés donde se espera que, en consonancia a su talla, ocupe los primeros puestos y pueda promocionar para regresar a la categoría recién perdida. Los azulgranas no defraudarán en el punto inicial puesto que, en la campaña 92/93, suman su quinto título pero sí en el segundo dado que el buscado ascenso no llega al ser superados en la Promoción por C.D. Touring y C.D. Calahorra mientras la última plaza es para el Mondragón C.F. En la temporada 93/94, como sucediera en el torneo anterior, el club altoaragonés se proclama Campeón añadiendo su sexto entorchado de la categoría a sus vitrinas, resultando la Promoción un nuevo traspiés pues se cede el ansiado ascenso a una sociedad más en forma como la S.D. Gernika. Real Racing Club de Santander “B” y U.D.C. Chantrea serán los rivales que, con la misma suerte, cierren el grupo.
En la campaña 94/95 la directiva azulgrana se hace con un ramillete de buenos jugadores con el propósito de dar el salto definitivo. La Liga, como era de esperar, no es sencilla manteniendo un fuerte pulso con el C.D. Endesa Andorra, el Campeón y Utebo F.C., tercer clasificado entre los cuales, respectivamente, hay apenas un punto de diferencia. Subcampeón del Grupo XVI, en la Promoción se depositan grandes expectativas pero con los pies en el suelo ante el conocimiento de que el reto es complicado. Disputada la liguilla pertinente, esta vez sí se asciende al comandar el grupo que integran C.D. Calahorra, C.D. Tropezón y C.D. Hernani, estallando la afición que acude cada domingo al Estadio de El Alcoraz ansiosa de competir en categoría superior. De nuevo en la élite del fútbol modesto semiprofesional, la S.D. Huesca concurre la temporada 95/96 en Segunda División B siendo partícipe del Grupo III donde se encuentran los clubs aragoneses, catalanes, baleares y valencianos concluyendo decimoquintos, con el agua al cuello y un punto sobre el descenso. La campaña 96/97, con un plantel similar al año anterior, discurre en el Grupo II con los clubs vascos, navarros, aragoneses, riojanos y castellano-leoneses en los mismos parámetros pero con la salvedad de que finaliza decimosexto y ha de defender su plaza en una Promoción para evitar el descenso. En esta fase de prolongación no aprovecha su primera oportunidad de salvación ante el Getafe C.F. puesto que, después de vencer 2-1 en casa, en la localidad madrileña será derrotado un contundente por 4-0 en la vuelta, consumándose el desastre en la segunda y final ante la A.D. Mar Menor, rival con el que se empata 1-1 en El Alcoraz y cae con estrépito en la vuelta por un doloroso 5-0.
En la edición 97/98 toca competir en Tercera División. Los malos resultados obtenidos y la mala marcha económica complican la elaboración de la plantilla y al final, con más problemas de lo debido, se reúne un grupo de jugadores que casi precipitan al club a Regional Preferente después de concluir en decimoséptima plaza, múltiples problemas y siempre mirando de reojo los tres últimos puestos. Preocupados con lo sucedido, en 1998 se toman acciones correctivas y el plantel azulgrana es quinto en la campaña 98/99 estando a un paso de promocionar, fase en la que sí se colará en la sesión 99/00 cuando, segundo en Liga tras la U.D. Fraga, opte al ascenso aunque sin opciones realesal ser superado por todos sus rivales siendo colista precedido por S.D. Eibar “B”, S.D. Noja y C.D. Mirandés.
2000 – 2010
El cambio de década y siglo traerá a Huesca importantes cambios en los aspectos social y deportivo aunque, como ahora veremos, habrá que esperar a que se produzcan. Para empezar se comienza con una interesante Liga 00/01 en la que el club azulgrana es cuarto pasando a disputar la Promoción. En esta Fase a priori no existe gran confianza puesto que el cuarto puesto en el Grupo XVI y el fútbol desarrollado invitan poco al optimismo pero, a medida que avanza la Liguilla, los buenos resultados permutan rápidamente todo lo previsto y se obtiene el ascenso a la Segunda División B después de superar a S.D. Lemona, C.D. Mirandés y S.D. Textil Escudo. Reencontrado con el tercer nivel nacional, la temporada 01/02 se desarrolla en el Grupo II junto a clubs aragoneses, catalanes, vascos, navarros y riojanos sumando ventitres derrotas, negativo balance que le conduce al decimonoveno puesto y a perder la categoría demasiado rápido. En Tercera División nuevamente, la campaña 02/03 resulta muy competida ocupando la segunda plaza a un punto de distancia de la U.D. Fraga, el Campeón, siendo la Promoción de Ascenso esquiva al ser superado por C.D. Mirandés y S.D. Lemona mientras colista es el cántabro C.D. Tropezón, de Tanos.
Durante la temporada 03/04 la directiva sigue, como ya sucediera en las décadas anteriores, con el deseo de subir de categoría, manteniéndose el bloque anterior y consiguiéndose in extremis el cuarto puesto. Previamente, a mitad de campaña, debido a los malos resultados se destituye al entrenador Txuma Martón para ver si así reacciona la plantilla. Clasificado para la disputa de la Promoción, la fortuna estará de su lado y después de eliminar primeramente a la S.D. Noja, 2-0 en casa y derrota por 1-0 en la localidad cántabra, en la Final se dará cuenta de la S.D. Eibar “B” ganando 1-0 en casa y una semana después en Ipurúa por 1-2 logrando volver al tercer nivel nacional. De regreso a Segunda División B la campaña 04/05 se disputa en el Grupo III compuesto por clubs catalanes, aragoneses, navarros y valencianos siendo décimo, cambiándose prácticamente toda la plantilla para la edición 05/06 en la que, dentro del mismo grupo, es decimosexto debiendo disputar una Promoción de Permanencia con el Castillo C.F., con quien empata 0-0 en El Alcoraz y 1-1 en San Bartolomé de Tirajana, salvando la categoría por el valor doble de los goles obtenidos a domicilio. En esta temporada, pese a los problemas presentados durante la Liga, el club azulgrana termina subcampeón de la Copa Federación al caer en la Final frente a la U.D. Puertollano: empate 1-1 en la ida disputada en El Alcoraz y derrota por 2-0 en el encuentro de vuelta jugado en la localidad castellano-manchega.
En la temporada 06/07, con Armando Borraz Alcubierre en la presidencia, un equipo renovado y buenos fichajes, el club oscense es subcampeón del Grupo III quedando a tres puntos del Campeón, Alicante C.F., consiguiendo varias décadas después disputar una Promoción de Ascenso a la división de plata. En esta Fase que tanta ilusión despierta en la ciudad, el primer plantel azulgrana consigue eliminar en Semifinales al C.F. Palencia tras empatar 1-1 en la capital castellano-leonesa y ganar 2-1 en Huesca. En la gran Final, donde se enfrenta a un temible Córdoba C.F., la suerte no le acompaña terminando perdiendo 2-0 en el Nuevo Arcángel mientras en El Alcoraz se empata 1-1, resultados que le impiden como soñaba debutar en la categoría de plata. En 2007 se constituye la Fundación Alcoraz con Agustín Lasaosa y José Antonio Martín Otín «Petón» al frente que tan determinantes se convertirán en el futuro azulgrana, asociación sin ánimo de lucro que se prepara con antelación para si un día el club se transforma en S.A.D.
Con una incipiente profesionalización cada vez más palpable y siguiendo al frente Armando Borraz, durante la campaña 07/08 se compite en el Grupo II junto a clubs castellano-leoneses, vascos, aragoneses, riojanos y navarros alcanzando el subcampeonato de Liga igualado a puntos con la S.D. Ponferradina. La S.D. Huesca, que anda en crecimiento y las cuentas cada día más controladas, afronta la Promoción de Ascenso con ganas y el apoyo de toda su afición eliminando en Semifinales al C.F. Gavá: 2-2 en la localidad barcelonesa y 1-1 en casa, pasando a la gran Final gracias al valor doble de los goles a domicilio, consiguiendo el ascenso por primera vez a Segunda División después derrotar al Écija Balompié 2-0 en casa y empatar en el encuentro de vuelta de la localidad sevillana 1-1. El estreno en la categoría de plata trae a Huesca numerosos cambios haciéndose obras de acondicionamiento en El Alcoraz para entrar a formar parte del fútbol profesional. Contratado Antonio Calderón como primer entrenador, la edición 08/09 ve pasar por el estadio azulgrana a parte de los clubs de la élite nacional haciéndose con un decimoprimero puesto empatado a puntos con el Elche C.F. que le permiten tener continuidad. En la sesión 09/10, segunda consecutiva en Segunda División, el club aragonés sufre mucho para eludir el descenso, consiguiendo evitar tan poco deseado destino gracias a una victoria en el último encuentro de Liga ante el Real Club Celta de Vigo disputado en la localidad gallega.
Durante estos años, socialmente la entidad altoaragonesa logra después de un complejo trámite transformarse en Sociedad Anónima Deportiva, logro hecho público el 6 de agosto de 2009 con el depósito de 2.625.000 de euros establecidos por el C.S.D. como capital social, pudiendo así acometer su futuro con optimismo dentro del fútbol profesional.
2010 – 2020
Convertido en Sociedad Deportiva Huesca, S.A.D. con Fernando Losfablos como presidente, el club oscense empieza la nueva década con paso firme intentando hacerse un hueco entre los grandes del fútbol nacional, contratando en 2010 los servicios de Onésimo Sánchez con el que inauguran la temporada 10/11 quedando decimocuartos con una plantilla muy humilde que se vacía en cada encuentro y convierte su estadio en un verdadero fortín, arañando a domicilio valiosos puntos que significan la permanencia de un club que trabaja bien sus escasos recursos. La edición 11/12 se caracteriza por las dos caras que ofrece la plantilla azulgrana, siendo la primera vuelta decepcionante y temiéndose realmente por el descenso, mientras que en la segunda -ya con Quique Hernández en el banquillo-, se experimenta una gran recuperación que le hace escalar puestos en la tabla hasta lograr una meritoria remontada para ocupar el decimotercero puesto.
En la temporada 12/13 Fabri González toma el testigo en el banquillo pero los malos resultados le llevan a dimitir siendo sustituido por Antonio Calderón con quien tampoco varía el rumbo azulgrana. Ángel Arroyo y Jorge D’Alessandro no conseguirán revertir la situación y con once visctorias a cinco puntos de la permanencia, es conjunto aragonés perderá la categoría. La decepción es grande en Huesca y la afición lamenta abandonar la categoría de plata, afrontando la campaña 13/14 con resignación dentro de una Segunda División B donde compite en el Grupo II junto a vascos, navarros, madrileños, castellano-manchegos y aragoneses terminando séptimo a tres puntos de disputar la Promoción de Ascenso. Fernando Losfablos contrata para la campaña 14/15 a Luis Garcia Tevenet, técnico con el cual dentro del Grupo II compuesto por clubs aragoneses, canarios, vascos, castellano-manchegos y madrileños se conquista, por primera vez en su historia, el título de Segunda División B, accediendo a una Promoción de Ascenso donde sus aspiraciones son totales. La S.D. Huesca se enfrenta en la Eliminatoria de Campeones ante el Gimnástic de Tarragona, Campeón del Grupo III con el que empata en casa 1-1 y pierde en la capital catalana por 3-1 debiendo consolarse, como mal menor, con seguir luchando para ascender. En Semifinales los oscenses se enfrentan al Racing Club Ferrol, conjunto gallego al que se vence por un contundente 0-4 en la ciudad gallega y luego, una semana después, por 2-0 en casa. Clasificado para la gran Final, el rival que le espera es el Huracán Valencia C.F., conjunto con el que se empata 1-1 en la localidad valenciana de Torrent y al que se derrota en casa por 2-0 en un abarrotado Estadio de El Alcoraz significando su regreso a la categoría de plata.
Su segundo ciclo en Segunda División se abre en la edición 15/16 con Juan Antonio Anquela en el banquillo, técnico de carácter con el que pretende obtener la permanencia. Éste no defrauda y, encuentro a encuentro, se va sumando el necesario poso para concluir decimosegundo sin pasar excesivos apuros. En la sesión 16/17 Anquela sigue ocupándose del banquillo azulgrana mejorando en mucho el torneo anterior. Considerado como el plantel revelación de la categoría, yendo de menos a más los oscenses consiguen concluir en sexta posición obteniendo el pase para luchar por una plaza en Primera División. Encantados por el desafío, la S.D. Huesca se enfrenta en Semifinales al Getafe C.F., conjunto con el que empata 2-2 en casa y cae derrotado en la localidad madrileña por 3-0 cayendo eliminado. Previamente, desde mayo de 2017, Agustín Lasaosa ocupará la presidencia en sustitución de Fernando Losfablos, siete años al frente del club.
En la edición 17/18 la entente que conforman Agustín Lasaosa al frente del club y José Antonio Martín «Petón», al cargo de la dirección deportiva, traen a Huesca importantes jugadores algunos cedidos y otros adquiridos que prestan un excelente servicio dirigidos desde el banquillo por Joan Francesc Ferrer «Rubi» con quien se se encaraman, desde las primeras jornadas, a lo alto de la clasificación. Líderes en buena parte del campeonato con uno de los presupuestos más bajos de la categoría, un bache a inicios de la segunda vuelta parecerá apartarles del ascenso directo, reaccionando a última hora para ser segundos a un punto del Rayo Vallecano de Madrid. Tal plaza, nunca antes alcanzada, les concede el pasaporte para jugar en Primera División, categoría élite del fútbol español que significa la culminación de un proyecto sobresalientemente planteado.
En su temporada de debut en la élite nacional, los azulgranas entregan la dirección de la plantilla para el torneo 18/19 al técnico argentino Leo Franco con el que no se obtienen buenos resultados siendo cesado en la jornada octava. Pese a disponer del presupuesto más bajo de la categoría, se desea hacer un buen papel y luchar por la permanencia accediendo al cargo Francisco Javier Rodríguez «Francisco» con el que se mejora el rendimiento pero no evita el descenso al finalizar decimonoveno descendiendo a Segunda División.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Album Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
ESCUDOS DEL CÓRDOBA CLUB DE FÚTBOL, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CÓRDOBA CLUB DE FÚTBOL, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN CÓRDOBA:
La ciudad y municipio de Córdoba, capital de la provincia andaluza homónima situada en la depresión del Río Guadalquivir muy próxima a Sierra Morena, concentra a trescientas veinticinco mil habitantes que residen en una localidad donde, gracias a los vestigios dejados por un buen número de civilizaciones y distintas culturas, es la que más títulos Patrimonio de la Humanidad posee. Capital del califato más importante de occidente, durante aquel periodo histórico fue la urbe más poblada, culta y opulenta de Europa decayendo su esplendor tras la cristianización. Convertida hoy en una ciudad donde predomina el sector servicios, su importante patrimonio ha generado una considerable industria turística acompañada de una red de museos que merecen su visita.
En cuanto al origen de la aparición del fútbol en la capital cordobesa a principios del s. XX, éste es poco conocido aunque existen muchas probabilidades de que fuese introducido por estudiantes residentes en Sevilla que lo practicaban de regreso a su localidad natal. Para poder constatar la primera puesta real en escena hemos de remitirnos hasta finales de la década de los años diez, prácticamente alrededor de 1920 cuando surgen dos clubs que van a monopolizar el fútbol en la ciudad: el Córdoba Sporting Club, sociedad fundada en 1919 que vistió camisa blanca con pantalón azul y jugaba en los aledaños de los Jardines del Duque de Rivas y; de otro lado, la S.D. Electro Mecánica F.C., originada en 1920 quien empleó camisa rojiblanca con pantalón negro jugando en las instalaciones de la empresa que le daba nombre. Como es lógico, desde sus inicios pronto se impuso una gran rivalidad entre ambas sociedades siendo constantes y muy seguidos los intensos duelos con sano protagonismo entre las aficiones de los dos clubs, encuentros disputados en gran parte dentro la por entonces conocida como Primera Categoría Grupo B bajo la batuta de la Federación Regional del Sur.
La pujanza del fútbol cordobés fue creciendo a medida que transcurrían los primeros años veinte y pronto, gracias a su éxito entre la juventud, fueron surgiendo nuevos clubs que se sumaron a la iniciativa emprendida por los dos primigenios convirtiendo la ciudad en un polvorín futbolístico. De entre ellos destacaron fundamentalmente dos, el Córdoba F.C. que vistió camisa rojiblanca con pantalón blanco y el Nacional F.C., entidades ambas inscritas en la Federación Regional del Sur tal cual sus antecesores, permaneciendo en los campeonatos locales sociedades con menor peso como el Club Unión Balompié, el Racing Club, el Wanderers F.C., el C.D. Ibérica, el Español F.C., el Sporting F.C. o el Stadium Balompié de Córdoba todos ellos con breves carreras deportivas.
En 1923 el industrial Jerónimo Padilla, propietario de una importante empresa metalúrgica, viendo el auge que venía experimentando el fútbol con cada vez más sociedades y personas volcadas en cada uno de los respectivos bandos, construyó como negocio el denominado Stadium de América. Dicha instalación, con capacidad para cinco mil localidades, dadas sus características albergó a partir de entonces los encuentros del Córdoba Sporting Club y del Córdoba F.C. convertidos en usufructuarios del recinto, inaugurándose el 27 de mayo con un enfrentamiento entre Córdoba Sporting Club y Granada F.C. Los sportinguistas, que empezaban a pisar fuerte a nivel regional, en el año 1924 gracias al empuje del monárquico Luis Ruíz de Castañeda -presidente del club-, solicitaron y obtuvieron de la Casa Real con fecha 27 de junio el título honorífico y destacado de «Real», pasando la institución blanquiazul a denominarse Real Córdoba Sporting Club. Los éxitos sociales obtenidos en los despachos pero, no fueron siempre unidos a la par que los deportivos y la S.D. Electro Mecánica F.C., menos aburguesada que su rival contó a partir de 1925 con mejores jugadores que los sportinguistas, proclamándose los rojiblancos subcampeones en el campeonato 26/27 de Primera Categoría Grupo B, una división donde coincidieron además de sportinguistas y electromecánicos, los también cordobeses del Nacional F.C.
Llegados a la temporada 28/29, la S.D. Electro Mecánica F.C. se hallaba en Primera Categoría Grupo B junto al Nacional F.C. estando el Real Córdoba Sporting Club en Segunda Categoría. Eran los tiempos de la implementación del Campeonato Nacional de Liga en sus primeras categorías y la capital cordobesa había quedado excluida por su bajo potencial futbolístico coincidiendo ocasionalmente con el peor momento deportivo de los clubs locales. De un lado, los sportinguistas se encontraban en una categoría por debajo de su nivel debido a problemas de índole económica y, de otro, la dirección de la empresa Sociedad Española de Construcciones Electro Mecánicas S.A. consideraba que la plantilla de jugadores de su primer equipo no rendía lo necesario tras volver lesionados muchos de ellos después de algunos encuentros siendo además el coste en Primera Categoría muy elevado, síntoma evidente de un profesionalismo marrón al que ninguno de los dos clubs podía hacer ya frente.
Alcanzado el año 1929, en medio de un panorama desolador donde los dos principales clubs sobrevivían con oxígeno asistido, de entre los círculos deportivos de la ciudad se pensó constituir un nuevo club que recogiese lo más granado de las distintas sociedades locales con el fin de aspirar a estar en el fútbol profesional, ya aceptado y legalizado, en lo más breve posible iniciándose movimientos para alcanzar dicho objetivo. Durante el verano de 1929 la S.D. Electro Mecánica F.C. fue finalmente disuelta por la carestía que le representaba a la empresa su manutención y parte de sus mejores jugadores, junto a otros procedentes de otros clubs cordobeses, dieron origen al flamante Córdoba Racing Club constituido el 3 de octubre. Presidido por Carlos Cáceres, en su primera Junta Directiva sería acompañado de los vicepresidente Benito Arana y José Alarcón, siendo secretario Mariano Melgaizo, vicesecreatrio Jerónimo Fernández y tesorero-contador Gaspar Gallegos.
Vistiendo los racinguistas camisa blanquiverde -los colores de la bandera andaluza- con pantalón azul y haciendo uso del Stadium de América como recinto deportivo, su encuentro de debut se disputó el 27 de octubre frente al equipo amateur del Real Betis Balompié, imponiéndose los locales por 1-0. Integrada la nueva sociedad por parte de algunos directivos del todavía activo Real Córdoba Sporting Club desilusionados con su situación deportiva, el club sportinguista quedó profundamente tocado siendo su futuro muy incierto salvo que se obrase algún milagro. Y éste llegó pues, pocos días antes del estreno de los racinguistas, el club fue reorganizado con fecha 20 de octubre siendo elegido presidente José Aparicio Martínez con las miras puestas en continuar la labor del hasta entonces club decano. El regreso a la actividad de los sportinguistas tras la gran crisis padecida fue sorprendente ya que, con un importante elenco de jugadores, encuadrado en Segunda Categoría consiguió ser Campeón de su grupo disputando una Promoción de Ascenso frente al Real Club Recreativo de Huelva, venciendo 3-2 en casa y siendo derrotado 2-0 en campo de los onubenses por lo que se les escapó el ascenso por muy poco.
Durante la temporada 30/31 Córdoba Racing Club y Real Córdoba Sporting Club compartieron grupo en Segunda Categoría mientras sociedades como el Athletic Club, quien también empleaba el Stadium de América, el Nacional F.C. y el Córdoba F.C. ocuparon categorías inferiores pero siempre dentro del fútbol federado. En 1931, con motivo de la instauración de la II República, los sportinguistas perdieron su condición de «Real» pasando a ser denominados Córdoba Sporting Club como en antaño, pero no fue su única pérdida pues a partir del momento empezaron a distanciarse deportivamente de los racinguistas. Al término de la campaña 30/31, el Córdoba Racing Club ascendió a Primera Categoría donde figuraban los grandes y más destacados clubs andaluces estrenándose durante la sesión 31/32 con una plantilla de gran nivel que luchó enconadamente por tratar de ascender a Segunda División mediante su intervención en la Fase Final de Tercera División, torneo por entonces eliminatorio en el que fue segundo.
En la temporada 32/33 los racinguistas repitieron puesto en la Fase de Ascenso, logrando pasar a Octavos de Final donde fueron eliminados por el Cartagena F.C.: 4-0 en la ciudad departamental y 1-0 en casa. La carrera meteórica del Córdoba Racing Club, que tan rápidamente creció, sin embargo se sustentó en un base artificial con poco soporte financiero por lo que, ante sus repetidos intentos por ascender, ambos frustrados y a consecuencia de la gran cantidad d dinero invertido, superior a sus ingresos, en agosto de 1933 su Junta Directiva se vio en la tesitura de pagar las deudas acumuladas o, por lo contrario, tomar una decisión más drástica como abandonar la actividad. Revisadas las cuentas, la agonía no tuvo solución y el club blanquiverde que tanto creció en poco tiempo, fruto de su desmesurada ambición desapareció. En la edición 33/34 los sportinguistas compitieron en Segunda Categoría mientras Athletic Club, Nacional F.C. y el debutante Sparta Sporting Club lo hicieron en Tercera Categoría causando la desaparición del Córdoba Racing Club un gran hueco entre los aficionados.
Transcurrida la primera mitad de 1934, exsocios que lo habían sido del desaparecido Córdoba Racing Club, añorando la historia acumulada por este club y algunos de los logros alcanzados, iniciado el verano empezaron a reunirse con la finalidad de constituir una nueva sociedad que, con el mismo sentimiento, volviera a encabezar el movimiento futbolístico en Córdoba. Nombrada una comisión comandada por Ángel Pozanco Barranco para acelerar y conducir las gestiones necesarias, contando con la supervisión de la Federación Regional del Sur el domingo 26, en el Bar Español, quedó constituido el Racing Fútbol Club siendo la primera Junta Directiva la compuesta por el propio Ángel Pozanco como presidente, Adofo Inchausti como vicepresidente primero, Antonio Díaz Rodríguez en el puesto de vicepresidente segundo, Jerónimo Fernández Pérez en la secretaría, Abdón Sánchez García como vicesecretario, Juan Villodres Herráiz como tesorero y Pedro De Vegas en el cargo de contador siendo elegidos como colores los mismos del club antecesor, camisa blanquiverde y pantalón azul.
Empezando desde Primera Categoría, el Racing F.C. fue lentamente mejorando su proyecto hasta conseguir, al término de la temporada 35/36, ascender a Segunda División tras eliminar mediante una Promoción de Ascenso al pacense Racing Club Extremeño. Preparándose para su debut en la categoría de plata, el estallido de la Guerra Civil lo sorprendió en julio de 1936 debiendo esperar a tan deseado momento en la campaña 39/40 adoptando, ya en 1941, el nombre de Club Deportivo Córdoba al ser aplicada la Ley que prohibía el uso de extranjerismos. Descendido a Primera Regional, tras el ascenso a Tercera División y coincidiendo con el mandato de su presidente José Ramón De la Lastra, en 1944 consiguió el título de «Real» pasando a ser titulado Real Club Deportivo Córdoba, nombre con el que regresó a Segunda División disfrutando de esta categoría entre las temporadas 45/46 y 47/48 mientras en la campaña 48/49, descendido, jugó en Tercera División para cerrar la década con un nuevo ascenso a la categoría de plata mientras, desde el 8 d septiembre de 1945, jugaba en el Estadio del Arcángel.
Durante los años cuarenta la ciudad se convirtió en un verdadero hervidero de sociedades surgiendo entidades como la Gimnástica Cordobesa, el Español de Las Margaritas, el C.D. Patria, el C.D. Santa Marina, el C.D. Ciudad Jardín, la U.D. Ferroviaria en la Estación Central, el C.D. San Lorenzo, el C.D. Coliseo o el C.D. San Rafael, a los que más tarde se incorporarán el Imperial F. de J., el C.D. Cruz Roja, el C.D. Español de Santiago, el C.D. Perla, el C.D. Juventud, el C.D. Cenemesa y el C.D. Candelaria destacando, por encima de todos, el Club Deportivo Electro Mecánica quien, originado en la misma empresa de años antes, tuvo un momento de esplendor a finales d los años cuarenta ascendiendo y militando en Tercera División.
Al arrancar los años cincuenta el Real C.D. Córdoba continuó su andadura en Segunda División acentuándose cada año un poquito más una creciente deuda que parecía no tener visos de cancelación. Fruto de sus problemas financieros al término de la temporada 52/53 se descendió a Tercera División destapándose en la campaña 53/54 un débito en torno al millón y medio de pesetas, toda una fortuna de la época. Sin ninguna alternativa a tan crítica situación, el 31 de julio de 1954 el club blanquiverde desaparecía en decisión adoptada por su Asamblea General.
HISTORIA DEL CLUB:
1951 – 1960
Extinguido el hasta entonces club más representativo de la ciudad, a principios de agosto de 1954 se piensa en soluciones y la única vía se encuentra en el vecino Club Deportivo San Álvaro. El C.D. San Álvaro era un modesto club fundado el 24 de octubre de 1951 por la directiva del Patronato de Obras Sociales San Eulogio siendo el Presidente de Honor de la entidad el obispo de la ciudad, fray Albino González Menéndez-Reigada. El equipo empleaba camiseta y pantalón blancos y utilizaba el Estadio San Eulogio, construido por la Asociación Benéfica de La Sagrada Familia. Comenzada su andadura deportiva en Segunda Regional durante la temporada 51/52, en su debut se proclamó campeón ascendiendo a Primera Regional, categoría donde se estrenó en la campaña 52/53 siendo presidente Martín Moreno Roca. Tras encadenar un segundo ascenso que le catapultó hasta Tercera División, el conjunto cordobés compartió grupo con el Real C.D. Córdoba en la sesión 53/54 siendo apasionados los duelos que ambos contendientes mantuvieron en el campeonato.
Desaparecido el Real C.D. Córdoba y en correspondencia a una serie de conversaciones mantenidas por los directivos de ambos clubs y las autoridades, el C.D. San Álvaro solicitó cambiar de nombre a la Federación Andaluza por el nuevo de Córdoba Club de Fútbol todo ello con vistas a ocupar el puesto recién dejado libre por los blanquiverdes llegando la conformidad federativa, interesada en mantener a la ciudad en un nivel deportivo elevado, en fecha 6 de agosto. El club filial del C.D. San Álvaro, el C.D. Constancia que vestía camisa roja y pantalón azul, acabaría finalmente desapareciendo mientras Andrés Jurado Alcántara fue elegido presidente de un club que, para conservar los colores que históricamente identificaban a los cordobesistas, modificó sus colores adoptando la camisa blanquiverde pero con pantalón blanco. Como resultado de esta unión, el Córdoba C.F. arrasa en la temporada 55/56 en su grupo de Tercera División y asciende directamente a Segunda División tras imponerse en la Fase de Ascenso. El 9 de febrero de 1955 se compra el Estadio El Arcángel a la familia De la Lastra, propietaria del terreno, convirtiéndose el mismo en Municipal. El club, ya saneado, emprende una etapa en la que consigue asentarse en la división de plata al final de los cincuenta, destacando la temporada 59/60 en la que finaliza subcampeón. Este puesto le permite disputar una eliminatoria de Promoción con la Real Sociedad de Fútbol: derrota por 2-1 en San Sebastián y victoria en casa por 1-0. En el desempate -entonces no había doble valor de goles fuera de casa-, 0-1 favorable a los realistas en encuentro celebrado en Madrid.
1960 – 1970
Casi se ha alcanzado la Primera División, objetivo que se consigue dos años después en la campaña 61/62 al ser Campeón de grupo en la última jornada de Liga con José Salinas de presidente y Roque Olsen en el banquillo blanquiverde. Con este ascenso se abre una época de esplendor en el club, la mejor sin duda de su historia, con siete temporadas consecutivas en Primera División en las cuales en El Arcángel pasan los primeros espadas del panorama nacional y algunos del internacional. El Córdoba C.F. aloja grandes jugadores como: Mingorance, Marañón, Homar, Miralles y Simonet. Durante estos años la entidad cordobesa deportivamente no destaca, salvo la gloriosa temporada 64/65 en la que finaliza quinto, pues es un club de escaso presupuesto que se conforma con mantenerse en la máxima categoría. En la edición 67/68 es decimotercero y ha de promocionar para no descender con el C.F. Calvo Sotelo, de Puertollano: 3-0 en El Arcángel y de nuevo victoria 1-3 en la vuelta. La campaña 68/69 es la del descenso a Segunda División al ser decimosexto y último con tan solo cinco victorias.
1970 – 1980
En Segunda División es quinto la temporada 69/70, pero en el transcurso de la campaña 70/71 la RFEF decide ampliar la Primera División a dieciocho clubs y que los cuatro primeros de Segunda División asciendan; el Córdoba C.F. es cuarto y consigue una de las plazas. La temporada 71/72 es la de su última estancia hasta la fecha en Primera Divisón, pues a pesar de su entusiasmo sólo se pudo vencer en seis encuentros y al final ocupó el decimoséptimo puesto, descendiendo a Segunda División. Seis son las temporadas que aguantará en la categoría de plata, pues al término de la sesión 77/78 desciende a Segunda División B. Las cosas no funcionan bien y en la campaña 78/79 casi desciende a Tercera División.
1980 – 1990
Un par de temporadas más y llega el ascenso a Segunda División de la campaña 80/81 tras ser segundo a un punto del Real C.D. Mallorca. Su paso por la categoría de plata despierta dudas en la afición pues no ve un club fuerte con el que competir. El resultado es que permanece dos temporadas, 81/82 y 82/83, descendiendo nuevamente a Segunda B. En la 83/84 llega el gran batacazo cuando es decimonoveno en su grupo con ocho victorias y muy descolgado, bajando a Tercera División. En la temporada 84/85 el Córdoba C.F. toca fondo, pero a base de paciencia queda subcampeón de su grupo y en la Promoción de Ascenso elimina al C.D. Mestalla: derrota por 1-0 en Valencia y 2-0 en casa; y en la Final al C.D. Valdepeñas: 4-1 en casa y 0-1 en la ciudad manchega. Con este ascenso empieza un ciclo de catorce temporadas consecutivas en Segunda División B, convirtiéndose en un clásico en la categoría. Varias son las oportunidades que se le presentan al club blanquiverde de ascender a Segunda División, pero en casi todas fracasa.
1990 – 2000
En la temporada 90/91 es tercero en Liga, acabando último con sólo dos empates en la Promoción y superado por Real Racing Club de Santander, Cartagena F.C. y Getafe C.F.. En 1993 se afronta la construcción de un nuevo estadio, el también denominado El Arcángel de forma oficial como su antecesor, dotado con pistas de atletismo y capacidad para 15.000 espectadores, el cual fue inaugurado el 7 de noviembre con un partido de Liga contra el R.C. Recreativo de Huelva con resultado final de 4-0 para los locales. La larga distancia que separa las gradas del terreno de juego, falta de visibilidad y cierta capacidad, harán que desde 2005 y ante las quejas recibidas por los aficionados, se inicie una gran y radical remodelación todavía no concluida para acercar las gradas y cubrir estas, además de aumentar la capacidad del recinto en su aforo a 25.100 espectadores.
Campeón de grupo es en la campaña 94/95, pero en la Promoción se queda a un punto del Sestao S.C., superando a C.D. Castellón y C.D. Mensajero. Cuarto es en la sesión 95/96, pero la tercera oportunidad también la desperdicia, ahora superado por el Levante U.D.. Detrás quedan Real Avilés Industrial C.F. y Racing Club de Ferrol. En la campaña 96/97 se conquista un nuevo título de Liga, pero en la Liguilla nueva decepción al ser superado por el Elche C.F. a consecuencia de tener el gol average desfavorable. Le acompañan en esta ocasión Real C.D. de la Coruña “B” y Barakaldo C.F.. El ansiado ascenso a Segunda División A llega al final de la temporada 98/99 cuando, tras ser tercero en su grupo, consigue superar a todos sus rivales en la dura Promoción: Cartagonova F.C.,Racing Club de Ferrol y Cultural y Dep. Leonesa.
2000 – 2010
El regreso a la Segunda División A es vivido con gran entusiasmo por parte de la afición cordobesa, deseosa de ver jugar a su equipo en esta categoría casi veinte años después. Tanto en los inicios como en las campañas que va a permanecer el Córdoba C.F. en la categoría hasta su descenso en la 04/05, son bastante complicados en el aspecto deportivo, pues casi nunca alcanza posiciones de tranquilidad y en demasiadas ocasiones permanece con la soga en el cuello. Pese a todo, este cúmulo de adversidades siempre cuenta con el aliento de su afición, consumándose el 2 de julio de 2000 la transformación de la entidad en Sociedad Anónima Deportiva y adoptando el nombre de Córdoba Club de Fútbol, S.A.D..
De nuevo en el pozo de Segunda División B. Durante la campaña 05/06 es sexto y no puede acceder a disputar la Promoción, objetivo que si alcanza en la siguiente temporada 06/07 en la que es cuarto. En esta fase elimina con apuros al Pontevedra C.F. gracias al valor doble de los goles obtenidos a domicilio: 0-0 en casa y 2-2 en Pasarón; consiguiendo el ascenso al superar a la S.D. Huesca en la Final: 2-0 en el Nuevo Arcángel y 1-1 en la capital oscense. El alirón y consecución de la nueva categoría es celebrado con la lógica alegría por parte de sus aficionados y simpatizantes que de nuevo se ven en categoría profesional. Durante las temporadas 07/08 y 08/09 los cordobeses luchan por no perder su plaza en la categoría de plata, siendo la edición 09/10 la mejor de todas ellas al conquistar el décimo puesto en medio de un campeonato en el que no se padecen demasiados problemas y en el que se añora haber obtenido más puntos a domicilio para alcanzar e incluso soñar con cotas mayores.
2010 – 2020
El campeonato 10/11 no es satisfactorio para una entidad que aspira a más, realizando un torneo situado en zona de nadie donde las primeras plazas están muy alejadas aunque con la confianza de que no se van tampoco a pasar excesivos apuros para garantizar la permanencia, terminando decimosexto. En la edición 11/12 el conjunto que dirige Paco Jémez consigue dar un vuelvo radical a sus últimas actuaciones y tras consolidarse en casa como un equipo fuerte al fin entra en la Promoción. En esta fase se enfrenta en Semifinales al Real Valladolid C.F. SAD quien le elimina al empatar 0-0 en la capital andaluza y derrotarle en la vuelta por 3-0.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Córdoba C.F.: 50 años en blanquiverde (aniversario 1954-2004). Rafael Aranda Tamayo y José Cañadillas Rico. Diario de Córdoba (2004).
Historia del Córdoba Club de Fútbol. Ignacio Cid Luque. Gráficas Santa Marina (1998).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
Estadio Las Palmas (1949-1951) / Estadio Insular (1951-2003)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DE LA UNIÓN DEPORTIVA LAS PALMAS, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DE LA UNIÓN DEPORTIVA LAS PALMAS, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN LAS PALMAS:
A mediados del s. XIX ya existen indicios de que en la isla de Gran Canaria se practican diversos “juegos de pelota” por jóvenes estudiantes de la colonia inglesa asentada en la isla que regresaban de sus estudios en Inglaterra. El primer campo utilizado por estos fue el denominado Campo de las Rehoyas.
Ya en febrero de 1894 se tiene noticia de lo que podríamos llamar el primer club dedicado al fútbol como tal, donde la prensa local se hace eco de un encuentro disputado entre el Grand Canary F.C. y una Escuadra Inglesa. También se tiene noticias del equipo denominado Las Palmas F.C. del Puerto de La Luz. Estas primeras formaciones estaban compuestas íntegramente por jóvenes ingleses que residían en la isla y disputaban encuentros frente a las copiosas tripulaciones de buques de guerra que estaban de paso.
En la primera década de s. XX comienzan a surgir los primeros clubs creados por jóvenes locales canarios. Así pues, hacia el año 1904 surgen los primeros equipos autóctonos en la isla de Gran Canaria, siendo uno de los primeros clubs en fundarse el Club Gimnástico, el cual disputaba sus encuentros en Santa Catalina, en unos terrenos llamados Teso del Porteño que después ocupó la Compañía Escandinava de Canarias; y el Club Canario, creado por los hermanos Vayo y que con posterioridad devendría en Sporting Club Las Palmas, para la práctica de otros deportes. A estos le siguieron otros conjuntos como el de Los Veintidós, el Pipiolo, el Tristany ó el Unión Central del Puerto, entre tantos otros. En los inicios también fueron utilizados como terreno de juego para la práctica del fútbol unos arenales a los que denominaban Campo de los Ingleses.
En el año 1905 tiene lugar la fundación de uno de los históricos del fútbol canario: el Marino Foot-ball Club. Después de unos años desde la implantación del fútbol, este deporte sufre una crisis en beneficio del béisbol en 1907 en la que desaparecen muchos de los equipos que se habían formado. Con la llegada a la isla en 1908 de José Gonçálvez García, junto con Eliseo Ojeda y otros jóvenes devotos de este deporte se vuelve a fomentar su práctica. Poco después, a finales de la década se fundan equipos importantes como: el Artesano F.C. en 1909, el Sporting Club Victoria ó el C.D. Porteño en 1910. Los dos clubs históricos, tanto Marino F.C. como Sporting Club Victoria, serán cantera continua e inagotable de jóvenes talentos hasta la creación de la Unión Deportiva.
El Marino Foot-ball Club fue fundado el 12 de mayo de 1905 por D. Eusebio Santana Torres en la Calle Cebrián dentro del barrio de Arenales junto al incomparable marco que ofrece el mar, de ahí la inevitable elección de su nombre. En un principio sus colores fueron el amarillo y azul, para luego pasar a vestir camisa azul y pantalón blanco. Tras un periodo de inactividad, en 1911 el equipo es reorganiazado por Eliseo Ojeda y pasa a jugar en el Campo del Muelle Grande, para luego en 1916 pasar a disputar sus encuentros en el Campo del Sagrado Corazón de María hasta la creación del Campo de España en los años veinte, terreno que abandonará en 1944 al transformarse este en canódromo. Esta decisión provoca que el Marino C.F. tenga que costearse la construcción de un nuevo campo, el Estadio de Las Palmas, inaugurado en 1944. Fue esta sociedad la gran rival de otro histórico como el Real Club Victoria durante casi cuarenta años, disputando apasionadamente los campeonatos regionales e interregionales de Canarias con la obtención de varios títulos en su haber. En 1941 y con la aplicación de la nueva Ley que prohíbe los extranjerismos cambia su nombre a Marino Club de Fútbol.
Pepe Gonçálvez, que aprendió a jugar de mozo en Inglaterra, nada más regresar a su tierra en 1907 crea un equipo en el Puerto de La Luz llamado Victoria. Sin embargo, este equipo carecía de sede social y no se registra oficialmente. Ya en el año 1910 se crea el Sporting Club Victoria, siendo su primer presidente electo Agustín Domínguez. El equipo viste camiseta a listas blancas y negras, y pantalón negro. Con el paso del tiempo esta sociedad irá captando a numerosos simpatizantes y adquiriendo una gran importancia dentro de la isla y del archipiélago. El 8 de julio de 1914 son creados los estatutos del club, siendo aprobados por la Delegación del gobierno el 14 de julio, fecha de su constitución oficial. El 5 de febrero de 1923 es nombrado Presidente de Honor a S.M. Don Alfonso XIII, recibiendo el título de Real y pasando a ser conocido como Real Club Victoria. Este club fue el único que consiguió competir en la Copa de España hasta 1950 y el primero en viajar a la península, concretamente en 1925, para competir en una gira que le lleva a jugar en Valencia, Aragón, Cataluña y Andalucía. En 1931 cambia su nombre a Club Deportivo Victoria, recuperando en 1940 su tradicional nombre de Real Club Victoria. En el año 1937 pasa a jugar sus encuentros en el Campo de Fútbol Pepe Gonçalves, construido en honor del fundador del Real Club Victoria.
En el 1911 aparece el Santa Catalina F.C. del barrio que le da el nombre. Con las fiestas de La Naval de 1911 celebradas en el popular barrio de La Isleta, se organiza un torneo por el que se rehace el Unión Central del Puerto para enfrentarse al combinado llamado Oriental de Las Palmas, celebrado en el Campo de Rompeolas. Comienza entonces a disputarse con motivo de estas fiestas el primer Campeonato de Las Palmas, cuya primera edición en 1912 la ganó por 2-1 el Sporting Club Victoria al Marino F.C.. También es digno de mención el encuentro celebrado el 1 de mayo de 1912 disputado en Santa Cruz de Tenerife entre el Sporting F.C. de Tenerife y el Sporting Club Victoria, el cual es considerado el primer Campeonato de Canarias y que acabó con victoria visitante por 0-1. La edición siguiente de 1913 se repetiría resultado en el mismo escenario y con los mismos protagonistas, esta vez por 0-3. En la edición de 1914 visitaría la isla tinerfeña el Marino F.C., perdiéndo por 1-0. Volverían los marinistas en la edición de 1915 para encajar un contundente 4-0 y suspenderse el encuentro al retirarse estos a causa de las decisiones arbitrales. En junio de 1916 sería el C.D. Porteño el representante de Gran Canaria, repitiéndose los sucesos acaecidos en la edición anterior, al retirarse los porteños tras encajar un 2-0.
En el mes de junio de 1914, el Tristany pasa a denominarse Club Deportivo Gran Canaria. Algunos de sus directivos consiguieron en 1915 que se constituyerá un subcomité dentro de la Federación Regional de Andalucía en Las Palmas, que tuvo una duración efímera de tan sólo un año en un intento de crear una federación regional canaria. El equipo vestía camisa y pantalón blancos, y fue junto a los dos clubs históricos, uno de los principales clubs en la isla de Gran Canaria. Fue el principal propulsor de la creación de la Unión Deportiva, a la que donó todo su patrimonio y sala de trofeos.
Es a partir de entonces cuando en la isla resurgen los equipos hasta la llegada de una nueva crisis provocada por la I Guerra Mundial, en la que existe una periodo de inactividad futbolística entre 1917 y 1922. Esta vez la crisis fue debida a la falta de promoción de este deporte frente a otros como la lucha canaria o las corridas de toros, y a la falta de terrenos de juego para la práctica del fútbol. Con todo, sí se disputaron los Campeonatos de Canarias: el 8 de diciembre de 1917 se celebra en la ciudad de Las Palmas, venciendo por 3-0 el Marino F.C. sobre el Sporting F.C. de Tenerife; el 2 de mayo de 1919 en Santa Cruz vence el C.D. Gran Canaria por 2-1 al Sporting F.C. de Tenerife.
En 1921 surge el C.D. Santa Catalina paticipándo en la Copa Lucana y tras una serie de problemas internos, el por entonces presidente D. García de Celis, lleva a cabo una reestructuración en el equipo, cambiando el 7 de agosto de 1926 el nombre a Athletic Club. Los “leones del puerto” que así es como se les conocía, tomaron como distintivos los propios del club madrileño. Vestía camisa blanca y roja a listas, y pantalón azul. Con la prohibición de los extranjerismos en enero de 1941 cambia a Atlético Club.
En 1922 resurge el fútbol en la isla gracias al empeño de equipos como el C.D. Porteño y el C.D. Gran Canaria. Ya reorganizados los clubs, se disputan cuantiosos partidos entre equipos de la isla y otros encuentros entre equipos de islas vecinas. Pasado el verano, se acuerda que el vencedor de cada isla dispute el Campeonato de Canarias, título patrocinado por los cigarrillos Lucana 66 y que a la postre recibiría el nombre de Copa Lucana. El 4 de marzo de 1923 se disputó en el Campo de Deportes España la Final entre el Marino F.C. y el C.D. Tenerife, con resultado de 2-0 y una vez más el partido suspendido por la retirada de los visitantes por su disconformidad ante la actuación arbitral.
El 13 de septiembre de 1926 quedaba constituída la Federación Canaria de Clubs de Foot-ball, la cual fue aceptada por la RFEF en la Asamblea Nacional celebrada en junio gracias a D. José Rivas. La ciudad era ya en esta década un caldo de cultivo de innumerables clubs que poco a poco fueron sumándose a los dos históricos:el Argentino F.C., el Héspérides F.C., la Unión Marina F.C., el Sporting Club San José, club este fundado el 8 de diciembre 1913 y en la actualidad Real desde 1988, la Sociedad Gimnástica, el C.D. Español, la U.D. Santa Catalina, el Acevedo F.C., el Ferreras F.C., la Sociedad Balompédica, el Unión Athletic, el Peñarol F.C., el Rehoyano F.C., el C.D. Estrella, el Luz y Progreso F.C., el Apolinario F.C., el C.D. Águila, el Canalejas C.F., el Levante F.C., el Racing Club, el Sporting X F.C., etc. Estos clubs compiten en las distintas categorías regionales hasta la llegada de la Guerra Civil, la cual genera un periodo obligado de inactividad hasta su fin en 1939.
Tras la Guerra Civil no comienza a disputarse el Campeonato Regional en la campaña 39/40, sino en la siguiente 40/41. Así mismo, en enero de 1941 todos los clubs pasan a castellanizar sus nombres por la entrada en vigor de la Ley de prohibición de extranjerismos. El C.D. Gran Canaria y la Sociedad Gimnástica (que ocupó la plaza de los grancanarios en Primera Categoría la última temporada 35/36 tras ser descendido por no presentarse a un partido de promoción suspendido por no reunir el terreno de juego las condiciones reglamentarias), acuerdan una unión para poder disputar la sesión 40/41, participando bajo el nombre de Gimnástica-Gran Canaria. El C.D. Gran Canaria recupera en la siguiente sesión 41/42 su tradicional nombre, mientras que la temporada 43/44 reaparece la Sociedad Gimnástica como Gimnástica C.F..
En el año 1940 tiene lugar la fundación del Arenas Club, uno de los tres equipos fusionados para dar lugar a la Unión Deportiva. El Arenas Club participa por primera vez la temporada 40/41 encuadrado en Segunda Categoría, donde acaba siendo subcampeón. Campeón lo es en la 43/44, ascendiendo a Primera Categoría y permaneciendo en ella hasta el momento de su fusión. El equipo vestía camiseta roja y pantalón blanco.
A mediados de la década de los años cuarenta aparecen nuevos clubs, caso del C.D. Las Palmas, el Nuevo Club Deportivo, el Estrella Blanca C.F. ó el C.D. Telde. Por desgracia, un común denominador unía a todos los clubs canarios y este era la negativa que padecían por parte de los clubs peninsulares a ser aceptados como rivales para competir, debido fundamentalmente a la carestía de los desplazamientos y a la lentitud de estos. Durante numerosos años el fútbol canario vivió sumido en el aislamiento, marginado y basándose como única salida en la realización de competiciones interinsulares y alejado del resto del país. Pese a todo, los ojeadores peninsulares no eran ajenos a las hornadas de grandes jugadores que salían de la isla, por lo que los más destacados siempre tuvieron hueco e ingresaron en los clubs denominados “grandes”, tal es el caso del centrocampista Luis Molowny que en 1946 ficha por el Real Madrid C.F. procedente del Marino C.F.
HISTORIA DEL CLUB:
1949 – 1950
A finales de los años cuarenta la situación del fútbol grancanario da un giro inesperado y las fuerzas locales, exasperadas ante la fuga constante de jóvenes valores a clubs peninsulares, deciden aunar los esfuerzos de los principales clubs de Las Palmas y unirse bajo un nuevo club, fuerte y potente, que represente a la ciudad en categoría Nacional. Los impulsores del proyecto fueron D. Manuel Rodríguez Monroy y D. Adolfo Miranda Ortega, vicepresidente y presidente respectivamente del Comité Regional de la Federación de Fútbol de Las Palmas.
Tras la ponencia de fusión expuesta en una reunión celebrada el 28 de febrero en la Federación Regional, y tras numerosas conversaciones que mantienen los clubs de la ciudad que compiten en la Primera Categoría, éstas acaban fructificando el 22 de agosto de 1949 cuando los cinco clubs implicados: Marino C.F., Real Club Victoria, C.D. Gran Canaria, Atlético Club y Arenas Club, deciden aceptar la fusión y crear el “equipo único”: la Unión Deportiva Las Palmas.
La U.D. Las Palmas es un club resultante de la fusión inicial de los clubs C.D. Gran Canaria y Arenas Club, que junto al Atlético Club estuvieron desde un principio a favor de dicha unión. El Atlético Club se incorpora a la fusión con posterioridad en una segunda fase, por lo que en un principio es inscrito para competir en la Primera Categoría para la temporada 49/50, aunque finalmente no lo haría. Tras esta fusión, desaparecen como tales Arenas Club, C.D. Gran Canaria y Atlético Club, mientras que los dos históricos Real Club Victoria y Marino C.F., pese a no poder sufragar los gastos iniciales del proyecto por la delicada situación económica en la que se encontraban, deciden aportar parte de sus jugadores más destacados. La sede social del nuevo club sería la propia del C.D. Gran Canaria sita en el nº 1 de la Plazoleta de Luis Antúnez y su primer presidente electo fue D. José del Río Amor. Los colores del nuevo equipo serían camisa amarilla, pantalón azul y medias azules con vuelta amarilla, colores de la bandera que representa la Provincia Marítima a la que pertenece la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. El terreno de juego sería el Estadio Las Palmas, propiedad del Marino C.F., inaugurado el 25 de diciembre de 1944 con un encuentro entre una Selección de Las Palmas y otra Selección del Puerto de La Luz.
Los equipos de Marino C.F. y Real Club Victoria mientras, a pesar de haber perdido a sus profesionales, optan por seguir con su vida deportiva con formaciones plenas de jugadores amateur. La constitución de la U.D. Las Palmas forzó a que después de un largo proceso de negociaciones, el 6 de junio de 1949, la Federación Española aprobase la inclusión de los equipos grancanarios en competiciones nacionales. Así pues, en la temporada 49/50 tras conquistar la U.D. Las Palmas el Campeonato Canario, pasa a entrar en la Fase Final de Ascenso a Segunda División obteniendo la segunda plaza tras la U.D. Melilla, puesto que le permite ascender a la categoría de plata por vez primera en su cortísima historia.
1950 – 1960
En la campaña de su debut en Categoría Nacional 50/51 lleva a cabo un gran torneo y queda tercero en su grupo, con lo cual accede a disputar la Promoción de Ascenso. En esta participan el club grancanario, dos conjuntos de Primera División: Club Real Murcia y C.D. Málaga; más tres de Segunda División: U.D. Salamanca, Real Zaragoza C.D. y Cto. de Dep. Sabadell. En la Liguilla se impone el conjunto canario y consigue el ascenso a Primera División en tiempo record después de una corta existencia de dos años solamente. Su estreno en Primera División de la campaña 51/52 es efímero y acaba con el club descendido, pues a pesar de mostrarse fuerte en casa, a domicilio tan sólo consigue un empate y catorce derrotas. Pero la U.D. Las Palmas es ya un club fuerte y no se desanima con la primera adversidad encontrada. Basado en una cantera prolífica en buenos jugadores y de gran nivel, en la temporada 52/53 queda cuarto rozando las puertas del ascenso, objetivo que alcanza en la campaña 53/54 al proclamarse Campeón de su grupo y conseguirlo directamente.
En el año 1953, el Estadio Las Palmas es adquirido en propiedad por el Cabildo Insular de Gran Canaria, cambiando su nombre a Estadio Insular y cediendo su uso a la U.D. Las Palmas como ya venía haciendo desde su fundación. Con este su segundo ascenso, hasta el final de la década permanecerá en Primera División compartiendo vicisitudes con los grandes del momento, siendo seis las temporadas en las que se ve buen fútbol en el Estadio Insular. Grandes jugadores como Silva y Mújica dan la estabilidad necesaria en un ciclo en el que la entidad amarilla no sobrepasa el décimo puesto. Sin embargo, en la campaña 58/59 recibe el primer aviso al tener que jugarse la permanencia con el Levante U.D., aunque salvado con fortuna: 1-2 en Valencia y empate a uno en el Insular. En la temporada 59/60 se cierra este periodo con el descenso a Segunda División al ser último clasificado en Liga.
1960 – 1970
Durante los primeros años de los sesenta el club canario entra en una pequeña crisis deportiva. Por primera vez en su historia recurre a jugadores forasteros para reforzar su plantilla y en la Liga, aún a pesar de rozar el ascenso, este se escapa en varias ocasiones por escaso margen. En la temporada 63/64 con Vicente Dauder en el banquillo reúne un excelente grupo mezclando jugadores foráneos y canteranos que le proporcionan el ansiado ascenso a la división de honor. Con este éxito empieza la gran época dorada de la U.D. Las Palmas con casi veinte temporadas consecutivas en Primera División. En la segunda parte de los sesenta aparecen grandes jugadores que aún hoy en día perduran en la memoria de la afición grancanaria como: Castellano, Tonono, Guedes, Martín Marrero y Germán.
El equipo va de menos a más y tras pasar tres temporadas en la zona meridiana de la tabla clasificatoria, en la campaña 67/68 alcanza el tercer puesto en dura pugna con los todopoderosos Real Madrid C.F. y C.F. Barcelona de los que le separan pocos puntos. En la edición 68/69 realiza el mejor campeonato de su historia, pues el club amarillo es subcampeón contra todo pronóstico, aunque eso sí distanciado a 9 puntos del Campeón Real Madrid C.F.. En 1969 debuta en la Copa de Ferias sin conseguir superar la Primera Ronda frente al Hertha B.S.C. de Berlín, empatando a cero en el Insular y perdiendo 1-0 en la vuelta con el Estadio Olímpico de Berlín como escenario.
1970 – 1980
La década de los setenta se presenta llena de altibajos deportivos. Nada más empezar tiene hecho el triste y desgraciado fallecimiento de Guedes, con tan solo 28 años. Aún así, con Pierre Sinibaldi en el banquillo, el club termina quinto en la temporada 71/72. Esta plaza le permite entrar en competición europea, competición en donde el club logra eliminar al italiano Torino Calcio y al eslovaco Slovan CH.Z.J.D. Bratislava, siendo eliminado en octavos de final a su vez por el F.C. Twente ’65 holandés. En las ediciones 72/73 y 73/74 finaliza undécimo, pero el suceso más destacable es el nuevo fallecimiento de un jugador del club. En este caso es Tonono como consecuencia de una infección hepática. El club canario que se siente maltratado por la fortuna con tanta desgracia, recula unos puestos en las ediciones siguientes, víctima de la mala suerte y de las circunstancias.
En la edición 76/77 la U.D. Las Palmas cuenta con tres argentinos muy cotizados que le llevan al cuarto puesto. Son Carnevalli, Morete y Brindisi. Con ellos participa en Europa la 77/78, superando en UEFA a F.K. Sloboda yugoslavo en primera ronda y siendo eliminado en la siguiente por el Ipswich Town F.C.. En la edición de 1978 llegan brillantemente y con mucho esfuerzo a la Final de la Copa del Rey, competición que les enfrenta con el F.C. Barcelona. En esta pierden por 1-3 ante los catalanes en un encuentro con claro signo barcelonista, pero que supone un reconocimiento general a la afición y fútbol canario. Son buenos tiempos y el equipo es cotizado dentro del país. Finalizan cuartos en la temporada 76/77, séptimos en la 77/78 y sextos en la sesión 78/79.
1980 – 1990
Con la llegada de los años ochenta muchas de sus figuras fichan por clubs de más renombre y el club se debilita. Son años de vacas flacas y deportivamente se retroceden varios puestos dentro de la clasificación. Toca ahora luchar por no descender, objetivo que no alcanza plenamente al cerrase al término de la temporada 82/83 un brillante ciclo de diecinueve temporadas entre la élite, descendiendo a Segunda División. Dos son las temporadas que necesita para volver a estar entre los grandes, pues tras ser undécimo en la campaña 83/84 se proclama Campeón en la temporada 84/85 con Roque Olsen de entrenador. En su participación dentro de la Copa de la Liga, es subcampeón la edición 83/84 al caer en la Final frente al C.D. Castellón: derrota por 3-1 en la ida y empate 1-1 en la vuelta celebrada en Estadio Insular. El regreso a Primera División dura tres temporadas pues al término de la sesión 87/88 desciende lamentablemente tras culminar una nefasta campaña en la que pierde muchos encuentros. El club se encuentra en Segunda División A desanimado y empezando a acumular una gran deuda fruto de los grandes gastos realizados recientemente.
1990 – 2000
Deportivamente puede afrontar la competición, pero tras cuatro temporadas el ciclo llega a su fin y agotado acaba descendiendo a Segunda División B al término de la campaña 91/92. Se deben seiscientos millones de pesetas y ha de afrontar la conversión a Sociedad Anónima Deportiva, trámite que consiguen superar con el aporte de varias entidades y organismos que finalizan con su transformación en U.D. Las Palmas, S.A.D.. En la Liga se copan los primeros puestos pero son necesarias cuatro temporadas para salir del pozo de la Segunda División B. En la campaña 92/93 son Campeones de Liga mientras que en la Promoción son superados por Hércules C.F. y U.D. Salamanca, siendo última la Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega.
En la temporada 93/94 son segundos y en la Liguilla son superados por la U.D. Salamanca. Le acompañan en esta fase Levante U.D. y Barakaldo C.F.. En la edición 94/95 son terceros en Liga pero de nuevo sufren un duro revés en la Promoción. En esta ocasión es el Deportivo Alavés quien les priva del ascenso, quedando rezagados U.D. At. Gramanet y Real Jaén C.F.. Por fin, es en la campaña 95/96 cuando consiguen ascender a Segunda División A tras ser Campeones de Liga y de Promoción, superando a: Elche C.F., Club Gimnàstic de Tarragona y Cultural y Dep. Leonesa. La estancia en Segunda División se alarga cuatro temporadas, pues en la edición 99/00 se proclama Campeón después de un gran torneo con Sergio Kresic en el banquillo y consigue un merecido ascenso a Primera División. Previamente en la campaña 97/98, había disputado la Promoción de Ascenso sin fortuna, siendo eliminado como aspirante por el Real Oviedo: derrota por 3-0 en la capital asturiana y un insuficiente 3-1 en casa.
2000 – 2010
El nuevo siglo empieza con dos presencias en Primera División que entusiasman a la afición grancanaria, temporadas 00/01 y 01/02, al término de la cual desciende tras ser decimoctavo. Aparecen figuras locales de la prolífica cantera local como Guayre y Ángel, quienes acabarán finalmente en otros clubs. El 29 de junio de 2003 disputa su último partido en el Estadio Insular frente al Elche C.F. con resultado de 4-1, para poco antes inaugurar el 8 de mayo el nuevo Estadio Gran Canaria en un encuentro frente al Royal Sporting Club Anderlecht belga, con resultado final de 2-1. Nuevamente en Segunda División, durante la campaña 02/03 son quintos aunque sin opciones al ascenso, objetivo que se torna amargo sin embargo a la conclusión de la edición 03/04 cuando descienden al ser últimos, después de una trayectoria desastrosa.
La Unión Deportiva se haya muy cerca de la ruina y de la desaparición, pero gracias a la Ley concursal que le es aplicada en noviembre de 2004 por la deuda reconocida de más de 60 millones de euros, y al empresario Miguel Ángel Ramírez, quien accede a la presidencia, se evitan alcanzar cotas más trágicas. Deportivamente el club durante la temporada 05/06 es tercero en Liga, consiguiendo en la Promoción ascender a Segunda División A tras superar a Real Sociedad de Fútbol “B”: 1-0 en el Estadio de Gran Canaria y derrota por 2-1 en la capital guipuzcoana, valiendo doble los goles obtenidos a domicilio; y C.D. Linares en la Final: 2-2 en la ida y 1-0 en Las Palmas. Desde entonces el conjunto insular se encuentra en Segunda División A atravesando una discreta fase en su historia con graves problemas económicos y por ende deportivos que no le permiten superar con holgura cada campeonato, además de permanecer lidiando peligrosamente con el descenso a excepción de la campaña 07/08 que se salda con un octavo puesto. En la campaña 09/10 es decimoséptimo clasificado consiguiendo la permanencia en parte a la efectividad de sus delanteros Rondón y Javi Guerrero, afrontando el futuro con moderado optimismo a la espera de que lleguen tiempos mejores.
2010 – 2020
El cambio de década trae en su temporada inicial 10/11 resultados muy similares a los últimos tiempos, quedando el conjunto grancanario en decimoquinto puesto aunque sin temerse su continuidad en la categoría en momento alguno, con una plantilla plagada de jugadores insulares producto de su fértil cantera. En la edición 11/12 se mejoran las prestaciones y con una plantilla mejorada que se hace fuerte en casa se consigue un meritorio noveno puesto que certifica la progresión de los canarios.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Constitución y formación de la U.D. Las Palmas: 1971. Ildefonso García Campos y Álvaro Meneses Travieso. Editorial Universidad de Las Palmas (2001).
100 años de fútbol canario. 4 volúmenes. Javier Domínguez García (1998).
Historia del fútbol canario… Todo empieza aquí (retrospectiva 1905/1950). Manuel Navarro Tejera (2005).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
Campo de Fútbol Municipal, El Burgo de Osma (1973/74)
Campo de San Juan, Garray (1974-1989)
Estadio Municipal Los Pajaritos (1989-1999)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL CLUB DEPORTIVO NUMANCIA DE SORIA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CLUB DEPORTIVO NUMANCIA DE SORIA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN SORIA:
La historia del fútbol en la ciudad castellana de Soria comienza en los años veinte en pleno apogeo y expansión de este deporte con la creación de varios clubs, muy humildes todos ellos, en los que se enrolan los jóvenes de la época. Así, clubs como el Urbión, el Stade Soriano y el Águila Roja se convertirán en los pioneros, aunque rodeados de multitud de problemas tendrán una vida efímera por no disponer de un terreno de juego en condiciones para llevar a cabo sus inquietudes deportivas. Más tarde, alrededor de los años treinta, surge el primitivo Numancia F.C., una entidad más organizada que las anteriores pero que carece, al igual que los citados proyectos, de un campo propio. Pese a todo consigue asentarse en la ciudad y captar la atracción de los aficionados, disputando ya encuentros con rivales castellanos de su zona de ámbito y clubs aragoneses principalmente.
Tras el paso de la Guerra Civil, Soria se encuentra con un panorama de posguerra en el que no hay ni el menor atisbo de práctica deportiva. Mientras el resto del país se está organizando para presentar sus clubs y empezar a competir, en la ciudad pasan varios años hasta que en el verano de 1942 aparece en escena el C.D. Numanciano, precursor del actual club. La nueva entidad deportiva es precaria y no llega a consolidar entre la afición, desapareciendo pocos años después.
HISTORIA DEL CLUB:
1945 – 1950
Sin embargo, el fútbol crece entre las masas y empieza a convertirse en un fenómeno social. Soria, quien no quiere vivir ajena a este movimiento, como capital de provincia y al igual que sucede con otras tantas capitales del Estado, es invitada a participar en el Campeonato de Liga de Tercera División organizado por la RFEF. El problema con el que se encuentran las autoridades es que no tiene club que le represente, con lo cual ha de empezar un nuevo proyecto futbolístico desde cero encargándose de reclutar a futbolistas procedentes de la misma ciudad y de las poblaciones limítrofes. Mediante una escrupulosa selección se escoge a un grupo de jugadores que han destacado recientemente y el 9 de abril de 1945 la nueva sociedad Club Deportivo Numancia se pone en marcha al quedar constituida. Inscrita en el Gobierno Civil, se afilia en el mes de mayo a la Federación Aragonesa por proximidad geográfica y como terreno de juego acondiciona el Campo de San Andrés, siendo su primer presidente Eusebio Brieva.
Deportivamente empieza en la Primera Regional Aragonesa, institución esta en la que tradicionalmente los clubs sorianos se adscriben, consiguiendo ascender al final de la campaña 45/46 a Tercera División tras una gran temporada. En su debut dentro de la categoría recién adquirida alcanza un meritorio cuarto puesto al término de la edición 46/47. En la temporada 47/48 no cuaja un buen rendimiento y es desplazado al décimo puesto, teniendo que disputar una Promoción de Permanencia frente a C.D. Alavés, C.D. Mirandés y S.D. Cultural Durango. El club rojillo no consigue, lamentablemente, estar a la altura de sus rivales y es tercero, perdiendo la categoría. Sin embargo, una disposición de la Federación Española lo vuelve a incluir en Tercera División, quedando anulado su descenso. En la edición 48/49 queda encuadrado en un grupo en el que los desplazamientos son más largos compitiendo con clubs manchegos, madrileños, extremeños y castellanoleoneses, provocando una pequeña crisis económica por los altos gastos ocasionados. En el aspecto deportivo sin embargo son terceros, con lo cual optan al ascenso de categoría. El C.D. Numancia se enfrenta mediante Promoción a Club Ferrol, S.D. Gimnastica Lucense y S.D. Erandio, quedando primero de grupo de forma sorpresiva y consiguiendo ascender a Segunda División con la paradójica cifra de catorce tantos a favor y diecisiete en contra.
El debut en Segunda División llega en la temporada 49/50, enmarcado en el grupo norte con fuertes rivales de la zona. Pese a empezar mal, el equipo se recupera en la segunda vuelta y finaliza decimotercero.
1950 – 1960
En la campaña 50/51 no puede repetir la hazaña de la edición anterior y desciende a Tercera División al concluir decimoséptimo y último, destacando la pérdida de puntos por sanción al alinear varios jugadores en plena mitad de temporada de forma no reglamentaria. En la temporada 51/52 acaba decimotercero inmerso en la categoría de bronce, repitiendo alineaciones indebidas, por lo que es nuevamente sancionado. En un principio, al reducirse el número de grupos para la próxima temporada en Segunda y Tercera División, se establece que deberán descender todos los equipos clasificados del séptimo puesto en adelante y que el sexto clasificado de cada grupo deberá de disputar una Fase de Permanencia junto a los dos últimos clasificados de cada grupo. Finalmente, tal medida no prospera y la temida reducción no se lleva a efecto, aunque sí se llega a jugar la Fase de Permanencia, librándose el C.D. Numancia de un descenso seguro.
Con esta campaña, el club soriano empieza un ciclo que le llevará a permanecer durante dos décadas en Tercera División, pasando con los lógicos altibajos. En la temporada 53/54 es duodécimo con una plantilla prácticamente local, mejorando considerablemente en la sesión 54/55 en la que es tercero. En el resto de la década de los cincuenta nada resalta en particular, a excepción de la dimisión en bloque de la junta directiva producida en la sesión 55/56 y del gran susto deportivo de la campaña 59/60 en la que es decimoquinto y a punto está de descender al encontrarse igualado a puntos con el C.D. Binéfar. Cuando el descenso era prácticamente seguro, la retirada de algunos clubs como C.D. Gallur y S.D. Triasú por problemas económicos, hace que el C.D. Numancia sea repescado para la temporada siguiente.
1960 – 1970
La década de los años sesenta se caracteriza por sus buenas campañas deportivas, sobre todo en el primer tramo, en las cuales inicia un continuo asalto sin premio a la Segunda División. En la temporada 61/62 consigue su primer campeonato de Tercera División, con tan sólo una derrota, pero en la primera eliminatoria de la Promoción cae ante la Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega: 1-1 en casa y 2-1 en la ciudad montañesa. En la campaña 62/63 consigue su segundo campeonato, pero nuevamente en la Promoción no está afortunado y sucumbe, en esta ocasión frente al C.D. Calvo Sotelo: 6-0 en Puertollano y 1-1 en casa. En la temporada 63/64 es subcampeón y dispone de otra oportunidad, pero contrario a sus intereses el Club Gimnástico de Tarragona se interpone y lo elimina: 2-0 en casa y derrota por 4-0 en Tarragona. Tercero es en la edición 64/65, consiguiendo su tercer título de la categoría en la campaña 65/66. Un viejo conocido lo elimina en la Fase de Ascenso, se trata de la Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega: 2-0 y 1-1 en casa.
Tras este periodo de intentos frustrados de ascenso, el club rojillo entra en receso y deportivamente se encuentra muy lejos de las primeras plazas. Tal es así que en la campaña 66/67 se ha de jugar el descenso con el Grupo Deportivo Lamusa de Huesca, conservando la categoría finalmente. En la temporada 69/70, los clasificados entre los puestos noveno y vigésimo han de descender a Regional por reestructuración de la categoría. El C.D. Numancia resulta duodécimo, abandonando la Tercera División casi veinte años después de haber ingresado en ella.
1970 – 1980
La década de los años setenta la empieza en Primera Regional, pasando poco después a la recién creada Regional Preferente. Son años duros y casi nadie quiere tomar la dirección de la entidad. A los graves problemas deportivos se les suman los económicos, siendo ocho las temporadas consecutivas en las que milita en Regional, lejos de su ubicación natural. En este periodo sombrío cabe destacar que en octubre de 1973 abandona su clásico Campo de San Andrés por remodelación de este, teniendo que migrar a las localidades sorianas de El Burgo de Osma y Almazán para poder jugar sus encuentros como local. Sin embargo, la remodelación no es llevada con diligencia y se convierte en un fracaso, encontrándose el C.D. Numancia sin campo en la campaña 74/75. La presión de encontrar una sede hace que se traslade a la localidad de Garray, emprendiendo al mismo tiempo un nuevo terreno de juego en Soria que será finiquitado en pocos meses, el Campo de San Juan, el cual se convertirá en sede del club hasta 1989. Siendo Vicente Valero presidente se consigue ascender a Tercera División en la temporada 77/78, culminando así una etapa de sufrimiento. El club es quinto en la campaña 78/79 y decimocuarto en la 79/80.
1980 – 1990
La década de los años ochenta la empieza con gran parte de su plantilla empleando jugadores procedentes de Madrid. En las primeras temporadas la sociedad, que disputa sus encuentros con clubs aragoneses y navarros, no alcanza ningún hito deportivo que deba ser destacado, hasta que en la campaña 83/84 consigue ser subcampeón de su grupo. Sin embargo, la mala suerte hace que el C.D. Numancia quede excluido de jugar la Promoción de Ascenso por ser uno de los dos peores segundos de todos los grupos de Tercera División, sin contar el X y el XIV. En las campañas posteriores el club soriano, conocedor de la dificultad de militar junto a entidades aragonesas que le suponen una gran rivalidad y un escollo casi insalvable, intenta integrarse en el grupo riojano, más asequible, pero sin éxito alguno. Pese a todo el club sigue reforzándose y en la temporada 87/88 queda cuarto.
Durante el verano de 1988 absorbe al Soria C.F., un club fundado en 1979 que pasa a ser filial con el nombre de C.D. Numancia Promesas, para posteriormente ser C.D. Numancia “B”. En la temporada 88/89 se contrata a Mezquita como entrenador y se confecciona una plantilla de garantías para intentar ascender a Segunda División B, el gran objetivo del conjunto soriano. El equipo responde a la perfección y concluye el campeonato como líder. El debut en Segunda División B llega en la temporada 89/90 y con la novedad de disputar sus encuentros por fin en casa. El 5 de agosto de 1989 se inaugura el Estadio Municipal Los Pajaritos con una reunión atlética (donde no podían faltar los atletas Abel Antón y Fermín Cacho) y con un partido amistoso ante el Real Valladolid C.F. que concluye 0-3. El campo es cedido por el Ayuntamiento al club por un periodo de 25 años. Al final de la temporada en Liga acaba siendo decimotercero.
1990 – 2000
En el inicio de los años noventa el C.D. Numancia se muestra dubitativo, pero consigue mantenerse sin problemas en una categoría en la que se está adaptando poco a poco. Algunas discrepancias entre entrenadores y presidentes parecen llevar algo de zozobra a la entidad, pero nunca traspasan la frontera de lo deportivo. En la temporada 93/94 llega Miguel Ángel Lotina al banquillo soriano. Tras unos comienzos difíciles, el equipo empieza a subir peldaños y al término del campeonato finaliza tercero. Este puesto le da derecho a promocionar para ascender a Segunda División. En su grupo las cosas no acaban de salir como se desea y se concluye tercero sin opciones tras C.F. Extremadura y A.D.C. Manlleu. Último clasificado es la U.P. Langreo.
En la campaña 94/95 se es subcampeón de grupo, cayendo en la Promoción al ser superado por el Ecija Balompié por un sólo punto. Detrás quedan Levante U.D. y Pontevedra C.F.. La temporada 95/96 se caracteriza por su gran intervención en el campeonato de la Copa del Rey, siendo capaz de eliminar a grandes clubs como U.D. San Sebastián de los Reyes, Real Sociedad de Fútbol, Real Racing Club de Santander y Real Sporting de Gijón, llegando a Cuartos de Final en los que se enfrenta al todopoderoso F.C. Barcelona. Frente a estos es eliminado al empatar a dos en Los Pajaritos y perder 3-1 en la ciudad condal. Una gran gesta para un club humilde. Lotina abandona el banquillo soriano y llega un nuevo técnico, Javier Yepes. En mente está el ascenso a Segunda División A y el club lo intenta con Antonio Gómez en el banquillo tras sustituir a Yepes, quedando segundo en la campaña 96/97 dentro de la Liga. En la Promoción no se pierde partido alguno y quedan campeones sorprendentemente superando a Real Club Recreativo de Huelva, Club Gimnàstic de Tarragona y C.D. Manchego.
El reestreno en Segunda División después de tantos años de ausencia formalizado en la campaña 97/98 sabe a gloria para el club numantino, pues consigue ser decimoséptimo y salvar la categoría en el último instante, cumpliendo además con el proceso de conversión en Sociedad Anónima Deportiva, trámite legal que le conlleva a adoptar el nombre de Club Deportivo Numancia de Soria, S.A.D.. En la campaña 98/99 vuelve Lotina al banquillo y con Francisco Rubio de presidente, el conjunto soriano desde la humildad, configura una plantilla equilibrada sin grandes figuras y mucha confianza que le lleva al tercer puesto en Liga y al ascenso directo a Primera División ante la desbordable alegría de sus seguidores. Con el equipo en la máxima categoría, el C.D. Numancia de Soria emprende la construcción de un nuevo feudo con el cual poder recibir a sus adversarios dado que el Campo de Los Pajaritos, a pesar de haber sido ampliado recientemente, no cumple del todo con los requisitos para albergar a una entidad instalada en la élite. El 14 de enero de 1999 y tras unos meses en obras, ve la luz en tiempo récord el Nuevo Estadio Los Pajaritos, con capacidad para más de nueve mil personas. El partido de inauguración enfrentó al club soriano con el Real Zaragoza, con resultado final de 1-3 para los maños y siendo Castaño el primer numantino en anotar en la historia del nuevo estadio. Ante la sorpresa de muchos, el estreno en Primera División de la campaña 99/00 es brillante, pues finaliza decimoséptimo convirtiendo Los Pajaritos en un fortín. Andoni Goikoetxea es su preparador y en el equipo destacan: Rubén Navarro, Pacheta, Barbu, Nagore, “Chispa” Delgado y Octavio.
2000 – 2010
En su segunda temporada en la élite, 00/01, el club soriano no puede resistir el embite de sus adversarios con un equipo muy modesto y desde mitad de la campaña ocupa los puestos rezagados, adueñándose del farolillo rojo bien pronto. Pese a todo, el conjunto da la cara y ofrece batalla en todos sus encuentros. En el descenso a Segunda División a punto esta de atragantársele la temporada 01/02, pues desde el principio no supera la zona media baja de la tabla, temiéndose el descenso. Rosu, Cuellar y la mano del técnico Manu Sarabia hacen el milagro. Los problemas económicos afloran en la entidad rojilla y se marca el objetivo de la permanencia, disputando una temporada 02/03 casi idéntica a la anterior. Unai Expósito, Marini, Kome, Pacheta, Cuéllar y Ojeda destacan en esta campaña dirigidos por Máximo Hernández en el tramo final. La temporada 03/04 supone un nuevo hito en el club soriano, pues se alcanza por segunda vez en pocos años la Primera División. Un fuerte sprint final unido a una gran solidez en casa, junto a la mano del técnico Quique Hernández, hacen que sea tercero con futbolistas como: Pulido, Pineda, Miguel Pérez, Jaime Molina y Juan Carlos Moreno.
La tercera estancia en Primera División se salda con un descenso, dado que en la temporada 04/05 con un presupuesto muy limitado y una plantilla luchadora pero muy ajustada, a poco se puede optar. Es colista durante casi todo el campeonato y tan sólo el Albacete Balompié estaá por debajo en la tabla. Tarantino, Juanlu, Tevenet, Palacios y Pignol son sus jugadores más aventajados, siendo Máximo Hernández el preparador más longevo que ocupa el banquillo tras sustituir a Francisco.
En la campaña 05/06 son octavos en el campeonato con una plantilla muy renovada y tras una primera vuelta bastante complicada. En la segunda parte van de menos a más y consiguen revitalizarse. En la siguiente temporada, 06/07, son de nuevo octavos con un equipo que parece indicar una recuperación deportiva en la entidad soriana, destacando jugadores como: Juan Pablo, Palacios, Nagore, Bolo y Kenji Fukuda. En el verano de 2007 se incorpora a la entidad el técnico Gonzalo Arconada, continuando en la presidencia el incansable Francisco Rubio, mimbres a los cuales se unen algunos jugadores poco reconocidos que finalmente le proporcionan el Campeonato de Liga y el tercer ascenso a Primera División en diez años. Esta nueva gesta del conjunto soriano no se verá refrendada en una cómoda estancia entre los grandes, pues en la campaña 08/09 pese al esfuerzo realizado y la voluntad depuesta, se ocupan puestos de descenso durante casi todo el torneo, siendo de nuevo ineludible la pérdida de categoría al ser decimonoveno clasificado.
Con todo, cabe ensalzar la humildad del cuadro soriano y el buen hacer de su directiva, capaz de enfrentarse con éxito evidente a rivales de más tradición y mayor presupuesto dentro del fútbol profesional, además de ser referencia para el resto de sociedades por su buena labor administrativa y económica, basado en un excelente modelo de gestión y de inversión en su cantera en la que presenta superávit por quinto año consecutivo en sus cuentas. Deportivamente, la campaña 09/10 bajo la tutela de Gonzalo Arconada sigue la trayectoria de las últimas ediciones en las que el club soriano cumple honradamente su cometido, quedando en un meritorio octavo puesto y mostrando sus armas a lo largo del campeonato en el que de vez en cuando asoma la cabeza en los primeros puestos, decayendo sus opciones en el último tramo de Liga en el que sus rivales se muestran firmes y se escapan siendo inalcanzables.
2010 – 2020
La campaña 10/11 la inicia con la ilusión de alcanzar al menos una de las plazas de Promoción, pero de forma temprana se observa que es un objetivo muy complicado y que su papel va a ser otro más alejado de los puestos de cabeza, conformándose con un décimo puesto que tampoco es de desmerecer. En la edición 11/12 los sorianos cumplen a la perfección con su papel y se mantienen alejados tanto del descenso como de la Promoción, terminando en un tranquilo pero meritorio décimo puesto como en la sesión precedente.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
90 años de fútbol en Soria. Carmelo Pérez Fernández de Velasco (1989).
Medio siglo de historia rojilla: 50 aniversario C.D. Numancia. Luis Martínez Mínguez. Diputación Provincial de Soria (1995).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).