Utilizamos cookies propias y de terceros, para realizar el análisis de la navegación de los usuarios. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso. Puedes cambiar la configuración u obtener más información aquí.
ESCUDOS DE LA SOCIEDAD DEPORTIVA ESCORIAZA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DE LA SOCIEDAD DEPORTIVA ESCORIAZA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN ZARAGOZA:
La presencia del fútbol en la capital aragonesa hizo su aparición en noviembre de 1903, fecha en la que el Conde de Sobradiel, jugador y directivo, creó el primitivo Zaragoza Foot-ball Club y que disputaba sus encuentros en el Campo del Sepulcro, entidad que desaparecería el 8 de septiembre de 1906, cuando su fundador y presidente contrajo matrimonio. El germen de este deporte ya había calado en las principales ciudades españolas y la ciudad del Ebro se mostraba un tanto remisa a ser pionera en estas lides.
Es en torno a 1914 cuando aparece el C.D. La Gimnástica, la primera entidad en disputar encuentros interregionales. A este le suceden otras sociedades como el C.D. Patria, el Athletic Club Zaragoza, el España F.C., la S.D. Universitaria, el C.D. Fuenclara (1918) y el más importante de todos ellos, el Iberia Sport Club, nacido en 1916 y que se convertirá poco después en claro dominante del fútbol regional.
En marzo de 1919, la alta sociedad local funda la Sociedad Atlética Stadium, entidad que en marzo de 1922 recibe el título de Real y que de las manos del Conde de Sobradiel conquista el Campeonato Regional en las ediciones de 1924 y 1925.
Cronológicamente le sigue el Zaragoza Foot-ball Club, entidad fundada en 1921 por Ricardo Arribas y que con un proyecto muy ambicioso pretende desbancar en el futuro al Iberia S.C., un club ya consolidado en la ciudad. Bien estructurado y con un respaldo económico notable, en lo sucesivo irá escalando puestos dentro del panorama local y regional. Juega en el Campo de El Asalto y se equipa con camisa roja de puños y cuello amarillos con pantalón blanco. Es una entidad que crece rápido y pronto es capaz de tutear a los grandes.
HISTORIA DEL CLUB:
1921 – 1930
Hijo de un empresario zaragozano y accionista de una de las sociedades industriales más importantes de la capital aragonesa, Manuel Escoriaza Fabro consiguió junto a su padre y dos hermanos fusionarse en 1895 con la importante firma francesa Carde, originaria de Burdeos, creando a partir de entonces la empresa Carde y Escoriaza que adquiriría gran notoriedad. Esta sociedad metalúrgica fue una avanzada en los tiempos que le tocó vivir, convirtiéndose en el primer cuarto de siglo XX en señera de modernidad y dedicándose especialmente a la construcción de tranvías, máquinas y vagones de tren, muy de moda por entonces en plena revolución de las comunicaciones, además de material aeronáutico para la Aviación.
Durante la I Guerra Mundial, dada la manifiesta posición neutral que adquirió España, recibió importantes pedidos de los países en conflicto para construir equipamiento bélico destinado al frente, suponiendo una importante entrada de divisas para el estado y una carga de trabajo para los empleados que garantizaba sus puestos durante varios años. En 1925 y tras alcanzar un gran auge económico, la familia Escoriaza consigue desprenderse del capital extranjero y cambia el nombre de la empresa a Material Móvil y Construcciones S.A. (M.M.C.), para a continuación en 1928 estar participada accionarialmente por la poderosa familia Urquijo, promotora de la empresa Compañía Auxiliar de Ferrocarriles S.A., (C.A.F.).
Dadas las características de gran empresa y la notable cantidad de operarios que posee, en 1921 la familia Escoriaza, muy amante del deporte, decide crear un club de fútbol con el cual involucrarse y de paso volcar sus ilusiones, la Sociedad Deportiva Carde-Escoriaza, quien viste camisa roja con pantalón negro. Esta sociedad en principio compite frente a otras empresas de la zona y clubs zaragozanos, adquiriendo poco a poco cierto nivel el cual propicia que José María Escoriaza, como presidente de honor y para dar cabida al equipo, construya un magnífico terreno dotado con todas las comodidades de la época emplazado junto a la estación de Cariñena, el denominado Campo de Las Delicias.
1930 – 1940
El Club se inscribe en la Federación Aragonesa en 1929 y pronto empieza a destacar siendo Campeón de Tercera Categoría, ascendiendo a Segunda Categoría en la campaña 30/31. Tras competir en la temporada 31/32, razones políticas y relativas a la dirección de la sociedad hacen que se retire de la competición oficial durante unos años, aunque el equipo sigue en activo disputando encuentros amistosos ocasionalmente. En julio de 1936 estalla la Guerra Civil y Zaragoza queda pronto en manos del bando nacional, siendo confiscada la empresa la cual a gran ritmo dota al Ejército de multitud de diversos transportes móviles como camiones, blindados, ambulancias, autocubas, vehículos adaptados para la reparación, además de otros con soportes para ametralladoras, transporte de bombas, etc, convirtiéndose en uno de los principales suministradores.
1940 – 1950
Pasado el conflicto la empresa vuelve a la normalidad y la dirección estima oportuno lanzar a la competición su sección deportiva, inscribiendo nuevamente el club en la federación desde donde parte jugando en Segunda Categoría. El club zaragozano en la temporada 40/41 se proclama Campeón y logra ascender a Primera Categoría, siendo subcampeón en la campaña 41/42 y alcanzando rápidamente un alto nivel que le lleva a ser uno de los más importantes de Aragón, mostrándose su escalada imparable al disponer de un gran respaldo económico que le facilita tener jugadores de gran valía, algunos de los cuales trabajan en la propia empresa. En 1943 reúne una excelente plantilla y se prepara con ahínco para conseguir entrar en Tercera División, una categoría que acaba de ser relanzada a nivel nacional recientemente para potenciar el desarrollo de los clubs modestos.
Como no podía ser de otra manera, la desde ese momento Sociedad Deportiva Escoriaza presidida por Benjamín Miñana Villanueva alcanza la Tercera División exitosamente al término de la temporada 43/44, consiguiendo entrar en Categoría Nacional previa eliminación del C.D. Español Arrabal por 2-1 en encuentro jugado el 30 de abril. El club participa por primera vez en el Campeonato de España en la edición de 1944, pero es eliminado en la primera eliminatoria de la Fase previa al caer derrotado por la U.D. Huesca con resultado de 2-1. El debut en Tercera División se produce en la campaña 44/45 finalizando en un discreto octavo puesto tras un torneo duro en el cual juega frente a clubs de gran categoría.
Parte de los jugadores de la plantilla mantienen un puesto de trabajo en la empresa, quien se ocupa de de ellos laboral y deportivamente, procurando la directiva en todo momento de conducir el equipo de forma organizada y sin hacer un gran derroche económico. Poco a poco el club se estabiliza dentro de este tercer nivel y en la temporada 47/48, después de un muy aceptable campeonato, es tercero en Liga, un puesto que no repetirá en los sucesivo al sufrir un retroceso deportivo que al final de la década le lleva a ocupar puestos en mitad de la tabla. En el torneo de Copa es eliminado al perder 2-1 en primera ronda frente al Arenas S.D. de Zaragoza. En la siguiente edición de 1949, que será su última participación en el Campeonato de España, logra superar la primera ronda al vencer por 3-1 al Atlético Club de Zaragoza, y de nuevo será eliminado en segunda ronda al perder ante el Arenas S.D. por 3-1.
1950 – 1954
Iniciada la década de los años cincuenta la plantilla zaragozana realiza una mala campaña 50/51 terminando duodécima y estando a punto de promocionar para no descender a Regional. Ante tal situación la directiva de Benjamín Miñana toma cartas en el asunto y refuerza la plantilla en vistas a no tener problemas en el futuro, siendo cuarto en la sesión 51/52 tras la llegada de nuevas incorporaciones que suben el potencial deportivo. Sin embargo, la ambición de la empresa no se detiene en este punto y la gran sorpresa se produce en la siguiente temporada, 52/53, cuando el equipo, muy reforzado, realiza un gran campeonato y consigue proclamarse Campeón dentro de un grupo compuesto por clubs aragoneses y catalanes, sobrepasando a distinguidos históricos como el C.D. Europa, C.D. Tarrasa ó C.F. Badalona.
En esa edición el sistema competitivo dictamina que el Campeón asciende directamente a Segunda División sin necesidad de disputar eliminatoria ninguna, beneficiándose la entidad metalúrgica de una regla que le conduce a auparse a una categoría con la cual soñaba de lejos. Con los recursos escasos y ajustados de un club particular perteneciente a una empresa, la S.D. Escoriaza se presenta humildemente en la categoría de plata durante la temporada 53/54 militando en el Grupo I ó Norte, grupo en el que realiza un torneo bastante discreto ante el potencial de sus adversarios pero que no le impide presentar batalla y dar la cara en todo momento. Pese a las ocho victorias y cinco empates conseguidos, el club ocupa el decimosexto puesto, terminando como colista y descendiendo a Tercera División.
En esas fechas se da la circunstancia de que la compañía Material Móvil y Construcciones, S.A. es absorbida por C.A.F., dándose un vuelco de ciento ochenta grados en la nueva dirección quien considera la manutención de un club de fútbol y además semiprofesional, como algo supérfluo y poco interesante. La sociedad que acaba de descender a Tercera División y tenía plaza en el grupo aragonés, es disuelta y liquidada, quedando sus jugadores libres para fichar por otros conjuntos del estado y dando fin a una etapa gloriosa en la cual el club rojinegro tocó el cielo con la yema de los dedos durante al menos una memorable temporada.
Son recordados de su paso por este club zaragozano jugadores como: Sierra, Mainar, Bellido, Castejón, Azcona, Igual, Serrano, David, Laborda, Blas, Garcieta, Torrent, Lana, Cendrós, Anoro, De Vega, Mefrano, Aragall, Castañar, Chiqui, Pascual, Elizondo, Panadés, Cea y Vidal; destacando sobre todos ellos Vergara, importante jugador quien llegó a alcanzar la internacionalidad.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Anuarios de la RFEF.
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles (Tomo II). Vicent Masià Pous (2011).
Instalaciones Polideportivas Luis Arias (1972-1991)
Instalaciones Deportivas de Endesa (1991-2008)
Estadio Juan Antonio Endeiza Obieta (2008-)
Capacidad: 3.000 espectadores
OTROS ESTADIOS:
Estadio Juan Antonio Endeiza Obieta (1956- )
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL ANDORRA CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL ANDORRA CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN ANDORRA:
El municipio y villa de Andorra, distante con la capital provincial, Teruel, en ciento veinticinco kilómetros, es la cabecera de la comarca nororiental de la Sierra de Arcos estando enclavado entre los ríos Martín y Guadalope, junto al río Regallo. Tradicionalmente dedicada a la agricultura y existiendo en su término restos de varios poblados ibéricos, el descubrimiento en 1914 de importantes yacimientos de lignito la convirtió en un centro minero construyéndose en 1940 una línea férrea para dar salida a su producción. Tras la presencia desde 1944 de técnicos pertenecientes a la Empresa Nacional Calvo Sotelo realizando prospecciones, en 1946 el Estado apostó por instalarse definitivamente en la localidad para explotar el subsuelo atrayendo a gran número de trabajadores que hicieron pasar, en pocos años, su población de algo más de cuatro mil a cerca de ocho mil vecinos.
Contando con el Frente de Juventudes de Andorra como único club en activo a partir de la segunda mitad de los años cuarenta y desconociéndose la existencia previa de cualquier otra sociedad, el aumento demográfico y la necesidad de generar actividades para cubrir el tiempo de ocio de gran parte de los trabajadores, originaron que en 1950 se inaugurase el Campo de Deportes y con él quedara constituido el Andorra Club de Fútbol siendo su primer presidente Antonio Peña Peña. Vistiendo camisa rojiblanca con pantalón azul, el club ingresó en la Federación Aragonesa siendo considerado como de Primera Regional, paso que le permitió estrenarse en la temporada 50/51 dentro del grupo turolense quedando en quinto puesto entre un total de seis participantes siendo protagonista la desorganización. En la campaña 51/52 la Primera Regional quedó dividida en dos grupos compitiendo los andorranos junto a clubs turolenses, zaragozanos y sorianos que ocasionaron un gran agujero en sus cuentas, motivo por el cual no fue inscrita la sociedad en lo sucesivo reduciendo su actividad a encuentros amistosos, campeonatos comarcales y fiestas locales.
HISTORIA DEL CLUB:
1957 – 1960
Mediados los años cincuenta la Empresa Nacional Calvo Sotelo de Combustibles Líquidos y Lubricantes (ENCASO) estaba plenamente asentada en la localidad turolense y, dando empleo a unas mil setecientas personas, en 1955 se financiaron las obras para dotar de una tribuna descubierta al Campo de Deportes que adoptó el nombre de Campo de Fútbol Calvo Sotelo siendo inaugurada oficialmente el 10 de septiembre de ese mismo año con un encuentro entre el Andorra C.F. y el Real Zaragoza C.D.
Siendo que el Andorra C.F. tenía en esos momentos su techo deportivo en el campeonato comarcal y se disponía ya de un excelente terreno de juego, pensando en disponer de un club propio y gestionarlo con total independencia, los directivos de la empresa patrocinaron entre la primavera y verano de 1957 un campeonato local al que acudieron ocho equipos de aficionados haciéndose posteriormente una selección de los jugadores más destacados, mimbres con los que el 18 de julio quedó constituido el titulado Club Deportivo Andorra con una Junta Directiva compuesta por los señores Jorge Alfaro Drets como presidente, José De Moya Chamorro, Luis Cirujeda y Larraz, todos vinculados a la Empresa Nacional Calvo Sotelo.
Vistiendo inicialmente de rojiblanco con pantalón azul, el C.D. Andorra nació con la voluntad de sustituir al Andorra C.F. del que tomó sus colores y proyectarse, si se podía, hacia Categoría Nacional, objetivo que, después de su estreno en el campeonato comarcal del campeonato 56/57, quedó patente en su debut de la temporada 57/58 en Primera Regional cuando se proclamó campeón con un presupuesto superior al de sus rivales consiguiendo el ascenso a Tercera División. Ubicado en la categoría que se habían propuesto sus gestores, el estreno de la campaña 58/59 se llevó a cabo en el Grupo V administrado por la Federación Aragonesa donde tenían cabida clubs aragoneses y sorianos terminando en decimoprimero puesto, decidiéndose una vez concluido el torneo dar un nuevo aire a la sociedad tras cambiar a uniforme totalmente blanco y adoptar el nombre de Club Deportivo Calvo Sotelo Andorra. Los cambios no se limitaron a los colores y el club de fútbol quedó integrado en la estructura del Grupo de Empresa Calvo Sotelo de Educación y Descanso, gozando a partir de entonces de un mayor apoyo por parte de los trabajadores de la empresa, muchos de ellos dados de alta como socios. En cuanto al campeonato 59/60, este se finalizó en décimo puesto.
1960 – 1970
Continuando en el Grupo V aragonés de Tercera División, el inicio de la década de los años sesenta no hizo presagiar lo que vino a continuación, máxime después de ser decimoprimero en la temporada 60/61 mirando más hacia los puestos de abajo que a los de cabeza. Presidido por el abogado bilbaíno y jefe de la empresa Juan Antonio Endeiza Obieta, el club de la Sierra de Arcos empezó a tomarle pulso a la categoría dando en la campaña 61/62 un salto cualitativo al finalizar cuarto, siéndole menos propicia la sesión 62/63 al concluir en séptimo puesto. Reforzada la plantilla en sus principales puestos, en la edición 63/64 se mantuvo un intenso duelo con el soriano C.D. Numancia resultando ambos empatados a puntos al final del torneo pero con los turolenses como campeones de Liga, su primer título en la categoría, accediendo por méritos propios a la Promoción de Ascenso a Segunda División con un gran equipo que se enfrentó en la Primera Eliminatoria a la S.D. Compostela, conjunto gallego al que se derrotó 3-0 en casa y con quien se perdió 3-1 en la vuelta haciendo valer en oro el tanto anotado. En la Segunda Eliminatoria y Final con el ascenso en juego, se enfrentó al C.D. Baracaldo A.H. perdiendo en la localidad vizcaína por 3-1 y ganando en casa por un insuficiente 2-1 que le impidió ascender a la categoría de plata ante la frustración de todos sus seguidores.
En la temporada 64/65 el C.D. Calvo Sotelo Andorra repitió por segunda vez consecutiva éxito en el Grupo V sumando su segundo título, en esta ocasión con cinco puntos de ventaja respecto a la S.D. Huesca, presentándose de nuevo con gran ilusión y esperanza a una Promoción de Ascenso a Segunda División que para toda la localidad y provincia suponían un atractivo enorme en el supuesto de conseguirse. Teniendo como rival al Albacete Balompié en la Primera Eliminatoria, el conjunto turolense se impuso en la capital manchega por 1-2 empatando 0-0 en casa por lo cual accedió a la Segunda Eliminatoria, auténtica Final que resultó un nuevo jarro de agua fría pues, ante una superior U.D. Lérida, nada se pudo hacer en la capital catalana al perder 2-1 y tampoco en casa al ceder un 2-3 que fue encajado con resignación y deportividad.
En la temporada 65/66, ya bajo la denominación de Calvo Sotelo Andorra, fue subcampeón de Liga a dos puntos del soriano C.D. Numancia entrando por tercera vez en la Promoción de Ascenso, logro que ponía negro sobre blanco que el club minero era un firme opositor al ascenso. En esta ocasión, al ser segundo, para ascender necesitaba pasar tres eliminatorias estando muy cerca de conseguirlo pues, superado el Rayo Cantabria en la Primera Eliminatoria, 3-1 en casa y derrota por 1-0 en Santander, la Segunda Eliminatoria también fue positiva aunque con más esfuerzo dado que el C.D. Diter Zafra no lo puso nada fácil empatándose 1-1 en el encuentro de ida en tierras pacenses y 2-2 en casa, precisando según el Reglamento de un encuentro de desempate jugado en Madrid en el que los blancos se impusieron por 1-0. Clasificados para disputar la Final, los turolenses como aspirantes se enfrentaron con el Segunda División Club Atlético Ceuta quien defendía su plaza siendo prometedor el 4-2 conseguido en casa ante una enfervorizada afición que veía el ascenso muy de cerca, siendo un tremendo palo el encuentro de la localidad norteafricana cuando, sin esperárselo, encajaron un severo 6-1 que dejó todo como estaba.
Tercero en la campaña 66/67 sin poder clasificarse para la Promoción de Ascenso, el C.D. Calvo Sotelo Andorra cerró un capítulo brillante en su historia estando tres veces a un paso de ascender a la categoría de plata, siendo quinto en la sesión 67/68 en un torneo donde no pudo dar alcance a los primeros clasificados. Siguiendo el plan para reestructurar las categorías nacionales emprendido por la Federación Española, en la edición 68/69 pasó a formar parte del Grupo III compartiendo destino con clubs de las federaciones navarra, guipuzcoana y aragonesa resultando decimotercero en un complicado torneo, pasando el corte establecido para el campeonato 69/70 en el que los primeros ocho clasificados tendrían continuidad en la categoría al ser octavo.
1970 – 1980
La década de los años setenta la inicia en una Tercera División que ha sido reducida a cuatro grupos con veinte participantes respectivamente aumentando, sin duda, el nivel de la competición y complicándose sobremanera la continuidad al aplicarse un sistema de promociones siempre traicioneras en la que parte de los últimos clasificado deben defender su plaza ante un aspirante procedente de la categoría inmediata inferior. Inserto en el Grupo II junto a clubs aragoneses, castellanos, leoneses, navarros y guipuzcoanos es decimoquinto y ha de defender la permanencia luchando con el aspirante madrileño C.D. Pegaso, conjunto al que vence 1-0 en casa y con el que empata 1-1 en la vuelta manteniendo la categoría. En la campaña 71/72 es decimosexto y ha de defender su plaza nuevamente, en esta ocasión frente al C.F. Lorca Deportiva, empatando 2-2 en la ida y ganando 2-0 en el Luis Arias, dándose paralelamente las circunstancias de que el Gobierno, en un nuevo plan estratégico, aprueba la integración de ENCASO en la Empresa Nacional de Electricidad (ENDESA), movimiento tras el cual la sociedad deportiva de la Sierra de Arcos adopta el nombre de Club Endesa-Andorra.
En la edición 72/73, estrenando su nueva denominación, es noveno y aguanta la categoría sin problemas, objetivo que no sucede en la temporada 73/74 al ser decimoctavo con el consiguiente descenso a Regional Preferente. Con un plantel superior al resto de sus rivales en la primera de las categorías regionales aragonesas, concluida la campaña 74/75 se proclama campeón de la misma consiguiendo el ascenso directo a Tercera División sin promoción mediante, éxito que es celebrado por su fiel afición demandante de fútbol con mayor nivel. En la sesión 75/76 es decimocuarto viéndose obligado a defender la permanencia frente al aspirante vigués Club Gran Peña Celtista, quien le derrota 0-2 en casa y 2-0 en la ciudad olívica condenándole a descender a Regional Preferente.
Durante la campaña 76/77, en un campeonato protagonizado por la próxima implementación de una nueva categoría nacional titulada Segunda División B, es subcampeón de Regional Preferente a un solo punto del Club Atlético Monzón consiguiendo el ascenso directo a Tercera División por la ampliación de grupos que experimenta esta categoría desplazada, a partir de ese momento, al cuarto nivel. En su primera edición, 77/78, el conjunto blanquillo en un emocionante torneo queda tercero a un punto del campeón Club Gimnástic de Tarragona ydel segundo clasificado U.D. Figueras rozando con la punta de los dedos el ascenso directo a Segunda División B, objetivo en la mente de sus directivos por el que se pugna en los últimos años setenta pero sin fortuna al ser cuarto consecutivamente en las sesiones 78/79 y 79/80.
1980 – 1990
Al empezar los años ochenta el club turolense se muestra como un serio candidato al ascenso contando con una plantilla competitiva que atrae en masa a la afición local. La Tercera División ha cambiado y avanza hacia que cada federación territorial administre un respectivo grupo de forma exclusiva. Todavía no es el momento de que la Federación Aragonesa disponga del suyo propio y la temporada 80/81 se comparte con la Federación Navarra donde caben los clubs navarros y riojanos manteniéndose un intenso duelo con el C.D. Binéfar de quien finalmente le separa un punto siendo el ascenso directo para los oscenses. El segundo puesto, dado el sistema competitivo, le habilita para disputar la Promoción de Ascenso, fase en la que supera en Semifinales al Real Valladolid Promesas, victoria por 1-0 en casa y en Pucela por 1-2, enfrentándose en la Final ante la U.D. Poblense, consiguiendo un importante 1-1 en Sa Pobla que es refrendado en casa con una meritoria victoria por 2-0 que le abre las puertas de Segunda División B por primera vez en su historia.
Con la obtención de este ascenso, el Club Endesa Andorra inicia la que será su segunda etapa más importante haciéndose un hueco importante en el fútbol aragonés y español para convertirse en uno de sus clubs más destacados. El debut en la nueva categoría de bronce se produce en la temporada 81/82 dentro del Grupo I correspondiente al norte peninsular, uno de los dos en los que está subdividida la categoría resultando al final noveno. En la edición 82/83, con menos acierto, es decimoquinto con muchos apuros para salvar la categoría mientras en la sesión 83/84 concluye decimosegundo consiguiendo, contra todo pronóstico, una meritoria cuarta plaza en la siguiente campaña 84/85 cuando lucha incluso por terminar ente los dos primeros clasificados para tener opciones de ascender directamente a Segunda División.
En 1985, la Federación Española en un error de cálculo y atendiendo la reclamación de tan solo algunos clubs, aprueba la reducción de la categoría a un grupo único para la temporada 86/87 por lo que la campaña 85/86 es una escabechina al establecer que los clasificados entre los puestos décimo y vigésimo, ambos inclusive, deben descender a Tercera División. El club blanquillo, pese a su esfuerzo, termina decimotercero siendo uno de los afectados de tan drástica medida. Descendido al Grupo XVI aragonés, la sesión 86/87 es un éxito al comandar la tabla clasificatoria de principio a fin por lo que asciende directamente a Segunda División B sin mediar Promoción junto a C.D. Teruel y U.D. Fraga después de recular la Federación Española ante el fracaso de la reforma recién aplicada origen de muchas quejas.
Su segundo ciclo en la categoría de bronce empieza con una categoría que pasa de un grupo único a cuatro con veinte participantes respectivamente agrupados por razones geográficas, regresando el Club Endesa Andorra con fuerza al ser cuarto en el campeonato 87/88 en el Grupo II formado por clubs navarros, riojanos, aragoneses, baleares, catalanes, guipuzcoanos y castellano-leoneses. Siguiendo en el mismo grupo y rivales de misma procedencia, la temporada 88/89 se cierra con el decimosegundo puesto siendo muy similar la campaña 89/90 al finalizar decimoprimero.
1990 – 2000
La década de los años noventa mantiene una regularidad muy similar a la dispuesta en la recién concluida, estrenándose con una sesión 90/91 en la que es penúltimo y desciende a Tercera División tras un mal ejercicio. En la temporada 91/92 demuestra nuevamente que la Tercera División le viene pequeña, quedando Campeón con solo tres derrotas y noventa y seis goles conseguidos en su haber. En la Promoción es Campeón de grupo y asciende a Segunda DIvisión B superando a la S.D. Amorebieta, C.At. Artajonés y Marina de Cudeyo C.F. El C.D. Endesa Andorra se convierte en un club ascensor y lo que consigue fácilmente en una temporada lo pierde con la misma prisa en la siguiente.
El conjunto turolense solo aguanta un par de temporadas en Segunda División B, pues en la campaña 92/93 es decimoquinto a un solo punto del descenso y en la 93/94 decimoctavo, descendiendo al quedar a dos puntos de la salvación. La secretaría técnica mueve ficha para intentar otra vez el asalto a Segunda División B en el campeonato 94/95, obteniendo el éxito por partida doble, pues queda Campeón del grupo aragonés y líder en el de Promoción de Ascenso con mucho mérito al superar con bastante holgura a Zalla U.C., C.D. Burladés y Ct.D. Bezana. El conjunto blanco demuestra sobre el terreno de juego que es un club ascensor ya que en la campaña 95/96 es último en el Grupo III con tan solo seis victorias, todas ellas en casa, siendo los encuentros a domicilio una constante derrama logrando tan solo seis empates.
De regreso a Tercera División, en la temporada 96/97 es tercero superado por C.D. Binéfar y U.D. Barbastro, pero el espíritu combativo y luchador de la entidad del Bajo Aragón hace que se sobreponga y consiga un milagroso ascenso a Segunda División B en un grupo en el que lo tiene bastante difícil y en el que es Campeón superando al C.D. Touring, U.D.C. Chantrea y Velarde C.F. Como en ocasiones anteriores, tampoco la temporada 97/98 resulta buena en Segunda División B, con tan solo siete victorias y mostrando los mismos guarismos dentro y fuera de casa, siendo su falta de acierto rematador un lastre para el equipo. Será último en la tabla y descenderá una vez más a Tercera División, categoría en la que se mantiene durante unos años.
En el campeonato 98/99 consigue el título del grupo aragonés con veintinueve victorias de un total de treinta y ocho encuentros, con ciento seis goles a favor y noventa y dos puntos, todo un record. Todo este repertorio de potencial no le sirve de nada en la Promoción, pues es superado por el Deportivo Alavés B y C.D. Ribamontán, dejando último al Real Titánico. Paradójicamente pierde los tres encuentros de casa. En la campaña 99/00 es tercero en Liga, pero su papel en la Promoción resulta testimonial pues es último, muy descolgado y con tan solo dos empates. El grupo lo conforman Peña Sport F.C., S.D. Lemona y C.D. Miengo. En la campaña 00/01 es quinto, a un solo punto de meterse en la Promoción de Ascenso.
2000 – 2010
Con la llegada de la temporada 01/02 sucede un hecho que va a repercutir trascendentalmente en el futuro de la entidad turolense; la retirada de la empresa ENDESA como máximo aval financiero del club. ENDESA, dentro del plan estratégico que marca su directiva nacional, en su nueva política decide abandonar la subvención que presta a todos los clubs de fútbol que apoya en el país y forman parte de su organigrama, dedicándose estas inversiones a otras actividades y acontecimientos deportivos de más escala y repercusión. La medida es un shock para el fútbol andorrano y otros clubs en similares circunstancias como los residentes en Escatrón, Puertollano, Ponferrada y As Pontes de García Rodríguez patrocinados por la empresa eléctrica, debiendo los nuevo gestores del club aragonés que adopta el nombre de Andorra Club de Fútbol replantearse cuál va a ser su futuro y cómo va a sobrevivir.
Deportivamente el descalabro en el campeonato de Liga es grande, quedando duodécimo en Liga y sin aspiraciones de entrar en Promoción de Ascenso. En la campaña 02/03 repite puesto y la directiva empieza a moverse para conseguir otras vías de ingresos que palíen la fuente anterior. Estas, aunque con menor cuantía, no tardan en llegar y en la temporada 03/04 aglutina una buena plantilla y acaba pese a todo tercero. El premio es jugar la Promoción pero en esta, tras vencer al C.D. Tropezón en casa por 1-0, pierde en la localidad torrelaveguense de Tanos por idéntico resultado, jugándoselo todo en los penaltis y teniendo peor suerte que el rival. En la sesión 04/05 es octavo, un tanto alejado de los puestos de cabeza, pero en la edición 05/06 se recupera y queda tercero a tres puntos del campeón C.D. Universidad de Zaragoza, consiguiendo promocionar de nuevo. El rival en suerte es la S.D. Gernika Club, empatando 1-1 en casa y 0-0 en la localidad vizcaína, con lo cual la posibilidad de continuar en la lucha por el ascenso se desvanece al hacerse valer el valor doble de los goles sumados a domicilio.
En las temporadas siguientes que cierran la década, el conjunto minero no consigue alcanzar una de las cuatro plazas que dan acceso a disputar la Promoción de Ascenso, quedándose en todas ellas con la miel en los labios en unos años en los cuales el grupo aragonés de Tercera División cambia a sus pretendientes y los clubs otrora poderosos pierden poder en beneficio de nuevas candidaturas. El 10 de septiembre de 2008 se inaugura las instalaciones deportivas remodeladas pasando a llamarse Estadio Juan Antonio Endeiza, en honor al presidente durante la década de los años sesenta y principios de los setenta.
2010 – 2020
En la campaña 10/11 el Andorra C.F. vuelve a la carga y con una plantilla corta pero muy compensada se proclama Campeón de Liga de forma brillante. En la Promoción de Ascenso, con un nuevo sistema eliminatorio, afronta la Eliminatoria de Campeones enfrentándose a la S.D. Noja a quien derrota por 1-0 en casa y con la que empata 1-1 en tierras cántabras, consiguiendo el ascenso a Segunda División B tras más de una década de ausencia. La edición 11/12 en la categoría de bronce y dentro del Grupo III constituido por clubs catalanes, aragoneses, valencianos y baleares es un querer y no poder puesto que desde el inicio el club minero no es capaz de desprenderse de las últimas plazas y la lucha sin cuartel que emprende para evitar el descenso resulta infructuosa terminando decimoséptimo.
El regreso al Grupo XVII aragonés de Tercera División empieza con una emocionante sesión 12/13 en la que el Andorra C.F. pugna cuerpo a cuerpo con el C.D. Sariñena por el título yendo finalmente a parar al conjunto oscense concluyendo ambos igualados a puntos. Clasificado para disputar la Promoción de Ascenso, el club blanquillo empata en Cuartos 1-1 ante el Jumilla F.C. en la ida y luego nuevamente 1-1 en casa llegándose a la tanda de penaltis donde tienen más fortuna los murcianos. La temporada 13/14 no ofrece el nivel de la anterior y se finaliza el campeonato en décimo puesto, mejorándose en la campaña 14/15 al ser quinto pero quedándose con la miel en los labios al no clasificarse entre los cuatro primeros. En la sesión 15/16 el club blanquillo oposita firmemente por el ascenso consiguiendo terminar segundo en Liga a un punto del Real Zaragoza Deportivo Aragón, siendo apeado en Cuartos en una igualadísima eliminatoria donde se empata 0-0 ante la U.D. Almansa en la localidad manchega y de nuevo 0-0 en casa llegándose a la tanda de penaltis donde pasan los azules.
Con mucho dinero dilapidado en sucesivos años, la economía del club andorrano se resiente tremendamente en una catastrófica edición 16/17 en la que, con una plantilla muy distinta a la mostrada en los últimos tiempos, queda vigésimo y colista destacado descendiendo a Regional Preferente. La crisis económica se adueña del club minero y, en una categoría más baja, los ingresos son menores terminando noveno en la temporada 17/18 y séptimo en la campaña 18/19. Las cuentas del Andorra C.F. son alarmantes debiéndose setecientos mil euros, medio millón de ellos a Hacienda, negro panorama que se suma a una atípica sesión 19/20 en la que, por si fuera poco, una crisis sanitaria suspende el campeonato restando diez jornadas por disputar cuando los blanquillos eran decimoctavos y colistas apuntando a un casi seguro descenso. Para su fortuna, la Federación Aragonesa no aplica en una medida extraordinaria, pérdida de categoría pudiendo continuar en la misma.
2020 – 2030
Al iniciarse los años veinte y coincidiendo con la crisis sanitaria, la Federación Aragonesa emite una circular donde se dice que aquellos clubs que decidan no inscribirse para el campeonato 20/21, no serán descendidos acogiéndose el Andorra C.F. por lo cual no participa ganando tiempo para resolver sus grandes problemas financieros. No son, sin duda, buenos tiempos para el municipio quien sufre un nuevo revés pues, desde el Gobierno, se anuncia el cierre de la central térmica dejando en la incertidumbre a muchos trabajadores. De regreso a la competición, en la temporada 21/22 finaliza sexto en Regional Preferente lanzando la directiva blanquilla un comunicado en el que se confirma la gran deuda existente y se reclama ayuda desde todos los sectores para que no desaparezca una sociedad que se plantea vender parte de su patrimonio.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles (Tomo II). Vicent Masià Pous (2011).
Nombre: Ciudad Deportiva del Real Zaragoza, S.A.D.
Año de inauguración: 1974
Cambios de nombre:
Ciudad Deportiva del Real Zaragoza C.D. (1974-1992)
Ciudad Deportiva del Real Zaragoza, S.A.D. (1992-)
Capacidad: 2.500 espectadores
OTROS ESTADIOS:
Campo de San Antonio (1939-1941)
Campo de Deportes de San José (1941-1948)
Campo de las Delicias (1948-1957)
Campo de Torrero (1957-1962)
Estadio del Arrabal (1962-1964)
Campo de Torrero (1964-1967)
Estadio de La Romareda (1967-1974)
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL REAL ZARAGOZA DEPORTIVO ARAGÓN. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL REAL ZARAGOZA DEPORTIVO ARAGÓN. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN ZARAGOZA:
El club más representativo de la ciudad de Zaragoza, el Real Zaragoza S.A.D., durante muchos años contó con un filial en el que apoyarse y foguear a jóvenes valores que luego, en el caso de los más distinguidos, tomaron parte de la primera plantilla. Sin embargo el mencionado filial nunca se trató del mismo club, ni todos los que representaron este propósito fueron creados expresamente con esa finalidad sino que, en función de cada época y sus requisitos, varios fueron los clubs que en un determinado perido de la historia pasaron por ese trance deportivo.
Para encontrar el primer filial reconocido expresamente con tal denominación hay que remontarse hasta el Zaragoza F.C., club constituido el 18 de marzo de 1932 fruto de la fusión por absorción que realizó el Iberia Sport Club sobre el desahuciado Zaragoza C.D. desapareciendo ambos con el resultante de un nuevo club por acuerdo mutuo. Esta entidad, con el ascenso a Primera División en el bolsillo a resultas de su gran temporada 35/36 del que no pudo disfrutar a consecuencia de la dramática irrupción de la Guerra Civil, precisó en 1939, dentro de una delicada situación en la que el fútbol estaba muy mermado, de un filial que no tenía. En este apurado momento se buscaron alternativas dentro de los clubs más selectos de la ciudad obteniendo lo que tan animosamente deseaban en el Athletic Club Comín, una modesta entidad que había sido fundada en 1934 y que jugaba en el Campo de San Antonio con camisa rojiblanca y pantalón azul, aunque en origen lo había hecho con camisa blanca y pantalón negro. El Athletic Club Comín suscribió iniciado 1940 un convenio de filialidad con el conjunto blanquiazul y adoptó el nombre de Athletic Club Zaragoza y, seguidamente, el de Club Atlético de Zaragoza a partir de 1941 por la prohibición de extranjerismos, jugando en Primera Categoría y formado por muchos jóvenes de gran calidad.
Esa misma temporada con una gran plantilla fueron Campeones de Liga además de Aragón amateur y de España en la categoría, derrotando al C.D. Alcoyano en la misma Final por 2-0 disputada en la ciudad de Valencia bajo el nombre oficial de Zaragoza F.C. En la temporada 43/44, en base a su clasificación deportiva, pasó a jugar en la recién reestrenada Tercera División siendo Campeón de su subgrupo y cayendo eliminado por el Levante U.D. para acceder a la Fase Final. Durante ocho temporadas consecutivas y distintos éxitos deportivos, el filial maño jugó con esta denominación en el Campeonato de Tercera División hasta que en el verano de 1952, debido a intereses del principal club de la ciudad, se rompió su filiación con el ya conocido como Real Zaragoza C.D. Tras la no renovación del acuerdo de filialidad el club atlético cambió de nombre pasando a ser conocido como Club Atlético Universitario, iniciándose un declive deportivo al no llegar jugadores con la calidad de los tiempos anteriores. En la temporada 52/53 se descendió a Primera Regional y en la siguiente 53/54, terminó lamentablemente su periplo deportivo al ser desahuciado por sus dirigentes al existir clubs en la ciudad que cumplían la misma labor formativa y se encontraban instalados en superior categoría.
En 1952, heredero de la labor formativa para el club zaragocista entró en escena el Club Deportivo Celta, una sociedad que jugaba en el Campo de San Antonio, vestía camisa gualdinegra a cuadros con pantalón negro y había sido fundada en 1928. El conjunto celtista suscribió un convenio de filialidad con la entidad blanquiazul que tenía su sede en la calle del Requeté Aragonés, nº12 y en pocos años consiguió ascender a Tercera División donde obtuvo plaza al término de la edición 53/54. En su temporada de estreno, 54/55, compitió en el Grupo V de la Tercera División aragonesa con muy negativos resultados pues, además de obtener sólo cuatro victorias, terminó décimo y colista perdiendo la categoría. En la campaña 55/56 el conjunto arlequinado fue de mal en peor dentro de la Primera Regional y al final del campeonato, desahuciado, desapareció.
HISTORIA COMO CLUB:
1939 – 1940
El siguiente filial del principal club de la capital aragonesa y de su región es el que en este historial nos ocupa. Los orígenes del actual dependiente zaragocista hay que buscarlos en el lejano 1939, fecha en la cual, tras la Guerra Civil, desde las autoridades se facilitó la constitución de nuevas sociedades cuando no la recuperación de otras nacidas con anterioridad para relanzar una sociedad maltrecha, con hambre y mucha miseria.
En el popular barrio de San José, en las proximidades de lo que actualmente es el Parque de Miraflores y empleando como sede un bar de la Avenida de San José, nació en 1939 el Racing Club San José constituyéndose en directiva los señores Forcén, Querol, Castillero, Pardo e Izquierdo. Esta modesta sociedad, integrada por elementos muy jóvenes, vistiendo camisa roja con cuello y mangas blancas y pantalón azul inició su carrera deportiva en el Campo de San Antonio pagando un pequeño alquiler, dedicando sus primeros años de trayectoria a competir en torneos locales hasta que en 1942 se adhirió a la Federación Aragonesa ya bajo el nombre de Club Deportivo San José al aplicarse desde el 1 de enero de 1941 la prohibición de extranjerismos en las sociedades deportivas. En aquellos tiempos las federaciones territoriales, para asegurarse de la seriedad de un club y que no era flor de un día, se prestaban a organizar campeonatos en los cuales, después de demostrar su valía, se les invitaba y concedía licencia para inscribirse federativamente. Dicho paso lo dio en agosto de 1943 el C.D. San José, seguramente apoyado por la inauguración del Campo de Deportes de San José sucedida el 28 de septiembre de 1941 de cuyas instalaciones se benefició junto a otras sociedades de su entorno. Una de ellas fue el C.D. Castelar, sociedad nacida en la calle del mismo nombre casi inmediata al recinto deportivo que terminó federándose en 1944.
El C.D. Castelar empezó su trayectoria federada en la temporada 44/45 dentro d Tercera Regional siendo tercero en su grupo sin mayor trascendencia mientras que el C.D. San José, con mayor ambición, compitió en Segunda Regional durante las temporadas 45/46 con un noveno puesto y 46/47 donde fue segundo tras el C.D. Amsa, también zaragozano. Después de intentar ascender a Primera Regional sin éxito en la campaña 47/48, en el verano de 1948 C.D. San José y C.D. Castelar unieron sus fuerzas quedando el segundo inserto en el primero quien pasó a denominarse Unión Deportiva Amistad adoptando como colores el violeta para la camisa y blanco para el pantalón. Al término de la edición 48/49 la fusión dio sus frutos y el club logró el ascenso a Primera Regional, máxima categoría del fútbol regional y cuarta a nivel nacional con una calidad contrastada. Dado que el Campo de Deportes de San José no reunía las exigencias de la categoría, la directiva de la U.D. Amistad presidida por Ángel Bayle Tello contactó con los gestores de la S.D. Escoriaza, propietarios del Campo de las Delicias, para poder disputar sus encuentros en este recinto, accediendo el club industrial a tal propósito.
1950 – 1960
La trayectoria ascendente de la U.D. Amistad se confirmó a principios de los años cincuenta cuando su equipo juvenil se convirtió en uno de los mejores de la región y su primera plantilla quedó tercera en la campaña 50/51 tras C.D. Celta y S.D. Hernán Cortés, conquistando el título de Primera Regional en la temporada 51/52 que le catapultó a Tercera División. El estreno en tan importante categoría, el tercero a nivel nacional, se llevó a cabo en la temporada 52/53 dentro del Grupo III donde participaban clubs aragoneses y catalanes requiriendo de grandes dispendios económicos y cierta profesionalidad. Ángel Bayle y su directiva tuvieron que realizar muchos esfuerzos y aportar dinero de su bolsillo para competir dignamente, consiguiendo una aceptable decimoprimera plaza que contentó a todos. Si compleja fue la edición 52/53, más lo fue la 53/54 cuando, por necesidades geográficas, el conjunto maño fue asentado en el Grupo IV donde competían parte de los aragoneses, castellano-manchegos y extremeños, siendo los viajes más distantes y mayores los gastos. La U.D. Amistad bajó al decimotercero puesto, promoviendo la RFEF en 1954 una gran reestructuración por la cual los grupos de la categoría eran confinados a sus respectivas regiones.
La Federación Aragonesa se quedó con el Grupo V saliendo la U.D. Amistad y resto de clubs aragoneses beneficiados al ser más cortas las distancias y, obviamente, los gastos. Con diez participantes en la edición 54/55, el club blanquivioleta concluyó en séptimo puesto certificando que, de hecho, era el tercer club local en importancia tras Real Zaragoza C.D. y Arenas S.D., máxime tras la retirada de la S.D. Escoriaza de la competición por decisión de la empresa que lo regía. En la temporada 55/56, siendo presidente Alejandro Pérez Ezquerra, el club se reforzó en todas sus líneas y, después de un competidísimo torneo, quedó primero igualado a puntos con Arenas S.D. y C.D Calatayud. Este título era el primero en la categoría y como complemento se disputó la Fase de Ascenso a Segunda División formando parte del Grupo II donde no obtuvo demasiada fortuna concluyendo octavo y colista al sumar dos victorias y un empate precedido de Gerona C.F., quien ascendió, A.D.Rayo Vallecano, C.D. Manresa, Arenas S.D., C.D. Elgóibar, C.F. Villafranca y Aranjuez C.F.
En la edición 56/57 la U.D. amistad se vio relegada al sexto puesto tras la marcha de sus mejores jugadores, solicitándose en 1957 la ayuda oficial del Real Zaragoza C.D. para firmar un acuerdo de filialidad y recibir de esta forma jugadores interesantes para elevar el nivel. Sancionado el trato, la U.D. Amistad cambió sus colores y recuperó los originales que ya dispusiera bajo la denominación C.D. San José, es decir, rojo para la camisa y azul el pantalón, compitiendo en el campeonato 57/58 con una gran aspiración que le llevó a se segundo empatado a puntos con el C.D. Ejea. Clasificado para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División, en esta fase quedó apeado en la Primera Eliminatoria por el C.D. Mirandés, potente rival con el que se perdió en la localidad burgalesa por 4-1 resultando insuficiente el 4-3 cosechado en casa una semana más tarde.
En la edición 58/59, el filial zaragocista se ajudicó el segundo título de la década aventajando en un punto al Arena S.D. con el que se inició una gran rivalidad al ser iguales sus objetivos y ser ambos de la ciudad de Zaragoza. Clasificado otra vez para la Promoción de Ascenso a la categoría de plata, en la Primera Eliminatoria la U.D. Amistad se topó con el C.D. Logroñés, perdiendo 1-0 en la capital riojana pero imponiéndose una semana después en el Campo de Torrero por 2-0. En la Segunda Eliminatoria y Final, el rival fue la Cultural y DeportivaLeonesa, llenándose Torrero para la ocasión aunque se logró un empate 0-0 que complicó y mucho su ansiado ascenso. Una semana después, en la capital leonesa todo se desvaneció al perder por 4-2. Durante estos años el Real Zaragoza C.D. rezaba para que su filial ascendiese a Segunda División pero el destino, jugándole una mala pasada, siempre estaba en contra. En la sesión 59/60 se obtuvo nuevamente el título, segundo consecutivo e igualmente con un punto de ventaja sobre el Arenas S.D., accediendo a una Promoción donde había muchas esperanzas depositadas. En la Primera Eliminatoria el rival que se encontró fue el San Sebastián C.F., potente club donostiarra filial de la Real Sociedad de Fútbol quien se impuso en casa por 0-1. Para el encuentro de vuelta todo pintaba agrio y en la capital guipuzcoana, pese a desarrollar un buen partido, todo quedó en tablas al empatar 1-1 y quedar fuera de concurso.
1960 – 1970
Con el cambio de década la U.D. Amistad siguió por sus derroteros conquistando en la temporada 60/61 su tercer título consecutivo en la categoría con dos puntos de ventaja sobre el Arenas S.D., clasificándose para la Promoción de Ascenso donde en la Primera Eliminatoria mostró una gran igualdad con el C.D. Cacereño venciendo en casa por 1-0 y cayendo derrotado en la capital extremeña por 3-2. Estos resultados, con el Reglamento de entonces, obligaron a disputar un desempate que se resolvió con un 0-0 que obligó a un cuarto encuentro, resuelto favorablemente para los azules por 2-1. En la Segunda Eliminatoria y definitiva, los maños se toparon con un fortísimo C.D. AtléticoBaleares con el que perdieron 1-2 en casa y abultadamente en Palma de Mallorca por 6-1 quedando el sueño del ascenso en borrajas.
Finalizado el campeonato la U.D. Amistad y el Real Zaragoza C.D. no renovaron el contrato de filialidad establecido en 1956 y acordaron uno nuevo de colaboración dado que el titular de La Romareda tenía desde 1955 un filial propio, el Juventud Club de Fútbol, conjunto constituido bajo el nombre de Real Zaragoza C.D. Aficionados quien, inscrito en Primera Regional la campaña 55/56 y campeón del torneo en la temporada 58/59 con ascenso a Tercera División incluido, debido a la Reglamentación de entonces que impedía la participación de dos clubs con la misma denominación dentro de las Categorías Nacionales, hubo de cambiar en 1959 a Juventud C.F. Los orígenes del Juventud C.F. se remontaban a 1951, año en el cual la RFEF obligó a todos los clubs de Primera División a disponer de un equipo juvenil. Del Real Zaragoza C.D. Juvenil salieron numerosos jugadores que ficharon por otros clubs pero a los mejores se les pensó dar cabida en un amateur que realizara una labor formativa en una categoría más contrastada.
Ser club colaborador no era lo mismo que ser filial y la U.D. Amistad se resintió negativamente en la sesión 61/62 pasando de jugar en el Campo de Torrero al Campo del Arrabal, además de mermar la calidad de su plantilla. Pese a su esfuerzo, en Liga fue superado por C.D.Numancia, de Soria y el filial maño, Juventud C.F., quedando en un tercer puesto que no satisfizo a sus gestores. En la temporada 62/63 la directiva del Real Zaragoza C.D. decidió no inscribir al Juventud C.F. en el Grupo V de la Tercera División aragonesa en una sorprendente solución que no dejó a nadie indiferente, siguiendo la U.D. Amistad con su bajón deportivo fruto de la organización de una plantilla con menor calidad que finalizó en sexto puesto.
En 1964, en plena temporada 63/64, el mecenas de la U.D. Amistad anunció su renuncia a depositar más dinero en el club iniciándose contactos con varios empresarios por si alguien decidía dar un paso al frente y hacerse con el timón pues, en caso contrario, la continuidad quedaba en serio peligro. Fue Dionisio Cruz, un exiliado zaragozano que emigró a Chile por su ideología a consecuencia de la guerra quien, de regreso a su ciudad en 1962 y acaudalado, para poder reintegrarse rápidamente pensó que el fútbol podía ser un camino idóneo. Rodeado de varias personas afines, una vez finalizada la campaña 63/64 con la U.D. Amistad en una decepcionante novena plaza, Cruz tomó el mando y poniendo como presidente a Carlos Salgado Lalaguna, además de invertir una gran cantidad de dinero en fichajes que debían reforzar la plantilla heredada introdujo profundos cambios en la sociedad titulándola Club Deportivo Aragón, pasando a vestir camisa blanca con banda vertical en un costado representando los colores gualdirrojos de la señera mientras el pantalón también era blanco.
El Real Zaragoza C.D., presidido por Waldo Marco quien se debatía entre recuperar a su por entonces filial Juventud C.F. hasta el punto de preinscribirlo para el campeonato 64/65 o apostar por un club local para forjar una cantera, finalmente descartó reactivar al filial y estableció un convenio de colaboración con el C.D. Aragón, recibiendo este último algunos cedidos con el objetivo de ascender a Segunda División, sueño pese al cual se terminó en un decepcionante quinto puesto. En la edición 65/66 Dioniso Cruz, muy contrariado por los malos resultados, decidió no seguir invirtiendo parte de su fortuna en el conjunto maño quedando este, bajo la presidencia de Luis Alfaro González primero y su sustituto Manuel Gimeno Alabau, muy desmantelado hasta el punto de ser decimoquinto con dos victorias y colista tras la retirada y pérdida de categoría del Alcañiz C.F. por incomparecencia en varios encuentros.
Necesitados respectivamente el Real Zaragoza C.D. de un filial y el C.D. Aragón de un inversor que paliase sus deudas, el 29 de julio de 1966 el presidente zaragocista Waldo Marco y el aragonesista Manuel Gimeno firmaron un acuerdo por el cual el club con plaza en el Grupo V de Tercera División se convertía en filial del club titular de La Romareda, comprometiéndose los blanquiazules a sufragar la deuda acumulada y a pagar los gastos venideros. Mantenido Manuel Gimeno en la presidencia, el recién declarado filial pasó a denominarse Aragón Club de Fútbol, uniformándose con camiseta azul y pantalón blanco, los colores inversos al primer equipo mientras el Campo de Torrero era su nuevo feudo. Deportivamente el Aragón C.F. mejoró ostensiblemente su plantilla y los resultados fueron muy diferentes a los mostrados en la edición anterior, convirtiéndose durante la sesión 66/67 en un serio aspirante al título que fue a parar a manos de la S.D. Huesca quien les aventajó en cinco puntos. Clasificados para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División, en esta fase se superó al Onteniente C.F. en la Primera Eliminatoria tras perder 2-0 en la localidad valenciana e imponerse en casa con un contundente 5-1, sufriéndose más en la Segunda Eliminatoria cuando, después de perder en Madrid por 4-0 ante la A.D. Plus Ultra, en casa se remontó con un extraordinario 5-0. En la Tercera Eliminatoria definitiva, el filial se impuso por 1-0 al Burgos C.F. cayendo una semana después en la capital castellana por 4-1.
En la sesión 67/68 el Aragón C.F. repitió puesto en Liga siendo superado de nuevo por la S.D. Huesca quien le aventajó en tres puntos, accediendo a una Promoción de Ascenso donde resultó apeado en la Primera Eliminatoria por el C.D. Almería: 2-1 en la ida y 0-0 en casa. La temporada 68/69 llegó con profundos cambios puesto que la RFEF empezó a reorganizar las categorías nacionales que de ella dependían. A los representantes de las federaciones aragonesa, navarra y guipuzcoana les fue asignado el Grupo III donde se proclamó campeón el ClubAtlético Osasuna, quedando el filial maño en un discreto octavo puesto. Con la voluntad de reducir participantes en la categoría en un inmediato futuro, la campaña 69/70 trajo una nueva reestructuración determinando la RFEF que el primer clasificado ascendería directamente a Segunda División y un corte mediante el cual los clasificados entre los puestos segundo y octavo, ambos incluidos, seguirían en Tercera División descendiendo a Regional el resto. El Grupo III, donde participaron una vez más aragoneses, navarros y guipuzcoanos, fue una caldera y el Aragón C.F., noveno clasificado a siete puntos de su antecesor, perdió su plaza.
1970 – 1980
Descendido a Regional Preferente, una categoría creada en 1969 por la Federación Aragonesa intermedia entre la Tercera División por arriba y la Primera Regional en un nivel inferior, los directivos del Aragón C.F. decidieron en 1970 cambiar la denominación del filial dejándola en Deportivo Aragón, nombre con el cual conquistaron el primer puesto de la temporada 70/71 ascendiendo directamente, sin Promoción de Ascenso mediante, a Tercera División.
Su regreso a Tercera División en la campaña 71/72 es efímero dentro de un grupo muy fuerte donde los rivales exhiben una gran calidad. Esta categoría, lejos de mantener una composición regional como la mostrada en los años cincuenta y sesenta, ahora es una confluencia de varias regiones donde cada federación muestra lo mejor de sí misma. Decimoctavo clasificado, tras un mal torneo desciende de nuevo a Regional Preferente, categoría en la cual durante la campaña 72/73 ofrece un nivel discreto, no clasificándose siquiera para la disputar la Promoción de Ascenso, objetivo que alcanzará en la sesión 73/74 al ser segundo tras la S.D. Huesca. En esta decisiva Fase, el filial maño es eliminado en sus aspiraciones por el Bilbao Athletic Club: empate 1-1 en casa y derrota por 3-2 en el encuentro de vuelta disputado en la capital vizcaína. El 19 de octubre de 1974, cumpliendo un viejo sueño dentro del club zaragocista para alojar a su profusa cantera, se inauguran las instalaciones de la nueva Ciudad Deportiva, recinto con varios escenarios que dan un aire de modernidad a la primera sociedad deportiva aragonesa.
Después de un discreto campeonato 74/75 en el cual no se alcanza ninguno de los dos primeros puestos, el ansiado ascenso al tercer nivel nacional del club presidido por José Sampietro Corral se produce al término de la temporada 75/76 al proclamarse Campeón por delante del Club Endesa-Andorra, reencontrándose en la temporada 76/77 con una Tercera División que va a ser reestructurada por enésima vez al constituir la RFEF para la siguiente edición la Segunda División B, categoría que ocupará el tercer escalón del fútbol nacional quedando la Tercera División relegada al cuarto. Alojado en el Grupo III donde compiten clubs aragoneses, baleares, catalanes, valencianos y murcianos, el filial zaragocista ocupa la decimosegunda plaza, pasando en la campaña 77/78 al Grupo II integrado por clubs aragoneses, guipuzcoanos, navarros, vizcaínos y castellanos donde realiza una gran labor quedando subcampeón a tan sólo tres puntos del C.D. Logroñés, club este quien asciende directamente a Segunda División B. En el curso 77/78 el Deportivo Aragón cambia, siendo presidente Agustín Natalías Blasco, su indumentaria que pasa a ser coincidente con la del Real Zaragoza C.D., es decir, camiseta blanca con pantalón azul. En lo que respecta al plano deportivo, en la sesión 78/79 se pasa al Grupo IV debido a cuestiones de distribución geográfica coincidiendo con clubs castellanos, canarios, castellano-leoneses y castellano-manchegos. Los gastos son excesivos pero pese a todo la plantilla cumple con un honroso octavo puesto. En la edición 79/80 que cierra la década, los zaragozanos ingresan el el Grupo III con el resto de clubs aragoneses, vascos y toledanos ocupando una positiva tercer plaza tras el donostiarra San Sebastián C.F, y Deportivo Alavés.
1980 – 1990
Entrados en los años ochenta consigue ascender a Segunda División B al término de la campaña 82/83 tras ser Campeón y eliminar en la Fase de Ascenso a Real Valladolid Promesas: 1-0 en la ida y un contundente 7-0 en casa; y al C.D. Eldense en la Final: 1-0 en casa y 0-1 en Elda. En la temporada 84/85 es subcampeón de Liga con veintitrés victorias y ocho empates, consiguiendo ascender directamente a Segunda División A, un reto jamás alcanzado y que gracias al esfuerzo realizado desde años atrás de la directiva encabezada por su presidente Santiago Navarro Pérez, supone una gran alegría para su afición y para el Real Zaragoza C.D., que por fin disfrutará de un filial dentro de una categoría superior en la cual la preparación de sus pupilos sea más acorde al nivel que posteriormente ocuparán. Su estreno en la categoría de plata con Manuel Suárez Alzamora en la presidencia se produce en la temporada 85/86 y lamentablemente no tiene el desenlace esperado pese a la dificultad de la empresa, rindiendo por debajo de su nivel y cosechando pocos puntos lejos de casa.
Entrenados por Carlos Casaús Ruiz, al final es decimoctavo a cinco puntos de la salvación y desciende a Segunda División B, destacando el paso por su plantilla del defensa gerundense Narcís Julià y del internacional zaragozano Francisco Javier Pérez Villarroya. Su regreso a Segunda División B se presenta difícil para la temporada 86/87 al ser encuadrado en un grupo único de veintidós participantes, terminando en la parte baja de la clasificación siendo decimoctavo con treinta y seis puntos, pero sin posibilidad de descenso por reestructuración de la categoría y ampliación de la misma a ochenta participantes. La 87/88 realizan una fabulosa campaña en la cual es subcampeón de grupo entrenados por José Martínez “Sigí”, y sólo el gol avarage particular con el campeón C.F. Juventud Mollesusa le impide de nuevo el ascenso a la categoría de plata. El final de la década presenta altibajos clasificatorios y tan pronto ocupa puestos rezagados como la sesión 88/89 en la que es decimosexto y logra eludir el descenso empatados a puntos con el riojano C.D. Arnedo, como termina en la parte media-alta de la tabla la siguiente sesión 89/90, siendo octavos con el técnico Manuel Vilanova.
HISTORIA COMO EQUIPO DEPENDIENTE:
1990 – 2000
La década de los años noventa la pasa casi por completo en Segunda División B a excepción de un par de comparecencias en Tercera División. En 1990 la RFEF modifica su Reglamento General incluyendo la nueva Ley del Deporte 10/1990. Esta Ley que, entre otras cosas, obliga a los clubs profesionales a transformarse en Sociedad Anónima Deportiva, provoca que los clubs hasta entonces filiales relacionados con estos se extingan y sean asimilados por los clubs profesionales quedando integrados en su estructura. El Deportivo Aragón se disuelve en el verano de 1991 y desaparece como club, pasando a ser equipo dependiente y adoptando el nombre de Real Zaragoza Club Deportivo “B”, respetándose la plaza y categoría disfrutadas hasta el momento del cambio. En lo deportivo la década empieza bien siendo quinto en la edición inicial 90/91 con el técnico zaragozano Víctor Fernández, pero en las campañas siguientes decrece su nivel tras renovar parte de su plantilla y acaba descendiendo a Tercera División al término de la sesión 92/93, ya bajo el nombre de Real Zaragoza, S.A.D. “B” tras la conversión completada de la entidad en el verano de 1992.
En la temporada 93/94 es segundo en el grupo aragonés y en la Promoción de Ascenso consigue ascender al liderar un cuarteto en el que le acompañan S. Cultural Deportiva Durango, C.D. Calahorra y S.D. Noja. Su vuelta a Segunda División B es efímera y la sesión 94/95 la finaliza siendo decimoctavo y perdiendo nuevamente la categoría. Como sucediera en la ocasión anterior, su paso por Tercera División resulta igual de corto, pues tras ser Campeón de Liga, en la Promoción supera a C.D. Oberena, C.D. Elgóibar y C.D. Tropezón retornando en un abrir y cerrar de ojos. En el último tramo de los años noventa el Real Zaragoza “B” lleva a cabo temporadas irregulares, pero sin duda destaca la 99/00 en la que es subcampeón con una potente plantilla dirigido por Manolo Villanova y consigue promocionar para tratar de ascender a Segunda División A. En la Liguilla no se obtienen buenos resultados y resulta tercero tras la Universidad de L.P. de G.C. C.F. y Xerez C.D., dejando como colista al Hércules C.F. de Alicante.
2000 – 2010
Iniciado el nuevo siglo, el equipo dependiente zaragocista intenta en las primeras temporadas denodadamente el ascenso de categoría resultando baldíos sus esfuerzos, pues la oportunidad de la temporada 01/02 tras ser tercero en Liga de nuevo con el zaragozano Manolo Villanova en el banquillo es desaprovechada al coincidir con el descenso de la primera plantilla a Segunda División. Las temporadas 02/03 y 03/04 pasan sin pena ni gloria inmerso en la zona media y sin aspiraciones al estar alejado de las primeras plazas, mientras en la edición 04/05 revive al ser quinto clasificado de la mano de Jesús Ángel “Chucho” Solana.
La sesión 05/06 es pésima y el club blanquiazul termina decimonoveno, alejado de la salvación y descendiendo a Tercera División tras diez temporadas consecutivas disputando encuentros en la categoría de bronce y siendo uno de los principales puntos de apoyo a la hora de proporcionar jugadores a la primera plantilla. Instalado en Tercera División se proclama Campeón en la campaña 06/07 de forma brillante y cosechando un buen número de puntos que hacen presagiar éxitos. No es así y en la Primera Eliminatoria de la Promoción el equipo dirigido por Pascual Sanz es superado por el Ontinyent C.F. que le derrota en ambos encuentros: 1-0 en la localidad valenciana y 0-1 en casa.
La edición 07/08 toma otro cariz y el equipo queda sexto a tan sólo un punto de jugar la Promoción, recuperando parte del camino perdido en la campaña 08/09 cuando es subcampeón tras el Club Atlético Monzón. En la Promoción elimina a la Unión Montañesa de Escobedo: 3-1 en la localidad cántabra y 3-0 en casa; cayendo en la siguiente ronda ante la S.D. Tenisca desde la tanda de penaltis tras imponerse en casa 2-0 y perder igualmente por 2-0 en La Palma. Configurado para estar en una categoría superior es tercero en el campeonato 09/10, ahora tras C.D. Teruel y C.D. La Muela, siendo eliminado en la Promoción por el Getafe C.F. “B”: 2-0 en la ida y empate 1-1 en casa.
2010 – 2020
El acoso que realiza el dependiente zaragocista es constante e iniciada la nueva década consigue al fin su propósito, aunque no de forma deportiva, sino a través de los despachos al hacer efectiva la toma de una de las plazas libres que han quedado en Segunda División B al ser descendido un club por impago, mediante el depósito de trescientos noventa y cinco mil euros en cuanto que deportivamente había sido subcampeón de Liga y eliminado en Primera Ronda por el C.D. Mairena: 2-0 en la localidad sevillana y 1-1 en casa.
La edición 11/12 se vive con cierta intranquilidad puesto que el rendimiento de la plantilla en el Grupo III no es todo lo positiva que se esperaba y a duras penas se consigue ser decimosexto. Este puesto le obliga a promocionar para conseguir la permanencia enfrentándose a la U.B. Conquense, rival al que supera tras vencer 1-0 en casa y 0-3 en la capital castellano-manchega. En diciembre de 2013 se acuerda el cambio de nombre a Real Zaragoza Deportivo Aragón, siendo trasladado durante la sesión 14/15 a la RFEF, aceptando oficialmente el cambio de nombre desde el 1 de julio de 2015.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles (Tomo II). Vicent Masià Pous (2011).
Campo de El Ensanche/Adolfo Masiá/La Pinilla (1954- )
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL CLUB DEPORTIVO TERUEL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CLUB DEPORTIVO TERUEL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN TERUEL:
Emplazada en el extremo meridional de Aragón y del Sistema Ibérico, la ciudad de Teruel es la capital menos poblada de España, siendo su principal característica la conservación de un rico y amplio patrimonio artístico de estilo mudéjar que le ha valido ser catalogado como Patrimonio de la Humanidad y, consecuentemente, albergar cierta industria turística.
Apareció el fútbol en la capital aragonesa a principios de 1917 cuando Francisco Pastor Calvo, inspector veterinario del municipio y gran aficionado al deporte, tuvo la idea de crear junto a un grupo de amigos un club en el cual la juventud local pudiera poner en práctica tanto este deporte que tan de moda estaba en todo el país como otros de gran seguimiento como eran el ciclismo y el pedestrismo. La brillante iniciativa tomó el nombre de Sociedad Deportiva Turolense y con su esfuerzo e ilusión, consiguieron un terreno en los llanos de San Cristóbal -al norte de la localidad en las inmediaciones de la antigua Plaza de Toros- que consiguieron adecentar y nivelar con la aportación de todos. Entrenados para la ocasión con motivo de las Fiestas de Junio, el domingo día 3 tuvo el estreno frente al Bilbilis F.C., de Calatayud, siendo derrotados los visitantes por un elevado tanteo de 10-3 con la presencia en las filas del once local que vestía camisa verdiblanca con pantalón blanco de Mario Rodríguez, portero, Mariano Valenzuela y Enrique Pérez, defensas, Emilio Bonilla, Roberto Pérez y Joaquín Polo, medios, mientras como delanteros actuaron Nicolás Negre, Ramón Hernández, Emilio Álvarez, Manuel Rodríguez y Lúcido Yubero.
El ambiente congregado y el abultado marcador espolearon a los locales para seguir jugando y, al poco tiempo, se originó el nacimiento de una nueva sociedad durante el verano, el Club Athletic, de breve historia al igual que el Decano puesto que a mediados de 1918, con pocos objetivos y gran falta de interés, desaparecían ambos quedando a la espera de años mejores.
El resurgimiento del fútbol en medio de una población que cuenta con doce mil habitantes tiene lugar en 1921 tras el éxito olímpico de la Selección Absoluta en Amberes un año antes con el regreso de la S.D. Turolense, de nuevo en activo desde julio uniformada en esta segunda oportunidad con camiseta roja y pantalón blanco, club que gozará nuevamente de los Llanos de San Cristóbal con Francisco Pastor una vez más al frente de la entidad. La iniciativa futbolística, lejos de tener un solo protagonista en esta tentativa de consolidación, llega ahora acompañada de savia nueva pues en el Cuartel de Infantería el capitán Oliván crea un equipo denominado Regimiento de Tetuán y, en 1922, las huestes de la institución Juventud Católica local crean una sección futbolística que se enfrenta a los dos anteriores creándose un caldo de cultivo idóneo para el desarrollo de este deporte.
A lo largo de 1923 la S.D. Turolense afianza su posición y el 6 de mayo, mediante asamblea extraordinaria, clarifica su organigrama quedando Francisco Pastor ratificado como presidente, Gabriel Ferrán como vicepresidente y tesorero, Raúl Ruiz en el puesto de secretario mientras Alfonso Pastor y Blas Sanz ejercen como vocales y José Ríos pasa a ser jefe de material. En la misma reunión se acuerda denominar Teruel Foot-ball Club al primer equipo de los tres con los que cuenta la sociedad siendo los dos restantes el de reservas y el infantil.
Sin embargo pronto las cosas cambiarán; la llegada del capitán Oliván al club con su propias ideas propicia a finales de año una escisión en la que Francisco Pastor junto a otros socios deciden emanciparse y constituir el Teruel Sporting Club, sociedad que viste camiseta con pantalón blanco y encuentra cobijo en unos terrenos situados en el barrio de las Ollerías de San Julián. Paralelamente a estos acontecimientos la S.D. Turolense solicita la presidencia honoraria del club a S.A.R. el Príncipe de Asturias D. Alfonso de Borbón y Battemberg, primogénito de S.M. el Rey D. Alfonso XIII, cambiando en 1924 a Real Deportiva Turolense aunque popularmente es reconocida simplemente como La Deportiva. A medida que avanza 1924 las desavenencias surgidas entre deportivistas y sportinguistas parece que se reducen a pasos agigantados y, de hecho, en julio se establecen reuniones entre ambas directivas para proceder a una inminente fusión que, ya en agosto, sorpresiva y finalmente no se lleva a efecto al ser descartada en sendas asambleas extraordinarias celebradas respectivamente por los socios.
La frustrada fusión origina una ralentización en el desarrollo del fútbol turolense y en 1927 ya no queda en pie ninguno de los proyectos iniciados a principios de la década. El tercer intento por consolidar el fútbol en la ciudad mudéjar ha de esperar a 1929 cuando, casi sin esperarlo, el acondicionamiento de unos terrenos sitos en la carretera de Teruel a Zaragoza denominados Campo de la Tahona impulsan la creación de nuevas sociedades como el Deportivo Foot-ball Club, el Deportivo Turolense y el más importante de todos ellos que marcará toda la década de los años treinta, el Rapid Sporting Club Turolense, una sociedad donde el gran aficionado Moisés Salvador vuelca toda su energía para que la ciudad tenga un proyecto sólido.
Iniciado 1930 el fútbol alcanza un gran apogeo y el Rapid Sporting Club Turolense, quien viste camisa azulina con pantalón blanco, se convierte en el más afamado bajo la presidencia de Antonio Llabrés Roger aprobando sus estatutos el martes 29 de abril. En importancia le sigue la Juventud Católica, uniformado con camiseta blanca cruzada por una cruz roja y pantalón negro quien, reactivado tras años de ausencia, consigue arrendar unos terrenos donde se encuentra el actual Estadio de Pinilla que no son exentos de problemas al pasar una línea de tendido eléctrico excesivamente próxima. Solucionada la adversidad, dicho campo es estrenado oficialmente el 27 de julio.
Si Rapid Sporting Club Turolense y Juventud Católica son los máximos referentes del fútbol local, a finales de año queda constituida la Olímpica Turolense, nueva sociedad presidida por José María Radillo que viste camiseta roja con pantalón blanco y quien se convertirá en el máximo opositor de los sportinguistas durante cierto tiempo. Mientras tanto el Rapid Sporting Club Turolense sigue a la suya, el 18 de diciembre accede Leocadio Brun a la presidencia y suma nuevos apoyos como el del ingeniero de caminos y alcalde local durante los años veinte José Torán de la Rad, impulsor del Viaducto y mecenas de la sociedad como presidente honorario hasta su prematuro fallecimiento en enero de 1932.
Surgen nuevas sociedades como el Athletic Club, quien viste camiseta rojiblanca con pantalón negro y el Terror F.C., ambos de escasa trayectoria, accediendo en 1933 a la presidencia del Rapid Sporting Club Turolense un aficionado que será determinante en la evolución del fútbol local como es Moisés Salvador Pérez, gran figura bajo cuyo esfuerzo social y también económico, pues de su bolsillo se consiguen sufragar las cuatro parcelas donde se consigue levantar un nuevo recinto deportivo, el Campo de Ensanche -actual Pinilla- como coronación al ansiado deseo de disponer de un recinto en condiciones. Inaugurado el 4 de junio de 1934 en un encuentro frente a la Juventud Deportiva Calanda con victoria local por 3-0 con tantos de Luís Pastor, El Ensanche facilita la creación de numerosos equipos integrados por juveniles como el Mercurio, el Aragonés, el Arrabal, el de La Parra, el Iberia, el San Nicolás de Bari, el de Los Tranquilos y el la Peña Lerín, constituido en 1935 para los cuales se organizan campeonatos locales.
Llegados a 1936 se piensa en inscribir al máximo representante turolense en la Federación Aragonesa para poder competir en los campeonatos que organiza dicha federación, pero todo es truncado en julio con el desbocamiento de la Guerra Civil, tremendamente cruel en todos los sentidos y especialmente sangrienta en la ciudad y su provincia donde se liberan crudas batallas. Bombardeada Teruel en varias ocasiones, la ciudad queda ampliamente devastada y precisa de la ayuda del Estado para su reconstrucción, no siendo esta actuación óbice para que a mediados de 1939 se reemprenda la actividad futbolística gracias al trabajo de Moisés Salvador.
El 28 de octubre de 1939, tras Asamblea Extraordinaria, la junta directiva del Rapid Sporting Club Turolense que preside Salvador aprueba el cambio de denominación de la sociedad a instancias del nuevo Régimen adoptando el de la ciudad y el de su dedicación, Teruel Foot-ball Club, nombre con el que competirá en lo sucesivo inscrito por fin en la Federación Aragonesa donde empieza desde Segunda Categoría.
Durante estos tiempos de cruda posguerra, Teruel empieza a contar con modestos clubs para los que se organizan campeonatos locales como el Dorado, el Goya, el Pedralva, el equipo del Frente de Juventudes, el C.F. Viaducto y el C.F. La Salle a los que se suman algunos de la década anterior como el Mercurio, Arrabal y La Parra, incluyéndose en algunas de estas formaciones personal del Batallón de Trabajadores nº21 con ámbito en la provincia aragonesa constituido por desafectos al Régimen sin condena o delito que eran confinados a trabajos forzados a manera de castigo.
Fallecido Moisés Salvador y con Cesáreo Budria al frente, la sociedad turolense cambia en 1941 a Teruel Club de Fútbol cumpliendo las instancias gubernamentales que prohíben el uso de extranjerismos, llegándose al año 1943 en el cual la Federación Española, supeditada por la Delegación Nacional de Deportes, decide instaurar un Campeonato Nacional de Liga de Tercera División donde se dé cabida a clubs profesionales para evitar que caigan a Regional y, de paso, a clubs modestos de capital de provincia y ciudades importantes que despunten por debajo de la Categoría Nacional.
El Teruel C.F. solicita a la Federación Aragonesa ingresar en Tercera División a través de la intercesión del gobernador provincial Francisco Labadie Otermín, siendo tramitada su petición con éxito aunque con importantes cambios puesto que se realiza una profunda reestructuración tanto en directivos; el falangista Arsenio Perales accede a la presidencia acompañado de los señores Santo Tomás, Blanco, Carrión, Cano, Amaro, Loscentales y Gea; se adoptan como colores oficiales el rojo para la camisa y el azul para el pantalón, se cambia la denominación del club a Unión Deportiva Teruel y se profesionaliza la sociedad quedando pocos miembros de la anterior plantilla mientras se da entrada a jugadores que cobran procedentes de superior categoría.
La U.D. Teruel debuta en Tercera División durante la campaña 43/44 en el Grupo V donde deben competir aragoneses y valencianos conjuntamente, pero la negativa de algunos valencianos a realizar largos desplazamientos trastorna los planes iniciales y finalmente se divide en dos subgrupos, uno por cada región, el total de participantes quedando terceros los turolenses en el aragonés tras Atlético Club Zaragoza y S.D. Arenas, de la misma localidad. En la temporada 44/45, con toda más organizado, la U.D. Teruel compite en el Grupo IV dondese insertan clubs de las federaciones Aragonesa y Navarra, alcanzándose un meritorio quinto puesto en medio de sociedades importantes como el Club Atlético Osasuna, C.D. Logroñés y U.D. Huesca entre otros.
En el verano de 1945 la U.D. Teruel, presidida por el doctor médico Francisco Marcos del Fresno, empieza a estar asfixiada económicamente y, por si fuera poco, debido a su proximidad y buena comunicación con Valencia es reubicada en el Grupo VI donde compiten valencianos y baleares. Armados con una plantilla de circunstancias y después de sufrir dolorosas goleadas, la entidad mudéjar concluye décima y última en la temporada 45/46 con el balance de una victoria, un empate y dieciséis derrotas no pudiéndose desplazar hasta Palma de Mallorca para contender con el C.D. Atlético Baleares, culminando un nefasto torneo que termina descendiendo a Primera Categoría. Tras pasar por Primera Categoría en la edición 46/47, el conjunto encarnado desaparece.
La desilusión se apodera de la afición turolense y nadie en la ciudad quiere asumir el mando de un nuevo proyecto que revitalice el fútbol. El Campo del Ensanche, también denominado de Educación y Descanso, presenta las gradas vacías las tardes de cada domingo hasta que al fin, en 1948, gracias al trabajo realizado por el exjugador y periodista Manuel Vicente Salesa a través de las ondas de Radio Teruel y del periódico Lucha, se consigue mentalizar a la sociedad deportista de la ciudad para constituir un nuevo club que es titulado Sociedad Deportiva Turolense.
La idea es empezar desde cero y con gente de la localidad por encima de todo, rescatándose los colores primitivos del Rapid Sporting Club Turolense, camiseta azulina con pantalón blanco y contando con jugadores de los diversos clubs modestos que existen en Teruel. Afiliado al Frente de Juventudes, durante la campaña 48/49 se debuta con relativo éxito en la competición que organiza dicha institución, inscribiéndose en 1949 en la Federación Valenciana donde empieza emplazado en Segunda Categoría. Bajo la presidencia de Martín Pérez del Moral y a continuación José Luís Urquijo Urquijo, los azulinos ven pasar por El Ensanche clubs como la Peña Deportiva Ideal, de Ontinyent, U.D. Manises y C.D. Alacuás entre otros a lo largo de la temporada 49/50 no pudiendo ascender a Primera Regional como tampoco lo harán en la siguiente edición 50/51.
En 1951, siendo presidente Francisco Marcos del Fresno, máximo directivo de la desaparecida U.D. Teruel y director de la Jefatura Provincial de Sanidad, la S.D. Turolense ingresa en la Federación Aragonesa con un grado más pues lo hace directamente en Primera Categoría, resultando al final de la temporada 51/52 noveno clasificado. A pesar de los intentos de la directiva para atraer aficionados y de los esfuerzos para acercar el club a su ámbito geográfico para competir con rivales aragoneses y así aumentar teóricamente los ingresos por taquillas, ambos apenas tienen repercusión en los seguidores y fruto de ello, en la campaña 52/53, escasos de recursos económicos resultan decimocuartos perdiendo la categoría. Nadie desea tomar el testigo y afrontar las deudas, con lo que la historia futbolística de la localidad parece repetirse una vez más y, como calcos, las trayectorias de U.D. Teruel y S.D. Turolense sucumben atrapadas en la misma trampa.
HISTORIA DEL CLUB:
1954 – 1960
Desaparecido el máximo representante futbolístico de la ciudad no por ello Teruel permanece exenta de clubs, pues varias son las sociedades que en esas fechas se mantienen compitiendo, aunque a un nivel más modesto, como adheridas a la Federación Aragonesa. En la edición 53/54 algunos clubs constituidos en la década anterior como el C.F. La Salle y el C.F. Viaducto a los que se suman algunos de reciente creación como el C.F. Los Sordos, el C.D. Turolense y el C.F. Juventud, toman el relevo de la extinta S.D. Turolense y mantienen en activo el recinto del Ensanche mientras se buscan soluciones para constituir un nuevo club hegemónico que tardará bastantes meses en consolidarse.
Fraguado durante el verano, el 14 de septiembre de 1954 y mediante asamblea constituyente celebrada en el salón del Círculo Mercantil Turolense, tiene lugar el nacimiento del Club Deportivo Teruel, nueva sociedad que toma el mando del fútbol local nutriéndose de jugadores de los distintos clubs anteriormente mencionados y en la cual se comprometen las fuerzas vivas de la ciudad siendo su primera junta directiva la encabezada por José Borrajo Vallés en la presidencia, jefe del Sindicato Provincial de Agua, Gas y Electricidad, Fernando Pascual y Aquilino Laguía en el puesto de vicepresidentes, Mario Burillo como secretario y un sinfín de vocales. Descartada el alta en la Federación Aragonesa por los problemas habidos en proyectos anteriores, el C.D. Teruel que viste camisa granate con pantalón azul, es inscrito en la Federación Valenciana partiendo de la última de sus categorías, la Tercera Regional, compitiendo en el Campeonato de Aficionados y en el Campeonato de Liga donde no cosecha excelentes resultados que le permitan acceder a la Segunda Regional.
Concluida la temporada 54/55, la campaña 55/56 no es mucho mejor y el primer equipo de la sociedad sigue instalado en la más baja de las categorías administradas por la Federación Valenciana por lo que la directiva, ansiosa de situar el fútbol turolense en un lugar más prominente acorde a la categoría de una capital de provincia, solicita la ayuda del Gobernador Civil provincial Marcos Peña Royo quien trabaja los hilos para conseguir la empresa que se le plantea. Para fortuna del club mudéjar la solución a su inquietud se halla cerca de casa pues la S.D. Montañanesa, conjunto de la ciudad de Zaragoza que atraviesa graves problemas económicos que le impiden seguir actuando en el Grupo V de Tercera División, renuncia a la categoría y su plaza, a través de gestiones realizadas por el gobernador en la Federación Aragonesa, es ocupada por el C.D. Teruel quien así supera administrativamente varias categorías.
Los cambios que sufre la sociedad, al margen de categoría, adscripción federativa y nivel de jugadores con el fichaje de numerosos futbolistas profesionales son significativos y, en la misma reestructuración, accede a la presidencia el ilerdense Ramón Coll Valls quien se ve acompañado de jugadores como Gustavo, Vicente Gómez, Torres, Julián, Medina, Tropel, Añoveros, Hernando, Antonio Julián, etc. El C.D. Teruel debuta en Tercera División durante la temporada 56/57 dentro de un grupo que ha sido ampliado en número de participantes consiguiendo un excelente tercer puesto en Liga, acometiéndose durante el torneo las obras de cambio de cara y reforma integral del Campo del Ensanche al cual se le dota de una pista de atletismo además de obras de acondicionamiento de tribuna con lo que adquiere un aspecto de polideportivo.
Tras la inauguración oficial de las obras el 8 de septiembre de 1957 y el traspaso al Real Zaragoza C.D. del jugador estrella Manuel Torres Pastor quien posteriormente irá cedido al Real Madrid C.F. convirtiéndose en campeón de la Copa de Europa de 1957, el C.D. Teruel realiza campañas más discretas desde el punto de vista deportivo siendo decimosegundo en la edición 57/58, octavo en la sesión 58/59 y decimoprimero en la temporada 59/60 que cierra la década.
1960 – 1970
Tras este inaudito ascenso, el C.D. Teruel va a permanecer catorce temporadas consecutivas en Tercera División, ingresando en el grupo aragonés y mostrando en la mayoría de campañas un potencial muy justo para poder alcanzar cotas mayores, finalizando casi siempre en la zona media-baja de la clasificación, a excepción de algunas temporadas como el cuarto puesto conseguido la 65/66 bajo la presidencia de Antonio Sancho Laguía.
A finales de los años sesenta, el equipo parece enderezar el rumbo y en la campaña 67/68 es tercero en Liga por detrás de S.D. Huesca y Aragón C.F., escapándose las plazas que optan al ascenso, para ser quinto en la siguiente 68/69, en un grupo integrado por clubs de varias federaciones, en la que se lleva el Campeonato y posterior ascenso el Club Atlético Osasuna. En la temporada 69/70, la previa a la reestructuración que padece la Tercera División, con Juan Gumá Alfi en la presidencia efectúa una pésima temporada que le lleva a ser penúltimo y descender a Regional Preferente.
1970 – 1980
Iniciada la década de los años setenta el C.D. Teruel empieza en el cuarto nivel nacional de la época, la Regional Preferente con cambio en la directiva al acceder Alfonso Torres Gimeno, directivo con quien se encadena un nuevo descenso en esta ocasión a Primera Regional, el quinto nivel. Afortunadamente para los turolenses el paso por esta categoría durante la temporada 71/72 es rápido y, una vez concluida se regresa a Regional Preferente. Con Antonio López Calderón y directivas sucesivas, la ciudad dispone de un filial en Tercera Regional, el Club Atlético Teruel, destino donde se forjarán jugadores por encima de edad juvenil que luego se incorporarán a la primera plantilla.
Deportivamente la década se pasa sin altibajos careciendo de oportunidades reales de ascender a Tercera División a excepción de la temporada 77/78 donde se anda cerca al concluir subcampeón. El alejamiento de las primeras categorías del fútbol nacional es cada vez más evidente, máxime cuando a partir de 1977 la RFEF crea una nueva, la Segunda División B, frustrándose los anhelos de alcanzar plaza en una de estas divisiones al menos a corto plazo.
1980 – 1990
El ansiado ascenso llegará al final de la temporada 83/84 presidido por Manuel López Pérez cuando el equipo termina subcampeón tras la S.D. Ejea. El 28 de febrero de 1984, el jóven centrocampista de 17 años Luis Milla Aspas (apodado Milla II en aquel entonces) es traspasado al F.C. Barcelona por un millón de pesetas más la disputa de un encuentro amistoso, convirtiéndose en el futuro en el jugador más destacado que ha pasado por las filas del club turolense.
En el reencuentro con la Tercera División empieza fuerte en medio del grupo navarro-aragonés, con grandes plantillas que le llevan a los puestos de cabeza, siendo cuarto en la edición 84/85 y tercero en la siguiente 85/86, ya con Moisés Salvador Moya en el cargo de presidente. Mejor si cabe será la campaña 86/87 cuando sea subcampeón formando parte de un grupo integrado completamente por clubs aragoneses y consiguiendo ascender por primera vez a Segunda División B, al serles concedidas tres plazas por la RFEF a la Federación Aragonesa ante la remodelación que sufre esta categoría la cual pasa de un grupo único a cuatro. Con el ascesno a la categoría de bronce y su permanencia en ésta, será cuando el club viva su época dorada con la ciudad entera y toda la afición volcada con el club que la representa, viviendo la ciudad mudéjar el mejor ambiente futbolístico de los últimos tiempos.
En las cuatro temporadas que milita el C.D. Teruel en Segunda División B, se enfrenta a grandes equipos como el Villarreal C.F., Levante U.D., Albacete Balompié ó C.D. Numancia entre otros, con grandes entradas en La Pinilla y llegando a disputar eliminatorias de la Copa del Rey con el C.D. Logroñés, Real Zaragoza C.D. ó C.D. Málaga. Deportivamente no son campañas buenas, salvo la 88/89 en la que se concluye cuarto clasificado con 45 puntos y acaba como revelación del grupo, siendo las demás un verdadero sufrimiento para la afición pues o se salvan in extremis o realizan una calamitosa temporada como la del descenso, 90/91, en la que son colistas y consiguen solamente cinco victorias.
1990 – 2000
Descendido a Tercera División, toda la década de los años noventa la pasa confeccionando plantillas para retornar a Segunda División B, quedándose siempre a las puertas de la Promoción de Ascenso, pues llega siempre con la gasolina justa para acceder a ésta o bien el infortunio en forma de gol-average se cruza por el camino, caso de la sesión 93/94 donde queda fuera de la Promoción al terminar empatado con 52 puntos con la U.D. Barbastro, la siguiente 94/95 donde de nuevo el equipo oscense le arrebata la cuarta plaza ó la sesión 95/96, donde una vez más acaba empatado a 66 puntos con el U.D. Barbastro, dejando éstos por tercer año consecutivo al equipo turolense fuera de las opciones de ascenso.
La última temporada del milenio, la 99/00, una vez más y será esta vez la que hace cuatro en la misma década en que los oscenses le arrebatan la cuarta posición al empatar a 65 puntos y arruinan las opciones del C.D. Teruel de aspirar a cotas más altas.
2000 – 2010
La participación en una Promoción de Ascenso llega con el nuevo milenio, siendo la temporada 00/01 la primera oportunidad al ser campeón de Tercera División por primera vez en su historia. En esta fase no tendrá suerte y será tercero tras el C.D. Alfaro y C.D. Aurrerá Ondárroa, mientras colista es el C.D. Laredo. En la edición 01/02 es subcampeón de Liga a tres puntos de la U.D. Fraga pero en la Liguilla es último muy descolgado, superado por C.D. Azkoyen, Zalla U.C. y C.D. Bezana.
Desde este momento se inicia una trayectoria descendente que le va a conducir a posiciones muy remotas alejado de los puestos de ascenso, culminando con la temporada 05/06 en la que es decimoquinto y a punto esta de perder la categoría. En la temporada siguiente 06/07, enmienda su actitud y sube puestos hasta ser sexto, mejorando ostensiblemente en la edición 07/08 en la que es tercero y opta al ascenso. En la Promoción se enfrenta al C.P. Villarrobledo al que elimina: 0-1 en casa y 0-4 en la localidad manchega; cayendo en la Final ante el C.D. Roquetas: 1-2 en casa y 1-1 en la localidad almeriense. La entidad turolense no ceja en su empeño de regresar a Segunda B y en la edición 08/09 lo intenta de nuevo tras repetir tercer puesto en Liga. En esta ocasión es superado por el C.F. Villanovense: 2-0 en la ciudad pacense de Villanueva de la Serena y 3-1 en casa, clasificándose los extremeños por el valor doble de los goles a domicilio. Será en la campaña 09/10 cuando logre por fin su objetivo de la mano de Ramón Calderé tras ser Campeón de Liga y en la Fase de Campeones elimine a la S.D. Noja: 1-1 en la localidad cántabra y la remontada por 2-1 en La Pinilla con goles de Lolo y Enric Pi, ante la alegría de su afición y seguidores.
2010 – 2020
El regreso a Segunda División B tras muchos años de ausencia es vivido con pasión por la afición local, realizando una meritoria campaña 10/11 con Ramón Calderé en la cual la plantilla no pasa excesivos problemas, hace un buen fútbol y remata su participación con un duodécimo puesto. La edición 11/12 transcurre por cauces similares a la anterior con Félix Arnáiz como entrenador y el conjunto mudéjar se mantiene alejado de las plazas peligrosas, aunque su acercamiento a las de privilegio tampoco se materializa concluyendo undécimo.
La carestía de la Segunda División B, con excesivos gastos en desplazamientos y en manutención de la plantilla afecta en pleno al C.D. Teruel quien para la temporada 12/13 cuenta con un presupuesto muy reducido respecto a sesiones anteriores. La fuga de jugadores y la contratación de nuevos sin el nivel de los anteriores hacen que pierdan potencial cerrando este periplo por la categoría en decimoctavo puesto. En la campaña 13/14, de nuevo en el Grupo XVII de Tercera División aragonés, los turolenses mantienen cierto nivel consiguiendo ser subcampeones tras el Real Zaragoza “B” por lo cual acceden a la Promoción de Ascenso a través de la ruta de no campeones de Grupo. En Cuartos de Final superan al Deportivo Alavés “B” tras empatar 1-1 en la capital vitoriana y vencer en casa por 3-2, pero en Semifinales el rival, C.D. Laredo, se muestra más poderoso y los cántabros les eliminan al imponerse 2-0 en la localidad costera y empatar 1-1 en La Pinilla.
El objetivo de los turolenses pasa a ser el ascenso con lo cual se refuerza la plantilla en aquellos puntos presuntamente más débiles. Iniciada la temporada 14/15 las expectativas son grandes y, aunque no se consigue la primera plaza, se lucha para ello quedando en poder de un sorprendente C.D. Ebro, de Zaragoza. En la Fase de Ascenso se enfrenta en Cuartos de Final al Atlético Sanluqueño C.F. saliendo mal parado puesto que, tras perder 2-1 en tierras gaditanas e imponerse en casa igualmente por 2-1, llegados a la tanda de penaltis es eliminado por el montante de 5-6 favorable a los verdiblancos. Después de dos Promociones consecutivas se busca la tercera y se encuentra al ser cuarto en la campaña 15/16 con algo de dificultad quedando nuevamente apeado en Cuartos pues, derrotado 0-2 en casa ante el Ontinyent C.F., en la localidad valenciana pierde 1-0 no produciéndose la remontada. El desarrollo de la sesión 16/17 es muy similar a la anterior pero, en esta ocasión, sin obtener el premio de poder promocionar lo cual es un relativo fracaso, destinándose todos los medios posibles en la edición 17/18 para quedar, al menos, entre los cuatro primero clasificado. Con una plantilla goleadora y bien armada, el campeonato promete paliar los recientes sinsabores materializándose finalmente el primer puesto y tercer título en la categoría, esperándole en la Eliminatoria de Campeones el Cádiz C.F. «B», rival al que derrota en la capital andaluza por 0-1 y con el que empata 0-0 en casa fraguando un ascenso ante el delirio de sus seguidores.
Contando con el técnico Dani Aso para dirigir al conjunto rojillo en su regreso a Segunda División B, los turolenses participan en la temporada 18/19 en el Grupo III junto a aragoneses, valencianos, baleares y catalanes en un competido grupo donde, a pesar de su esfuerzo, no logran abandonar los puestos de cola finalizando decimoséptimos a tres puntos de la salvación matemática por lo que, después de una breve estancia, descienden a Tercera División. Emplazado en el Grupo XVIII aragonés, la campaña 19/20 resulta un intenso mano a mano con la S.D. Tarazona por quedar en primer lugar pero, la crisis sanitaria estallada en marzo de 2020, provoca que la Federación Española suspenda el campeonato restando por disputar once jornadas. A medida que transcurren los meses no hay fútbol en esta categoría y, llegados a junio, se aprueba que los cuatro primeros luchen en julio por una plaza en superior categoría mediante eliminatorias a un solo encuentro y con cruces entre clubs de la misma federación territorial. Teniendo como rival al C.D. Brea, los rojillos caen sorprendentemente en Semifinales por 1-2 significando su adiós al ascenso.
2020 – 2030
Coincidiendo con el inicio de la nueva década, la Federación Española decide antes de empezar la temporada 20/21 y en plena crisis sanitaria crear en un futuro inmediato dos nuevas categorías tituladas Primera División RFEF y Segunda División RFEF que vienen a sustituir las clásicas Segunda División B y Tercera División a las que se añade un nueva denominada Tercera División RFEF. Para establecer los ascensos y descensos se idea un complicado sistema competitivo con subgrupos y posteriores clasificaciones con distintos niveles quedando el C.D. Teruel primero del Subgrupo A y, a continuación, campeón de Liga en la Fase de Ascenso por lo que accede por la vía rápida a la nueva Segunda División RFEF, categoría que toma el cuarto nivel nacional estrenándose los rojillos en la campaña 21/22 dentro del Grupo III. Compartiendo destino con catalanes, aragoneses, baleares más la presencia del C.D. Numancia de Soria, el rendimiento es elevado concluyendo en cuarto puesto, plaza que le permite promocionar para tratar de acceder a Primera División RFEF con eliminatorias a encuentro único. Enfrentado al C.P. Cacereño en Semifinales se cosecha una abultada victoria por 0-4 que promete mucho y desata la ilusión pero, ya en la Final y tras llegar a la prórroga, se cede 0-2 ante la A.D. Mérida escapándose el ascenso.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Segunda División B “Historia de los clubs que nunca la sobrepasaron”. Vicent Masià Pous (2007).
Anuarios de la RFEF.
“Linajes del fútbol español”. Vicent Masià Pous (2016).
ESCUDOS DEL CLUB DEPORTIVO LA MUELA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CLUB DEPORTIVO LA MUELA. EVOLUCIÓN HISSTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN LA MUELA:
La localidad zaragozana de La Muela es un municipio cercano a la capital que en las dos últimas décadas ha experimentado una transformación espectacular, gracias a la implantación en su término de numerosos parques eólicos, un gran polígono industrial y a un sinfín de residencias urbanas.
Próxima a contar con apenas mil habitantes a lo largo de todo el siglo XX, los primeros escarceos con el fútbol federado fueron registrados en 1966 con la creación del primitivo Club Deportivo La Muela, una entidad que empezó en la categoría más baja del fútbol aragonés, la Tercera Categoría Regional, y que logra ascender a Segunda Categoría la sesión 71/72 con Prudencio Gimeno Sánchez al frente del club. El club muelano acaba desapareciendo en 1978 ante la falta de jugadores y su extrema humildad, manteniéndose con vida apenas poco más de una década.
HISTORIA DEL CLUB:
2005 – 2010
La evolución del tiempo y la llegada de numerosas personas al municipio atraídas por su prosperidad han desembocado en un crecimiento poblacional que hoy rebasa los cinco mil habitantes, surgiendo con este movimiento la idea de crear un club de fútbol en el cual alojar una escuela local para formar a niños en categorías inferiores y paralelamente tener un equipo profesional que pasee el nombre de la localidad por la geografía nacional. Esta idea nace tras construirse en 2004 un recinto deportivo municipal que recibe el nombre de Campo Municipal Clemente Padilla, que cuenta con unas instalaciones deportivas inmejorables para la práctica del fútbol con césped artificial, surgiendo la idea de retomar la actividad futbolística del club desaparecido a finales de los setenta.
La idea de constituir un club representativo se desarrolla en 2005 gracias a Víctor Pinilla, hermano de la alcaldesa, bajo el nombre de Club Deportivo La Muela, el cual es inscrito en el Registro de Entidades Deportivas de Aragón el 7 de septiembre de 2005, y siendo elegidos los colores de la entidad gualdinegros. El C.D. La Muela se inscribe en la Federación Aragonesa debutando en Segunda Regional en la edición 05/06, consiguiendo exitosamente el ascenso a Primera Regional tras quedar Campeón del grupo segundo dirigidos por Víctor Pinilla. En esta categoría debuta en la campaña 06/07 siendo Campeón del grupo tercero, encadenando su segundo ascenso consecutivo que le permite alcanzar la Regional Preferente, categoría en la que también sobresale y al término de la edición 07/08 enlaza con la Tercera División al proclamarse nuevamente Campeón dentro del grupo primero, ello gracias a una ambiciosa política de fichajes, insólita en un municipio tan pequeño, a base de golpe de talonario con buenos sueldos y mejores ofertas.
El paso a esta categoría se presupone como definitivo en la entidad jalonera, pero la ambición de los gualdinegros es notoria y en su estreno de la campaña 08/09 ocupan el cuarto puesto ante la sorpresa de sus contrincantes. Este puesto le permite disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División B en la que se encuentra con el C.D. Mirandés y ante el cual obtiene escasa renta, perdiendo ambos encuentros de la eliminatoria: 1-3 en casa y 4-1 en Miranda de Ebro.
En la temporada 09/10 refuerza su plantilla con jugadores de la talla de Rubén Falcón ó Goran Drulic, y la entidad que preside Javier Mur Pintre se propone dar el salto definitivo a Segunda División B siendo elegido como entrenador Emilio Larraz López. En la Liga se obtiene la segunda plaza en litigio con veintiocho victorias, seis empates y tan sólo cuatro derrotas, a cuatro escasos puntos del líder C.D. Teruel. En la Promoción de Ascenso el club gualdinegro echa el resto y elimina al C.D. Marino: 0-2 en la localidad tinerfeña de Los Cristianos y 1-0 en casa. En semifinales se enfrenta al C.D. Constancia: 0-1 en Inca y 1-1 en casa, llegando la eliminatoria final que le empareja con el C.C.D. Cerceda. En esta decisiva fase empata 2-2 en la localidad lucense, resolviendo el ascenso en casa al imponerse 1-0 en las postrimerías del encuentro con gol de Cristian.
2010 – 2011
Durante el verano de 2010 se especula con mantener algún trato de favor respecto al Real Zaragoza en forma de cesión de jugadores, pero la negativa del conjunto maño es tajante y los gualdinegros han de conformar un presupuesto y plantilla ajustados a sus límites para afrontar el nuevo reto en su debut en la categoría de bronce. El encargado de dirigir al equipo la sesión 10/11 será Eduardo “Gori” Silva, siendo presidente Miguel Abbas. Este, tal y como se esperaba, se ciñe a las previsiones y se ficha a gran cantidad de jugadores: los porteros Pato Guillén y Zaparáin; los defensas: Tonet, Barreda, Hervías, Javi Suárez, Fausto, y Pepe Plá; los medios: Rubén Royo, Fran Suárez, Josete Abarca, Charly Martínez, Galdós y Montejo; y a los delanteros: David Mainz, Pablo Rodríguez y Moisés.
Aunque existe una clara y notable diferencia entre la primera y segunda vuelta, mostrándose ambicioso en el primer tramo liguero con aspiraciones de permanencia y caótico el segundo, con un equipo desangelado que pierde numerosos puntos. La crisis no se hace esperar y en noviembre a punto está el club de no seguir disputando la competición ante la falta de ayudas incumplidas por parte del consistorio muelano, envuelto en un escándalo de corrupción. A finales del mes de diciembre el empresario Luis Oliver llega al club con la intención de sanar las deudas y abrir una nueva etapa económica en el equipo zaragozano, siendo elegido como nuevo presidente a Fernando Puertas.
Sin embargo, las promesas de la nueva directiva no se cumplen y los jugadores dejan de entrenar en el mes de marzo debido al impago de varias mensualidades, repercutiendo en el estado de la plantilla y llevando finalmente al descenso deportivo tras ser decimoséptimo. A esto se une un posterior descenso administrativo por impago a jugadores, desplomándose el club gualdinegro hasta la Regional Preferente, una categoría que tampoco puede afrontar inmerso en graves problemas económicos y le hace partir de Segunda Regional en la campaña 11/12. Sin embargo, el club no llega a disputar un sólo encuentro tras retirarse definitivamente de la competición y disolverse.
El 27 de julio de 2012 se funda el C.F. Recreativo La Muela con Agustín Navarro Fábregas en la presidencia del nuevo club gualdinegro, el cual toma el relevo futbolístico de la localidad. El 2 de agosto quedará inscrito en el Registro de Entidades Deportivas de Aragón, debutando la sesión 12/13 en Tercera Regional y finalizando séptimo. La siguiente temporada 13/14 mejorará el puesto siendo Campeones de grupo.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Segunda División B “Historia de los clubs que nunca la sobrepasaron”.Vicent Masià Pous (2010).
ESCUDOS DE LA SOCIEDAD DEPORTIVA HUESCA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DE LA SOCIEDAD DEPORTIVA HUESCA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN HUESCA:
La ciudad aragonesa y bimilenaria de Huesca, situada al norte de la región en los límites de las sierras exteriores de los Pirineos y cruce tradicional de caminos, es la capital de la provincia homónima y de la comarca de La Hoya, habiéndose especializado en el sector servicios y preferentemente comercial como cabeza de una provincia de la que aglutina un cuarto de su población. Con cierta dedicación a la industria y conservación de labores agrarias debido a las características de su geografía, en los últimos tiempos la ciudad ha sabido dinamizarse y abrirse al turismo exponiendo su patrimonio cultural y proximidad a los Pirineos.
En cuanto al fútbol se refiere, es la ciudad de Huesca pionera a la hora de introducir la práctica de este deporte en Aragón, promoviéndose por miembros de la Sociedad Velocipedista Oscense en 1902 los primeros tanteos en el Campo de la Estación que, debido a la falta de interés por el resto de componentes, quedan en nada. Demasiado pronto para triunfar, el momento idóneo llegará apenas unos años después, concretamente en 1910 cuando, atentos a lo que ocurre en el resto del país y los distintos Campeonatos de España iniciados en 1903 que ocupan a la prensa, grupos de jóvenes locales decidan dar rienda suelta a una actividad deportiva que empieza a coger auge en institutos de secundaria como medida higiénica. De este modo el 10 de abril y en el Campo de la Cabañera, se dan cita dos contendientes que obedecen a los títulos de El Ideal, formado por alumnos de la Escuela Normal de Magisterio Oscense y Club Sertorius, formado por estudiantes del Instituto Provincial de Educación Secundaria en lo que es el primer encuentro formal.
De la unión de unos y otros, al poco tiempo se constituye la primera sociedad seria de la ciudad, el Huesca Sport Club, uniformado con camisa blanca y pantalón negro que concurre habitualmente al Campo de la Cabañera para realizar sus ensayos. Entrenados e ilusionados como pioneros en la provincia, fruto de sus inquietudes en el mes de agosto consiguen del ayuntamiento que se les incluya en el programa de las Fiestas de San Lorenzo, patrón local, convocándose un concurso de ámbito provincial al que, lamentablemente, no se suma nadie en unos tiempos en los que el balompié todavía es un desconocido abriéndose camino. Sin rival al que enfrentarse y obligados a cumplir con el compromiso adquirido, los miembros de la sociedad oscense optan por dividirse en dos equipos luciendo unos una banda diagonal roja mientras los otros eligen una banda diagonal morada. El fútbol da su pistoletazo de salida, surgiendo en 1911 el Hibernia Foot-ball que tendrá un carácter efímero.
A medida que avanzan los años, en Huesca comienza a despegar este deporte y para las Fiestas de San Lorenzo de 1913, el Huesca S.C. abre las puertas para la visita de clubs forasteros disputándose un memorable encuentro frente a la Sociedad Gimnástica Zaragozana, sociedad venida desde Zaragoza con la que se establece un resultado final de 9-0 favorable para los locales. En el año 1915 surgen otras dos entidades, el Atlético Osca y el Stadium F.C., sociedad esta última quien utiliza por primera vez los colores azul y grana en su camiseta. Antes de finalizar la década, después de haberse extinguido el Huesca S.C. y fruto del apogeo del fútbol en todo el país, surge el Club Deportivo España, sociedad que juega en el Campo de la carretera de Apiés y emplea camisa roja con pantalón blanco, recibiendo en 1925 gracias a la gestión de la directiva presidida por Manuel Banzo Echenique el título de Real por lo que cambia su denominación pasando a ser conocido como Real Club Deportivo España.
Casi de forma paralela a la carrera iniciada por los españolistas, transcurre la del Bosco F.C., subsistiendo en activo iniciado 1922 hasta cuatro clubs en la capital altoaragonesa; Atlético Osca, Stadium F.C., C.D. España y Bosco F.C. que contenderán en un torneo organizado con motivo de las fiestas locales en honor al patrón San Lorenzo. Fruto de estos encuentros y después de llegar a un acuerdo, el 20 de septiembre de 1922 queda constituido el Huesca Foot-ball Club, sociedad nacida de la fusión entre Atlético Osca y Stadium F.C. que, para su uniforme, emplea los colores azulgranas con pantalón negro de los stadiumnistas. Con Santos Solana Pérez como primer presidente electo del club, la nueva sociedd jugará en el interior del Velódromo de la Alameda protagonizando una gran rivalidad con el Real C.D. España. En 1924, bajo la presidencia de Lorenzo Fuyola y un plantel de jugadores nacidos todos en la localidad o localidades de su ámbito provincial, el Huesca F.C. se adjudica el Campeonato de Aragón de Primera Categoría Grupo B superando a la U.S. Aragón, de Zaragoza, título que consolida la práctica de este deporte e incita a muchos aficionados a seguirlo de forma apasionada.
En 1926, debido al incremento de sus seguidores, reducidas dimensiones y escasas condiciones del Velódromo de la Alameda abierto en 1897, los azulgranas inauguran el 12 de marzo el Campo de Villa Isabel situado junto a la carretera de Zaragoza en un partido donde se invita al potente F.C. Barcelona con resultado final de empate 2-2 que reúne una gran cantidad de espectadores por la fama del rival. Posteriormente, el 29 de octubre de 1927, este terreno de juego será inhabilitado por la Federación Aragonesa durante un periodo de tres meses a raíz de los graves incidentes acaecidos el 23 de octubre en un encuentro del Campeonato Regional frente al Real Zaragoza C.D. en el que es agredido por la afición local el colegiado Sr. Arribas tras un pésimo arbitraje y, fuera ya del recinto, se mantienen refriegas entre los aficionados locales quienes persiguen a los zaragocistas hasta la estación de ferrocarril donde deben ser protegidos por la guardia de asalto. El conjunto oscense, ante tal decisión que considera totalmente injusta por no poder controlar los ánimos de sus seguidores, decide retirarse del Campeonato y de la Federación Regional al entender cierto favoritismo federativo hacia los clubs zaragozanos y animadversión hacia el fútbol oscense, quedando libres todos sus jugadores los cuales pasan a engrosar las filas de otros equipos.
Llegados a 1929 los dos principales clubs locales, Huesca F.C. y Real C.D. España llevan años desaparecidos, surgiendo entonces el Club Deportivo Oscense, sociedad que nace con fuerza y desde el Campo de Villa Isabel, conquista el Campeonato Regional de Aficionados de 1931 brillantemente superando varias eliminatorias hasta alcanzar la Final del Campeonato de España, intenso evento que pierde el 21 de junio de 1931 ante el vigués Ciosvín F.C. por el resultado desfavorable de 1-4 en encuentro disputado en el Campo de Chamartín, de Madrid. Al igual que su predecesor, el Huesca F.C., el C.D. Oscense también vestirá camiseta azulgrana con pantalón negro. En 1931, movido por la presión popular, la directiva del club decide cambiar su denominación dejándolo en Club Deportivo Huesca y durante la temporada 32/33 incluso llega a participar en la Fase de Tercera División junto a Club Atlético Aurora, de Pamplona, Zaragoza C.D. y C.D. Alkartasuna, de Tafalla, un torneo por entonces eliminatorio de carácter suprarregional establecido por la Federación Española para dilucidar qué clubs ascienden a Segunda División.
Desde 1932, con un deporte más asentado que suma adeptos constantemente, el C.D. Huesca cuenta con un nuevo rival local titulado como Club Ciencia y Deportes, sociedad que emplea desde sus inicios el Campo de la carretera de Apiés, viste camisa grana con pantalón negro y acaba comiéndole pronto el terreno a los del Club Deportivo hasta el punto de que los azulgranas, concluida la temporada 33/34, entran en un profundo declive que se asevera mediado 1934 causando la desaparición del C.D. Huesca por causas fundamentalmente económicas debido a la escasa masa social que le apoya.
Avanzado 1935, tras varias conversaciones mantenidas por distintos aficionados, el fútbol parece renacer en la capital altoaragonesa quedando formada el 30 de octubre una comisión encargada de constituir una nueva sociedad. Presidido por Mariano Palacio, en fecha 17 de diciembre queda constituido el nuevo Huesca Fútbol Club -sin relación alguna con el club del mismo nombre existente entre 1922 y 1927-, sociedad que al igual que las anteriores, viste camiseta azulgrana con pantalón negro haciendo uso del Campo de Villa Isabel como feudo deportivo. Adherido a la Federación Aragonesa, el Huesca F.C. permanecerá alejado de las primeras categorías debido a su fragilidad competitiva y financiera durante su primer año de vida, dedicando su principal cometido a fomentar el fútbol y disputar encuentros frente a clubs de su zona de influencia y de la capital regional preferentemente hasta que en julio de 1936 estalle la Guerra Civil.
Dividido Aragón en dos frentes quedando la parte occidental en manos del Ejército Nacional y la parte oriental en las del Ejército Republicano, la práctica del fútbol y, por supuesto, a nivel oficial, fue imposible suspendiéndose todas las actividades durante un largo periodo de varios años. Tomada la ciudad por las tropas nacionales desde el principio, su interés estratégico ocasionó que durante 611 días consecutivos fuese hostigada por las tropas republicanas en lo que se convirtió en el asedio más prolongado a una localidad durante el conflicto, terminando todo en marzo de 1938 cuando cae el Frente de Aragón.
A finales de 1938, concretamente en diciembre, la capital altoaragonesa ha recuperado parte de su estabilidad y en medio de un ambiente de circunstancias, el Huesca F.C. empieza a reorganizarse quedando definida su nueva Junta Directiva en enero de 1939 con vistas a participar junto a Club Atlético Osasuna, de Pamplona, C.D. Logroño, Zaragoza F.C. y el militar Aviación Nacional, de Zaragoza, en un campeonato regional para restablecer la práctica deportiva lo antes posible.
Finalizada la guerra el deporte en Huesca, como en el general de las localidades españolas, pasa a estar tutelado por el Frente de Juventudes siendo los camaradas de Falange quienes se encarguen de movilizar a la juventud creando equipos y organizando torneos para el fomento físico. A lo largo de 1939 y 1940 nacerán Sporting, Nacional, Hispania del F.J., Juventud, Oscense, C.D. Español del F.J. y la Organización Juvenil del F.J., estableciéndose torneos locales de donde saldrán jugadores que ingresen en el máximo representante local. En noviembre de 1940 la D.N.D. nombra a Manuel Ezquerra Jiménez presidente del Huesca F.C., preparándose una plantilla competente para debutar en el Campeonato de Primera Categoría de la temporada 40/41. Prohibido por Ley el uso de extranjerismos en las denominaciones de las sociedades deportivas, siendo el club oscense una sociedad polideportiva que engloba varias disciplinas en el Parque Deportivo de Villa Isabel, a partir del 1 de enero de 1941 pasa a ser conocido como Club Deportivo Huesca.
El C.D. Huesca tendrá una vida tranquila durante las temporadas 41/42 y 42/43 siendo que, una vez finalizada esta última, se hace oficial la venta de la parcela que ocupa Villa Isabel para la construcción de un complejo de viviendas. Amenazada la ciudad de quedarse sin recinto deportivo, el delegado provincial de Educación y Descanso, capitán Gaspar Lahoz Martín, asume el mando reclamando a las autoridades nacionales fondos para construir un nuevo campo. Para tener más fuerza, nada más empezar 1943 Lahoz cita a los dos clubs locales federados, C.D. Huesca y C.D. Español, con el fin de constituir una nueva sociedad polideportiva donde tengan ambos representación y, de paso, se alberguen otras disciplinas necesitadas de un espacio público, quedando el 19 de enero definitivamente constituida la nueva Unión Deportiva Huesca.
Presidida por el capitán Lahoz, la U.D. Huesca adopta los colores azulgrana con pantalón azul del C.D. Huesca y el escudo del C.D. Español, un club dedicado exclusivamente a la práctica de baloncesto que había sido constituido el 22 de noviembre de 1941 y competía en el campeonato regional con éxito gracias al trabajo de Anselmo López Martín, inspector de hacienda y amante de este deporte que, natural de Ávila y procedente de Barcelona donde se había instalado su familia durante los años veinte, antes del conflicto había militado en la sección de baloncesto del R.C.D. Español.
Haciendo uso inicialmente del Campo de Villa Isabel, esta entidad se convertirá en la más exitosa de cuantas han existido en la ciudad hasta esa fecha, inaugurando en 1945, gracias a la intervención de Educación y Descanso quien se declara propietaria, el Campo de San Jorge bajo usufructo para permanecer diez temporadas en Tercera División, sumando dos títulos de la categoría y consiguiendo debutar en Segunda División durante la campaña 50/51, división en la que resistirá tres temporadas consecutivas hasta que descienda al término de la sesión 52/53. A partir de este descenso se luchará por recobrar la categoría recién abandonada, invirtiéndose grandes sumas de dinero que no darán los resultados apetecidos y, arruinado y una deuda de seiscientas mil pesetas, consumarán la desaparición del club en el verano de 1956. Entre 1956 y 1960 será el modesto Agrupación Deportiva Santiago quien represente a la ciudad en competición oficial.
HISTORIA DEL CLUB:
1960 – 1970
Después de varias conversaciones mantenidas a lo largo de marzo en el Bar Flor, por fin el 31 de marzo de 1960 se conseguía constituir un nuevo club, la Sociedad Deportiva Huesca, entidad que vestiría como sus antecesores con camisa azulgrana y pantalón azul. El viernes 8 de abril el club se inscribe en la Federación Aragonesa y el martes 12 se reúne la junta directiva dirigida por Patricio Funes. En la primera temporada de la S.D. Huesca en competición oficial, 60/61, se juega en Primera Regional Preferente, consiguiendo ascender como Campeón a Tercera División. En la temporada 61/62 se obtiene el undécimo puesto, salvándose con apuros del descenso y gracias a resultados de otros equipos. En la campaña 62/63 acaba en segunda plaza, pero en la Fase de Ascenso a Segunda División son eliminados por el Arenas Club de Guecho de “Piru” Gainza. Pese al 1-0 obtenido en el partido de ida, en la vuelta pierden por 5-1. En la campaña 64/65 se juega de nuevo la Fase de Ascenso al ser segundo en Liga. Esta vez será la S.D. Eibar el que impide el cambio de categoría ya que ganará ambos encuentros: 0-3 en San Jorge y 4-1 en Ipurúa.
En la campaña 66/67 se logra el Campeonato en la Tercera División, pero en la Fase de Ascenso el Bilbao Atlético le priva de nuevo del éxito. Empate a cero en San Jorge y derrota por 1-0 en San Mamés. En la siguiente temporada 67/68, se repite la conquista del título, pero una vez más en la Promoción resulta eliminado. En esta ocasión con más sufrimiento, pues se vence a la Cultural y Dep. Leonesa por 2-1 en casa y se pierde 1-0 en León. El partido de desempate disputado en León se pierde por 2-0. En esa misma temporada se comprarán 26.000 m² para la ubicación del nuevo campo, gracias a la venta del jugador Porta al Granada C.F. por el montante total de trescientas cincuenta mil pesetas.
1970 – 1980
Desde la temporada 68/69 hasta la 72/73, la S.D. Huesca va poco a poco de mal en peor. En la campaña 70/71 es decimotercero y se juega la permanencia con la S.D. Ilintxa, la cual se gana pese a los apuros del partido de vuelta: 5-1 en San Jorge y derrota por 3-0 en Legazpi. En la sesión 71/72 se salvará al final de disputar la Promoción y del descenso, hasta que finalmente en la campaña 72/73 se desciende al ser decimotercero y perder la permanencia con el C.D. Guadalajara, quien le derrota 2-0 en la ida y al que gana por un insuficiente 2-1 en casa. El 16 de enero de 1972 se inaugura frente al Deportivo Aragón con resultado final de 2-1 para los oscenses el nuevo Estadio El Alcoraz, campo que viene a sustituir el vetusto San Jorge. Durante la temporada 73/74 se consigue de nuevo el ascenso a la Tercera División tras ser Campeón de Regional Preferente. Ese mismo año se juega la Copa de España de Aficionados, eliminando a equipos de la talla del Barcelona Atlético y llegando a la Final disputada a doble partido contra el Deportivo Aragón, quedando en la ida empatados a cero en La Romareda con arbitraje del recordado Guruceta Muro. El partido de vuelta se disputa el 6 de junio de 1974 con un lleno hasta la bandera, y finalizará con un resultado de 3-0 a favor del equipo azulgrana. Llegaba así el primer trofeo a nivel nacional del club.
En la temporada 74/75 se salva la categoría gracias a la eliminatoria de permanencia que se juega contra el C.F. Sporting Mahonés: 4-1 en casa y derrota por 2-0 en Mahón. Durante la temporada 75/76 se es subcampeón, mientras que en la Fase de Ascenso cae eliminado ante la U.D. San Andrés: empate a uno en la ida y derrota por 2-1 en Barcelona. En la edición 76/77 se produce de nuevo un cambio de presidente, siendo Joaquin Sarvisé el nuevo responsable azulgrana. La S.D. Huesca alcanza la séptima posición que le permite subir de categoría gracias a la remodelación del fútbol español, accediendo a la Segunda División B. En la temporada 77/78 se mantiene la categoría con Luis Costa como entrenador. Al inicio de la campaña 78/79 tiene que despedir a los jugadores más caros por la grave situación económica que atraviesa el club. En esta misma temporada llega a la S.D. Huesca el meta Paco Buyo, que posteriormente jugará en el Sevilla F.C. y Real Madrid C.F. de Primera División, siendo además internacional absoluto. El conjunto azulgrana obtiene la decimotercera posición.
1980 – 1990
Llegados a 1980 la ciudad altoaragonesa casi ha duplicado su población respecto a las últimas décadas acercándose a los cuarenta y cinco mil habitantes. Futbolísticamente su máximo representante, la S.D. Huesca, vive al hasta entonces mejor momento deportivo acomodado en el tercer nivel nacional, la Segunda División B, deseando alargar todo lo posible su estancia en esta categoría en la cual, dada su condición de club modesto, debe luchar cada temporada al máximo de sus posibilidades para mantenerse. De este modo, en las campañas 79/80 y 80/81 se aguanta la plaza acabando en el puesto decimocuarto y decimoséptimo respectivamente, mientras que en la edición 82/83 se mejora la clasificación ocupándose un discreto decimosegundo puesto. En el aspecto financiero, los costes que le acarrea militar en una categoría tan exigente en lo económico y en lo deportivo como es la Segunda División B, inevitablemente le pasa factura acumulándose una deuda que ronda los cerca de cuarenta millones de pesetas. Los acreedores, deseosos de cobrar lo que les corresponde, exigen al club azulgrana que se cumplan los pagos, circunstancia ésta que asfixia por completo la tesorería hasta el punto de no haber dinero para pagar los emolumentos de una plantilla que es, en la práctica, totalmente profesional.
La temporada 83/84 comienza con un nuevo presidente, Juan Luis Larrosa, quien ha de hacer frente a un imposible económico que deriva, como se temía, en la pérdida de la categoría debido a la confección de una plantilla que no está a la altura, se debate en muchos problemas y concluye en decimonoveno puesto. Por si fuera poco, para subsistir, se ha de subastar el Estadio de El Alcoraz para saldar, en la medida de lo posible, una deuda que extraordinariamente se ha disparado hasta los cincuenta millones de pesetas, salvándose milagrosamente los muebles gracias a la intervención plausible de los socios quienes, en una derrama extraordinaria, consiguen la titularidad de los terrenos.
Arrastrado a competir en Tercera División, el club oscense ingresa durante la sesión 84/85 en el Grupo IV en el cual militan los clubs pertenecientes a la Federación Aragonesa, donde tienen cabida también los clubs sorianos y los de la Federación Navarra que incluye, además de los propios, a los riojanos por entonces aun no segregados. Cambiados los papeles, a diferencia de la Segunda División B donde es uno más, en esta categoría los azulgranas se convierten en un equipo a batir por su potencial resultando, como se esperaba, Campeón con holgura respecto al segundo y tercer clasificados. Clasificado para disputar la Promoción de Ascenso, se elimina en primera instancia al C.D. Cieza: 2-0 en El Alcoraz y derrota por 1-0 en la vuelta; pero no puede con el Real Burgos C.F.: 1-0 en la ida y empate 0-0 en Huesca perdiéndose la oportunidad de regresar a la división de bronce. En la edición 85/86 es subcampeón de Liga tras el Club Atlético Osasuna Promesas con Néstor Gavín de presidente, pero en la Promoción cae eliminado en Primera Ronda ante el C.D. Maspalomas, conjunto canario con el cual empata 0-0 en El Alcoraz y cae derrotado por 2-0 en el encuentro de vuelta.
En 1986 la R.F.E.F. decide dar autonomía propia a los integrantes del Grupo IV y reasigna respectivamente el Grupo XV para los clubs pertenecientes a la Federación Navarra y el Grupo XVI para los de la Federación Aragonesa perdiéndose un tanto por cien de potencial competitivo. A pesar de que la S.D. Huesca sale beneficiada con esta medida teóricamente al quedar su camino expedito de posibles rivales, lo cierto es que no se aprovecha tal circunstancia favorable puesto que la temporada 86/87, cuando además se le otorgan a la Federación Aragonesa tres plazas para cubrir puestos en la recién ampliada Segunda División B, los azulgranas en un mal año quedan séptimos. En medio de una situación deportiva que no es la mejor, en la campaña 88/89 se alcanza la cuarta plaza en Liga, aunque muy alejado del primer clasificado, U.D. Barbastro, revertiendo todo en la edición 89/90 cuando, con una excelente plantilla, ahora sí se consigue el ascenso directo, sin mediar Promoción, a Segunda División B gracias a ocupar el primer puesto con relativa holganza.
1990 – 2000
Rebasado 1990 la ciudad de Huesca supera escasamente las cincuenta mil almas presentando, acorde a los nuevos tiempos, una imagen más cosmopolitana. Más dinámica que antaño, la sociedad oscense desea que su primer representante haga un buen papel en el tercer nivel nacional y no se sufra tanto como en el pasado reciente, sueño este último difícil de cumplir en una categoría atractiva en lo deportivo, pero excesivamente cara en lo económico que causa estragos en el bolsillo de los club modestos.
El reestreno en Segunda División B, campaña 90/91 en lo que es su segundo ciclo dentro de esta categoría, resulta bastante discreto finalizando en decimotercero puesto pero con la satisfacción de haber cumplido con la permanencia. En la siguiente campaña, 91/92, sin embargo, el torneo no es tan halagüeño y con un plantel que no rinde como se esperaba, el club oscense desciende a Tercera División con un triste balance de siete victorias. Vestido con el traje de equipo ascensor, la S.D. Huesca vuelve una vez más al cuarto nivel nacional compitiendo en el Grupo XVI aragonés donde se espera que, en consonancia a su talla, ocupe los primeros puestos y pueda promocionar para regresar a la categoría recién perdida. Los azulgranas no defraudarán en el punto inicial puesto que, en la campaña 92/93, suman su quinto título pero sí en el segundo dado que el buscado ascenso no llega al ser superados en la Promoción por C.D. Touring y C.D. Calahorra mientras la última plaza es para el Mondragón C.F. En la temporada 93/94, como sucediera en el torneo anterior, el club altoaragonés se proclama Campeón añadiendo su sexto entorchado de la categoría a sus vitrinas, resultando la Promoción un nuevo traspiés pues se cede el ansiado ascenso a una sociedad más en forma como la S.D. Gernika. Real Racing Club de Santander “B” y U.D.C. Chantrea serán los rivales que, con la misma suerte, cierren el grupo.
En la campaña 94/95 la directiva azulgrana se hace con un ramillete de buenos jugadores con el propósito de dar el salto definitivo. La Liga, como era de esperar, no es sencilla manteniendo un fuerte pulso con el C.D. Endesa Andorra, el Campeón y Utebo F.C., tercer clasificado entre los cuales, respectivamente, hay apenas un punto de diferencia. Subcampeón del Grupo XVI, en la Promoción se depositan grandes expectativas pero con los pies en el suelo ante el conocimiento de que el reto es complicado. Disputada la liguilla pertinente, esta vez sí se asciende al comandar el grupo que integran C.D. Calahorra, C.D. Tropezón y C.D. Hernani, estallando la afición que acude cada domingo al Estadio de El Alcoraz ansiosa de competir en categoría superior. De nuevo en la élite del fútbol modesto semiprofesional, la S.D. Huesca concurre la temporada 95/96 en Segunda División B siendo partícipe del Grupo III donde se encuentran los clubs aragoneses, catalanes, baleares y valencianos concluyendo decimoquintos, con el agua al cuello y un punto sobre el descenso. La campaña 96/97, con un plantel similar al año anterior, discurre en el Grupo II con los clubs vascos, navarros, aragoneses, riojanos y castellano-leoneses en los mismos parámetros pero con la salvedad de que finaliza decimosexto y ha de defender su plaza en una Promoción para evitar el descenso. En esta fase de prolongación no aprovecha su primera oportunidad de salvación ante el Getafe C.F. puesto que, después de vencer 2-1 en casa, en la localidad madrileña será derrotado un contundente por 4-0 en la vuelta, consumándose el desastre en la segunda y final ante la A.D. Mar Menor, rival con el que se empata 1-1 en El Alcoraz y cae con estrépito en la vuelta por un doloroso 5-0.
En la edición 97/98 toca competir en Tercera División. Los malos resultados obtenidos y la mala marcha económica complican la elaboración de la plantilla y al final, con más problemas de lo debido, se reúne un grupo de jugadores que casi precipitan al club a Regional Preferente después de concluir en decimoséptima plaza, múltiples problemas y siempre mirando de reojo los tres últimos puestos. Preocupados con lo sucedido, en 1998 se toman acciones correctivas y el plantel azulgrana es quinto en la campaña 98/99 estando a un paso de promocionar, fase en la que sí se colará en la sesión 99/00 cuando, segundo en Liga tras la U.D. Fraga, opte al ascenso aunque sin opciones realesal ser superado por todos sus rivales siendo colista precedido por S.D. Eibar “B”, S.D. Noja y C.D. Mirandés.
2000 – 2010
El cambio de década y siglo traerá a Huesca importantes cambios en los aspectos social y deportivo aunque, como ahora veremos, habrá que esperar a que se produzcan. Para empezar se comienza con una interesante Liga 00/01 en la que el club azulgrana es cuarto pasando a disputar la Promoción. En esta Fase a priori no existe gran confianza puesto que el cuarto puesto en el Grupo XVI y el fútbol desarrollado invitan poco al optimismo pero, a medida que avanza la Liguilla, los buenos resultados permutan rápidamente todo lo previsto y se obtiene el ascenso a la Segunda División B después de superar a S.D. Lemona, C.D. Mirandés y S.D. Textil Escudo. Reencontrado con el tercer nivel nacional, la temporada 01/02 se desarrolla en el Grupo II junto a clubs aragoneses, catalanes, vascos, navarros y riojanos sumando ventitres derrotas, negativo balance que le conduce al decimonoveno puesto y a perder la categoría demasiado rápido. En Tercera División nuevamente, la campaña 02/03 resulta muy competida ocupando la segunda plaza a un punto de distancia de la U.D. Fraga, el Campeón, siendo la Promoción de Ascenso esquiva al ser superado por C.D. Mirandés y S.D. Lemona mientras colista es el cántabro C.D. Tropezón, de Tanos.
Durante la temporada 03/04 la directiva sigue, como ya sucediera en las décadas anteriores, con el deseo de subir de categoría, manteniéndose el bloque anterior y consiguiéndose in extremis el cuarto puesto. Previamente, a mitad de campaña, debido a los malos resultados se destituye al entrenador Txuma Martón para ver si así reacciona la plantilla. Clasificado para la disputa de la Promoción, la fortuna estará de su lado y después de eliminar primeramente a la S.D. Noja, 2-0 en casa y derrota por 1-0 en la localidad cántabra, en la Final se dará cuenta de la S.D. Eibar “B” ganando 1-0 en casa y una semana después en Ipurúa por 1-2 logrando volver al tercer nivel nacional. De regreso a Segunda División B la campaña 04/05 se disputa en el Grupo III compuesto por clubs catalanes, aragoneses, navarros y valencianos siendo décimo, cambiándose prácticamente toda la plantilla para la edición 05/06 en la que, dentro del mismo grupo, es decimosexto debiendo disputar una Promoción de Permanencia con el Castillo C.F., con quien empata 0-0 en El Alcoraz y 1-1 en San Bartolomé de Tirajana, salvando la categoría por el valor doble de los goles obtenidos a domicilio. En esta temporada, pese a los problemas presentados durante la Liga, el club azulgrana termina subcampeón de la Copa Federación al caer en la Final frente a la U.D. Puertollano: empate 1-1 en la ida disputada en El Alcoraz y derrota por 2-0 en el encuentro de vuelta jugado en la localidad castellano-manchega.
En la temporada 06/07, con Armando Borraz Alcubierre en la presidencia, un equipo renovado y buenos fichajes, el club oscense es subcampeón del Grupo III quedando a tres puntos del Campeón, Alicante C.F., consiguiendo varias décadas después disputar una Promoción de Ascenso a la división de plata. En esta Fase que tanta ilusión despierta en la ciudad, el primer plantel azulgrana consigue eliminar en Semifinales al C.F. Palencia tras empatar 1-1 en la capital castellano-leonesa y ganar 2-1 en Huesca. En la gran Final, donde se enfrenta a un temible Córdoba C.F., la suerte no le acompaña terminando perdiendo 2-0 en el Nuevo Arcángel mientras en El Alcoraz se empata 1-1, resultados que le impiden como soñaba debutar en la categoría de plata. En 2007 se constituye la Fundación Alcoraz con Agustín Lasaosa y José Antonio Martín Otín «Petón» al frente que tan determinantes se convertirán en el futuro azulgrana, asociación sin ánimo de lucro que se prepara con antelación para si un día el club se transforma en S.A.D.
Con una incipiente profesionalización cada vez más palpable y siguiendo al frente Armando Borraz, durante la campaña 07/08 se compite en el Grupo II junto a clubs castellano-leoneses, vascos, aragoneses, riojanos y navarros alcanzando el subcampeonato de Liga igualado a puntos con la S.D. Ponferradina. La S.D. Huesca, que anda en crecimiento y las cuentas cada día más controladas, afronta la Promoción de Ascenso con ganas y el apoyo de toda su afición eliminando en Semifinales al C.F. Gavá: 2-2 en la localidad barcelonesa y 1-1 en casa, pasando a la gran Final gracias al valor doble de los goles a domicilio, consiguiendo el ascenso por primera vez a Segunda División después derrotar al Écija Balompié 2-0 en casa y empatar en el encuentro de vuelta de la localidad sevillana 1-1. El estreno en la categoría de plata trae a Huesca numerosos cambios haciéndose obras de acondicionamiento en El Alcoraz para entrar a formar parte del fútbol profesional. Contratado Antonio Calderón como primer entrenador, la edición 08/09 ve pasar por el estadio azulgrana a parte de los clubs de la élite nacional haciéndose con un decimoprimero puesto empatado a puntos con el Elche C.F. que le permiten tener continuidad. En la sesión 09/10, segunda consecutiva en Segunda División, el club aragonés sufre mucho para eludir el descenso, consiguiendo evitar tan poco deseado destino gracias a una victoria en el último encuentro de Liga ante el Real Club Celta de Vigo disputado en la localidad gallega.
Durante estos años, socialmente la entidad altoaragonesa logra después de un complejo trámite transformarse en Sociedad Anónima Deportiva, logro hecho público el 6 de agosto de 2009 con el depósito de 2.625.000 de euros establecidos por el C.S.D. como capital social, pudiendo así acometer su futuro con optimismo dentro del fútbol profesional.
2010 – 2020
Convertido en Sociedad Deportiva Huesca, S.A.D. con Fernando Losfablos como presidente, el club oscense empieza la nueva década con paso firme intentando hacerse un hueco entre los grandes del fútbol nacional, contratando en 2010 los servicios de Onésimo Sánchez con el que inauguran la temporada 10/11 quedando decimocuartos con una plantilla muy humilde que se vacía en cada encuentro y convierte su estadio en un verdadero fortín, arañando a domicilio valiosos puntos que significan la permanencia de un club que trabaja bien sus escasos recursos. La edición 11/12 se caracteriza por las dos caras que ofrece la plantilla azulgrana, siendo la primera vuelta decepcionante y temiéndose realmente por el descenso, mientras que en la segunda -ya con Quique Hernández en el banquillo-, se experimenta una gran recuperación que le hace escalar puestos en la tabla hasta lograr una meritoria remontada para ocupar el decimotercero puesto.
En la temporada 12/13 Fabri González toma el testigo en el banquillo pero los malos resultados le llevan a dimitir siendo sustituido por Antonio Calderón con quien tampoco varía el rumbo azulgrana. Ángel Arroyo y Jorge D’Alessandro no conseguirán revertir la situación y con once visctorias a cinco puntos de la permanencia, es conjunto aragonés perderá la categoría. La decepción es grande en Huesca y la afición lamenta abandonar la categoría de plata, afrontando la campaña 13/14 con resignación dentro de una Segunda División B donde compite en el Grupo II junto a vascos, navarros, madrileños, castellano-manchegos y aragoneses terminando séptimo a tres puntos de disputar la Promoción de Ascenso. Fernando Losfablos contrata para la campaña 14/15 a Luis Garcia Tevenet, técnico con el cual dentro del Grupo II compuesto por clubs aragoneses, canarios, vascos, castellano-manchegos y madrileños se conquista, por primera vez en su historia, el título de Segunda División B, accediendo a una Promoción de Ascenso donde sus aspiraciones son totales. La S.D. Huesca se enfrenta en la Eliminatoria de Campeones ante el Gimnástic de Tarragona, Campeón del Grupo III con el que empata en casa 1-1 y pierde en la capital catalana por 3-1 debiendo consolarse, como mal menor, con seguir luchando para ascender. En Semifinales los oscenses se enfrentan al Racing Club Ferrol, conjunto gallego al que se vence por un contundente 0-4 en la ciudad gallega y luego, una semana después, por 2-0 en casa. Clasificado para la gran Final, el rival que le espera es el Huracán Valencia C.F., conjunto con el que se empata 1-1 en la localidad valenciana de Torrent y al que se derrota en casa por 2-0 en un abarrotado Estadio de El Alcoraz significando su regreso a la categoría de plata.
Su segundo ciclo en Segunda División se abre en la edición 15/16 con Juan Antonio Anquela en el banquillo, técnico de carácter con el que pretende obtener la permanencia. Éste no defrauda y, encuentro a encuentro, se va sumando el necesario poso para concluir decimosegundo sin pasar excesivos apuros. En la sesión 16/17 Anquela sigue ocupándose del banquillo azulgrana mejorando en mucho el torneo anterior. Considerado como el plantel revelación de la categoría, yendo de menos a más los oscenses consiguen concluir en sexta posición obteniendo el pase para luchar por una plaza en Primera División. Encantados por el desafío, la S.D. Huesca se enfrenta en Semifinales al Getafe C.F., conjunto con el que empata 2-2 en casa y cae derrotado en la localidad madrileña por 3-0 cayendo eliminado. Previamente, desde mayo de 2017, Agustín Lasaosa ocupará la presidencia en sustitución de Fernando Losfablos, siete años al frente del club.
En la edición 17/18 la entente que conforman Agustín Lasaosa al frente del club y José Antonio Martín «Petón», al cargo de la dirección deportiva, traen a Huesca importantes jugadores algunos cedidos y otros adquiridos que prestan un excelente servicio dirigidos desde el banquillo por Joan Francesc Ferrer «Rubi» con quien se se encaraman, desde las primeras jornadas, a lo alto de la clasificación. Líderes en buena parte del campeonato con uno de los presupuestos más bajos de la categoría, un bache a inicios de la segunda vuelta parecerá apartarles del ascenso directo, reaccionando a última hora para ser segundos a un punto del Rayo Vallecano de Madrid. Tal plaza, nunca antes alcanzada, les concede el pasaporte para jugar en Primera División, categoría élite del fútbol español que significa la culminación de un proyecto sobresalientemente planteado.
En su temporada de debut en la élite nacional, los azulgranas entregan la dirección de la plantilla para el torneo 18/19 al técnico argentino Leo Franco con el que no se obtienen buenos resultados siendo cesado en la jornada octava. Pese a disponer del presupuesto más bajo de la categoría, se desea hacer un buen papel y luchar por la permanencia accediendo al cargo Francisco Javier Rodríguez «Francisco» con el que se mejora el rendimiento pero no evita el descenso al finalizar decimonoveno descendiendo a Segunda División.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Album Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
ESCUDOS DEL REAL ZARAGOZA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL REAL ZARAGOZA, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN ZARAGOZA:
La ciudad y municipio de Zaragoza, capital de la provincia homónima y de la comunidad autónoma de Aragón, con una población de seiscientos setenta y cinco mil habitantes es la quinta en número de habitantes a nivel nacional siendo centro de un importante nudo logístico, de transportes y de comunicaciones. Bañada por los ríos Ebro, Huerva y Gállego, además del Canal Imperial de Aragón que riega su fértil huerta, la ciudad cuenta con un importante patrimonio histórico que atrae a gran cantidad de turistas siendo, junto a su área metropolitana, sede de varios complejos industriales con multitud de servicios. Foco universitario, político, cultural y de ocio, su situación ha ido prosperando en las últimas décadas con grandes mejoras en sus arterias, destacando especialmente el servicio de transporte hacia sus vecinos.
En cuanto a los primeros pasos del fútbol en la capital aragonesa, surgido éste en distintas zonas de la geografía española, tuvo su aparición en el año 1903 cuando, en fecha 16 de noviembre, quedaba constituido en el local de la Academia del pintor Emilio Fortún el titulado Foot-ball Club formado por componentes aristocráticos y elitistas entre los que destacaban unos cuantos ciudadanos británicos en medio de la inmensa mayoría de jóvenes zaragozanos procedentes de la universidad. Presidido por José Pedro Navarro Marín al que acompañaron en la primera Junta Directiva Hugo Sheridan Garrat en la vicepresidencia, Sixto Rodríguez en la secretaría y Asher Huddlestone, vice-cónsul británico, en la tesorería, aquellos jóvenes alquilaron unos terrenos en el Campo del Sepulcro uniéndose poco después Joaquín María Cavero Alcíbar, Conde de Sobradiel, en un proyecto que no cuajó y en abril de 1904 cerró una cortísima carrera.
Tras un periodo de casi seis años sin actividad organizada donde tan solo desde los colegios de los Hermanos Maristas y Padres Escolapios surgían equipos ocasionales que se enfrentaron entre sí en el Campo de Los Huertos destacando el marista Pilar F.C. a finales de década, en enero de 1910 se constituyó el Zaragoza Foot-ball Club con alumnado procedente de la universidad zaragozana exclusivamente donde concurrían estudiantes aragoneses, vizcaínos, riojanos y navarros. Empleando nuevamente el Campo del Sepulcro y vistiendo camiseta blanca con pantalón negro, tampoco este club que contendió con los principales representantes de Huesca y Pamplona pudo perdurar y, antes de concluir el año, ya estaba disuelto.
Entre 1911 y 1913 el fútbol universitario fue el gran protagonista dando forma a clubs donde, ilusionados jóvenes, practicaban este deporte con tal de divertirse. Sociedades efímeras que desaparecían conforme sus integrantes terminaban sus respectivas carreras fueron el Sparta, con aragoneses y catalanes, el Amaika formado por estudiantes vascos, la U.D. Universitaria también con vascos y los más discretos Sporting Club y Athletic Club, formado por alumnos del Colegio de los Corazonistas que en 1915 dio lugar al España F.C. e Hispania Club.
En 1913 se constituyó la Sociedad Gimnástica Zaragozana, con José María Gayarre en la presidencia que empezó su carrera en el Campo de la calle Zurita para, casi de inmediato, levantar el primer campo de fútbol reglamentario titulado Campo de la Química por estar ubicado junto a los terrenos de la empresa Industrial Química. Vestidos con camiseta gualdinegra y pantalón negro, la Gimnástica fue el primer club serio contendiendo con clubs de las provincias limítrofes y algún vasco hasta que, a finales de 1915, desapareció por la falta de sustento financiero y de aficionados.
Barrida por las circunstancias la Sociedad Gimnástica Zaragozana, a principios de 1917, recién llegados desde Argentina, los hermanos Abinzano, Jesús y Julio, contactaron con José Luis Gayarre para constituir un nuevo club aprovechando sus amplios contactos con el Colegio de El Salvador, regido por los Jesuitas y lista de jugadores con los que había convivido. Gayarre, entusiamado con la idea, les entregó los uniformes que todavía guardaba y así, en uno de los bancos de la popular Plaza del Pilar, el sábado 24 de marzo quedaba constituido el Iberia Sport Club presidido por Ricardo Ostalé.
Uniformado con camiseta gualdinegra y pantalón negro, el burgués conjunto iberista se supo rodear casi de inmediato del personal de la empresa de fundición Carde-Escoriaza donde, además de seguidores consiguió jugadores, creando una sociedad homogénea que se desvivía constantemente a su equipo. En 1918, tras negarse la directiva presidida por Francisco Ginés quien había sustituido a Basilio Berdejo y éste a su vez a Ricardo Ostalé, a apoyar la constitución de la Federación Aragonesa, Luis Gayarre Lafuente asumió la presidencia, adquiriendo la sociedad una nueva perspectiva para lanzarse a la conquista del fútbol regional. Campeón Regional de los campeonatos oficiosos de 1917, 1918, 1919 y 1920, durante estos años los reconocidos como “avispas” por su indumentaria, se convertirán en el principal club aragonés no teniendo rival ni en Zaragoza ni en el resto de la región, cualidad que les hará adquirir un gran prestigio.
En marzo de 1919, la alta sociedad local educada en el Colegio de los Corazonistas funda la Sociedad Atlética Stadium con Fermín Asirón al frente, entidad que tenía en sus filas a antiguos jugadores que habían jugado primero en el Athletic Club y, entre 1915 y 1918 en el España F.C. que vestía camisa y pantalón blancos. Iniciados en el Campo del Paseo de la Mina y apoyados por personas pudientes entre los que destaca el Conde Sobradiel, el 19 de abril de 1922 gracias a la amistad del socio Emilio Ara Bescós con el Conde de Someruelos, esta sociedad que vestía camisa roja con pantalón blanco recibe el título honorífico de «Real» pasando a ser denominada Real Sociedad Atlética Stadium a la par que inaugura el Campo del Arrabal en fecha 12 de marzo mediante encuentro disputado ante el Iberia Sport Club con resultado favorable a los locales por 2-1, un espléndido recinto con capacidad para hasta ocho mil espectadores coincidiendo con la conquista del título regional de las ediciones 1924 y 1925.
Cronológicamente detrás de Iberia Sport Club y Real Sociedad Atlética Stadium, en orden de importancia destaca el Zaragoza Foot-ball Club, entidad fundada en 1921 por Ricardo Arribas que, con un proyecto muy ambicioso, pretende desbancar en el futuro al Iberia Sport Club, un club ya consolidado en la ciudad. Bien estructurado y con un respaldo económico notable, en lo sucesivo irá escalando puestos dentro del panorama local y regional. Jugando en el Campo de El Asalto y uniformados con camisa roja de puños y cuello amarillos con pantalón blanco, esta entidad crecerá rápidamente y pronto será capaz de tutear a los dos por entonces grandes.
En 1924 el Zaragoza F.C. absorbe al C.D. Fuenclara, un club constituido en 1917 y registrado en enero de 1922 auspiciado por la Escuela Católica de Obreros y Comerciante que venía jugando en el Campo de la calle Bilbao, para ser más fuerte adoptando los colores de este, camisa rojiblanca y pantalón blanco. Sin embargo, pese a la fusión, su economía no será lo suficiente boyante que precisa por lo que pronto quedará anclado en sus aspiraciones no pudiendo progresar. La salida natural a sus anhelos pasará inevitablemente por una fusión con otra sociedad y, tras mantener conversaciones a lo largo de 1925 con la potente y desahogada Real Sociedad Atlética Stadium, finalmente se insertará y diluirá en esta última la cual adopta la denominación de Real Zaragoza Club Deportivo.
El Real Zaragoza C.D. mantiene la estructura, reconocimiento e idiosincrasia de la Real Sociedad Atlética Stadium, no modificando su tradicional camisa roja combinada con pantalón azul y continuando siendo conocidos como “los tomates”, empezando un despegue deportivo que lo llevará a competir en Tercera División durante la temporada 30/31.
Paralelamente a estos acontecimientos, el Iberia Sport Club, fruto del gran trabajo de Luis Gayarre, adquirirá unos terrenos en el Monte de los Olivos que, entre 1922 y 1923, verán cómo se construye el Campo de Torrero, un flamante terreno de juego con capacidad para quince mil espectadores que es inaugurado el 7 de octubre de 1923 ante el Club Atlético Osasuna, de Pamplona, con derrota de los locales por 1-4. Perdidos los campeonatos regionales de 1924 y 1925 en franca competencia con la Real Sociedad Atlética Stadium, los guadinegros se harán con los siguientes títulos hasta final de la década representando en 1926, 1927, 1928, 1929 y 1930 al fútbol aragonés en el Campeonato de España, pasando a partir de 1926 a experimentar una transformación en la cual el fútbol profesional sustituye al clásico fútbol amateur.
El Iberia Sport Club empieza, tal cual hacen los grandes clubs nacionales, a fichar jugadores foráneos procedentes de otras provincias mayoritariamente vascos, entrando el club zaragozano en 1928 dentro de los planes para militar en las Ligas Nacionales que se están organizando para el fútbol profesional. Dado el peso del fútbol aragonés y la trayectoria de la sociedad, al club gualdinegro se le concede la oportunidad de luchar por la plaza libre que resta en Primera División, siendo eliminado en la Primera Ronda por el Real Oviedo F.C. con el que empata 2-2 en un primer encuentro perdiendo posteriormente en el desempate por 1-4. Decidido por criterio deportivo militar en Segunda División, los gualdinegros debutan en la temporada inicial 28/29 con un magnífico registro al quedar segundo clasificado empatado a puntos con el Sevilla F.C., conjunto andaluz que, debido al gol average favorable, termina contendiendo como aspirante ante el Primera División Real Racing Club, de Santander, quien defiende y consigue mantener su puesto.
En la campaña 29/30 la Federación Española subraya que el ganador de la primera plaza ascenderá directamente a Primera División sin Promoción mediante, compitiendo el Iberia Sport Club con gran entusiasmo aunque finalmente, por un solo punto concluye tercero tras Deportivo Alavés y Real Sporting de Gijón con quien empata a puntos. El Iberia Sport Club compite durante estos años con una gran plantilla que demuestra estar próxima a la élite del fútbol nacional y quizás, de haber colmado sus aspiraciones, bien pudiera evitado los problemas económicos en los que pronto se verá enrolado.
HISTORIA DEL CLUB:
1932 – 1940
Entre finales de los años veinte y principios de los treinta la capital regional aragonesa cuenta con tres grandes clubs que compiten, cada uno hasta donde sus respectivas posibilidades alcanzan, en la Serie A o Primera Categoría. Conocidos el Iberia Sport Club y el Real Zaragoza C.D., el tercero en discordia es el Club Patria-Aragón, una sociedad presidida por Pío Hernando Aceña que viste camisa con pantalón blancos y juega en el Campo del Arrabal. Sustentado por el Círculo Tradicionalista desde sus inicios, esta sociedad tenía su origen en el C.D. Tradición constituido en 1923 que, en ese mismo año, adquirió el nombre de C.D. Patria llegando, ya en 1924, a fusionarse con la Unión Sportiva Aragón, conjunto amateur con el que se pensó constituir una nueva sociedad capaz de ser una alternativa a los dos grandes clubs zaragozanos.
La realidad, sin embargo, terminaría siendo otra y las tres sociedades, gigantes con pies de barro, atravesarían momentos muy delicados nada más empezar la nueva década. En lo que respecta al Iberia Sport Club, sus andanzas en la Segunda División fueron cortadas de pleno al ser décimo y colista perdiendo su plaza, aunque a nivel regional se alzó con el Regional de 1931. Los gualdinegros, sumidos en una grave crisis económica, no eran los de apenas un año antes y su hasta entonces gran plantilla había sufrido grandes cambios.
Si preocupante era la situación de los iberistas, más lo era y con diferencia la de Real Zaragoza C.D. y Club Patria-Aragón, ambos en un callejón sin salida. Los zaragocistas, quienes habían competido durante la temporada 28/29 en Segunda División B, una Tercera División en toda regla para dilucidar qué dos clubs iban a ascender a Segunda División, repitieron sus intentos en las campañas 29/30 y 30/31 sin fortuna debiendo invertir en futbolistas profesionales y en caros viajes sin apenas recompensa. Lo mismo ocurrió con los patriotistas, con ciertas posibilidades en la temporada 29/30 en Tercera División y sin apenas en la edición 30/31. Arruinados ambos por frustrarse sus intentos de alcanzar una meta demasiado cara y alertados por la Federación Aragonesa por impago, en 1930 hubo conversaciones entre las dos sociedades para crear una nueva pero, debido a los números rojos de unos y otros, todo quedó en nada.
En 1931, estando el ahora conocido como Zaragoza C.D. -tras la instauración de la Segunda República que prohibió el uso de referencias monárquicas- agonizando y el Iberia Sport Club con la soga al cuello después de haber sido quinto en el Grupo III de Tercera División donde perdió sus opciones de ascender a Segunda División, hubo un intento de fusión que terminó en fracaso pues, si los socios iberistas votaron a favor, la negativa de los zaragocistas fue rotunda aun sabiendo que era su fin. Con deudas en todas partes, a finales de 1931 tanto Club Patria-Aragón como Zaragoza C.D. causaron baja en la Federación Aragonesa desapareciendo los primeros mientras a los segundos no les quedaba aire.
De estar tremendamente enemistados y no poder siquiera verse, el futuro para iberistas y zaragocistas pasaba por una unión a cara de perro tuviese la oposición que fuese, unión porque no podía ser fusión al haber causado baja federativa el Zaragoza C.D. y deber, precisamente, estos una importante suma a la federación regional. Promovida con toda la buena voluntad del mundo por el presidente de la Federación Aragonesa, José María Muniesa, la unión entre ambos era inevitable y en febrero y marzo de 1932 empezaron las reuniones entre ambas directivas para llegar a un acuerdo. Conocida la finalidad, faltaba discutir los detalles, siendo todos solucionados el 15 de marzo cuando se firmó la constitución del Zaragoza Fútbol Club, nueva sociedad que, ocupando la plaza federativa que tenía el Iberia Sport Club, podría empezar una nueva carrera deportiva convirtiéndose en el club hegemónico de la capital aragonesa. Decidido que vistiese camisa blanca con pantalón azul celeste, los neutrales colores federativos para no crear discrepancias entre los socios firmantes, junto a un escudo con el emblema de la ciudad odeado con los bordes amarillo y negro iberistas, el nuevo club jugaría en el Campo de Torrero empezando su carrera con quince jugadores hasta el momento gualdinegros más el entrenador, también avispa, Elías Sauca.
Deportivamente fuerte y saneado, su andadura en Tercera División durante el campeonato 32/33 fue exitosa conquistando, sin demasiada oposición, el torneo sin apenas problemas. En la Promoción de Ascenso elimina al Baracaldo F.B.C.: 2-1 en la ciudad vizcaína y 4-0 en casa; en la siguiente ronda vence al C.D. Logroño: 0-0 en la capital riojana y 2-0 en casa; después al Valladolid Deportivo: 1-0 en casa y 0-0 en la vuelta, cayendo en la final ante el Centro Sports Sabadell: 1-1 en la ciudad lanera y 1-2 en casa ante la desesperación de sus seguidores. El ansiado ascenso a Segunda División se produce en la campaña 33/34 cuando tras ser campeón de grupo pasa a la Fase Final y es subcampeón de un grupo en el que ascienden los dos primeros clasificados.
El estreno en Segunda División llega con la campaña 34/35, año en el que queda tercero y apunto está de promocionar. En la siguiente 35/36 es subcampeón, jugando una Fase de Ascenso en la que es subcampeón de un grupo de seis clubs y con el que se gana un puesto en Primera División. Sin embargo, tal logro deportivo se ve empañado por la irrupción de la Guerra Civil, acto que pone fin a la denominada quinta de los “Alifantes”, un gracioso apelativo surgido de un aficionado catalán que hacía referencia a la elevada altura de sus defensas.
El debut en Primera División se traslada pues a la temporada 39/40 en la cual son séptimos. En la 40/41 no se realiza un buen torneo y son undécimos quedando a un solo punto de la salvación y descendiendo a Segunda División.
1940 – 1950
En febrero de 1941 castellanizan su denominación por imperativo legal y pasan a ser conocidos como Zaragoza Club de Fútbol. El paso por la categoría de plata es efímero y con un equipo soberbio, al final de la campaña 41/42 son subcampeones, ganándose el acceso a la Fase Final, eliminatoria en la que son segundos de un grupo de seis clubs obteniendo de forma directa el ascenso a Primera División. El Zaragoza C.F., en esta nueva oportunidad, se muestra irregular y es incapaz de aguantar en Primera como presuntamente requerían sus seguidores, descendiendo al término de la campaña 42/43 al ser decimotercero con tan solo dos victorias y nueve empates, unos pésimos resultados. En Segunda División no le van mejor las cosas y tras cuatro temporadas consecutivas sin pena ni gloria, desciende a Tercera División en la 46/47 al ser decimotercero en una clasificación muy igualada.
Pasar por la Tercera División significa un duro golpe para el aficionado zaragozano y la crisis se deja notar, dejando de acudir en masa al campo. A pesar de ello se sobrepone y en la 48/49 consigue retornar a Segunda División tras ser subcampeón de grupo y lo más importante, ser ampliada la categoría de uno a dos grupos.
1950 – 1960
En un par de temporadas el Zaragoza C.F. confecciona minuciosamente un buen equipo y se aúpa a las primeras posiciones, adquiriendo en la campaña 50/51 el subcampeonato. Este puesto le permite disputar la Promoción de Ascenso en la que es de nuevo segundo de un grupo de seis y con ello adquiere plaza en Primera División. El 30 de marzo de 1951, mediante asamblea extraordinaria se cambia el nombre del club, pasando a ser Real Zaragoza Club Deportivo, reivindicación que corrobora el pasado realista de uno de sus antiguos fundadores, la Real Sociedad Atlética Stadium.
La alegría en la división de honor dura un par de temporadas, pues al término de la 52/53 se es decimosexto y colista con solo seis triunfos y cinco empates. El club maño tarda tres campañas en recuperarse dado que en la 54/55, tras ser tercero en Liga, decepcionantemente es quinto en la Promoción perdiendo el tren del ascenso. En la 55/56 repite tercer puesto en Liga, pero en la Promoción se mantiene fuerte y es subcampeón ascendiendo a Primera. Durante estos años el club zaragozano pasa por constantes problemas económicos y en 1951 adquiere en propiedad el Campo de Torrero en vistas a usarlo como cambio de moneda, con el cual poder afrontar retos futuros. Poco tiempo después de adquirirlo lo vende y con lo recaudado sufraga totalmente su deuda, ficha nuevos jugadores y acomete el diseño de un nuevo estadio. Durante cinco años disfruta de su uso mientras afronta la construcción del nuevo campo con más capacidad para albergar a su creciente masa social. A más aforo, más recaudación y de estas resulta el Estadio de La Romareda, estrenado el 8 de septiembre de 1957 con un encuentro frente al C.A. Osasuna y resultado favorable 4-3 para los maños.
1960 – 1970
Este merecido ascenso abre un periodo de estabilidad en la entidad blanquiazul, dado que toda la década de los sesenta la pasará íntegramente en la élite de nuestro fútbol. Durante estos maravillosos años aparecen “los cinco Magníficos”, con Lapetra, Canario, Marcelino, Santos y Villa, todos ellos grandes jugadores que son adquiridos con la venta de Torrero. Este quinteto, acompañado de muchos otros jugadores, proporciona al club maño un excelente rendimiento, pues se obtienen muy buenas clasificaciones en Liga y el pase a competiciones europeas. De su buen juego y hacer se consigue estar en cuatro presencias en las finales de la Copa del Generalísimo, de las que se ganan dos: en 1963 se pierde en el Camp Nou ante el C.F. Barcelona por 1-3; en 1964 se conquista la primera Copa: 2-1 ante el Club Atlético de Madrid en el Santiago Bernabeu; en 1965 de nuevo en el Bernabeu se pierde 0-1 ante el mismo Club Atlético de Madrid; y finalmente, en 1966 se impone al Club Atlético de Bilbao por 2-0 en el recinto antes mencionado.
Internacionalmente, en la temporada 61/62 y tras acabar cuarto clasificado en Liga doméstica, es admitido para disputar la Copa de Ferias. En 1963 llega a cuartos cayendo ante la A.S. Roma. La 62/63 y tras acabar quinto en Liga, se planta en la Final de la Copa de Ciudades en Feria, tras una buena competición durante 1964 en la que deja fuera de competición a equipos como: A.O. Irákis griego, Laussane Sports suizo, Juventus F.C. de Turín, y Royal F.C. Liégeois belga. En la Final tiene como rival al también equipo español del Valencia C.F., con resultado favorable de 2-1 con goles de Villa y Marcelino en partido disputado en Barcelona, alzándose como Campeón y conquistando su primer título europeo.
Al proclamarse campeón de Copa del Generalísimo en 1964, disputa por primera vez la Recopa de Europa (nombre españolizado de la Cup Winner’s Cup, es decir, Copa de Campeones de Copa) en la edición 64/65. En esta, tiene suerte en los emparejamientos, y elimina uno tras a otro a: Valletta F.C. maltés, Dundee F.C. escocés, Cardiff City F.C. galés; y siendo eliminados en la semifinal por el equipo londinense del West Ham United F.C., el cual se proclamó Campeón en esta edición. Tercero en Liga la sesión 64/65, regresa a la Copa de Ferias la edición 65/66 en la que es de nuevo finalista y dejando por el camino otra vez numerosos equipos anglosajones: Shamrock Rovers F.C. irlandés, a los escoceses del Heart of Midlothian F.C. y Dunfermline Athletic F.C., y Leeds United A.F.C. inglés. En la Final se enfrenta al C.F. Barcelona, que previamente había eliminado al Chelsea F.C., y gana en la ida 0-1 con gol de Canario. En la vuelta, cae 2-4 en La Romareda, haciendo estériles los goles de Marcelino.
Cuarto en Liga y campeón de Copa en la campaña 65/66, regresa a la Recopa la sesión 66/67 en la que elimina al Everton F.C. de Liverpool en cuartos, y cae en semifinales frente al Rangers F.C. de Glasgow. La 67/68 de nuevo en Copa de Ferias, es eliminado prematuramente por el equipo húngaro del Ferencvárosi T.C. de Budapest. La siguiente campaña 68/69 llega hasta octavos, destacando la eliminación del Aberdeen F.C. escocés y siendo eliminado por el Newcastle United F.C., en el enésimo encuentro entre el equipo maño y un rival del Reino Unido durante esta década. Llegados a finales de década, se produce el lógico e inevitable relevo generacional y el conjunto pierde fuelle y protagonismo, viéndose relegado a posteriores clasificaciones.
1970 – 1980
El inicio de los años setenta supone un duro revés para el club aragonés, pues a la primera de cambio pierde la categoría al ser último en la edición 70/71. Tres victorias y nueve empates son escaso balance para un conjunto habituado poco antes al éxito. El paso por Segunda División resulta felizmente breve, dado que en un apretado final durante la 71/72 queda tercero y consigue volver entre los grandes. Una gran campaña 73/74 en la que acaba tercero, le permite volver al escenario europeo para la 74/75, dando cuenta de Vitória F.C. de Setúbal y del Grassoppher-Club suizo, no pasando de octavos al caer frente al equipo teutón del VfL Borussia Moünchengladbach. La entidad zaragozana consigue reunir un buen grupo de jugadores como Lobo Diarte, Soto, Blanco, Ocampos y Arrúa, que le llevan a ser sorprendentemente subcampeón de Liga en la temporada 74/75, la mejor clasificación de su historia. La sesión 75/76 disputa de nuevo la Copa de la UEFA, siendo eliminado a las primeras de cambio por los checos del T.J. Internacionál Slovnaft de Bratislava.
La fuga de algunas de sus figuras a otros clubs más importantes, merma en exceso su potencial y termina descendiendo tristemente a Segunda División en la conclusión del campeonato 76/77 al ser decimosexto. Como sucediera escasos años antes, el Real Zaragoza C.D. se sobrepone de inmediato a la decepción y conquista el campeonato de la división de plata por la puerta grande, retornando a la élite. Instalado ya en Primera, se realizan fichajes ajustados que consiguen mantener la categoría sin grandes sufrimientos.
1980 – 1990
Los años ochenta suponen una regularidad deportiva en el campeonato doméstico, en el que no sufren problemas y desde el cual consiguen en varias ocasiones entrar en competiciones europeas, verdadera aspiración del club. Lo más significativo sin duda es la conquista de la Copa del Rey en la edición de 1986, tercera en sus vitrinas, ante un F.C. Barcelona plagado de estrellas que sucumbe por 1-0 con gol de Rubén Sosa en partido disputado en el Vicente Calderón. La disputa de la Supercopa de España de 1986 finalmente no se celebró al no llegar un acuerdo en las fechas para la celebración de los encuentros de ida y vuelta frente al Real Madrid C.F., vigente campeón de Liga.
Paralelamente, destaca la llegada hasta semifinales en la edición de la Recopa de 1987, donde eliminan a la A.S. Roma por penaltis en primera ronda, y caen en semifinales fuera de competición al ser derrotados por el A.F.C. Ajax. Siendo quinto la temporada 88/89 en Liga, regresa a la UEFA la sesión 89/90 superando en primera ronda al Apóllon F.C. chipriota y ser eliminados en la siguiente por los alemanes del Hamburger S.V.
1990 – 2000
En los años noventa el Real Zaragoza C.D. recupera parte del protagonismo que tuvo en la década de los sesenta y notables son sus presencias en la Copa del Rey, torneo en el que siempre llega lejos y en el que es capaz de disputar dos finales, cada una de ellas con distinto sabor, pues en 1993 cae ante el Real Madrid C.F. por 0-2 en partido celebrado en el valenciano Luís Casanova, mientras que en 1994 se impone en el madrileño Vicente Calderón al Real Club Celta de Vigo desde la tanda de penaltis, tras empate 0-0 en el tiempo reglamentario. En la Supercopa de España cae ante el F.C. Barcelona con un 0-2 en casa, y con una insuficiente remontada por 4-5 en el feudo barcelonista.
En el Campeonato de Liga intercambia buenas con malas temporadas, sufriendo a veces más de la cuenta, caso de las temporadas 90/91 y desde la 95/96 a la 97/98, y saboreando un tercer puesto en la 93/94. La temporada 91/92 termina sexto en Liga y entra en competición europea la 92/93, eliminando a Stade Malherbe Caen francés, F.K. Frem de Copenague, y cayendo en octavos frente al B.V. Borussia 1909 de Dortmund.
Pero su mayor logro deportivo es la consecución de la Recopa en 1995, al llegar a la final tras eliminar a F.C. Gloria Bistrita, F.C. Tatran Presov, S.C. Feyenoord Rotterdam y Chelsea F.C.. En este apasionante encuentro disputado en Paris, el conjunto maño consigue imponerse al Arsenal F.C. de Londres por 2-1 con un gol increíble de Nayim desde el lateral del centro del campo a pocos minutos del final. El delirio colectivo es inimaginable y el equipo es recibido con efusividad por su afición en Zaragoza. Destacan de esta época jugadores emblemáticos como pueden ser: Cedrún, Pardeza, Higuera, Poyet, Belsué, Aguado, Esnaider y Solana. La edición siguiente 95/96, el Real Zaragoza participa nuevamente en la Recopa de Europa defendiendo su título de Campeón, en la que hace un buen papel eliminando a A.S.K. Inter Slovnaft de Bratislava y Club Brugge K.V. belga, y siendo apeados de competición por el Real Club Deportivo de La Coruña.
A nivel extradeportivo, destaca la conversión en Sociedad Anónima Deportiva durante 1992 por imposición legal y tras reunir los 539 millones de pesetas requeridos por el CSD, siendo elegido presidente Alfonso Solans el 2 de septiembre con el nuevo consejo de administración, quien estabiliza el club económicamente. La entidad tras este importante movimiento cambia de nombre y pasa a ser Real Zaragoza, S.A.D.
La primera década del nuevo siglo resulta en su globalidad plena de resultados agridulces, pues tan pronto se esta arriba como abajo dentro de las categorías del fútbol profesional. La temporada 99/00 termina cuarto. Ya en la temporada 00/01 se esta a punto de perder plaza en Primera División al ser decimoséptimo en un campeonato que, sin embargo, debuta en la Nueva Copa de la UEFA y en el que es apeado en primera ronda por el T.S. Wisla polaco de Cracovia. La temporada 01/02 destaca por la consecución de su quinta Copa del Rey. Este título llega en 2001 al derrotar al Real Club Celta de Vigo por 3-1, en partido disputado en La Cartuja de Sevilla con goles de Aguado, Jamelli y Yordi. En la Supercopa de 2001, se pierde la oportunidad de conseguir el trofeo al empatar a uno en casa y ser derrotado en el Santiago Bernabeu por 3-0. En la temporada siguiente, 01/02, se presenta lo ineludible y acaba en Segunda División al ser vigésimo y último con tan solo nueve victorias y diez empates. Como premio en esta desastrosa campaña, destaca su participación en la Copa de la UEFA, en la que elimina al danés Silkeborg I.F. en primera ronda y cae en la siguiente ante el Servette F.C. suizo.
El paso por la categoría de plata es breve y al final de la edición 02/03 termina segundo alcanzando nuevamente plaza entre los grandes. El club maño se reorganiza y contrata nuevos futbolistas que den otro aire a la entidad. Deportivamente se mejora y sobrevive cómodamente sin sobresaltos ni alardes en la zona media de la tabla. La entidad parece abonada a presentar batalla en la Copa del Rey y fruto de su constante trabajo y esfuerzo consigue plantarse en dos finales más del torneo. En la edición de 2004 se impone en Montjuïch al Real Madrid C.F. por 3-2 en un vibrante partido. Finalmente se logra el título de Supercopa de España en la edición 2004, frente al Valencia C.F. al caer 1-0 en la ida y ganar 1-3 en Mestalla.
La sesión 04/05 regresa a Europa, superando a S.K. Sigma Olumuc checo, pasando como segundo de grupo ganando a F.C. Utrech holandés y F.K. Dnipro ucraniano, derrotar a Fenerbahce S.K. y caer ante el F.K. Austria Wien en octavos. En la Final de Copa de 2006 es vapuleado en el Santiago Bernabeu por el Real C.D. Espanyol de Barcelona con un resultado de 1-4 desfavorable. Cuando todo parecía indicar que el club iba a iniciar un largo periodo de tranquilidad en Primera División tras un buen campeonato 06/07, fichando jugadores de renombre y con un considerable presupuesto, llega el varapalo del descenso a Segunda División A de la temporada 07/08, campaña en la que sufre un declive dramático en el último tramo liguero que le lleva al decimoctavo puesto y caer en primera ronda de la UEFA ante el A.S. Aris de Salónica griego.
En el verano de 2008 se ficha al técnico Marcelino García Toral y se consigue retornar a Primera División tras ser tercero a un sólo punto del líder Xerez C.D.. Sin embargo, los resultados en la campaña 08/09 no son todo lo aceptables que a priori se había formado la entidad maña y en Navidad, el técnico José Aurelio Gay toma el banquillo además de reforzarse la plantilla con un elevado número de jugadores que a trancas y barrancas son fundamentales para salvar al club de un descenso casi seguro. En la temporada 09/10, el camino que emprenden los zaragocistas es muy similar al desarrollado en la edición anterior, logrando la permanencia con más apuros de los previstos en un campeonato que se desenvuelve de forma agónica por no caer en puestos de descenso.
2010 – 2020
El cambio de década no trae nada nuevo e inmersos en Ley Concursal, el conjunto maño pasa por numerosos problemas sociales y deportivos en la campaña 10/11 teniendo que alcanzar la permanencia en el último encuentro de Liga disputado en Alicante frente al titular Hércules C.F. SAD en un comprometido torneo donde se sufre muchísimo. En la edición 11/12 el club maño lleva a su afición al borde del ataque de nervios puesto que empieza mal el campeonato, continua peor y en breve se mete en puestos de descenso. La pérdida de categoría parece prácticamente inevitable hasta que el técnico Manolo Jiménez empieza a inculcar sus conocimientos y reflota la plantilla paso a paso consiguiendo en el último encuentro salvar milagrosamente la plaza cuando pocos creían en él. El camino emprendido por el Real Zaragoza bajo la presidencia de Agapito Iglesias, con unos gravísimos problemas económicos, tal y como se esperaba pero no deseaba termina descarrilando en la sesión 12/13 cuando con una plantilla que tan solo suma doce en la segunda vuelta, termina vigésima y colista perdiéndose la categoría.
El club aragonés entra en barrena y en los corrillos futbolísticos se señala a Agapito Iglesias como el culpable de la situación. Por si fuera poco, para enjuagar la deuda la categoría de plata no es la más idónea. Perdidos algunos jugadores y no renovados por otros que ofrezcan una calidad similar, los zaragocistas realizan un pésimo torneo 13/14 que se resuelve con una decepcionante decimocuarta plaza conseguida mirando de reojo el descenso al tercer nivel nacional. Movida la masa social para hacer frente al futuro inmediato de la mejor de las maneras, la Fundación Zaragoza 2032 consigue hacerse con el setenta y dos por cien del capital social del club accediendo a la presidencia Christian Lapetra quien sustituye a Agapito Iglesias durante el verano de 2014. Se esperan cambios en el club maño especialmente en lo deportivo y, aunque sexto en Liga, la temporada 14/15 permite soñar con retornara a la categoría de élite. No será así y, en la Promoción de Ascenso, después de perder 0-3 en casa ante el Girona F.C. y protagonizar una espectacular remontada por 1-4 en Montilivi, en la Final se echa todo a perder después de ganar 3-1 a la U.D. Las Palmas en La Romareda y perder en la vuelta por 2-0 ante la desilusión de sus aficionados.
La campaña 15/16 es ilusionante pero, a medida que ésta avanza, el equipo no rinde lo esperado y sin objetivos, queda octavo a un paso de poder disputar la Promoción. Pese a contar con buenos jugadores, el Real Zaragoza echa un paso atrás en la sesión 16/17 y, como recientemente sucediera, a punto está de dar con sus huesos en Segunda División B. En la temporada 17/18 se hace una gran limpia en el club aragonés y se contrata al técnico Natxo González con quien se accede al tercer puesto precedido por Rayo Vallecano de Madrid y S.D. Huesca quienes ascienden directamente. A los zaragocistas les queda el trayecto más complicado si quieren seguir a sus hermanos oscenses, pero caen eliminados en Semifinales ante el C.D. Numancia de Soria; empate 1-1 en Los Pajaritos y derrota amarga e inesperada en casa por 1-2. Ilusionados por aproximarse a lo realizado en la campaña anterior, la sesión 18/19 es desastrosa y el equipo lucha por no descender. La presencia de rivales menos cualificados les beneficia y quedan decimoquintos.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
El libro de oro del Real Zaragoza. Ricardo Gil. Editorial Plaza & Janés (1984).
Real Zaragoza: 1932-1995. Pedro Luis Ferrer y Javier Lafuente. Editorial Mira (1995).
Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
El sueño de ser grandes; historia social del nacimiento del fútbol en Zaragoza, 1903-1936.Pedro Ciria Amores. Universidad de Zaragoza (2012).