Historial del Real Club Celta de Vigo, S.A.D.
PLANTILLA 2024 – 2025:
DATOS GENERALES:
- Nombre completo: Real Club Celta de Vigo, S.A.D.
- Ciudad: Vigo
- Provincia: Pontevedra
- Comunidad Autónoma: Galicia / Galiza
- Fecha de constitución: 10 de agosto de 1923
- Fecha de federación: 10 de agosto de 1923
DATOS SOCIALES:
- Presidente: D. Manuel Carlos Mouriño Atanes
- Dirección social: c/ Conde de Gondomar, 1 – 36.203 Vigo
- Teléfono: 986110900
- Correo electrónico: web@celtavigo.net
- Dirección del estadio: Avenida de Balaídos, s/n – 36.210 Vigo
- Web oficial: www.celtavigo.net
- Facebook oficial: Real Club Celta de Vigo
- Twitter oficial: @rccelta_oficial
- Canal Youtube oficial: Real Club Celta de Vigo SAD
CAMBIOS DE NOMBRE:
- Club Celta (1923-1924)
- Real Club Celta (1924-1931)
- Club Celta (1931-1940)
- Real Club Celta de Vigo (1940-1992)
- Real Club Celta de Vigo, S.A.D. (1992-)
TÍTULOS NACIONALES:
4 Ligas de Segunda División:
- 1934/35
- 1935/36
- 1981/82
- 1991/92
1 Liga de Segunda División B:
- 1980/81
1 Liga de Tercera División:
- 1930/31
TÍTULOS INTERNACIONALES:
1 Copa Intertoto:
- 2000
ESTADIO:
- Nombre: Estadio Municipal de Balaídos
- Inauguración: 30 de diciembre de 1928
- Cambios de nombre:
- Campo Municipal de Balaídos (1928-)
- Capacidad: 31.800 espectadores
EVOLUCIÓN DEL ESTADIO DE BALAÍDOS:
OTROS ESTADIOS:
- Campo de Coya (1923-1928)
- Estadio Municipal de Balaídos (1928- )
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL REAL CLUB CELTA DE VIGO, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL REAL CLUB CELTA DE VIGO, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN VIGO:
La portuaria e industriosa ciudad de Vigo, localidad situada en la Ría del mismo nombre y la más poblada de Galicia, es históricamente una de las principales puertas de entrada del fútbol en nuestro país encontrándose sus orígenes comparativamente igual de remotos y a la misma altura que los hallados en otras latitudes peninsulares como Minas de Riotinto, Huelva, Sevilla y Linares, núcleos todos ellos con fuerte presencia de ciudadanos extranjeros, principalmente británicos, a partir de 1873 tras la apertura de fronteras por parte del Gobierno para la implantación de empresas foráneas. Del mismo modo, tal y como sucede con el resto de las localidades pioneras mencionadas, son los ciudadanos británicos al servicio de una empresa del archipiélago quienes se convierten en su principal propagador. En el caso vigués la iniciativa corre a cuenta de la Eastern Telegraph Company Ltd., sociedad instalada en la ciudad olívica en mayo de 1873 la cual, contratados sus servicios por el Gobierno nacional, se hará cargo de montar y mantener el servicio de cable telegráfico submarino que conecta el Reino Unido con Vigo y desde aquí con Lisboa, vital para la comunicación entre ambos continentes.
La compañía británica, siguiendo el ejemplo de las grandes empresas de aquel país quienes se preocupan de la estabilidad laboral y emocional de sus empleados conscientes de residir en suelo extranjero lejos de la patria, con el paso de los años habilitará una sede social para la comunidad en los bajos del Hotel Moderno con sala de recreo dotada de billares y mesas de ping-pong para juegos de interior, adquiriendo poco después en la falda del Monte del Castro una gran finca, Villa Felisa, donde se construye un edificio central para residentes que actúa, de igual modo, como centro para los trabajadores. En sus inmediaciones, muy cerca, en la Rúa Taboada Leal levantarán dos pistas para lawn-tennis. Amantes como son de los deportes, los británicos de la Eastern Telegraph Company Ltd. practicarán durante el verano actividades al aire libre como remo en la Ría y atletismo, dejando para el invierno disciplinas como hockey sobre hierba, rugby y fútbol, habiéndose encontrado esporádicas reseñas sobre esta última en tiempos tan lejanos como 1876 y 1880, siendo habitual su práctica con anterioridad a 1893 y pública a partir de 1895 cuando la prensa local se hace eco por primera vez de un encuentro disputado por el Exiles Cable Club, la sociedad promovida por el staff directivo de la cual se desconoce la fecha exacta de constitución.
A caballo entre los siglos XIX y XX, el Exiles Cable Club o Exiles F.C. como consta en algunos medios, se enfrenta ocasional y mayoritariamente a tripulaciones de los mercantes británicos de paso por el famoso puerto local en misiones de reabastecimiento para dirigirse tanto a las colonias africanas como de la Indias Orientales del Imperio y, sobre todo, a marinos oficiales de la Royal Navy igualmente del Reino Unido fondeados allí por las mismas razones, haciendo uso de un diminuto campo de fútbol habilitado para tal propósito con dimensiones no reglamentarias en los terrenos del Relleno, hoy Alameda.
El ejemplo de los isleños no pasa desapercibido para los vigueses, curiosos y atraídos por tan vigoroso deporte, surgiendo nada más empezar el siglo XX los primeros atrevidos locales que desean poner en práctica el sport de moda. Parte del alumnado de la clásica Escuela de Artes y Oficios, una institución modelo en Vigo implantada en 1886 que permanecen agrupados bajo la juvenil Sociedad de Artes y Sport, son los iniciados que juegan y comparten los terrenos de los cuadros del Relleno con los británicos, amistad de cuyo fruto y a iniciativa de varios voluntariosos británicos y vigueses queda constituido el 4 de junio de 1903 el Vigo Sport Club. El recién creado club olívico adopta como colores identificativos los de la matrícula marítima, maillot partido a dos mitades rojo y blanco con pantalón de este último color, estará liderado por el gran atleta amateur Manuel Ocaña, hijo de una reconocida familia de fotógrafos en la cual figuran varios sportman como sus hermanos Andrés y Fernando cuya voluntad es, inexcusablemente, facilitar el camino a todos aquellos jóvenes que deseen practicar sport. Ocaña, auténtico alma mater de la sociedad y principal impulsor, volcará todo su interés para que el proyecto deportivo cuaje practicando, además de fútbol, otras disciplinas, resultando sin embargo al cabo de un par de años ser el fútbol sin duda la que, con diferencia, cuente con más seguidores y a la par, la que mayor repercusión tiene en el público ocasionando recién iniciado 1905 el cambio de nombre a Vigo Foot-ball Club.
Los hermanos Ocaña no están solos y en el proyecto rojiblanco también hay cabida para otro grupo de conocidos hermanos; Antonio, Rodrigo y Mauro Alonso Giménez-Cuenca, hijos del afamado industrial conservero Antonio Alonso quienes con su esfuerzo físico y también capital permiten que el club adquiera una solidez financiera consiguiendo gracias a sus amistades, como la del diputado Ángel Urzaiz, que S.M. El Rey D. Alfonso XIII les entregue en 1905 una copa de plata como broche para organizar Campeonatos de Galicia. En abril de ese año dos de los hermanos Alonso, Rodrigo y Antonio, fichan por el Madrid F.C. adquiriendo gran protagonismo Antonio, gran futbolista con cuyo rendimiento los de la villa y corte conquistan el Campeonato de España de esa edición, desplegándose a su regreso a la ciudad una calurosa bienvenida por el alcance de tan gran gesta. Los viguistas crecen a pasos agigantados y entre los gestores nace el impulso de registrar la sociedad en el Gobierno Civil, paso que se consigue el 22 de mayo después de aprobarse colectivamente unos Estatutos, ser elegida una directiva y contar con la aprobación del Gobernador provincial. En esta primera directiva reconocida por la máxima autoridad Rodrigo Alonso Giménez-Cuenca ejercerá de presidente honorario mientras Manuel Ocaña es el presidente efectivo, estando acompañados por Jaime Rocha como tesorero; Mario Vidales en el puesto de secretario y como vocales Jesús Rodríguez, Ángel Queizán y José Sobrino.
Paralelamente a estos hechos y, dada la repercusión que adquiere el fútbol en Vigo, a principios de 1904 surge otra sociedad, el Petit Foot-ball Club, presidido por Francisco Estévez cuyos miembros visten camisa con pantalón blanco dándose la circunstancia de que los tres conjuntos existentes por entonces, Exiles Cable Club, Vigo Sport Club y el recién constituido puestos comúnmente de acuerdo emplean conjuntamente las instalaciones deportivas del Campo del Relleno, el único recinto habilitado. En 1905, con la entrada de nuevos socios, la sociedad con sede en Bouzas aprobará y presentará el 10 de septiembre sus Estatutos ante el Gobierno Civil siendo aprobados el 11 con el nombre ya de Fortuna Foot-ball Club, constando su primera junta directiva la formada por Roberto Pérez en la presidencia, Francisco Lago en la vicepresidencia, Luciano Vázquez como secretario y Paulino Iglesias en la tesorería, mientras vocales resultan Adolfo Ferrer, Raúl López y Francisco Estévez. Apenas un mes antes, en concreto el 2 de agosto, los miembros del que fuera Hispania Foot-ball Club, sociedad nacida en 1904, repiten los pasos dados por sus convecinos y se registran como Español Foot-ball Club vistiendo camisa blanquinegra a rayas y pantalón blanco con Jaime Rocha en la presidencia, A. Aboal como vicepresidente, E. Vidales como secretario, N. Montenegro en la vicesecretaría, J. Fontán como tesorero y los vocales J. Nerón y P. Rodríguez en un club cuyo benefactor es el conocido sportman vigués Francisco José Rodríguez.
Desde su nacimiento, tanto Vigo F.C. como Fortuna F.C. alineaban respectivamente en sus filas a unos cuantos jugadores británicos empleados del Cable en contraposición al Exiles F.C., enteramente repleto de ellos y al Español F.C., excluido de ellos, constituyéndose igualmente en 1905 otras sociedades como el Marítimo F.C., presidido por Manuel Figueroa que, luciendo camisa blanquiazul con pantalón azul, dieron pie en las postrimerías de ese año al establecimiento de un torneo regional organizado por el Vigo F.C. a instancias de haber recibido la real copa de plata. Este campeonato, calificado por los vigueses como Copa del Rey en comparación con el Campeonato de España que venía desarrollándose desde 1903 y oficiosamente como Campeonato de Galicia al ser invitadas varias sociedades del resto de provincias gallegas que finalmente no aceptaron participar -posteriormente sería la Federación Gallega quien lo oficializaría-, aún reunió a un quinto participante, el Regimiento de Infantería Murcia, combinado militar con sede en la ciudad presidido por Fernando Ocaña, resultando finalmente vencedor el Vigo F.C. mientras en la edición de 1906, con el mismo formato, triunfaría el Fortuna F.C.
El Vigo F.C. fue desde su origen un club de referencia en toda Galicia que llegó a labrarse una gran reputación en el resto del país fruto de su gran trabajo, pues en él se acomodaban los más selectos jugadores de la ciudad y como club pionero solía ser foco de atención para muchos aficionados que seguían sus evoluciones dentro de la cancha. El crecimiento de esta sociedad, deseosa de marcar diferencias respecto a su máximo rival ciudadano, el Fortuna F.C., le llevó en 1906 a fusionarse con otro conjunto local de poca enjundia, el New Club formado en 1905 al que literalmente absorbió, empezando a consolidarse tras esta unión un proyecto sólido que le llevó a proclamarse oficiosamente Campeón de Galicia en 1907 y representar por primera vez a su región en el Campeonato de España de ese año. La potencialidad de los olívicos era considerable y, presentes en Madrid, tan solo cedieron una derrota ante el postrero vencedor, Madrid F.C.
Aunque finalizado en otoño de 1907, a principios de 1908 el Fortuna F.C. estrenó el Campo de Bouzas, un nuevo recinto cedido por Rafael Tapias -el principal alentador del Real Club Náutico de Vigo- que, a pesar de estipular un alquiler nunca ejerció su derecho, fue sin duda bienvenido al descongestionar un abarrotado Campo del Relleno o del Malecón en el cual cada día era más difícil ponerse de acuerdo para jugar ante la cantidad de pretendientes que reunía. El Vigo F.C. seguía siendo el primero de la clase y validado su triunfo regional en 1908, los rojiblancos se presentaron nuevamente en la Fase Final del Campeonato de España participando en un anecdótico torneo donde sólo concurrieron los olívicos y el organizador, Madrid F.C. ante la negativa voluntad de inscripción de clubs vascos y catalanes, muy dolidos por el desarrollo del anterior campeonato donde se produjeron considerables irregularidades. Al final, 2-1 para los madrileños.
Tras la constitución del breve Industriosa F.C., club integrado por jóvenes formados en la Escuela de Artes y Oficios que trabajaban en los talleres de empresa de astilleros y los modestos Teis F.C., quien vestía camisa partida a dos mitades roja y azul con pantalón blanco y Alcabre F.C., tramitado por la Mayordomía Real el 26 de agosto de 1908 el Fortuna F.C. recibió el título honorífico de Real de manos de S.M. El Rey D. Alfonso XIII pasando a ser denominado Real Fortuna Foot-ball Club -Real Club Fortuna en prensa-, acción que puso las pilas a los blancos quienes tomaron por las bravas el relevo de los rojiblancos viguistas conquistando consecutivamente los Campeonatos Regionales de 1909, 1910, 1911 y 1912 sin apenas oposición. La supremacía de los de Bouzas desmoralizó progresivamente a los integrantes del Vigo F.C. los cuales, a la desesperada, intentaron fortalecer sus filas procediendo el 6 de mayo de 1910 a unirse mediante fusión por absorción con el languideciente Español F.C. conservando nombre y colores así como el Campo de Coia, un recinto estrenado el 9 de febrero de 1908 que le prestaba independencia y permitía alejarse del inapropiado a todas luces Campo del Malecón. Previamente a estos acontecimientos, gracias a la destacada intervención del Vigo F.C. y en especial del empuje del fútbol vigués, el 14 de noviembre de 1909 fue constituida con sede en la ciudad la Federación Gallega, siendo su primer presidente Manuel Bárcena de Andrés, Conde de Torre-Cedeira.
El año 1911 trajo buenas nuevas al fútbol local quedando constituido el 1 de julio el Sporting Club, un conjunto originado en su mayoría por antiguos miembros de la otrora poderosa sociedad Real Club Náutico de Vigo, popular centro recreativo creado el 7 de abril de 1906 que, a pesar de sus saneadas cuentas, no pudo esquivar su disolución el 24 de febrero de 1909. El Sporting Club, liderado y presidido por Fernando Bárcena, nacía con la voluntad expresa de acometer la práctica de cualquier actividad al aire libre bien fuera sobre el agua como sobre tierra, recuperando las regatas, el tiro al pichón además de hacer un guiño al fútbol con la optimización de una sección dedicada a este deporte. Al mes de ser constituido, la junta directiva dio de alta las distintas secciones tanto en la federación náutica como de fútbol, autorizando una negociación para emprender una fusión con el Vigo F.C. que no tuvo un éxito completo pero que habilitó el uso del Campo de Coia para el balompié y el tiro de pichón. Por su parte el Vigo F.C., muy pendiente de equipararse a los propietarios del escudo coronado rojo, el Real Fortuna Foot-ball Club, inició el 22 de agosto los trámites para obtener de la Casa Real la presidencia honoraria del club y, con ello, el título de Real, solicitud frustrada que finalmente no cuajó por razones desconocidas.
Si en 1911 la pretendida fusión entre Sporting Club y Vigo F.C. acabó en agua de borrajas, la convivencia entre ambas sociedades durante dos años al fin trajo sus frutos el 28 de septiembre de 1913 cuando, por mutuo acuerdo, se lograba la unión de ambos quedando los sportinguistas integrados en la estructura viguista. El resultado de la fusión comportaba el cambio de nombre de los rojiblancos quienes pasaban a denominarse Vigo Sporting Club, conservado su clásico maillot pero no su tradicional pantalón blanco, ahora azul, un acuerdo que no quedaba ahí y reportaba adicionalmente puntos muy positivos como la ampliación de disciplinas, el atletismo pasaba a ser uno de los principales pilares y, sobre todo, la presidencia de un gerente de garantías como el industrial conservero José Curbera Fernández, persona de gran tradición deportista con cuyo apoyo financiero e influencia se deseaba llegar lejos.
Iniciado 1914 el viejo sueño de los viguistas para ser presididos honoríficamente por S.M. El Rey D. Alfonso XIII al fin se convirtió en realidad gracias a la intermediación del diputado Ángel Urzáiz, celebrándose con gran alegría tal concesión el 6 de mayo. El ahora ya Real Vigo Sporting Club, potenciado a todos los niveles con la fusión del año anterior, conquistaba brillantemente en 1914 el ansiado cetro regional, soñado título que repetiría en las ediciones de 1917, 1918, 1919, 1920 y 1923 todas ellas bajo la presidencia del apreciado José Curbera.
La coexistencia de Real Fortuna Foot-ball Club y Real Vigo S.C. a partir de la igualdad de fuerzas alcanzada en 1914 se volvió más tirante si cabe en esta etapa, destapándose una enconada rivalidad que ni Manuel de Castro “Handicap” -posterior presidente de la Federación Gallega-, pudo reconducir cuando publicó en El Faro de Vigo en 1915 la conveniencia de unir ambas sociedades en una sola por el bien del fútbol local. Lejos de tomar en consideración tal recomendación, las palabras de Castro sirvieron para distanciar todavía más a ambas aficiones quienes, sirviéndose en pretéritos argumentos en contra de tal iniciativa, reafirmaron sus radicales y enconadas posturas para seguir cada por su camino como hasta la fecha.
Entre 1915 y los primeros años veinte Vigo vivirá una enorme explosión futbolística naciendo nuevos clubs que saciarán las ganas de jugar de muchos jóvenes los cuales, sin hueco en los primeros teams, desean practicar este deporte. La Gimnástica F.C., el más antiguo de ellos, originado en el histórico y muy popular Gimnasio de Vigo, tradicional centro inaugurado en 1878 quien viste camisa partida a dos mitades rojiblanca con pantalón blanco y desea competir en Primera Categoría será uno de ellos, acompañándoles otros como el C.D. Español, el Iberia F.C., el Iris F.C., el Galicia Sporting Club, el Chao Sporting, el Europa F.C., el Club Rápido de Bouzas todavía hoy en día vigente, el Deportivo de Coya y los teams del barrio de Lavadores entre los que se encuentran el Comercial F.C. y Victoria Sport Club, fusionados ambos en 1922 como Unión Sporting Club.
HISTORIA DEL CLUB:
1923 – 1930
Llegados a 1923 ambos clubs, Real Fortuna Foot-ball Club y Real Vigo Sporting Club -primeros constituyentes entre un selecto ramillete de clubs de todo el Estado de la Federación Española de Clubs de Foot-ball el 14 de octubre de 1909, aunque los sportinguistas como herederos del Vigo F.C.-, seguían competiendo denodadamente entre sí cada año en pos de representar al fútbol gallego en el Campeonato de España en oposición a los clubs coruñeses y, en menor medida, de los de la ciudad de Pontevedra, la capital provincial. Esta lucha, fratricida a todas luces y a la cual los fortunistas habían sumado los títulos regionales de 1915, 1921 y 1922 últimamente, garantizaba casi todos los años un club vigués en dicha competición, pero no lo suficiente fuerte para conseguir algún título.
El periodista Manuel Castro “Handicap”, redactor en Sprint y El Faro de Vigo quien en 1915 ya había reclamado una fusión entre los dos grandes, durante este periodo ocupó diversos puestos en el escalafón balompédico alcanzando en 1922 la presidencia de la Federación Gallega, puesto que abandonó a finales de año en favor de Camilo Bernárdez y la vicepresidencia en el Real Vigo Sporting Club que le valió para intentar tantear el terreno y ganarse adeptos para proponer una unión definitiva. Si años antes se había ganado las críticas por parte de las respectivas aficiones que no veían con buenos ojos este paso que con tanto ahínco había defendido desde su palco periodístico denunciando los males que aquejaban al fútbol vigués, a partir de la primavera las tornas cambiaron y lo que antes parecía imposible ahora adquiría tintes de verosimilitud.
Pese a existir cierta oposición, las conversaciones entre Real Vigo Sporting Club y Real Fortuna Foot-ball Club pronto se iniciaron para limar asperezas y converger ideas, llegándose a la conclusión de que su viabilidad era posible siempre y cuando olvidaran el pasado debiendo obligatoriamente partir desde cero. Dicho y hecho, contando inicialmente con el soporte de la Federación Gallega y de la Federación Española cuya autorización fue requerida el 22 de junio, con el avance de las reuniones la entente entre ambos fructificó y los dos decidieron aceptar la fusión de forma separada mediante el consentimiento de sus respectivos socios en sendas asambleas celebradas el 12 de julio. Siguiéndose la hoja de ruta del proceso ideado por Castro, la asamblea constituyente fue fijada para el viernes 10 de agosto en los salones de la Sociedad Gremial de Patronos, teniéndose como puntos preferentes la aprobación de unos Estatutos redactados por Juan Baliño, la aceptación de unos colores identificativos y la elección de un nombre que iba a acompañar al seguro formulismo Real Club cuando lo confirmara la Casa Real.
Superada la prueba estatutaria, sobre la mesa se propusieron hasta siete alternativas como eran Olímpico, Unión, Galicia, Atlántico, Oliva, Breogán y Celta, siendo descartadas cinco de ellas a excepción de Olímpico y Celta que gustaban más. La voluntad de los asistentes se pronunció abiertamente en favor de esta última quedando descartada la de Olímpico, confirmándose la de Club Celta como la elegida. En cuanto a los colores no hubo discusión, serían los de la Selección Nacional; camisa roja, pantalón negro y medias azules con vuelta blanca, siendo el maillot fundacional sustituido apenas un año después por uno azul que derivaría con el paso del tiempo en celeste mientras que el pantalón hacia finales de los años veinte se tornaba en blanco.
Abierto un plazo de varios días para la inscripción de socios y el preceptivo registro en el Gobierno Civil llevado a cabo el día 14, el 23 de agosto fue elegida la junta directiva siendo aclamado presidente Manuel Bárcena de Andrés, el Conde de Torre-Cedeira mientras Manuel R. Cadaval y Manuel Otero Bárcena resultaban vicepresidentes, Gaspar Barreras secretario y José Lago ocupaba la tesorería.
Deportivamente, el Real Club Celta -nombre adoptado oficialmente el 23 de febrero de 1924-, nació muy fuerte y pronto se hizo dominador del Campeonato Gallego conquistando las ediciones de 1924, 1925 y 1926 de forma consecutiva y, más tarde, las de 1930, 1932 y 1934. Mientras tanto, participaba en el Campeonato de España cuando la ocasión se lo permitía y disputaba un gran número de encuentros amistosos frente a clubs peninsulares, extranjeros e incluso sudamericanos. Cabe destacar el gran crecimiento experimentado por la afición viguesa durante ese periodo, propiciando con su aumento la inauguración del nuevo Estadio de Balaídos el 30 de diciembre de 1928 mediante la programación de un encuentro frente al Real Unión Club, de Irún, que culmina con el resultado de 7-0 para los vigueses, abandonando un Estadio de Coya que se le había quedado pequeño.
En 1928, tras muchos años de reivindicación a nivel nacional se organiza el primer Campeonato de Liga de clubs, no siendo invitado el club vigués a participar en Primera División, la más alta de las categorías. Esta medida causó un gran malestar en la entidad celeste, pues consideraban sus dirigentes que debía militar en ella al igual que el aventajado Real Sociedad de Foot-ball de San Sebastián, club espejo donde se miraron al no concebir quedar apartados de un derecho que según ellos les pertenecía. En su defensa alegaban los vigueses que el club guipuzcoano fue invitado por ser finalista en el Campeonato de España de 1913 mientras que el club gallego, habiéndolo sido en 1908 como Vigo Foot-ball Club, no recibía el mismo trato, argumento que chocaba de bruces con el federativo quien incidía en que Real Sociedad de Foot-ball de San Sebastián y Club Ciclista, vencedor de la edición de 1909, eran el mismo club. Así pues, habiendo perdido esta batalla fundacional, debuta en Segunda División durante la temporada 28/29 cosechando un noveno puesto que le hace perder la categoría por la reestructuración que sufre esta, mientras que la edición 29/30 la pasa en Regional proclamándose Campeón.
1930 – 1940
El cambio de década lo inicia disputando la sesión 30/31 en Tercera División, quedando de nuevo Campeón y ascendiendo a Segunda División al vencer en la Fase Final.
En abril de 1931, la II República se instala en el gobierno, perdiendo el club el título de Real y cambiando su denominación a Club Celta. Por el cuadro celeste pasan grandes jugadores como Pasarín, Polo, Chicha y Otero, llegando el club a proclamarse Campeón de Segunda División en la campaña 34/35. Sin embargo no consigue ascender a Primera División al quedar tercero en la Fase Final, objetivo que si alcanza en la edición 35/36 cuando, tras ganar el Campeonato, queda primero en esta fase. Este logro histórico viene acompañado de una crisis económica que se ve paralizado por la Guerra Civil.
En agosto de 1939 la directiva, encabezada por Braña Merino, recompone la plantilla y la prepara para afrontar la campaña 39/40. En esta quedan décimos y han de promocionar con el C.D. de La Coruña, venciéndoles por 1-0 en encuentro disputado en Madrid.
1940 – 1950
En la temporada 40/41 son nuevamente décimos en Liga, pero al ampliarse la categoría a catorce clubs no promociona. Durante 1940 cambia de nombre y recupera el título Real, pasando a ser Real Club Celta de Vigo. En las temporadas 41/42 y 42/43, consigue dos excelentes quintos puestos, pero en la 43/44 desciende a Segunda División al ser decimocuarto y último.
Un año en Segunda División le basta al club vigués para recuperar la categoría, pues tras ser tercero se impone mediante Promoción al Granada C.F., derrotándolo por 4-1 en partido disputado en Madrid. Desde la 45/46 hasta la 49/50 el Real Club Celta de Vigo permanece en Primera División en posiciones templadas de la clasificación, a excepción de la 47/48 en la que son cuartos en Liga y finalistas de la Copa del Generalísimo. Para llegar a la Final, el club vigués elimina al Club Atlético de Madrid y en semifinales al Real C.D. Español tras tres empates, (1-1, 2-2 y 2-2), y victoria final por 2-1. El 4 de julio de 1948 disputa la Final frente al Sevilla C.F., perdiendo por 1-4. Destacan por los celestes en estos años: Mesa, Roig, Pahíño, Miguel Muñoz, Juanito Vázquez y Areitio.
1950 – 1960
La década de los cincuenta significa el asentamiento del club entre los mejores, pues prácticamente durante toda ella permanece en Primera División. En el aspecto deportivo sufre altibajos, siempre en posiciones alejadas de los primeros puestos, los cuales le llevan incluso a promocionar en la sesión 52/53 para no descender. En esta, pese a ser tercero, consigue la permanencia gracias a que la S.D. La España Industrial no puede ascender al ser filial del C.F. Barcelona. El periplo en Primera División termina en la temporada 58/59 al ser decimosexto y último con tan solo cuatro victorias en su haber.
1960 – 1970
La década de los años sesenta se caracteriza por ser idéntica a la anterior, pero con los papeles totalmente cambiados. El club se haya en Segunda División y siempre se muestra con opciones al ascenso, protagonizando tres Promociones. Así en la campaña 59/60 tras ser segundo en Liga, el Real Valladolid Deportivo le cierra las puertas al empatar a dos en Vigo y derrotarles 5-0 en Pucela. En la edición 60/61 es el Real Oviedo C.F. quien lo hace: derrota por 1-0 en Oviedo y empate a dos en Balaídos.
En la campaña 65/66 tiene una nueva oportunidad, ahora frente al C. de D. Sabadell: derrota por 2-0 en la ciudad fabril y empate 0-0 en casa. En las temporadas 66/67 y 67/68 queda tercero y no consigue disputar la Promoción. Tanto sufrimiento tiene su recompensa cuando en la temporada 68/69, tras ser segundo, consigue subir directamente a Primera División al ser modificado el sistema previo de ascenso. El Real Club Celta de Vigo se reestrena en Primera División durante la sesión 69/70, con un periodo en el que disfrutará las mieles de la élite durante seis campañas consecutivas.
1970 – 1980
El club, como en anteriores ocasiones, sufre y padece para mantenerse en esta categoría, pero destaca entre todas la temporada 70/71 en la que finaliza sexto clasificado con jugadores como Lezcano y Manolo. En la campaña 74/75 es decimoséptimo a un punto de la salvación y desciende a Segunda División. Su paso por la categoría de plata es efímero, pues consigue al término de la edición 75/76 ser subcampeón y regresar a Primera División por la vía rápida. Lamentablemente su papel se convierte en el tramo final de los años setenta en el de equipo ascensor y tan pronto combina presencias en Primera División, caso de las sesiones 76/77 y 78/79, como en Segunda División A, caso de las campañas 77/78 y 79/80. Esta última supone un dramático descenso a Segunda División B, pues con una plantilla desequilibrada y sin repuestos de garantía, finaliza decimoséptimo.
1980 – 1990
El paso por la categoría de bronce durante la 80/81, supone un punto de inflexión en la entidad celeste, pues jamás se había alcanzado un puesto tan bajo desde su fundación. Se arma una plantilla con jóvenes canteranos y gente de calidad que retorne al club a categorías más apropiadas, y al final de la misma se proclama campeón con solo tres encuentros perdidos y gran distancia con el resto de equipos. La entrada de nuevas promesas hace que se reúna un equipo muy competitivo en la campaña 81/82 en Segunda División, y se concluya la temporada con el liderato bajo el brazo. El ascenso a Primera División es disfrutado por escaso tiempo por sus seguidores, pues al término de la 82/83 desciende nuevamente a Segunda al ser decimoséptimo, en virtud a la juventud e inexperiencia de su plantilla. El cuadro celeste intenta de inmediato el regreso pero habrán de pasar un par de temporadas para conseguirlo.
Tras el fracaso de la edición 83/84, será en la campaña 84/85 cuando se alcance al ser tercero en Liga. El club vigués no consigue estabilizarse en Primera División y nuevamente desciende a Segunda División, para volver a ascender en la 86/87. Con este ascenso, por fin se consigue un pequeño periodo de estabilidad y tres son las campañas consecutivas en las que consigue permanecer en Primera, destacando las 87/88 y 88/89 en las que es séptimo y octavo respectivamente. La campaña 89/90 la cierra con un descenso a Segunda División al ser decimonoveno con cinco victorias y alejado de los puestos de salvación. Durante estos años figuran jugadores como: Baltazar, Morí, Fenoy y Maté.
1990 – 2000
La década de los noventa la inicia con mal pie y a punto esta de descender a Segunda B. Un rápido enmiendo durante el verano de 1991 hace que se incorporen nuevos jugadores, reparando el error y consiguiendo concluir la 91/92 en primer puesto, arrollando en el campeonato. En la temporada 92/93 comienza la segunda gran época del club vigués en Primera División, pues doce van a ser las temporadas en las que Balaídos pueda ver fútbol de categoría. El club se convierte en Sociedad Anónima Deportiva, con un capital social de 577 millones de pesetas, pasando a ser Real Club Celta de Vigo, S.A.D.
Tras ser undécimo, en la campaña 93/94 consigue el Real Club Celta de Vigo llegar a la Final del Campeonato de España con el bilbaíno Txetxu Rojo en el banquillo. En esta ocasión el rival es el Real Zaragoza y el resultado a la conclusión del encuentro y tras disputa de prórroga es de empate a cero. En los penaltis el resultado es desfavorable y se pierde lamentablemente por 4-5 ante la desilusión general de su animosa afición. En Liga son decimoquintos y decimoterceros en la edición 94/95. Grandes jugadores pasan por el club como: el portero Cañizares, Patxi Salinas, Vicente, Gudelj y Engonga.
En la madrugada del 31 de julio al 1 de agosto de 1995 tuvo lugar un suceso que resultaría un hecho inaudito y sorprendente en la historia de nuestra competición. La Liga Nacional de Fútbol Profesional decidió no inscribir al Real Club Celta de Vigo y al Sevilla F.C., castigándoles con el descenso a la Segunda División B por no entregar en el plazo previsto la documentación exigida por a Ley del Deporte. La no presentación de dos avales, uno por club, 45 millones de pesetas por parte de los vigueses y otro de 85 por los sevillistas, fueron el detonante de dicha decisión. Esto desencadenó durante dos semanas, una serie de manifestaciones en la calle por parte de ambas aficiones protestando por tal medida. Mientras tanto, al Albacete Balompié y Real Valladolid C.F. les son adjudicadas las plazas de ambos. Tras dos semanas de tensas negociaciones, la LNFP decide readmitir a ambos clubs, sin descender a Real Valladolid ni Albacete Balompié, por lo que la División de Honor queda ampliada a veintidós clubs.
Tras este traspiés, el Real Club Celta de Vigo inicia un periodo de amplia reestructuración deportiva que deviene con los fichajes de grandes jugadores que protagonizarán grandes éxitos deportivos: Macinho, Goran Djorovic, Karpin, Dan Eggen, Cadete, Bruno Caires, Oskar Vales, Mostovoi, Penev, Makelele, Revivo y Dutruel, entre otros. En la temporada 97/98 se es sexto en Liga de la mano de Javier Irureta, consiguiendo entrar en la Copa de la UEFA. En la sesión 98/99 toma el relevo Víctor Fernández, acabando quinto en Liga. En la UEFA eliminan a F.C. Arges Pitesti: 0-1 y 7-0 en casa; Aston Villa F.C.:0-1 en casa y 1-3 en Birmingham; Liverpool F.C.: 3-1 en casa y 0-1; y ceden ante el Olympique de Marseille: 2-1 y 0-0 en casa. Séptimo es en la campaña 99/00, mientras en la Copa de la UEFA elimina al F.C. Lausanne Sport: 3-2 y 4-0 en casa; Aris F.C. de Salónica: 2-2 y 2-0 en casa; Sport Lisboa e Benfica: 7-0 en casa y 1-1; Juventus F.C.: 1-0 y 4-0 en casa; y cede ante el Racing Club de Lens: 0-0 en casa y 2-1.
2000 – 2010
En la campaña 00/01 es sexto en Liga, mientras en la Copa de la UEFA elimina al H.N.K. Rijeka: 0-0 en casa y 0-1; F.K. Crvena Zvezda (Estrella Roja): 1-0 y 5-2 en casa; F.C. Shakhtar Donetsk: 0-0 y 1-0 en casa; V.f.B. Stuttgart 1893: 0-0 y 2-1 en casa; y cede ante el F.C. Barcelona: 2-1 en casa y 3-2. Para llegar a la Copa de la UEFA, antes debió superar la Copa Intertoto, título que gana al vencer al P.K. Pelister de Bitola macedonio, Aston Villa F.C. en semifinales, y en la Final a los rusos del F.K. Zenit de San Petersburgo, siendo hasta la fecha su único trofeo internacional oficial.
En 2001 consigue llegar a la Final de la Copa del Rey. Se enfrenta nuevamente al Real Zaragoza y repite derrota, en esta ocasión sin paliativos al ser vencido por 1-3. En la campaña 01/02 es quinto en Liga, pero en la Copa de la UEFA elimina al S.K. Sigma Olomouc: 4-0 en casa y 4-3; y cayendo ante el F.C. Slovan Liberec: 3-1 en casa y 3-0. La temporada 02/03 es magnífica pues se alcanza el cuarto puesto Liga consiguiendo plaza para jugar la siguiente campaña en Champions League. En la Copa de la UEFA elimina al Odense B.K.: 2-0 en casa y 1-0; Viking F.K. de Stavanger: 3-0 en casa y 1-1; cayendo ante el Celtic F.C. de Glasgow: 1-0 y 2-1 en casa. La temporada 03/04 es la del desastre deportivo cuando nadie se lo esperaba y significa el adiós momentáneo a la Primera División y a las competiciones europeas. Pese a todo, el club olívico consigue disputar la edición de la Liga de Campeones al pasar la previa frente al S.K. Slavia Praga: 3-0 en casa y 2-0. En la Liga de Campeones se enfrenta a Club Brugge K.V.: 1-1 y 1-1; A.C. Milan: 0-0 en casa y 1-2; y Amsterdamsche F.C. Ajax: 1-0 y 3-2 en Vigo. En los octavos es eliminado por el Arsenal F.C.: 2-3 en casa y 2-0 en Londres, acabando su sueño europeo.
La edición 04/05 la pasa en Segunda División, mentalizado en recuperar la categoría perdida, objetivo que alcanza de sobras al ser segundo clasificado final. Cuando empieza la temporada 05/06, nadie espera que el club celeste vaya a quedar sexto clasificado. Gustavo López, Baiano, Silva y Ángel le catapultan de nuevo a la UEFA. La máxima exigencia de la Liga y la Copa de la UEFA incidieron negativamente en un Real Club Celta de Vigo que no pudo soportar tal presión en la 06/07, cayendo nuevamente en las redes de Segunda. A nivel internacional, participó en la UEFA tras pasar la previa frente al Standard Liége: 0-1 y 3-0 en casa. En la liguilla empató a uno en casa con el Eintracht Frankfurt F.1, venció 1-0 al Fenerbahçe F.K. y cayó derrotado ante el Newcastle United F.C.: 2-1, empatando con el U.S. Città di Palermo a uno en casa de estos. En los dieciseisavos, elimina al F.C. Spartak Mockba: 1-1 y 2-1 en casa; cayendo en octavos ante el S.V. Werder Bremen: 0-1 en casa y 2-0 en la ciudad germana.
La temporada 07/08 resulta aciaga para los intereses del club, quien en una segunda vuelta de Campeonato de Liga nefasta, acaba finalmente en decimoctavo puesto y descendiendo a Segunda División. Desde entonces milita en la categoría de plata, teniendo grandes problemas económicos que le impiden acceder a cotas más altas y que incluso le llevan a pelear por la permanencia como sucede en las últimas tres temporadas de la década en las que anda alejado de los puestos de cabeza como se presupone a una entidad histórica como la celeste y en la que se encuentra con muchos handicaps para subsistir.
2010 – 2020
En la campaña 10/11 se es sexto en Liga tras ocupar los primeros puestos en algunas jornadas, siendo relegado y teniéndose que conformar con disputar la Promoción de Ascenso por su irregularidad. En esta fase es eliminado en Primera Ronda por el Granada C.F. tras imponerse 1-0 en casa y ser derrotado en la capital andaluza también por 1-0, no pasando los penaltis al marcar cuatro goles por cinco de sus rivales. En la edición 11/12 el club celeste no desperdicia la oportunidad que se le presenta y tras una fenomenal temporada consigue quedar subcampeón de Liga a seis puntos de distancia del también gallego Real C.D. de La Coruña SAD, logrando el ascenso a Primera División por la puerta grande.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
- Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
- Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
- Historia de los clubes de Primera División 94-95. Coleccionable, Revista semanal Interviú (1995).
- Real Club Celta: Su vida, sus triunfos y sus derrotas a través de veinticinco años (1923-1948). Luis del Valle y Leoncio Silva (1948).
- Albores del fútbol vigués. 1905-1923. Celso González Villar. Editorial Faro de Vigo (1959).
- R.C. Celta: 75 años de historia (1923-1998). Coleccionable. Editorial Faro de Vigo (1997).
- Historia do fútbol galego. Anxo Varela. Edicions Lea (1997).
- Historia y estadística del fútbol español. Vicente Martínez Calatrava. Fundación Zerumuga (2002).
- Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
- Anuarios de la RFEF.
- Gaceta de Galicia. Diario.
- Correo de Galicia. Diario.
- Vida Gallega. Semanario.
- Los Deportes. Semanario.
- Faro de Vigo. Diario.
- Noticiero de Vigo. Diario.
- www.elmundodeportivo.es/hemeroteca Diario deportivo.
- www.lavanguardia.es/hemeroteca Diario.
- www.farodevigo.es Diario.
ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:
- www.celtavigo.net (Web oficial).
- www.historiadoceltadevigo.net (Web no oficial).
- www.fameceleste.blogspot.com (Web no oficial).
- www.halacelta.com (Web no oficial).
- www.yojugueenelcelta.com (Web no oficial).