Lágrimas franjiverdes
Aitor García – Franjiverdes.com
20.07.2015 – 11:08
La afición del Elche CF está hecha para sufrir. Eso no lo discute nadie. Y es que todo aficionado franjiverde puede contar con los dedos de una mano los partidos en los que no termina sufriendo en los minutos finales. Pero lo que está ocurriendo en estos momentos es otra cosa.
Realmente, no sé cómo nos ven desde otras partes de España. Pero yo, como aficionado de este equipo, sí que veo cómo son las cosas en las aficiones de otras localidades. Y creo que la afición que hay en Elche no la tienen muchos. Y es que nosotros nos sentimos hermanos. Solamente por compartir unos colores. Y aunque no nos conozcamos.
Es lógico, por otra parte. Es un equipo con muchísima Historia detrás. Un club que ha tocado al cielo, pero también se ha quemado en el infierno. A lo largo del siglo pasado, pasamos de una época dorada en la que fuimos uno de los equipos grandes en Primera, a estar a punto de la desaparición.
Pero en este siglo, algo parecido nos ha pasado ya. El ascenso a Primera, después de 25 años, fue un regalo para una generación que jamás había visto a su equipo luchar contra los grandes. En el recuerdo de muchos queda, ya para siempre, el empate a cero contra el Barcelona en casa, que supuso la primera permanencia; o el partido contra el Real Madrid que solo un penalti provocado gracias a Pepe pudo evitar que puntuáramos…
Y, como he dicho antes, después del cielo, el infierno. Después de casi una década con Sepulcre como presidente, a su salida el Elche se vio abocado a una crisis en la que lleva sumergido más de medio año.
Y no quiero entrar aquí a culpar a nadie. Sinceramente, me da igual. Porque los únicos perjudicados somos los aficionados de este equipo, que a saber qué pasará con él. Primera, Segunda, Segunda B, o más abajo aún. Quizá la desaparición. La nueva directiva, o eso dice, se encontró con una deuda de casi 18 millones de euros. Había que pagarla en un mes o seríamos descendidos. Y era una deuda inaplazable.
Ni la LFP, ni el TAD nos dan la razón. El Elche pagó la deuda con Hacienda con 17 días de retraso. Y a pesar de pagarlo, es sancionado. ¿Para qué pagamos, entonces, si nos van a sancionar igual?
En fin. Que al final, como siempre, los perjudicados somos los aficionados. Llevamos varios meses en los que muchos nos hemos hecho medianamente expertos en todo este tema jurídico. Y es que el porcentaje de noticias puramente deportivas es bajísimo. Por desgracia.
Solo espero que esto acabe pronto. Y si es con final feliz, mejor que mejor. Si no, tocará empezar de cero. Porque aunque empecemos desde abajo otra vez, el nivel de ilusión y de pasión por los colores franjiverdes seguirá por donde se quedó.
