El Atleti de los porteros.
El conjunto rojiblanco se ha especializado en ganar el premio Zamora, otorgado al portero menos goleado de LaLiga, demostrando que también se puede optar a los títulos fortaleciendo la retaguardia.
No hay duda de que la vuelta de Diego Pablo Simeone al Atlético de Madrid en calidad de entrenador revolucionó un club que llevaba tiempo intentando encontrar una identidad que el argentino le ha sabido dar. Basando su juego en aspectos defensivos, el equipo mejoró hasta convertirse en uno de los mejores de LaLiga Santander en un momento en el que Real Madrid y FC Barcelona se repartían todos los títulos de España.
El Cholo desembarcó en el conjunto colchonero en diciembre del 2011 y ya en esa primera campaña demostró que su apuesta iba por una línea en la que todos corrían hacia atrás y el 1-0 era un resultado más que válido siempre, independientemente del rival que tuviera enfrente.
Con la filosofía de “partido a partido” llegó y triunfó, en parte gracias al gran esquema táctico con el que defendía a sus porteros. El primero en comprobarlo fue un joven Thibaut Courtois que cedido por el Chelsea firmaba sus primeras palomitas en Europa. Tal fue su buen hacer defensivo que con tan solo 21 años recibió el Trofeo Zamora que se le entrega al meta que menos tantos ha encajado en una temporada de LaLiga, teniendo que haber jugado un mínimo de encuentros para poder optar a el mismo.
De Courtois a Oblak, siete Zamoras
A partir de aquí, al curso siguiente, en la campaña 2013-2014 el belga volvió a ser el mejor en su puesto y sumó un nuevo galardón a su palmarés. Así triunfaba en un país históricamente exportador de futbolistas como uno de los porteros más prometedores en el viejo continente.
Tras la salida de Courtois, que tuvo que regresar al Chelsea, llegó otro gran portero, Jan Oblak, al que entre unas cosas y otras, le costó arrancar. Ha llovido mucho desde entonces y en 2019 hay mucha gente que opina que es el mejor del mundo en su puesto, habiendo levantado cuatro Zamoras consecutivos (2016, 2017, 2018 y 2019) algo que anteriormente solo había logrado Víctor Valdés del FC Bercelona en la historia del galardón.
Así, si esta campaña Oblak logra emular la gesta con el nuevo balón de LaLiga Santander cada vez que aceche su portería y de nuevo se lleva el premio al meta menos goleado, se coronará como el mejor de siempre en un galardón que cuenta con auténticas leyendas tanto españolas como del resto del mundo.
Los porteros han mejorado la defensa
Todo esto demuestra que si el Atleti es un firme aspirante para aumentar su palmarés cada año es gracias no solo a los buenos porteros que tiene sino a lo bien que sabe defender su meta. Hay espacio para que los arqueros crezcan y se desarrollen convirtiéndose en auténticos héroes gracias al Cholo y su sistema de juego. No hay que olvidar que el argentino le ha cambiado la cara a un equipo que ahora sí que es aspirante a ganar una Champions League en la que los pronósticos de Betway sitúan a los colchoneros con cuotas de 21,00 si levantan el trofeo este curso, cuota revisada el 16 de septiembre. Si lo consiguen seguramente sea gracias a una soberbia actuación de Oblak, como en su día firmara Courtois en la final de Copa del Rey que levantó contra el Real Madrid.
Por tanto, parece que esta campaña, además de ver la clásica pelea entre Real Madrid, FC Barcelona y Atlético, a la espera de ver si algún otro equipo puede entrar en la lucha por ganar LaLiga, hay algún aliciente más para hacer caso a Simeone y contratar el servicio de televisión digital, ya que Oblak está listo para mejorar los registros de Valdés y convertirse en el portero con más Zamoras de la historia.
En definitiva, Oblak, Courtois, Moyá y los que vengan son y han sido muy buenos guardametas pero lo que realmente les convierte en los mejores es el tener la confianza de una defensa que se compone de 10 futbolistas que se dejan la piel por cada balón y marchan al unísono de la voz de su comandante desde el banquillo, Simeone.