Historial del Club Deportivo Binéfar
DATOS GENERALES:
- Nombre completo: Club Deportivo Binéfar
- Ciudad: Binéfar
- Provincia: Huesca
- Comunidad Autónoma: Aragón
- Fecha de constitución: 1941
- Fecha de federación: 1941
CAMBIOS DE NOMBRE:
- Club Deportivo Binéfar de Educación y Descanso (1941-1948)
- Club Deportivo Binéfar (1948- )
TÍTULOS NACIONALES:
5 Ligas en Tercera División:
- 1980/81
- 1981/82
- 1987/88
- 1996/97
- 1997/98
ESTADIO:
- Nombre: Estadio Municipal Los Olmos
- Año de inauguración: 7 de septiembre de 2008
- Cambios de nombre: Estadio Municipal Los Olmos (2008- )
- Capacidad: 2.000 espectadores
OTROS ESTADIOS:
- Campo Municipal de Educación y Descanso / L’Aigüera (1941-1946)
- Campo Municipal El Segalar (1946-2008)
- Estadio Municipal Los Olmos (2008- )
TRAYECTORIA EN LIGA:
ESCUDOS DEL CLUB DEPORTIVO BINÉFAR. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
UNIFORMES DEL CLUB DEPORTIVO BINÉFAR. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:
ORÍGENES DEL FÚTBOL EN BINÉFAR:
Situado en la comarca oscense de La Litera, de la que ejerce de capital administrativa, el municipio y localidad de Binéfar es un centro comercial y de servicios que presenta una importante actividad agropecuaria destacando su lonja que es todo un referente para el mercado nacional. Transformado su término en regadío a principios del pasado siglo gracias al Canal de Aragón y Cataluña, contando con cerca de diez mil vecinos su economía se basa en la agricultura, la ganadería y las industrias agroalimentarias, mecánicas y textiles.
Contando con cerca de dos mil ochocientos vecinos al empezar los años veinte, hizo aparición el fútbol en el municipio en junio de 1922 cuando un grupo de amigos liderados por los hermanos Juan y Agustín Basols acordaron constituir un club de fútbol al que denominaron Sociedad Cultural Deportiva Binéfar, siendo elegido primer presidente Ángel Vilalta mientras el puesto de secretario recayó en Antonio Bartos. Seguidores los hermanos Basols del F.C. Barcelona, los colores azul y grana para la camiseta combinados con pantalón negro fueron su bandera localizándose inmediatamente después en la carretera de Esplús un recinto donde poder jugar titulado Campo del Cuadrao. Sin muchas nociones del juego todavía, su primer encuentro fue ante el Barbastro F.C. con el que se perdió por un abultado 0-7 tomándose revancha meses después cuando el 11 de marzo del siguiente año se le pudo vencer 2-0.
La llegada de resultados positivos aumentó la moral de los literanos hasta el punto de ser uno los clubs partícipes en la constitución de la Federación Aragonesa, hecho acaecido el 13 de septiembre de 1923, quedando considerado como club de Segunda Categoría, tercera en importancia a nivel regional tras las Serie A y Serie B de Primera Categoría, conquistando el Campeonato Provincial oscense en 1925 y perdiendo el Regional ante la Real S.A. Stadium, de Zaragoza. Campeón provincial de nuevo en 1926, los elevados costes de los viajes y escasos medios para posibilitar ingresos determinaron a finales de ese mismo año su languidecimiento disminuyendo drásticamente la práctica de encuentros hasta terminar desapareciendo a principios de 1927 debiendo esperar todavía un tiempo hasta encontrar un digno sucesor.
Transcurridos dos años sin fútbol en la capital literana, en marzo de 1929 quedó constituida la Juventud Deportiva Binefarense con el ánimo de reestablecer la práctica de este deporte y recuperar el espacio perdido debutando en fecha 3 de marzo a domicilio frente a la U.D. Fonz, rival al que derrotó por 1-6 siendo su primera victoria. Vistiendo camiseta azul celeste con pantalón blanco y haciendo uso del Campo del Cuadrao, la nueva sociedad ingresó en la Federación Oscense disputando en 1930 la Copa de Huesca a título provincial llegando a la Final frente al C.D. Huesca donde, después de dos encuentros, hubo que realizar un tercero de desempate en Monzón imponiéndose los de la capital por 4-0 dejando a los literanos subcampeones.
Dado de alta en la Federación Aragonesa en 1931, la J.D. Binefarense fue considerada como de Segunda Categoría participando en el campeonato de la temporada 31/32 no pudiéndolo terminar al retirarse de la competición una vez empezado por carecer de medios económicos para desplazarse hasta Zaragoza donde residían seis de los ocho clubs de la categoría, retirada que significó su lamentable desaparición acto seguido haciendo constatar que, aun a pesar de contar con jugadores de valía, los males financieros siempre derrumbaban cualquier iniciativa binefarense a nivel competitivo.
En medio de tantos problemas económicos y sumándose ya dos proyectos fallidos, en 1934 quedó constituida la Agrupación Deportiva Binefarense continuando como sus antecesores haciendo uso del Campo del Cuadrao pero sin pasar el trámite de darse de alta en la Federación Aragonesa para poder competir a nivel oficial. Con una directiva consciente de que esta aventura no se podía emprender sin tener un respaldo económico, el conjunto literano que repetía camisa azul celeste y pantalón blanco se dedicó a jugar encuentros amistosos frente a clubs oscenses y de la continua provincia ilerdense con la cual mantenía una gran relación comercial cerrándose su progresión en julio de 1936 con el estallido de la Guerra Civil al quedar Aragón fracturada de arriba abajo en dos mitades, la franja oriental en poder de las tropas gubernamentales y la occidental en manos de los nacionales. Sin posibilidad de jugarse la competición oficial y con el frente muy próximo durante todo el transcurso de la guerra, el fútbol local quedó aplazado hasta la llegada de mejores tiempos.
Tomada la localidad a finales de 1938 por las tropas nacionales, después de la guerra todo el deporte en Binéfar quedó en manos de Falange quien, a través de su Organización Juvenil, desde mediados de 1939 controló entre otras disciplinas al fútbol creando un equipo que representó a la localidad frente a otros conjuntos de su misma consideración del resto de la provincia siendo también habituales los desplazamientos del Binéfar O.J. a localidades de la vecina de Lérida. Desaparecido el antiguo Campo del Cuadrao, en la carretera de Esplús, se habilitó uno nuevo en lo que hoy en día es parque junto a la Avenida de Nuestra Señora del Pilar denominado oficialmente Campo Municipal de Educación y Descanso y popularmente como L’Aigüera, recinto marcadamente provisional desde el cual se inició la recuperación del fútbol local.
HISTORIA DEL CLUB:
1941 – 1950
Con tres mil quinientos vecinos, tras un par de años con las huestes juveniles como máximo exponente y coincidiendo con el inicio de la alcaldía de José Lacort Muzas, la idea nacida a principios de 1941 de crear un campeonato provincial de fútbol impulsó en primavera la constitución del Club Deportivo Binéfar de Educación y Descanso tomando como colores el azulino para su camiseta y el blanco para el pantalón, los usados por sus antecesores durante la década anterior, acordando como escudo el municipal y siguiendo empleando el Campo de l’Aigüera como base para proclamarse campeón provincial de esa edición y subcampeón en la de 1942.
La buena marcha del conjunto azulino, afluencia de aficionados a los encuentros y pésimas condiciones de L’Aigüera repercutieron en las autoridades municipales adquiriéndose en septiembre de 1943 unos terrenos en la partida de El Segalar en previsión de construir un nuevo campo de deportes, debiendo transcurrir todavía unos años hasta ver la luz. Mientras tanto el C.D. Binéfar de E. y D. siguió su progresión en el fútbol aragonés conquistando el Campeonato Provincial de 1944, el de Liga de Tercera Regional de la temporada 44/45 siendo semifinalista del Campeonato de Aficionados regional de 1946. Precisamente en este último año fue inaugurado el nuevo Campo Municipal de El Segalar titulado oficialmente como de Educación y Descanso, área deportiva donde además se le añadió una piscina en 1950 para beneficio de la población.
Siguiendo su estela de conjunto prominente y uno de los mejores oscenses, en la campaña 47/48 fue subcampeón del grupo de Primera Regional provincial y campeón de Aragón de Aficionados alcanzando los Cuartos de Final a nivel nacional donde sucumbió ante el C.F. Barcelona Amateur, disputando en la edición 48/49 después de ser segundo en Liga tras el C.D. Calatayud la Fase de Ascenso a Tercera División donde finalizó tercero sin poder conseguir el objetivo pero con el nuevo nombre de Club Deportivo Binéfar desde agosto de 1948. En la sesión 49/50, estando el club presidido por Juan Mitjana Corney, se conquistó el campeonato de Primera Regional aragonesa tras desempatar con el C.D. Hernán Cortés, de Zaragoza, consiguiendo el pase a la liguilla para tratar de ascender a Tercera División, fase en la que se enfrentó a Real Unión Club, de Irún y C.D. Calahorra que defendían su plaza y a los aspirantes C.D. Basconia, de Basauri, S.D. Éibar y C.D. Anaitasuna, de Azcoitia terminando terceros tras eibarreses y basauritarras en cuando solo había premio para los dos primeros clasificados.
Afortunadamente para sus intereses el ascenso a Segunda División de C.D. Logroñés y U.D. Huesca originó un hueco para los literanos en la categoría pero, cuando todo estaba previsto para que los azulinos jugaran en el tercer nivel nacional, un error de bulto por parte de la Federación Aragonesa dejó fuera a los binefarenses aprovechando la ocasión la Federación Catalana para inscribir al C.F. Tárrega ante la incredulidad de propios y extraños. Denunciada y reclamada la situación por el C.D. Binéfar, la Federación Española dio la razón a los oscenses concediéndoles una plaza pero, al estar aprobada con anterioridad la presencia del club catalán, el máximo organismo nacional no se desdijo dejando el grupo impar para el siguiente campeonato.
1950 – 1960
Al comenzar los años cincuenta Binéfar era una localidad próspera e industriosa que atraía a muchos comerciantes y gente de todo el país en busca de fortuna llegando a los cinco mil vecinos con muchos de ellos abonados al club. El fútbol, convertido en la máxima distracción para el fin de semana, adquirió una nueva dimensión con el debut en Tercera División quedando el club oscense encuadrado en el Grupo III donde participaban aragoneses y catalanes realizando un muy buen papel en su estreno de la temporada 50/51 al finalizar octavo. En la campaña siguiente 51/52 el grupo contó con la participación de la U.D. Mahón debiéndose desplazar a Baleares por primera vez en su historia en un difícil torneo donde no hubo tiempo para florituras ocupándose el decimotercero puesto.
En la sesión 52/53 el Grupo III volvió a ser área reservada para catalanes y aragoneses concluyendo en décimo puesto, pasando en la edición 53/54 los aragoneses a formar parte del Grupo II donde compartieron Liga con vascos, riojanos y navarros no pudiendo el C.D. Binéfar aguantar el ritmo con graves problemas económicos tras varios años en la élite nacional. Sin apenas recursos pero con un equipo profesional, en el transcurso del torneo sus mejores piezas marcharon a otros clubs al no cobrar dejando la plantilla tan castigada que, en las dos últimas jornadas, no se pudo acudir a Erandio y Santander para contender respectivamente ante S.D. Cultural Durango y S.D. Rayo Cantabria quedando su contador a cero puntos por doble incomparecencia, decimonoveno y colista. Al no descender ningún club ese año al ser aprobada la ampliación de la Tercera División en número de participantes y grupos, los oscenses pudieron continuar en la categoría sin renunciar a ella formando parte del Grupo V en la temporada 54/55 que fue adjudicado a la Federación Aragonesa que, por entonces, incluía a los clubs sorianos finalizando en segundo puesto tras la S.D. Arenas, de Zaragoza. Clasificado para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División en cuando apenas un año antes estaba casi desahuciado, el C.D. Binéfar compitió en el Grupo II junto a siete aspirantes más terminando séptimo delante de la Ag.D. Rayo Vallecano, colista, mientras le precedieron Ag.D. Plus Ultra, de Madrid, C.D. Manresa, Gerona C.F., S.D. Arenas, C.D. Elgóibar y C.D. Tudelano.
La experiencia, gratificante sin duda y una oportunidad histórica para ver en el Campo de El Segalar a clubs de solera, resultó positiva no pudiéndose repetir en la campaña 55/56 al ser quintos, pero teniendo una continuidad en la sesión 56/57 cuando, de nuevo en un magnífico torneo y en un grupo aumentado de diez a dieciocho participantes, fueron segundos a dos puntos de la zaragozana S.D. Arenas volviendo a colarse en una Promoción de Ascenso a Segunda División, la segunda en pocas fechas. En esta fase el club azulino apostó fuerte y con una excelente plantilla consiguió eliminar en la Primera Ronda al C.D. Azkoyen después de perder 2-1 en la localidad navarra de Peralta y vencer en casa 2-0, y en Segunda Ronda al C.D. Europa, de Barcelona después de vencer en casa 1-0, caer derrotado en la ciudad condal por 4-3 y precisar de un desempate en el que se venció por 1-0. Clasificado para disputar la gran Final con el ascenso a la división de plata en juego, la suerte quiso que se enfrentaran a La Felguera-Siderúrgica C.P., potente club asturiano que defendía su plaza en Segunda División y resultó inabordable al derrotar contundentemente en la ida por 8-0 a los oscenses quedando el encuentro de vuelta en un trámite con victoria azulina por 2-0.
En la edición 57/58 los binefarenses perdieron potencial ocupando la novena plaza en Liga lejos de los puestos de cabeza, esquivando el descenso a Primera Regional en la temporada 58/59 por solo dos puntos en un campeonato donde los nervios estuvieron a flor de piel. Sin el dinero de años anteriores y con una plantilla muy similar a la del último curso, la campaña 59/60 confirmó el descenso de los oscenses a Primera Regional siendo decimosextos y colistas en un mal año que significó su despedida de la categoría y el cierre de un histórico ciclo que duró diez temporadas consecutivas viviendo los aficionados binefarenses grandes acontecimientos.
1960 – 1970
Después de tan gloriosa etapa los primeros años sesenta presentaron la otra cara de la moneda con un C.D. Binéfar que no fue ni la sombra de lo que apenas había sido unas temporadas atrás teniendo una mal entrada en el campeonato 60/61 en el que, jugando en Primera Regional, fue sexto en el Grupo I de la categoría que recogía a los clubs oscenses y del norte de Zaragoza. Tras unas campañas donde el público fue apartándose progresivamente del Campo de El Segalar como consecuencia de los malos resultados obtenidos por el primer equipo del club, una vez concluida la temporada 62/63 en Primera Regional la directiva estimó oportuno retirar el equipo sénior de la competición oficial quedando en activo tan solo el equipo juvenil.
Sin fútbol de primer nivel y en medio de una grave crisis, los aficionados se vieron de repente huérfanos de un representante que había competido durante un largo tiempo en Tercera División, incluso había promocionado por una plaza en Segunda División. Nada era como antaño hasta que a principios de 1965 un grupo de aficionados, añorando tiempos pasados, decidió volver a la actividad y montar un equipo sénior con el cual competir oficialmente. Dicho y hecho, después de contar con algunos jugadores a los que, poco a poco se sumaron más fichajes de postín, la directiva presidida por Francisco Miñana Mateo apostó fuerte por acoplar un potente plantel con el cual hacerse con el primer puesto en el grupo único de Primera Regional de la temporada 65/66 logrando el objetivo y, con ello, el ascenso directo a Tercera División.
En la temporada 66/67, de nuevo con la confianza que proporciona disponer de un presupuesto para hacer cosas importantes, el C.D. Binéfar se reestrenó en el tercer nivel nacional dentro del Grupo V donde competía la élite del fútbol aragonés entrando con cautela al finalizar decimotercero, puesto que fue mejorado en la sesión 67/68 concluyendo octavo. Llegados a 1968 la Federación Española, empeñada en reestructurar las categorías nacionales y aumentar a priori la modernización del fútbol acoplándose a los nuevos tiempos, acordó reducir los grupos de Tercera División agrupándolos por proximidad geográfica. A los clubs aragoneses les fue asignado el Grupo III junto a guipuzcoanos, navarros, sorianos y riojanos teniendo un año complicado en el que fue decimoséptimo descendiendo a Primera Regional los clasificados en los puestos decimonoveno y vigésimo. Se había salvado el primer asalto pero en la edición 69/70 la Federación Española elevó la purga y decidió que, para temporada 70/71, perderían su plaza los clasificados entre los puestos noveno al vigésimo, ambos inclusive. El C.D. Binéfar, consciente de sus limitaciones económicas y que alcanzar la permanencia era tarea casi imposible, hizo lo mejor que pudo reuniendo una plantilla sin demasiadas pretensiones que terminó decimoctava descendiendo a Regional Preferente.
1970 – 1980
Al comenzar la década de los años setenta, conservándose todavía parte de la plantilla del curso anterior y estando el club presidido por Antonio Lagüens Planes, el C.D. Binéfar se proclamó en la temporada 70/71 subcampeón del grupo único de Regional Preferente tras el Deportivo Aragón escapándose la oportunidad de ascender directamente a Tercera División y debiendo jugar una eliminatoria a doble encuentro ante el C.D. Ilicitano como aspirante que no tuvo resultado positivo al perder en la localidad alicantina por 4-1 e imponerse en casa por 1-0.
Desaprovechada la oportunidad se pensó que en lo sucesivo llegaría el momento de ascender pero, la existencia de otros rivales con los mismos objetivos y plantillas no tan potentes como se creía, frustraron sus planes. Cuarto en la campaña 71/72 y tercero en la sesión 72/73 precedido por U.D. Barbastro y Club Atlético Monzón, tras un quinto puesto en la edición 73/74 el equipo azulino fue perdiendo fuelle competitivo obteniendo un discreto noveno puesto en la temporada 74/75 para concluir vigésimo y último en una paupérrima campaña 75/76 que le condenó a perder la categoría y sumirse en Primera Regional.
El C.D. Binéfar con este descenso tocó fondo máxime cuando, desde la Federación Española, se confirmo la creación de una nueva categoría titulada Segunda División B que venía a ocupar el tercer puesto entre las categorías nacionales desplazando a los binefarenses hasta el sexto nivel. Sin la afluencia al Campo de El Segalar de otros tiempos, el club campeó como pudo la edición 76/77 terminando en decimocuarta plaza siendo rescatado para competir en Regional Preferente gracias a una ampliación de la Primera Regional que pasó de tener un grupo único a dos.
Beneficiados por tal decisión federativa, en la sesión 77/78 se remontó el vuelo concluyendo en tercer puesto tras C.D. Numancia, de Soria y C.D. Teruel, consiguiendo al término de la temporada 78/79 bajo la presidencia de Francisco Águeda Hernando retornar a Tercera División por la puerta grande al proclamarse campeón igualado a puntos con la S.D. Ejea. La Tercera División de la campaña 79/80 era por entonces una categoría en constante cambio que buscaba asentarse a nivel autonómico, siendo este torneo una de las piedras previas para cimentar un proyecto que pretendía que cada federación territorial dispusiera de un grupo en la categoría. Mientras esto ocurría catalanes y aragoneses convivieron en el Grupo IV finalizando los literanos en noveno puesto.
1980 – 1990
Dando continuidad a la idea de conceder un grupo de Tercera División a cada territorial, en la temporada 80/81 la Federación Española concedió el Grupo IV a las federaciones Aragonesa, que por entonces incluía a los clubs de la provincia de Soria y a la Navarra, idem con La Rioja, presentando el C.D. Binéfar un plantel muy compacto entrenado por Ignacio Bergara que consiguió, rivalizando con Club Endesa Andorra y Deportivo Aragón, igualados estos dos a puntos, proclamarse campeón por primera vez en su historia de la categoría. Obtenido el título, para refrendar tan épica temporada hacía falta superar la Promoción de Ascenso a Segunda División B para poner una guinda al pastel, deseo que para su lamento no se cumplió después de eliminar en Semifinales al Albacete Balompié venciendo en casa 1-0 y perdiendo en la capital manchega 2-1 pasando por penaltis y, en la Final, no poder con un complicado C.F. Lorca Deportiva quien se impuso 2-1 en la localidad murciana y 0-1 en el Campo de El Segalar ante la frustración de su afición.
En la campaña siguiente, 81/82, el club literano se hizo con los servicios del técnico Manolo Carreño sumando su segundo título en la categoría y, además, de forma consecutiva, superando por un solo punto al Club Atlético Osasuna Promesas por lo que tuvo una nueva oportunidad para tratar de ascender a Segunda División B, accediendo a la disputa de una Promoción donde en Semifinales logró superar al C.D. Salmantino después de perder en la capital charra por 1-0 y en El Segalar imponerse por un contundente 4-0. Clasificados para la gran Final, los azules se lo jugaron todo a una carta frente al C.D. Orense realizando un gran encuentro en la capital gallega al imponerse por 1-3 esperando con ansia el de vuelta en casa donde le esperaba su afición y no se podía errar. Comprometidos con el ascenso los aragoneses vencieron nuevamente por 3-1 ante el delirio de todos los presentes consiguiendo por primera vez en su historia, no el ascenso al tercer nivel nacional que ya hizo en 1950, pero sí a una categoría como la Segunda División B con lo que significaba.
Dividida en aquellos tiempos la categoría de bronce en dos grupos de veinte componentes cada uno atendiendo razones geográficas coincidiendo el primero con en norte peninsular y el segundo con el centro-sur, por razones obvias al conjunto aragonés le correspondió el Grupo I debutando durante la sesión 82/83 junto a otros clubs aragoneses, vascos, catalanes, riojanos, gallegos, navarros, asturianos más la presencia del canario C.D. Tenerife y del F.C. Andorrá. Debiendo aumentar su presupuesto considerablemente para afrontar tal odisea, el C.D. Binéfar tuvo como entrenador inicial a Javier Ruiz de Lazcano quien, debido a los malos resultados, fue sustituido al cabo de doce jornadas por Manolo Buján salvando de forma casi milagrosa la categoría al perder el último encuentro de Liga y hacer lo mismo la S.D. Cultural Erandio, quien descendió igualada a puntos. Después de ser decimoséptimo y pasarlo bastante mal, en la edición 83/84 se confió el proyecto al técnico salvador Manuel Buján preparando un plantel acorde a la categoría que ofreció un gran resultado en el mismo grupo y prácticamente ante los mismos rivales finalizando en una notable séptima plaza, el mejor registro de su historia en esta división, ganándose la confianza de directivos y aficionados.
De nuevo con Buján en el banquillo, la temporada 84/85 fue otro éxito para los oscenses pues con una plantilla muy similar a la del curso anterior y un presupuesto bajo, anduvieron próximos a los puestos de cabeza y alejados de la cola finalizando octavos. En la campaña 85/86, presionada la Federación Española por algunos clubs históricos en horas bajas, se comunicó a todos los participantes que, una vez finalizado el campeonato, la categoría sería reducida de dos a un grupo único con veinte componentes. La medida, muy dura e incomprensible, conllevó que los clasificados entre los puestos décimo y vigésimo, ambos inclusive, descendieran por lo que el C.D. Binéfar salió a por todas desde el principio sin suerte pues, a dos puntos de la permanencia, concluyó decimosegundo descendiendo a Tercera División. Lo que en otros años hubiera sido un resultado digno para continuar en la categoría, de repente fue un mal trago hallándose en la sesión 86/87 en el Grupo XVI constituido íntegramente por clubs aragoneses.
Comprobado el desastre cometido por la Federación Española en Segunda División B, durante el desarrollo de la Liga el máximo organismo nacional rectificó a la marcha ante las quejas recibidas determinando que, para el campeonato siguiente, el tercer nivel sería ampliado a cuatro grupos de veinte participantes respectivamente asignándose a cada federación territorial un número de plazas según la cantidad de clubs federados. Sabiéndose que a la Federación Aragonesa le correspondía tres, el C.D. Binéfar en un torneo muy reñido luchó hasta el fin por una de ellas pero la presencia de tres grandes rivales como Club Endesa Andorra, C.D. Teruel y U.D. Fraga, les dejó en cuarto puesto sin premio. Frustrados por no ascender pero con un equipo muy competitivo y casi sin rival en el grupo aragonés, la edición 87/88 fue un paseo para los celestes perdiendo tan solo tres encuentros y anotando cien goles para conseguir el título y, paralelamente, el ascenso directo a Segunda División B sin mediar promoción según el sistema competitivo de aquellos años.
En su retorno a la categoría de bronce el C.D. Binéfar se encontró en la temporada 88/89 con una categoría fraccionada en cuatro grupos correspondiéndole el Grupo II donde competían aragoneses, catalanes, baleares, riojanos, navarros y el F.C. Andorrá, disfrutando de un buen año en el que bajo la dirección del técnico José Luis Iranzo Simón terminaron octavos. En la campaña 89/90, siguiendo en el mismo grupo, el desarrollo del campeonato discurrió por similares cauces pero ahora bajo la batuta de José Sigifredo Martínez «Sigi» concluyendo en noveno puesto cerrando una década donde el club oscense estuvo en el candelero nacional entre los más destacados.
1990 – 2000
Al empezar los años noventa el C.D. Binéfar siguió acomodado en el Grupo II de Segunda División B disputando su tercera temporada consecutiva en este nuevo ciclo bajo las órdenes del técnico Victor Manuel Pinilla aunque, a diferencia de los cursos anteriores, con más problemas de los previstos pues durante todo el campeonato 90/91 tuvo que emplearse a fondo para evitar el descenso terminando finalmente decimocuarto. Tras agotarse los recursos económicos, en el verano de 1991 se completó una plantilla para luchar por la permanencia que no tuvo el desenlace esperado pues ni Pinilla en las quince primeras jornadas ni Esgardo Calvo Marini en el tramo final pudieran evitar un descenso que se antojó utópico desde el principio. Vigésimos y colistas, los celestes perdieron la categoría descendiendo al Grupo XVI aragonés donde el plantel, muy distinto al año precedente, no consiguió alcanzar en la temporada 92/93 una de las primeras cuatro plazas concluyendo en un discreto séptimo puesto.
Pasado el mal trago y asumido que regresar a Segunda División B no era factible en lo inmediato al estar las arcas semivacías y cohabitar con clubs provistos de superiores presupuestos, la campaña 93/94 todavía con un buen equipo fue similar al año anterior terminando de nuevo séptimo. Como no hay dos sin tres, la sesión 94/95 fue una repetición de las anteriores ocupando la séptima plaza, siendo preocupante la edición 95/96 en la cual no solo no se estuvo a la altura sino que se concluyó más allá de la mitad de la tabla yendo hasta el puesto decimosegundo. Con el cambio de directivos y entrada de dinero fresco, la temporada 96/97 fue un rayo de esperanza realizándose un magnífico campeonato en el cual los literanos pusieron la sexta marcha venciendo en veintiocho de los treinta y ocho encuentros, consiguiendo el primer puesto y cuarto título en la categoría. Depositadas muchas esperanzas en el ascenso al tercer nivel nacional, los oscenses se encontraron con una Promoción con formato de liguilla a doble encuentro donde solo el primero ascendía, teniendo un mal comienzo que les lastró pese a tener probablemente el mejor plantel de los cuatro participantes. Con un punto de ventaja el ascenso fue para el Real Racing Club «B» siendo tercero el Deportivo Alavés «B» y cuarto el Club Haro Deportivo.
Tras el disgusto el C.D. Binéfar no se amilanó y en la campaña 97/98 salió nuevamente desde el inicio con el objetivo de ser primero y poder promocionar para luchar por algo que se deseaba con muchas ganas, logrando como se esperaba y además con mucha holgura, concluir campeón. Clasificado para disputar la temible Promoción de Ascenso, en esta fase la Real Sociedad de Fútbol «B» fue su máximo rival llegando al final igualados ambos a puntos pero con el gol average favorable a los oscenses, mínima ventaja que le sirvió en bandeja el ascenso de categoría siendo tercero el Peña Sport F.C., de Tafalla y cuarto el Castro F.C. Catalpultado a Segunda División B, el club literano abordó este tercer ciclo en el tercer nivel nacional con la ilusión de aguantar muchos años preparándose para iniciarse con buen pie en la sesión 98/99 dirigido por David Rodrigo. Ubicado en el tradicional Grupo II, el torneo fue un sufrimiento de principio a fin llegando a la última jornada con el agua al cuello. Un empate en Gernika ante el titular y una serie de resultados favorables le evitaron descender incluso disputar la siempre traicionera Promoción de Descenso terminando decimoquinto. En la edición 99/00 Juan Carlos Oliva dirigió a los celeste en sus primeras once jornadas siendo sustituido por el exjugador local profesional Agustín Abadía quien, con bastante atino, supo lograr la permanencia terminando decimocuarto.
2000 – 2010
Coincidiendo con el cambio de siglo el C.D. Binéfar afrontó su tercera temporada consecutiva en Segunda División B contando con Agustín Abadía en el cargo de entrenador y teniendo como máximo objetivo la permanencia. El curso 00/01 como se esperaba a priori no fue nada fácil, máxime cuando los puestos de descenso estaban muy cerca y no se conseguía distanciar de ellos lo suficiente para gozar de tranquilidad. Avanzado el torneo se evitó el descenso directo pero una vez completado no la diputa de la Promoción de Permanencia, temida fase en la que se jugó su futuro inmediato en Semifinales ante la U.B. Conquense empatando 0-0 en casa y perdiendo en la localidad castellano-manchega por 2-1. Condenado a llegar hasta el último suspiro, en la Final se jugó el todo por el todo ante el C.F. Fuenlabrada saliendo cara en la moneda al empatar en casa 0-0 y en la localidad madrileña 1-1 haciendo valer el valor doble de los goles a domicilio.
Salvados por la campana, la sesión 01/02 fue casi una repetición de la anterior en el aspecto deportivo con un conjunto muy cercano al descenso aunque con final feliz pues solo la existencia de rivales en peores condiciones les salvó del descenso directo y de disputar la Promoción de Permanencia terminando decimoquintos conducidos por Francisco Javier Rúa. Acostumbrados a padecer y a sobrevivir caminando por el hilo de alambre, en la temporada 02/03 Francisco Javier Rúa repitió en el cargo consciente de que el plantel asignado carecía de la categoría suficiente para eludir el descenso decidiendo la directiva binefarense que, pasara lo que pasara, iba a terminar el campeonato en el banquillo. Con cinco victorias, nueve empates y noventa tantos encajados, el club ocupó el último puesto descendiendo a Tercera División con dignidad a la espera de tiempos mejores. Conservando una plantilla notable para competir en Tercera División, la campaña 03/04 resultó entretenida aunque el primer puesto tuvo dueño con el intratable Utebo F.C., finalizando segundo en Liga y obteniendo el correspondiente pase a la Promoción de Ascenso. Con un nuevo sistema provisto de Semifinales y Finales a doble encuentro, a los oscenses les tocó en suerte medirse en Semifinales al Ct.D. Bezana empatando 0-0 en la localidad cántabra y venciendo 4-2 en casa por lo que del ascenso sólo les separaba la Final, eliminatoria que fue una frustración al perder 1-2 en casa ante el C.M. Peralta y empatar en la localidad navarra una semana más tarde 1-1.
No conseguido el ascenso y con una economía mermada, los años posteriores fueron un calvario para la entidad celeste siendo un aviso de lo que podía venir la sesión 04/05 en la que se ocupó la decimoquinta plaza mirando de reojo los puestos de cola. Después de una tímida recuperación en la campaña 05/06 donde fueron décimos, llegaron dos nuevos resbalones en las ediciones 06/07 y 07/08 terminando en ambas decimotercero resultando un auténtico fracaso la temporada 08/09 que significó un borrón al ser decimoctavo y perder la categoría. El C.D. Binéfar tocó fondo descendiendo a Regional Preferente, categoría que no ocupaba desde hacía muchos años, aunque se recompuso de manera rápida pues sin apenas oposición terminó el campeonato 09/10 en el primer puesto de su grupo retornando a Tercera División de forma directa. El 7 de septiembre de 2008 el C.D. Binéfar estrenó el nuevo Estadio de Los Olmos frente al C.D. Zuera con derrota por 1-3, una obra que costó 2,4 millones de euros sustituyendo al entrañable Campo de El Segalar.
2010 – 2020
El reencuentro con el Grupo XVII aragonés de Tercera División fue mejor de lo esperado y, aprovechando el talante de la plantilla, la temporada 10/11 le dejó un magnífico resultado al terminar cuarto tras Andorra C.F., Real Zaragoza «B» y Utebo F.C. que le abrió las puertas de un posible ascenso a Segunda División B. Sin embargo el sueño se rompió a las primeras de cambio pues en Cuartos, después de vencer en casa al Racing Club de Ferrol por 1-0, en el encuentro de vuelta disputado en la localidad gallega se perdió 2-0 quedando eliminado. En la campaña siguiente 11/12 el conjunto celeste perdió potencial y finalizó la Liga en novena plaza llegando un nuevo desastre en la sesión 12/13 cuando, con un plantel de circunstancias, se ganaron cinco encuentros y se perdieron treinta y tres siendo colista destacado con quince puntos yendo de cabeza a Regional Preferente.
El C.D. Binéfar atravesaba su segunda gran crisis en pocos años muestra de su inestabilidad económica y aunque en la edición 13/14 se terminó en primer puesto consiguiendo el ascenso directo a Tercera División, lo cierto es que éste no fue fácil y hubo que luchar denodadamente ante la presión que ejercieron sus rivales. Acomodado de nuevo en el Grupo XVII, la temporada 14/15 se vivió más pendiente de evitar el descenso que otra cosa consiguiendo el objetivo por pocos puntos y concluyendo el campeonato en decimoquinto puesto. Consciente la directiva binefarense de que el puesto del club era militar en Tercera División en estos tiempos de vacas flacas, en los torneos siguientes se prepararon plantillas con ese fin terminando siempre alrededor de la zona media de la tabla clasificatoria pero sin sobrepasar la décima plaza como ocurrió en la campaña 15/16 siendo decimotercero en la sesión 16/17 y decimoquinto de nuevo en la 17/18. Tras mejorar en la edición 18/19 en la que concluyeron decimoprimeros, llegó la convulsa temporada 19/20 en la cual el protagonista no fue el fútbol sino la crisis sanitaria que, empezado el mes de marzo, obligó a la Federación Española a suspender las jornadas que restaban para concluir el campeonato decretando que todos los clubs implicados conservaran la categoría.
BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:
- Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
- Anuarios de la RFEF.
- Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles (Tomo II). Vicent Masià Pous (2011).
- La Tierra. Diario.
- La Voz de Aragón. Diario.
- Diario de Huesca. Diario.
- www.diariodelaltoaragon.es Diario digital.
- www.elperiodicodearagon.com Diario general.
- www.heraldo.es Diario general.
- www.elmundodeportivo.com/hemeroteca Diario deportivo.
- www.marca.com Diario deportivo.
- www.as.com Diario deportivo.
ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:
- www.cdbinefar.com (Web oficial).