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Clubs Históricos

 

Historial del Palencia Club de Fútbol

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Palencia Club de Fútbol
  • Ciudad: Palencia 
  • Provincia: Palencia
  • Comunidad Autónoma: Castilla y León
  • Fecha de constitución: 1963
  • Fecha de federación: 1 de septiembre de 1966

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Otero Club de Fútbol (1963-1968)
  • Otero Palencia C.F. (1968-1969)
  • Palencia Club de Fútbol (1969-1984)

 

TÍTULOS NACIONALES:

1 Liga de Segunda División B:

  • 1978/79

 

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal La Balastera
  • Año de inauguración: 12 de septiembre de 1943
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal La Balastera (1943- 2006)
  • Capacidad: 12.500 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo de Otero (1963-1966)
  • Estadio Municipal de la Balastera (1966-1984 )

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL PALENCIA CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL PALENCIA CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN PALENCIA:

Bañada por el río Carrión y próximo a su desembocadura en el río Pisuerga, el municipio y ciudad de Palencia, capital de la provincia homónima, se asienta sobre una extensa planicie conocida como Tierra de Campos flanqueado por los cerros del Otero y San Juan, contando con una población de ochenta mil vecinos. Con una economía que gira principalmente en torno al sector servicios, tiene gran peso también la industria donde la automovilística y derivados, junto con la agroalimentaria y materiales para la construcción forman parte de su paisaje. Provista de un importante patrimonio histórico-artístico, son relevantes sus obras de ingeniería religiosa y civil en el casco antiguo contando, además, con un elevado número de estatuas y monumentos conmemorativos.

Con veinte mil habitantes a mediados de los años diez del pasado siglo XX, Palencia era una modesta capital de provincia donde la práctica deportiva se ceñía al ciclismo y a las típicas competiciones pedestres tan de moda durante la época. La implantación de colegios privados vinculados a la doctrina cristiana como el de los Maristas y el de La Salle, pronto fueron motivo para el uso del fútbol como herramienta educativa y pedagógica con fines a la formación cultural y física de la juventud, convirtiéndose con el paso de los años en una de las disciplinas deportivas preferidas.

No obstante, y aún a pesar de ser los colegios la base principal para difundir el fútbol en la ciudad, los primeros equipos organizados parten de otra organización en franca expansión, Los Exploradores de España, una asociación creada en nuestro país por Teodoro de Iradier en 1912 a imagen y semejanza de los Scouts. Constituido el 20 de enero de 1914, Los Exploradores de Palencia fueron un grupo juvenil con elementos entre diez y dieciocho años que defendían los valores cristianos y patrióticos, empleando al igual que hacían los colegios, el fútbol como elemento perfecto para la formación del espíritu. En 1918 contaban con varios equipos y no era en absoluto difícil verlos jugar en los descampados y superficies aptas para la práctica deportiva al aire libre.

Iniciados los años veinte, otro grupo juvenil con raigambre religiosa tomó la iniciativa futbolística en la capital castellana, Los Tarsicios, constituido básicamente por muchachos que se apoyaban en la congregación eucarística del mismo nombre y cuya edad no sobrepasaba los dieciséis años pero que tiraban del resto de la juventud local para implantar definitivamente un deporte en pleno auge.

El gran paso se dio en 1922 con la constitución de la primera sociedad deportiva dotada de una sólida estructura: el Sporting La Salle, una entidad presidida por Pablo Bilbao creada al abrigo del colegio lasaliano que, a diferencia de las precedentes, tenía una clara vocación polideportiva. Así tan frecuente era verlos organizando encuentros de fútbol como carreras pedestres o ciclistas, deporte este último en el que se implicaron notablemente a lo largo de varios años.

En 1923 al Sporting La Salle le surgió un rival local con aspiraciones, el Palencia Deportiva, club presido por César Fernández que tenía como objetivo preferente ser el referente palentino para cualquier práctica deportiva. Ambas sociedades vivieron un buen momento durante ese año siendo partícipes en la constitución de la Federación Castellano-Leonesa de Foot-ball ocurrida el 2 de abril, de modo que incluso se iniciaron contactos para una probable fusión que pareció fuera a cristalizar a finales de septiembre. Lejos de la realidad, la pretendida fusión fue un fracaso absoluto y a finales de año la Federación organizó su primer Campeonato oficial, el de la temporada 23/24, donde el Sporting La Salle quedó emplazado en Primera Categoría mientras el Palencia Deportiva lo fue en Segunda Categoría.

El 19 de marzo de 1924 el Sporting La Salle inauguró el Campo del Picadero consolidando su hegemonía en la ciudad ante un muy humilde Palencia Deportiva que terminó desapareciendo ese mismo año, iniciándose un periodo lleno de altibajos donde la entidad colegial no conseguía destacar en la región castellanoleonesa perdiendo peso al descender al Grupo B de Primera Categoría. Sin apenas afición y sin un terreno de juego en plenas condiciones que le acompañara en su peregrinaje, los lasalianos dejaron de competir finalizada la campaña 26/27. Con esta retirada se inició un periodo sombrío donde Palencia carecía de un representante futbolístico, no cuajando ninguno de los proyectos que se intentaron establecer para recuperar una situación añorada apenas un tiempo antes.

El 24 de marzo de 1929 quedó constituido el Club Deportivo Palencia, por aquel entonces con una indumentaria que luego se varió, vistiendo con camiseta morada y pantalón negro. El club palentino empezó a jugar en el Campo de las Eras del Monedero, paseando su andadura deportiva por los campeonatos menores de la Federación Regional del Oeste (antigua Federación de la región de Castilla-La Vieja). Contemporáneas al nacimiento de este club fueron otras sociedades que mantuvieron una trayectoria paralela: la S.D. Unión Castilla el 1 de septiembre de 1929, con camisa rojiblanca y pantalón negro y el C.D. Fábrica Nacional de Armas en 1930, club representativo de la Fábrica Nacional de Armas radicada en la ciudad.

El C.D. Palencia pasó poco después a jugar en el Campo de Grijota quedando Campeón de Segunda Categoría en la temporada 29/30, ascendiendo a Primera Categoría en la sesión 30/31. Hasta la edición 31/32 permaneció en la Federación Castellano Leonesa para quedar integrado en la campaña 32/33 dentro de Primera Categoría ya en la Federación Cántabra. Con la sesión 33/34 quedó encuadrado en Segunda Categoría mientras que otros clubs de la capital palentina eran inscritos en Tercera Categoría como fueron los casos del Celta F.C., el Racing Club, el Sporting Palentino, la U.D. Castilla, el C.D. Español o el C.D. Bailén. Dentro de un periodo con continuos cambios, en la sesión 35/36 los clubs de las provincias de León, Palencia y Zamora pasaron a la Federación Asturiana de Fútbol de manera provisional por encontrarse en esos momentos en constitución la Federación Leonesa de Fútbol, hallándose en dicha situación cuando se produjo el estallido de la Guerra Civil en julio de 1936.

El C.D. Fábrica Nacional de Armas, tras un breve historial y una vez acabada la contienda bélica, se fusionó en 1941 con el representante tradicional, el C.D. Palencia -el cual pese a ser Campeón de Primera Categoría en la sesión 40/41 se encontraba debilitado tras la Guerra-, dando forma al nuevo C.D. Fábrica Nacional de Palencia. Empezando a jugar desde la Regional Castellana el primer ascenso se produjo en la temporada 42/43 logrando el título regional y alcanzando luego en la Liga de Campeones el ascenso a Tercera División, categoría en la que jugaron esa misma temporada integrados en el Grupo I formado por clubs gallegos y la S.D. Ponferradina. El 26 de septiembre de 1943 disputó su primer encuentro en La Balastera teniendo como rival a la U.D. Orensana, conjunto al que derrotó por 4-0.

Llegada la sesión 46/47 y presidido por Benito Cid de la Llave se proclamó campeón del Grupo II pasando a disputar la Fase Intermedia, torneo que no pudo superar para acceder a la Fase Final al ser cuarto. A partir de la temporada 48/49 cambió en su indumentaria el pantalón, permutando el color negro por el blanco. Paralelamente, en lo que restaba de década hicieron aparición otros clubs de la ciudad como el Deportivo Fábrica Nacional -que vistió camiseta blanca y negra a listas con pantalón azul-, el C.D. Fábrica Nacional Castilla -con camisa morada y pantalón negro-, la Sociedad Gimnástica Palentina -que vistió enteramente de blanco-, el Juventud C.F. -con camisa verde y pantalón azul-, la Cerámica Otero -que lo hizo con camiseta y pantalón blancos-, la Sociedad Piel Balompié, el Español C.F., el Edelco C.F. o el C.D. Pisuerga.

El C.D. Fábrica Nacional de Palencia durante ocho temporadas consecutivas militó en Tercera División hasta que al final de la campaña 50/51, ya como C.D. Palencia desde el 24 de abril de 1950, descendió a Primera Regional por problemas económicos tras ganar el primer partido de la Promoción de Permanencia en Santiago de Compostela ante el titular, pero sin jugarse el de vuelta dentro del Grupo I. Este declive no obedeció a la falta de patrocinio de la Fábrica Nacional de Armas sino a un grave error de los dirigentes del club quienes, después de organizar como cada año numerosas tómbolas y sorteos para recaudar fondos “olvidaron” pagar a Hacienda y acabaron generando una deuda que envió primeramente al club a Regional en el citado 1951 y, en segundo término, a su desaparición un año más tarde.

En el verano de 1952, tras la desaparición del C.D. Palencia e impulsado por Manuel Sieiras -antiguo jugador y directivo de este club-, se aprovechó la estructura de la S.D. Avenida Santander, un modesto club constituido en 1951, inscrito en la Federación del Oeste y quien vestía originariamente camisa azul y blanca a listas con pantalón blanco, para darle un nuevo impulso con la incorporación de exjugadores del C.D. Palencia transformándolo en Atlético Palentino. Con esta nueva denominación, acompañada por el cambio de colores vistiendo ahora camiseta morada con pantalón azul, haciendo uso del Campo Municipal de Deportes y presidido por Cándido Guantes Rodríguez el club permaneció tres temporadas en Primera Regional proclamándose campeón en la 53/54, logrando ascender a Tercera División después de repetir el primer puesto en el Grupo II de la Segunda Fase y superar una última eliminatoria frente al C.D. Villanovense en la que venció 0-1 en tierras pacenses y empató en casa 2-2 el 13 de junio de 1954.

Convertido en el primer club de la ciudad, a partir de la temporada 54/55 inició una etapa en Tercera División pasando a disputar sus encuentros en el Estadio de la Balastera, al igual que la S.D. Unión Castilla, otra sociedad local de reciente constitución quien, vistiendo camisa rojiblanca a rayas con pantalón azul, debutó en la categoría manteniéndose en ésta hasta la edición 57/58. En la temporada 55/56 el Atlético Palentino cambió su nombre a Club Atlético de Palencia y, estando presidido por Pablo Sáez Martín, fue segundo clasificado dentro del Grupo XV disputando la Fase Intermedia de acceso a Segunda División donde no tuvo éxito.

Con la afición repartida entre estas dos sociedades y debilitados ambos clubs poniéndose trabas en sus respectivas carreras deportivas, estando el Club Atlético de Palencia en Tercera División y la S.D. Unión Castilla en Primera Regional, en 1960 se iniciaron las conversaciones para una definitiva unión de la cual saliera beneficiado todo el fútbol palentino quedando constituido el Palencia Club de Fútbol, nueva sociedad quien, ocupando la plaza que tenía el Club Atlético de Palencia en Tercera División, partió desde esta categoría vistiendo inicialmente íntegramente de blanco. En la temporada 62/63, vistiendo nuevos colores como los tradicionales camiseta morada y pantalón azul, el Palencia C.F. se clasificó en segundo puesto en el Grupo II tras el C.F. Béjar Industrial promocionando para intentar ascender a Segunda División, midiéndose ante el C.F. Badalona quien le derrotó 3-1 en la ida, empatando en casa 0-0 en un encuentro marcado por la polémica surgida con veladas y no tan veladas acusaciones por parte de la afición hacia directivos y jugadores a raíz de una presunta venta de la eliminatoria.

La marcha económica del Palencia C.F., debido a las grandes inversiones realizadas para militar en superior categoría, acabaron teniendo repercusiones muy graves sobre la plantilla de la campaña 63/64 hasta el punto de no cobrar, motivo por el cual la marcha deportiva fue un desastre perdiendo la categoría y descendiendo a Primera Regional. El destino con el que se iba a encontrar el conjunto palentino durante la próxima sesión 64/65 era inviable para recuperarse financieramente con lo cual, mediante Asamblea de sus socios, se decidió no inscribir a la primera plantilla y sólo competir con el equipo de juveniles en el Campeonato Provincial.

HISTORIA DEL CLUB:

1963 – 1970

Contando la ciudad con algo más de cincuenta mil vecinos y anticipándose al inminente colapso del Palencia C.F., en 1963 surgieron varias iniciativas entre los aficionados para postularse, cada uno dentro de sus posibilidades, como herederos de un club que se intuía muy cercano a la desaparición, surgiendo el Castilla C.F. constituido por antiguos seguidores de la S.D. Unión Castilla vistiendo camiseta rojiblanca con pantalón azul y estando presidido por Narciso Ortega Ramos, el Ruedo Palentino constituido el 1 de septiembre que vestía camiseta negriazul con pantalón negro y el Otero Club de Fútbol, con camiseta azul y pantalón negro.

Tomando el Castilla C.F. y el Ruedo Palentino parte de la Primera Regional palentino-zamorana en la temporada 64/65, los rojiblancos consiguieron ascender a Tercera División estrenándose en la campaña 65/66 con un octavo puesto mientras que los negriazules fueron campeones de la Primera Regional palentina no pudiendo ascender en la Promoción de Ascenso, entablándose conversaciones durante el verano de 1966 entre directivos del Ruedo Palentino y del Palencia C.F. para, empleando la base de los negriazules, volver este último a la competición con la promesa de conseguir el ascenso. Disputada la sesión 66/67, el Palencia C.F. compitió en Primera Regional provincial quedando en última posición y empatado a puntos con otro conjunto local, el Otero C.F. recién federado y presidido por Antonio Calvo descendiendo ambos a Segunda Regional, teniendo un curso irregular el Castilla C.F. al concluir decimotercero en Tercera División.

En la edición 67/68 el Castilla C.F. terminó colista y descendió a Primera Regional, declinando el Palencia C.F. competir mientras el Otero C.F., líder en su categoría, consiguió el ascenso a Primera Regional de modo que, para la siguiente temporada, 68/69, estos dos clubs de la capital palentina tenían asegurado verse las caras en esta categoría. Conscientes gran parte de los aficionados palentinos de que el Castilla C.F. no podía colmar sus aspiraciones de crecimiento y de que el futuro pasaba por agrandar al Otero C.F., durante el verano de 1968 se llegó al acuerdo de renovar la directiva oterista al completo e incorporar a nuevos gestores quedando el 10 de agosto nombrado Bonifacio Aguayo Lorent como nuevo presidente. Cambiada la denominación a Otero Palencia C.F. y permutados los colores a camiseta morada con pantalón blanco, el campeonato fue un mano entre los renovados oteristas y los castellanos, ahora bajo la denominación Club Deportivo Castilla, proclamándose los primeros campeones y accediendo ambos a la Promoción de Ascenso donde, entre ocho aspirantes palentinos, burgaleses y leoneses, el Otero Palencia C.F. fue el gran triunfador consiguiendo plaza en Tercera División al ser primero.

Conseguido el ascenso, el conjunto oterista consiguió de la Federación del Oeste permiso para competir durante su campaña de debut 69/70 en Tercera División bajo el nombre de Palencia Club de Fútbol desprendiéndose del sustantivo que le vio nacer, teniendo un buen debut en el Grupo II donde concluyó en séptima plaza rodeado de conjuntos castellano-leoneses, cántabros y vascos mientras el C.D. Castilla era segundo no pudiendo ascender en la Promoción de Ascenso al ser cuarto en su grupo.

1970 – 1980

En 1970, empezando un nuevo ciclo, la Federación Española organizó la Tercera División con cuatro grupos de ámbito interregional basados en razones de proximidad geográfica con veinte participantes cada uno quedando el Palencia C.F. ubicado en el Grupo II donde se reunieron clubs castellano-leoneses, navarros, aragoneses, vascos, madrileños y castellano-manchegos sumándose la incorporación del por entonces denominado Tenerife Atlético Club, posterior campeón de Liga, estando los morados a un buen nivel hasta el punto de ser terceros tras los canarios y Real Valladolid Deportivo por lo que obtuvieron plaza para promocionar a Segunda División, eliminatoria a doble encuentro disputada como aspirante ante el Real Oviedo C.F. quien conservó su plaza al imponerse 2-0 en la ida y 1-2 en La Balastera.

Siguiendo en el Grupo II, la campaña 71/72 no fue tan buena luchando por no tener que jugar la Promoción de Permanencia, destino traicionero que se evitó por un solo punto terminando el decimoprimero puesto. Cambiado al Grupo I en la sesión 72/73 compartiendo torneo junto a clubs gallegos, asturianos, cántabros, vascos y castellano-leoneses, el conjunto palentino estuvo a un notable nivel intentando atrapar una de las dos primeras plazas pero la competencia de un gran Orense C.F. que finalmente ascendió y C.D. Ensidesa, con quien empató a puntos, le relegaron al tercer puesto quedándose sin nada. En la edición 73/74 el Palencia C.F. volvió a competir en el Grupo II junto a madrileños, navarros, vascos, aragoneses, castellano-leoneses y castellano-manchegos concluyendo en sexto puesto, ingresando en la temporada 74/75 nuevamente en el ya conocido Grupo I donde le esperaban gallegos, asturianos, cántabros, vascos y castellano-leoneses en un curso donde intentó estar arriba pero sin opciones reales de promocionar al ser cuarto precedido por Real C.D. de la Coruña y C.D. Ensidesa, empatando a puntos con el Racing Club de Ferrol.

La marcha ascendente del Palencia C.F. durante estos años estuvo acompañada de buenos fundamentos contando la ayuda del Castilla Palencia C.F., sociedad que en el campeonato 71/72 se convirtió en filial adoptando el nombre de Atlético Palencia y, paralelamente y constituido en 1975, el Palencia Promesas Club de Fútbol, filial de nuevo cuño que se convirtió en el primero del club morado desbancando al Atlético Palencia que desapareció en 1978.

Después de regresar al Grupo II donde fue noveno en la campaña 75/76, en 1976 la Federación Española anunció cambios estructurales implementando una nueva categoría titulada Segunda División B a caballo entre la Segunda División por arriba y la Tercera División por abajo que iba a ser desplazada al cuarto nivel nacional. Siguiendo en el mismo grupo y sabiéndose de antemano que, salvo el primer clasificado que ascendía directamente, los clasificados entre lo puestos segundo al décimo, ambos inclusive, pasarían a la nueva división, los palentinos tuvieron que esforzarse para no perder un nivel finalizando octavos y certificando su puesto el 29 de mayo de 1977 tras imponerse al Real Unión Club de Irún por 1-0, tanto de Mota. Clasificado para jugar en Segunda División B y manteniendo, por lo tanto, plaza en el tercer nivel, el Palencia C.F. se estrenó en esta categoría coincidiendo con la sesión 77/78 y en el Grupo I que cubrió todo el norte, noroeste y centro peninsular terminando en decimotercero puesto siendo, tras la llegada a la presidencia de Bonifacio Aguayo y la contratación del exjugador y ahora técnico Francisco Gento, memorable la temporada 78/79 al comandar en solitario la clasificación general a la conclusión del torneo y ascender a Segunda División después vencer en el último encuentro por 1-0 al Pontevedra C.F. con gol de Teixidó de penalti.

Teniendo continuidad Francisco Gento en el banquillo morado, el estreno en Segunda División de la campaña 79/80 atrajo a numerosísimo público a las gradas del viejo Campo de La Balastera que fue ampliado en capacidad, pasando el Palencia C.F. más dificultades de las previstas para mantenerse y debiendo esforzarse al máximo para, en el último encuentro del campeonato, asegurar su continuidad al empatar 2-2 en casa ante el Real Club Recreativo de Huelva finalizando en decimoquinta posición, un punto por encima del descenso.

1980 – 1990

La temporada 80/81 fue la segunda consecutiva del club castellano en Segunda División llegando al banquillo José Luis Montes con el objetivo prioritario de conseguir la permanencia, deseo que no se cumplió debido a los malos resultados obtenidos perdiendo la categoría en el penúltimo encuentro de Liga ante el Castilla C.F., filial en aquellos tiempos del Real Madrid C.F. Descendido a Segunda División B, la directiva morada confió nuevamente su proyecto a José Luis Montes afrontando la campaña 81/82 con optimismo al disponer de una buena plantilla que, vistos los resultados, no defraudó finalizando el campeonato en segundo puesto, hecho acontecido el 16 de mayo de 1982 tras vencer 2-0 al Zamora C.F., a tres puntos del Barcelona Atlético, por lo que ascendió nuevamente a Segunda División, un reto difícil de conseguir para clubs en su misma situación.

Invertido mucho dinero en el ascenso y partiendo con ciertas dificultades económicas, el Palencia C.F. se reestrenó durante la sesión 82/83 en la categoría de plata asumiendo que iba a ser un campeonato complicado de desenlace incierto. Contratado el técnico Luis Costa, los buenos resultados sorprendieron a todos estando el ascenso a Primera División a tiro de piedra pero, impagos a los jugadores, exilios como local a otras capitales vecinas como Valladolid y Burgos al clausurarse La Balastera en dos ocasiones, además de otras cosas que tiene el fútbol, impidieron la materialización de lo que era un sueño para todos los aficionados concluyendo en quinto puesto, a tres puntos de la gloria. Entre dos espadas por la deuda acumulada superior a los cien millones de pesetas y con una plantilla a la que se debían cuarenta y cinco, el riesgo de desaparición en la edición 83/84 era inminente pero la Junta Gestora presidida por Carlos Herrero, a trancas y barrancas después de quitarse de en medio la mitad de la deuda, como pudo logró inscribir al club en la categoría a expensas de lo que pudiera pasar. Contando con el técnico Juan Carlos Touriño y una plantilla debilitada por la marcha de sus mejores jugadores, el equipo se resintió muchísimo como era de esperar no sirviendo de nada la llegada del técnico José Pérez García quien, a falta de siete encuentros, sólo pudo corroborar el descenso a Segunda División B, decimonoveno y a cuatro puntos de la salvación.

Si complicada fue la campaña anterior, más si cabe era de esperar la temporada siguiente 84/85 con el club en Segunda División B dentro del Grupo I. Sin embargo, la plantilla cumplió. Entrenados por José Pérez en sus primeras cinco jornadas, Teófilo Dueñas en las cinco siguientes y Rafael Alcaide «Crispi» en las veintiocho restantes, se pudo sobrevivir terminando en decimosegunda plaza cuando, debido a la desesperante situación del club, todo apuntaba a que el colapso era inminente. Teniendo continuidad Rafael Alcaide en el banquillo, la sesión 85/86 empezó sobre el hilo de alambre formándose una plantilla ajustada para mantener la categoría a expensas de lo que pudiera ocurrir en el plano financiero. En lo deportivo notable fue el esfuerzo de técnico y jugadores terminando en un plausible séptimo puesto pero, una vez terminado el torneo, en julio de 1986 se debían treinta y seis millones de pesetas a la plantilla. Requerido el aval por parte de la AFE quien facilitaba el pago en tres fracciones, el 25 de agosto sólo se había hecho frente al primer pago después de aprobar los socios del club dos días antes mediante Asamblea General seguir en activo.

No efectuándose el pago de las dos fracciones restantes, el club morado podía darse de hecho como descendido a Tercera División por la vía administrativa antes de empezar la temporada 86/87 por lo que, anticipándose a un mal mayor, se desvinculó al por entonces filial, Club Deportivo Cristo Olímpico constituido en 1975 y filial desde 1980 del Palencia C.F. tras la desaparición del Palencia Promesas C.F. y así tener de dónde agarrarse en el futuro próximo. No pudiendo solventar sus deudas y pasados los días concedidos, viéndose que el club era inviable en Tercera División se estimó no inscribirlo en ninguna competición siendo su último acto.

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
  • Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951)
  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Anuarios de la RFEF.
  • Archivo privado de Miguel Santos.
  • El Diario Palentino. Diario.
  • El Día de Palencia. Diario.
  • Imperio: Diario de Zamora de F.E. de las J.O.N.S. Diario.
  • Hoja Oficial del Lunes. Semanario.
  • www.diariopalentino.es Diario.
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial del Real Club Deportivo Carabanchel


DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Real Club Deportivo Carabanchel
  • Ciudad: Madrid 
  • Provincia: Madrid
  • Comunidad Autónoma: Comunidad de Madrid
  • Fecha de constitución: 8 de septiembre de 1916
  • Fecha de federación: 1917

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Sociedad Deportiva Centro de Carabanchel Bajo (1916-1932)
  • Club Deportivo Carabanchel (1932-1997)
  • Real Club Deportivo Carabanchel (1997- )

 

TÍTULOS NACIONALES:

1 Liga de Tercera División:

  • 1966/67

 

ESTADIO:

  • Nombre: Campo Municipal La Mina
  • Año de inauguración: 1916
  • Cambios de nombre:
  • Campo Municipal La Mina (1916- )
  • Capacidad: 2.500 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo Municipal La Mina (1916- )

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL REAL CLUB DEPORTIVO CARABANCHEL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL REAL CLUB DEPORTIVO CARABANCHEL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN CARABANCHEL:

Situadas al suroeste del municipio y ciudad de Madrid, las tierras que ocupan los actuales distritos de Latina, Carabanchel y Usera pertenecieron hasta su anexión en 1948 a los por entonces municipios independientes de Carabanchel Bajo, el más próximo a la capital y Carabanchel Alto, dos núcleos de población históricamente separados entre si pero a la vez hermanados cuyo nexo de unión fue durante siglos la ermita de Santa María la Antigua. Tradicionalmente dedicados a la agricultura, desde principios del siglo XX Carabanchel Bajo que contaba con diez mil vecinos y Carabanchel Alto, con cinco mil, empezaron a industrializarse y a absorber a un gran número de inmigrantes creciendo rápidamente su población y número de calles hasta conurbarse con la capital ya en los años cuarenta.

HISTORIA DEL CLUB:

1916 – 1930

La llegada del fútbol a Carabanchel Bajo hay que retrotraerla hasta 1911, año en el que, gracias a la labor pedagógica e higienista de los hermanos clérigos Hilario y Manuel Herranz implicados en la educación de los jóvenes a través del desarrollo de actividades sociales, culturales y deportivas, crearon el Centro Católico Social donde el balompié era una de las prácticas más seguidas. Con el paso de los años, aprendidas sus reglas haciendo uso de varias eras en las proximidades de la localidad y viendo la necesidad de constituir un club de fútbol para competir, los clérigos reclamaron la ayuda financiera de los miembros laicos de la Cofradía del Apóstol Santiago ligados al Centro Católico para llevar a buen fin su proyecto, quedando el 8 de septiembre de 1916 constituida la titulada Sociedad Deportiva Centro Carabanchel Bajo.

Presidido por el farmacéutico Pedro Arranz, acordado vestir camiseta blanca con pantalón negro y redactados sus Estatutos y Reglamentos, rápidamente se localizaron unos terrenos junto a la antigua fábrica de cerillas coincidentes donde estaba la Fuente de la Mina, derrocándose ésta y acondicionándose para la habilitación del campo del mismo nombre. Conseguidos dar lo primeros pasos, el siguiente fue dar de alta la sociedad en la Federación Regional del Centro hecho que aconteció en 1917 quedando inscrito, dada su categoría, en Tercera Regional donde pudo iniciar su carrera deportiva.

En unos tiempos donde el fútbol comenzaba a adquirir protagonismo y a concentrar la atención de los jóvenes, la S.D. Centro de Carabanchel Bajo fue abriéndose camino sobreviviendo como podía en un mundo nada fácil donde muchos clubs tan pronto nacían, a continuación desaparecían. Inserto en los años veinte, llegados a la temporada 24/25 la Federación del Centro tuvo que crear nuevas categorías ante la avalancha de nuevas sociedades quedando definidas cuatro donde, por orden de jerarquía, la cabeza estaba comandada por Primera Categoría Grupo A, seguida del Grupo B, Segunda Categoría Grupo A y, por último, el Grupo B o cuarto nivel donde militó el conjunto carabanchelero hasta que en la campaña 29/30 fueron redefinidos estos cuatro niveles adoptando, respectivamente, los nombres de Primera Categoría, Segunda Categoría Preferente, Segunda Categoría Ordinaria y Tercera Categoría.

1930 – 1940

Club modesto dentro del panorama futbolístico de la ciudad de Madrid y su órbita, la S.D. Centro de Carabanchel Bajo accedió en la temporada 30/31 a Segunda Categoría Ordinaria coexistiendo con el C.D. Alamillo y el Sporting Extremadura quienes, teniendo y compartiendo campo en la carretera de Extremadura, militaban en Tercera Categoría al igual que la S.D. Europa, máximo representante de la vecina Carabanchel Alto. No federado inicialmente, pero constituido en 1931 fue el C.D. Betis San Isidro, de Carabanchel Bajo, constituyéndose poco después en Carabanchel Alto el Centro Unión de Campamentos.

El 27 de julio de 1932, después de ser consensuado por el club, la Federación del Centro momentos antes de cambiar a Federación Castellana al administrar las provincias de Castilla La Nueva a las que se unieron algunas de Castilla La Vieja, aprobó el cambio de denominación a Club Deportivo Carabanchel en un intento de los blanquinegros de proyectar su identidad geográfica resultándoles afortunado el cambio al proclamarse campeones de la categoría una vez concluida la sesión 32/33. En este mismo curso participaron en Tercera Categoría nuevas sociedades domiciliadas en Carabanchel Bajo como la Asociación Cultural y Deportiva Juvenia y la Sociedad Gimnástica Carabanchel, a la postre campeón absoluto que vestía camisa blanquinegra con pantalón negro, figurando como adherido el Club Deportivo Victoria quien se uniformaba con camisa blanquivioleta y pantalón negro.

En la edición 33/34 el C.D. Carabanchel se estrenó en Segunda Categoría Preferente, el segundo nivel regional tras los grandes clubs madrileños compitiendo la Sociedad Gimnástica Carabanchel en Segunda Categoría Ordinaria en una localidad que rebasaba los treinta mil vecinos y vivía un gran crecimiento en todos los sentidos. Pasados los más distinguidos clubs de la capital al Campeonato Superregional, en la temporada 34/35 el C.D. Carabanchel debutó en Primera Regional alcanzando el tercer puesto debiéndose desplazar hasta tierras tan remotas como Valladolid y Salamanca que le obligaron a incrementar notablemente su presupuesto reuniendo una plantilla repleta de profesionales, siendo exitosa la campaña 35/36 en la que, tras de ser cuarto en Liga, logró conseguir el Campeonato de Aficionados organizado por la Federación Castellana después de imponerse por 3-1 ante la Ag.D. Ferroviaria, de Madrid. Cuando todo parecía encaminado a presagiar buenos tiempos, el estallido de la Guerra Civil en julio de 1936 frenó en seco su desarrollo pasando tres largos años sin actividad.

1940 – 1950

Finalizado el conflicto y con el club desorganizado, durante el verano de 1939 gracias a la labor de Pedro Arranz pronto se volvió a la actividad quedando el club ubicado en Primera Regional B al regresar los grandes clubs excepcionalmente al Grupo A en unos tiempos donde todo tomó el cariz de provisional finalizando la temporada 39/40 en cuarto lugar. En consonancia con los nuevos gestores del país y su simbología, el C.D. Carabanchel añadió el águila de San Juan a su tradicional escudo accediendo en la campaña 40/41 al grupo único de Primera Regional una vez comprometidos los grandes clubs en las primeras categorías nacionales, teniendo los blanquinegros un buen papel al ser cuartos.

El Campo de la Mina se llenaba cada domingo y muchas eran las familias que acompañaban a la plantilla tanto en casa como a domicilio resultando nuevamente cuarto en la sesión 41/42 pero con una categoría fraccionada en dos grupos, convirtiéndose la edición 42/43 en una pesadilla al terminar sexto y colista debiendo defender su plaza en una Promoción de Permanencia en la que fue tercero debiendo jugárselo todo a una carta ante el aspirante madrileño C.D. Pardiñas al que se derrotó 2-1 conservando su puesto. En la temporada 43/44, tras la concesión de un grupo a los clubs castellano-manchegos de la Federación Castellana, los clubs madrileños fueron reagrupados siendo delicada la situación deportiva de los carabancheleros que concluyeron octavos debiendo disputar una segunda Promoción de Permanencia en la que se enfrentaron a encuentro único con el madrileño C.D. Cultural Leonés, siendo esquiva la fortuna al perder 1-3 por lo que descendieron a Segunda Regional.

Competir en Segunda Regional fue un paso atrás para los blanquinegros quienes atravesaron por una pequeña crisis terminando sextos en la campaña 44/45 y décimos en la sesión 45/46, empezando a surgir en la localidad nuevos clubs que muchos años después tomarían protagonismo como el C.D. Puerta Bonita, sociedad constituida el 21 de abril de 1942 que vestía camiseta y pantalón blancos. Coincidiendo con la edición 46/47 la Federación Castellana creó una nueva categoría titulada Segunda Regional Preferente lo cual desplazó a los blanquinegros a un nivel inferior, hecho que fue equilibrado rápidamente al proclamarse campeones de Liga y ascender. Tras varios años de penurias deportivas, el C.D. Carabanchel parecía mostrar visos de recuperación corroborados con el quinto puesto de la temporada 47/48, un curso en el que se empezó perteneciéndose a Carabanchel Bajo y, desde abril de 1948, al municipio de Madrid tras anexionarse la capital estatal un considerable número de municipios hasta la fecha independientes de su entorno.

Reorganizadas las categorías de la Federación Castellana en 1948, el C.D. Carabanchel pasó en la campaña 48/49 a competir en Primera Regional formándose una plantilla para sobrevivir en una categoría con cierto nivel en la que fue noveno resultando más plácida la sesión 49/50 en la que, cuarto clasificado, gozó del apoyo de sus seguidores durante todo el torneo.

1950 – 1960

Acomodado en Primera Regional, el club del águila saboreó en los primeros años cincuenta un periodo de crecimiento donde su masa social, debido al constante crecimiento del ahora bario madrileño de Carabanchel parecía no tener fin con la masiva llegada de inmigrantes y la construcción de nuevas viviendas que modificaban su tradicional paisaje. Quinto en la temporada 50/51, en 1951 la Federación Castellana dividió la categoría en dos grupos siendo los blanquinegros nuevamente quintos en la campaña 51/52 terminando cuarto en la sesión 52/53 en la que empezó a competir en la Copa Ramón Triana para clubs aficionados de gran seguimiento.

Habituada a los cambios, en 1953 la Federación Castellana volvió a reagrupar a los clubs madrileños en un mismo grupo dejando el otro para los afiliados de Ciudad Real, siendo los blanquinegros séptimos en un curso discreto mientras que, en la sesión 54/55, con nuevos jugadores que dieron otro aire a la plantilla se alcanzó el primer puesto ascendiendo posteriormente a Tercera División, un éxito de enorme repercusión entre los aficionados que por fin veían a su club formando parte de los más destacados del panorama nacional. Competir en una categoría como esta, auténtico tercer nivel en la estructura del fútbol español, exigió de directivos y personas cercanas al club un gran desembolso económico preparándose para su debut en la edición 55/56 en el Grupo XVI administrado por la Federación Castellana, estreno que fue placentero al concluir en un notable quinto puesto.

Con la temporada 56/57 los clubs castellanos pasaron a integrar el Grupo XV donde se aumentaron el número de participantes hasta dieciocho y con ello los gastos en desplazamientos, algo que no repercutió en la calidad de la plantilla blanquinegra capaz de conseguir la octava plaza. Elevado el nivel de los participantes con grandes clubs madrileños, manchegos, abulenses y segovianos, la campaña 57/58 ahora en el Grupo XIV fue nuevamente atractiva aunque se retrocedió al décimo puesto estando a un solo punto del descenso, siguiendo en el mismo grupo en la sesión siguiente 58/59 pero con la novedad de compartir destino con clubs extremeños para finalizar decimocuarto debiendo exprimirse al fondo para no perder la categoría. Lo apuntado en las sesiones anteriores con un equipo demasiado justo para la categoría, no se pudo revertir en la edición 59/60 ocupándose el decimoquinto puesto, plaza que le significó descender a Primera Regional tras encadenar un ciclo de cinco temporadas consecutivas en el tercer nivel nacional.

1960 – 1970

Al empezar los años sesenta el C.D. Carabanchel se trazó como meta prioritaria regresar a Tercera División lo antes posible, su hábitat natural en aquellos tiempos, preparando una plantilla que no defraudó en absoluto en la temporada inicial 60/61 al proclamarse campeón de Liga aunque con solo dos puntos de margen sobre la S.D. Gimnástica Segoviana. Materializado el regreso al tercer nivel nacional, de nuevo en el Grupo XIV administrado por la Federación Castellana, los blanquinegros volvieron con fuerza arrancando un valioso sexto puesto en la campaña 61/62 que, lamentablemente par ellos, no tuvo continuidad en la sesión 62/63 al ser decimocuartos reflotando con ímpetu en la edición 63/64 en la que resultaron quintos.

Destacado conjunto entre los más sobresalientes madrileños y entre los de la región central de la península, la temporada 64/65 no fue tan notable retrocediendo hasta la novena plaza, ensombrecida más tarde en la campaña 65/66 al ser decimoterceros. Con la llegada de la sesión 66/67 todo cambió y, en un campeonato de Liga espectacular, los blanquinegros se proclamaron por primera vez en su historia ganadores del título de la categoría, una hazaña que les abrió de par en par la posibilidad de ascender a Segunda División ante la desbordante ilusión de sus aficionados. Como campeón de grupo los carabancheleros se enfrentaron en Semifinales al C.D. Badajoz quien arrasó en un abarrotado Campo de la Mina al imponerse por un severo 0-4 que dejó la eliminatoria encarrilada para los pacenses, siendo todavía más dolorosa la derrota en tierras extremeñas con un bochornoso 8-1 que dolió y mucho en el seno del club.

Después de esta gesta, las figuras del plantel marcharon a clubs de superior categoría y la edición 67/68 se presentó complicada por cuando, además de ingresar en el Grupo XV con los clubs extremeños, la Federación Española anunció un ambicioso plan por el cual se iba a reducir en breve la categoría en grupos y número de participantes. Confirmado que los clasificados del puesto decimoprimero al decimoctavo descenderían a Primera Regional, los blanquinegros se esforzaron por quedar entre los diez primeros consiguiéndolo de forma apurada pues un solo punto separó el éxito del fracaso quedando octavo. La temporada 68/69 fue una reválida de la anterior y, dentro del Grupo VIII junto a extremeños, castellanos más la participación del Tenerife Atlético Club, se saldó satisfactoriamente concluyendo en decimocuarto puesto. Teniendo continuidad en el mismo grupo, en 1969 la Federación Española confirmó que, para la nueva década, la Tercera División iba a quedar reducida a cuatro grupos con veinte participantes respectivamente por lo que, los clasificados entre la novena y vigésima plaza, ambas inclusive, perderían la categoría. Los de Carabanchel lucharon con ahínco todo el torneo y, con una victoria en el último encuentro, sellaron el octavo puesto conservando su plaza.

1970 – 1980

Tras encadenar varios años de continuas purgas, la Tercera División de los años setenta ofreció una nueva imagen con el territorio nacional dividido en cuatro sectores por afinidad geográfica. Con este movimiento el nivel de los participantes era más elevado y el C.D. Carabanchel, ubicado en el Grupo II junto a castellanos, navarros, vascos y aragoneses tuvo que hacer un esfuerzo en la temporada 70/71 que no salió para nada bien al resultar decimonoveno con ocho victorias perdiendo la categoría. El descenso a Primera Regional, inevitable con los registros cosechados, no fue equilibrado en la siguiente campaña 71/72 cuando, con una plantilla muy parecida al curso anterior, sólo pudo clasificarse en séptima posición debiendo esperarse para recuperar la categoría perdida a la conclusión de la sesión 72/73 donde, con mucho trabajo y también fortuna, pudo liderar un grupo en el que terminó empatado a puntos con el C.D. Guadalajara y un punto por encima de Talavera C.F. y C.D. Manchego quienes también lucharon por el mismo objetivo.

El regreso a Tercera División fue recibido como agua bendita por la afición blanquinegra quien de nuevo se vio en una categoría donde le correspondía competir por masa social y aspiraciones deportivas, afrontando la edición 73/74 en el Grupo II con una composición muy similar a la de apenas años antes. El sistema competitivo, muy criticado al haber Promociones de Permanencia, le atrapó de buenas a primeras al finalizar decimotercero debiendo defender su plaza ante el aspirante Real Valladolid Promesas a quien derrotó en casa por 2-0 y en el encuentro de la capital pucelana por 0-1 garantizándose la continuidad. Tras el susto del curso anterior, el C.D. Carabanchel se reforzó mejor en lo sucesivo obteniendo el séptimo puesto en la temporada 74/75 mientras en la campaña 75/76 tuvo que apretar para evitar jugar la Promoción de Permanencia eludida por dos puntos, anunciando en 1976 la Federación Española grandes cambios en un futuro inmediato al desear implementar una nueva categoría titulada Segunda División B.

A caballo entre la Segunda División por arriba y la Tercera División por abajo, venía a desplazar a esta última hacia el cuarto nivel real por lo que, una vez concluida la sesión 76/77, la mitad de los participantes engrosarían la nueva competición mientras el resto seguirían en una Tercera División a la que solo le quedaría el nombre. El conjunto blanquinegro estuvo muy desdibujado y, decimoséptimo, no pudo superar el reto perdiendo una categoría. La Tercera División de la edición 77/78 quedó en seis grupos de veinte participantes figurando los madrileños en el Grupo IV junto a castellanoleoneses, castellano-manchegos, extremeños, madrileños y canarios terminando séptimo, formando parte del mismo grupo en el campeonato 78/79 donde fue noveno. En 1979 la Federación Española amplió el número de grupos a ocho pasando los madrileños al Grupo V siendo un torneo muy irregular en el que se concluyó en decimoséptima plaza.

1980 – 1990

El desarrollo de los años ochenta estuvo condicionado por los nuevos tiempos, la crisis económica y la retirada en parte de muchos aficionados que buscaban otras formas de ocio. El C.D. Carabanchel sintió sus efectos y no pudo recuperar el nivel de otras décadas debiéndose conformar con lo que tenía, incluso perderlo en algún momento de más apuro. La temporada 80/81 empezó con cambios pues la Federación Española adjudicó la administración del Grupo VII en exclusivo a la Federación Castellana. Décimo finalmente en un ámbito geográfico más restringido, en la campaña 81/82 repitió puesto siendo su papel muy similar en la sesión siguiente 82/83 en la que fue noveno. La tendencia marcada en los últimos años no hacía presagiar lo que ocurriría en la edición 83/84, nefasto campeonato en el que, decimoctavo, perdió la categoría descendiendo a Regional Preferente.

La Regional Preferente de los años ochenta era el quinto nivel nacional y salir airoso de ella era complicado por la gran igualdad predominante y competencia con otros clubs en franco crecimiento. Quinto en la temporada 84/85 y mismo puesto en la campaña 85/86, el final del túnel se vislumbró al término de la sesión 86/87 cuando, tercero en Liga, la adjudicación del Grupo VII de Tercera División de forma íntegra a la nueva Federación Madrileña hizo que ascendiera directamente teniendo una tranquila reentrada en la edición 87/88 solventada con la novena plaza mientras en la temporada 88/89 mejoró al ser sexto. En la campaña 89/90, reforzado el plantel, el C.D. Carabanchel realizó un buen campeonato que le situó arriba finalizando tercero pero a un considerable margen de puntos del C.D. Móstoles, líder inalcanzable quien ascendió a Segunda División B de forma directa.

1990 – 2000

Durante los primeros años de la década de los noventa el C.D. Carabanchel se asentó en el Grupo VII madrileño de Tercera División aunque los resultados no fueron especialmente destacables permaneciendo el conjunto blanquinegro inmerso en la parte baja de la clasificación. Decimocuarto en la temporada 90/91, en las siguientes campañas 91/92 y 92/93 saldadas con la decimosegunda plaza tampoco se rebasó la mitad de la tabla teniendo un gran susto en la sesión 93/94 cuando, sumando tan solo ocho victorias, no se hizo un buen torneo concluyendo en decimoséptimo puesto.

Un cambio decisivo en la gestión de la sociedad y la entrada de capital cambiaron por completo la tendencia a partir de 1994 llegando jugadores de más nivel que elevaron el rendimiento de la plantilla considerablemente ofreciendo la edición 94/95 una imagen totalmente diferente. De transitar sin pena ni gloria por la categoría, el conjunto carabanchelero pasó a ser un firme opositor para el ascenso terminando en tercer lugar a un punto de C.F. Rayo Majadahonda y a dos del campeón D.A.V. Santa Ana clasificándose para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División B, fase en la cual se vio superado por una Cultural y Deportiva Leonesa que se impuso un sus seis encuentros quedando tercero el Viveiro C.F. y cuarto el Real Titánico, de Laviana. Frustrado un posible cambio de categoría, en la temporada 95/96 se incorporaron nuevos fichajes que repitieron el tercer puesto en Liga, en esta ocasión tras C.F. Rayo Majadahonda y C.D. Orcasitas, presentándose en la Promoción de Ascenso donde mantuvieron un intenso duelo con el Ponte Ourense C.F., sociedad con la que empataron a puntos siendo decisivo el margen de goles anotados, vital para conseguir el ascenso siendo tercero el Club Atlético Burgalés y cuarto el Real Titánico.

Logrado el pasaporte a Segunda División B, el debut del club madrileño en la campaña 96/97 se efectuó dentro del Grupo I compartiendo destino con clubs madrileños, castellano-manchegos, gallegos y asturianos más el Real C.D. Mallorca «B» en un campeonato especial en el que, además de estrenarse notablemente con un magnífico octavo puesto, en fecha 9 de enero de 1997 y después de haberse solicitado en octubre, le fue concedido por S.M. El Rey D. Juan Carlos I el título de Real por su dilatada historia pasando a ser conocido desde entonces como Real Club Deportivo Carabanchel. Conseguida la permanencia y el título honorífico, la sesión 97/98 no fue tan fructífera y la plantilla, con muchas caras nuevas, no estuvo al nivel del curso anterior sumando cinco victorias y trece empates, balance muy negativo con el que perdió la categoría descendiendo a Tercera División al ser decimonoveno. La estancia de los blanquinegros en el tercer nivel, corta por su alta exigencia, no tuvo continuidad en lo sucesivo y de nuevo en el Grupo VII madrileño, la edición 98/99 fue decepcionante quedando en decimosegundo puesto. La debilidad económica por los gastos efectuados y una plantilla de escasa valía propiciaron el desastre del curso 99/00 pues, decimonoveno, encadenó un segundo descenso casi consecutivo a Regional Preferente abriéndose un periodo de incertidumbre deportiva y económica.

2000 – 2010

El descenso a Regional Preferente fue un paso atrás el cual se desconocía cuándo se iba a superar, empezando la temporada 00/01 y el cambio de siglo con un discreto octavo puesto que fue mejorado en la campaña 01/02 al ser tercero pero quedando apeado del ascenso. En la sesión siguiente, 02/03, el Real C.D. Carabanchel volvió a ser tercero quedándose a las puertas del objetivo pero, al ascender un significativo número de clubs madrileños de Tercera División a Segunda División B, se crearon varias vacantes en el Grupo VII madrileño siendo una de ellas adjudicada a los blanquinegros quienes, repescados administrativamente, desaprovecharon la oportunidad de la edición 03/04 al finalizar decimonovenos y regresar por la vía rápida a Regional Preferente.

El desarrollo de la temporada 04/05 fue nuevamente exitoso, en esta ocasión con fundamentos deportivos al proclamarse campeón de su grupo, ascendiendo a Tercera División donde, una vez más, no dio la talla en la campaña 05/06 ocupando la decimoséptima plaza y regresando a Regional Preferente, categoría en la cual siguió profundizando en una grave crisis que le llevó a ser décimo en la sesión 06/07 y decimocuarto en la edición 07/08 con el agravante de verse arrastrado una vez concluido el torneo a Primera Regional por el descenso masivo de conjuntos de Tercera División a Regional Preferente. En el año 2008 el Real C.D. Carabanchel tocaba fondo siendo cuarto en el sexto nivel nacional y con el castigo que le suponía no haber salido una vez terminado el campeonato 08/09.

La temporada 09/10 fue azarosa debido a que, al recibir fondos de la Comunidad Europea, se acometieron en el Campo de la Mina importantes obras para remodelar todo el graderío y dotar al terreno de juego con césped artificial. Deportivamente, jugar en el exilio del Estadio Ernesto Cotorruelo propiedad de la Federación Madrileña no le vino demasiado mal a los blanquinegros quienes, subcampeones de Liga, ascendieron a Regional Preferente dejando atrás un periodo sombrío para su dilatada historia.

2010 – 2020

Los años diez empezaron con el mismo ritmo del último torneo consiguiendo encadenar un segundo ascenso consecutivo una vez finalizada la temporada 10/11, en esta ocasión a Tercera División después de ser segundo en Liga empatado a puntos con el C.D. Colonia Moscardó, campeón y C.D. Fortuna, de Leganés que quedó apeado. El Real C.D. Carabanchel se reencontraba nuevamente con una categoría donde se sentía cómodo llevando a cabo un buen campeonato 11/12 en el que fue séptimo teniendo opciones de promocionar a superior categoría, clasificación que fue mejorada en la siguiente campaña 12/13 al ser sexto a tan solo tres puntos de la Promoción. Sin embargo, lo que parecía ser el inicio de una etapa fructífera, pronto se desvaneció como un castillo en el aire a lo largo de la sesión 13/14 con una plantilla muy cambiada capaz de sumar cinco escasas victorias que le condujeron al vigésimo puesto y al descenso a Regional Preferente.

El traspiés dolió máxime cuando las dos primeras temporadas en su retorno a Tercera División habían sido tan notables, empezando un nuevo ciclo en una categoría tan complicada como la Regional Preferente en la que se sabe cuándo se entra pero no cuándo se sale. La edición 14/15 fue, por lo tanto, difícil de llevar terminando en séptimo puesto mientras que en la campaña 15/16 resultó sexto repitiendo la misma plaza en la temporada 16/17. Durante el verano de 2017 se incorporaron nuevos jugadores a la plantilla blanquinegra con el ánimo de cubrir una de las dos primeras plazas al final del campeonato, objetivo que afortunadamente se cumplió para sus intereses alcanzándose el primer puesto y, con ello, el ascenso a Tercera División.

El regreso al Grupo VII madrileño de la categoría se hizo con las miras puestas en obtener la permanencia consiguiéndose con cierta holgura al concluir decimotercero, siendo especial el campeonato 19/20 debido a que, en marzo de 2020 y a falta de diez jornadas para terminar el torneo, a causa de una grave crisis sanitaria la Federación Española decidió darlo por finalizado dándose la circunstancia de que los blanquinegros marchaban en ese momento en el puesto decimosegundo.

2020 – 2030

La tercera década del nuevo siglo empieza con cambios en la temporada 20/21 pues, desde la Federación Española, se emprende una reestructuración competitiva en la que se decide suprimir la Segunda División B y la Tercera División creando dos nuevas categorías con vistas a la temporada 21/22 tituladas Primera División RFEF y Segunda División RFEF a las que se añade otro nivel denominado Tercera División RFEF. Mientras se modifica el sistema, la crisis sanitaria aleja a los aficionados de los estadios. El conjunto blanquinegro es sexto en el Subgrupo II durante la Primera Fase por lo que accede al grupo de los clubs que lucharán por conseguir una plaza para tratar de unirse a los que accedan a Segunda División RFEF, objetivo fallido al ser sexto y último, decimosegundo en el cómputo general por lo que pasa a Tercera División RFEF.

Competir en Tercera División RFEF es haber perdido una categoría ocupando plaza durante la campaña 21/22 en el quinto nivel nacional, campeonato en el que, pese a tener un buen plantel, queda quinto.

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Real C.D. Carabanchel. Un centenario. Francisco Javier Garrido y Miguel Ángel Martínez (2019).
  • Anuarios de la RFEF.
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial de la Agrupación Deportiva Torrejón Club de Fútbol

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Agrupación Deportiva Torrejón Club de Fútbol
  • Ciudad: Torrejón de Ardoz 
  • Provincia: Madrid
  • Comunidad Autónoma: Comunidad de Madrid
  • Fecha de constitución: 17 de agosto de 1953
  • Fecha de federación: 21 de octubre de 1953

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Club Deportivo Torrejón (1953-1969)
  • Agrupación Deportiva Torrejón (1969-2002)
  • Agrupación Deportiva Torrejón Club de Fútbol (2002- )

 

TÍTULOS NACIONALES:

0 Ligas de Categoría Nacional:

 

ESTADIO:

  • Nombre: Campo Municipal Las Veredillas
  • Año de inauguración: 6 de septiembre de 1992
  • Cambios de nombre:
  • Campo Municipal Las Veredillas (1992- )
  • Capacidad: 1.000 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo Municipal de San Isidro (1953-1990)
  • Polideportivo Municipal (1990-1992)
  • Campo Municipal Las Veredillas (1992- )

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DE LA AGRUPACIÓN DEPORTIVA TORREJÓN CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DE LA AGRUPACIÓN DEPORTIVA TORREJÓN CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN TORREJÓN DE ARDOZ:

Distante a unos 15 km de la capital provincial, Madrid y situado al este en la denominada Vega del Henares, el municipio y ciudad de Torrejón de Ardoz fue hasta los años cuarenta del siglo XX una localidad dedicada a la agricultura la cual, a raíz de la instalación en su término de una base militar automovilística y en 1945 del Instituto Nacional Técnico Aeroespacial, en 1955 atrajo la construcción de una base militar aérea estadounidense que polarizó su posterior desarrollo. Contando con ciento treinta y cinco mil vecinos, el municipio despliega en su suelo urbano varios polígonos industriales con importantes empresas que ocupan al cuarenta por cien de su economía, siendo el sector más destacado el de servicios con el cincuenta por cien. Presentes varios centros comerciales y de ocio, su buena red de infraestructuras y conexión aérea han favorecido su espectacular crecimiento.

Contando la localidad madrileña con apenas dos mil quinientos habitantes, el fútbol a nivel organizado tuvo que esperar a aparecer en 1934 cuando aficionados locales dieron pie a la constitución del Torrejón Foot-ball Club, sociedad de escasa trayectoria y movimiento que tuvo una corta vida deportiva dedicándose plenamente al desarrollo de encuentros amistosos y viendo truncada su progresión por la irrupción de la Guerra Civil en julio de 1936.

Finalizado el conflicto bélico y siendo el fútbol un espacio de segundo orden con actividades más importantes que captaban la atención de los vecinos en unos duros tiempos de posguerra, la normalización de este deporte llegó en 1943 con la constitución de la Sociedad Deportiva Torrejón, club que vistiendo camisa rojiblanca con pantalón azul y recién estrenado el Campo de San Isidro, empleó sus primeros años de vida jugando encuentros amistosos para, en 1947, inscribirse en la Federación Castellana y empezar desde Tercera Regional. Quinto en la temporada de debut 47/48 y séptimo en la campaña 48/49, en la sesión 49/50 fue sexto coincidiendo con el C.D. Imperial del F. de J. quien no llegó a culminar el campeonato al retirarse anticipadamente. La carrera deportiva de la S.D. Torrejón tampoco fue más allá y, una vez finalizada la temporada 50/51 en la cual resultó décimo, el club no se inscribió para competir en la siguiente campaña 51/52 desapareciendo al poco tiempo.

HISTORIA DEL CLUB:

1953 – 1960

Tras dos temporadas sin fútbol a nivel federado, en 1953 un grupo de aficionados se propusieron constituir una nueva sociedad con la que la localidad fuera representada dentro del fútbol federado, siendo el 17 de agosto la fecha elegida para dar partida de nacimiento al Club Deportivo Torrejón siendo elegido presidente Inocencio Tizón Martínez. Contando con el Campo de San Isidro y vistiendo camiseta roja con franja diagonal blanca y pantalón azul, el club fue dado de alta en la Federación Castellana el 21 de octubre partiendo su carrera deportiva desde Tercera Regional Ordinaria finalizando cuarto en la temporada 53/54, decimosegundo en la campaña 54/55 y décimo en la sesión 55/56.

Club modesto de una localidad que apenas rebasaba los cinco mil habitantes pero empezaba a ser centro de acogida de mucho inmigrantes, en la edición 56/57 se concluyó en séptimo puesto acechando el ascenso en las dos siguientes temporadas al ser tercero en la 57/58 y segundo en la 58/59 no pudiendo ascender en la Promoción, pero sí en la campaña 59/60 después de ser tercero en Liga y obtener billete para Segunda Regional una vez disputada la Promoción de Ascenso.

1960 – 1970

Al comenzar los años sesenta Torrejón de Ardoz había duplicado su población contando diez mil vecinos, estrenándose el C.D. Torrejón en Segunda Regional con un buen cuarto puesto en la temporada 60/61. Octavo en la campaña 61/62, en la sesión 62/63 se consiguió el primer puesto en Liga y con el ello el ascenso a Primera Regional, cuarto nivel de la época donde ya había jugadores interesantes algunos de ellos con etiqueta de profesional. Octavo en la edición 63/64 y décimo en la temporada 64/65, el club franjiblanco empezó a asentarse en la categoría siendo decimoprimero en la campaña 65/66 y decimosegundo en la sesión 66/67 coincidiendo en una época de pleno crecimiento de la localidad a todos los niveles surgiendo, a la par en 1967, nuevos clubs promovidos por industriales como el C.D. La Imperial, sustentado por la empresa de calzado del mismo nombre y el C.D. Norsa, ambos con presencia en Tercera Regional. De momento ajeno los franjiblancos a estos movimientos próximos, en el campeonato 67/68 resultaron novenos mientras en el torneo 68/69 decimoprimeros.

Una vez concluida la temporada 68/69, viéndose por parte de los distintos clubs que formaban el panorama futbolístico torrejonero a nivel federado, que su futuro pasaba por una unión de los tres y no seguir actuando en solitario, los presidentes de C.D. Torrejón, Inocente Tizón Martínez, C.D. Norsa, Millán Latorre Expósito y C.D. La Imperial, Julián Puchol Paniagua iniciaron conversaciones a tres bandas para que los dos últimos quedaran integrados en el primero de modo que, cambiando los franjiblancos de nombre a Agrupación Deportiva Torrejón, la resultante tuviera más fuerza pudiendo en breve ir ascendiendo categorías. Paralelamente a estos hechos, aprovechando el excedente de jugadores quedó constituido el Atlético Torrejón, filial que se estrenó en Tercera Regional ocupando una de las dos plazas de los recientemente fusionados. Acordado que Inocente Tizón siguiera de presidente, la campaña 69/70 pese a su esfuerzo se resolvió terminando en segundo puesto a un punto del C.D. Mejoreño quien ascendió, debiendo esperar la escalada para otro momento.

1970 – 1980

La década de los años setenta resultó espectacular, no sólo en la progresión del club franjiblanco que se catapultó a categorías hasta la fecha inimaginadas, sino también en el municipio que tuvo un desarrollo vertiginoso convirtiéndose en sede de una gran multitud de empresas y crecimiento poblacional, triplicándose de forma extraordinaria al pasar en apenas diez años de veinte mil a setenta y cinco mil habitantes.

Confirmado Julián Puchol Samaniego como nuevo presidente, la temporada 70/71 fue testigo de un plantel renovado que anotó ciento diecisiete tantos quedando segundo a seis puntos de la Unión Balompédica Conquense pero con el buen sabor de boca de ascender a Primera Regional, una categoría añorada con parte de los mejores clubs castellanos de la época donde, con refuerzos, sólo cedió tres derrotas proclamándose campeón en la campaña 71/72 encadenando un nuevo ascenso directo, en esta ocasión a Tercera División. Esta categoría, verdadero tercer nivel nacional, presentaba la novedad de estar subdividida en cuatro grupos con veinte participantes respectivamente lo que le daba un gran prestigio, debiendo los del Corredor del Henares elevar su presupuesto para contender con clubs de otras regiones y costear largos viajes. Ubicado en el Grupo II junto a madrileños, vascos, aragoneses, castellano-leoneses, navarros y castellano-manchegos, la sesión 72/73 atrajo muchos aficionados al Campo de San Isidro pero no la permanencia al concluir decimoséptimo descendiendo a Regional Preferente, nueva categoría que la Federación Castellana estrenaba un paso por encima de la clásica Primera Regional.

El debut en el grupo único de Regional Preferente durante la edición 73/74 no pudo resultar mejor al finalizar en primer puesto, llevarse el título y conseguir el ascenso directo a Tercera División en un curso redondo donde se impuso en veintidós de los treinta encuentros, incorporándose en la temporada 74/75 al Grupo II junto a madrileños, riojanos, navarros, vascos, castellano-leoneses y castellano-manchegos estando a punto de eludir la Promoción de Permanencia al ser decimotercero. Aplicando el sistema competitivo de la época, tuvo que defender su plaza en eliminatoria a doble encuentro frente al aspirante Tolosa C.F., venciendo en casa 2-0 y perdiendo en la localidad guipuzcoana 1-0 por lo que conservó la categoría. La siguiente campaña 75/76 discurrió por unos cauces muy similares terminando la Ag.D. Torrejón en decimocuarto puesto y requiriendo de la Promoción de Permanencia para tener continuidad, eliminatoria que le enfrentó al aspirante Real Valladolid Promesas imponiéndose los franjiblancos en la capital castellana por 0-1 y repitiendo resultado favorable en casa.

Acomodado en la categoría y viendo pasar por el Campo de San Isidro grandes jugadores en el final de sus carreras y otros empezándolas con destino en Primera División, llegados a 1976 la Federación Española anunció cambios para 1977 con la creación de una nueva categoría titulada Segunda División B que iba a reunir a cuarenta participantes distribuidos en dos grupos de veinte respectivamente. El acceso a este nivel que se convirtió en el tercero por orden jerárquico desplazando la Tercera División al cuarto, estuvo reservado a los clasificados entre los puesto segundo y décimo, ambos inclusive, habida cuenta que el campeón ascendía directamente a Segunda División, realizando los torrejoneros presididos ahora por Antonio Soler Herreros un notable torneo 76/77 que les exigió mucho aprobando al concluir décimo. Precisamente en este curso, la nueva Junta Directiva dio pie el 10 de junio de 1976 a la constitución de la Ag.D. Torrejón Promesas para dar oportunidad a los más jóvenes. Con plaza en Segunda División B a buen recaudo, la temporada 77/78 se presentó como tremendamente ilusionante disputándola en el Grupo I junto a clubs madrileños, gallegos, asturianos, vascos, castellano-leoneses, aragoneses y navarros recorriendo todo el noroeste peninsular para, entrenados por José Joaquín Campo en sus primeras treinta y una jornadas, Ángel Vilda en dos y Julio Martialay en las cinco últimas, terminar novenos.

La campaña 78/79 fue, contra todo pronóstico, la mejor de su historia. A las órdenes del técnico Julio Martialay, siguiendo en el Grupo I el conjunto madrileño estuvo en los puestos de cabeza todo el campeonato teniendo incluso opciones de ascender directamente a Segunda División, concluyendo finalmente en cuarto puesto pero a tan solo dos puntos de conseguir lo que hubiera sido una hazaña. La sesión 79/80, contando con el mismo técnico, no fue tan excitante como la anterior, pero sí atractiva al terminar octavo si ver cuestionada su continuidad en la categoría y disfrutando de buen fútbol.

1980 – 1990

Al empezar los años ochenta la Ag.D. Torrejón siguió compitiendo en el Grupo I de Segunda División B siendo Antonio García Puente que condujera a la plantilla hasta la decimotercera posición no sufriendo excesivos problemas para mantenerse, algo que no sucedió en la campaña 81/82 cuando, primero Juan Antonio Fernández fue cesado tras veintinueve jornadas y luego el exinternacional Manuel Sanchis se encargó de obtener la continuidad quedando decimosexto en un difícil campeonato en el que se cambió de aires pasando al Grupo II junto a clubs andaluces, canarios, murcianos, extremeños, catalanes, baleares y norteafricanos que resultó una auténtica ruina para las arcas franjiblancas. Muy tocado en lo económico, la sesión 82/83 se presentó con una plantilla sin reforzar adecuadamente dirigida nuevamente por Manuel Sanchis quien, repitiendo en el Grupo II, sumó ocho victorias y seis empates siendo vigésimo y colista por lo que descendió a Tercera División.

Tras seis temporadas consecutivas en la categoría de bronce, la edición 83/84 se abrió con un club en crisis, problemas económicos y una cartera de jugadores demasiado justa para un Grupo VII administrado por la Federación Castellana con madrileños, castellano-manchegos y castellano-leoneses donde, decimonoveno, terminó descendiendo a Regional Preferente encadenando un segundo descenso, en esta ocasión administrativo, a Primera Regional como consecuencia de tener deudas con la plantilla. Con poco dinero y en el sexto nivel nacional cuando apenas un año antes estaba en el tercero, la edición 84/85 se afrontó como se pudo teniendo una buena salida pues, tercero en la clasificación, pudo ascender a Regional Preferente como mal menor.

En Regional Preferente, categoría dividida en dos grupos, la Ag.D. Torrejón empezó a encontrarse poco a poco a sí misma tras el varapalo económico de 1984 buscando asentarse en la categoría y, a ser posible, no perderla y recuperar a la afición. En este duro proceso fue decimosegundo en la temporada 85/86 y octavo en la campaña 86/87, mostrando síntomas de recuperación en la sesión 87/88 cuando, tercero en Liga estuvo a dos puntos de colarse en la Promoción de Ascenso y a cuatro de éste. En la edición 88/89 se pudo rematar la tendencia alcista al liderar el Grupo II y ascender directamente a Tercera División, reencontrándose en el curso 89/90 con un Grupo VII ahora formado íntegramente por clubs madrileños tras asumir en 1987 la Federación de Fútbol de Madrid su administración ocupando la decimosexta plaza.

1990 – 2000

Los años noventa empezaron con problemas pues, la necesaria construcción de un parking subterráneo municipal junto al Campo de San Isidro, obligaron al club franjiblanco a trasladarse obligatoriamente al Polideportivo Municipal en plena temporada 90/91, un campeonato donde quedó quinto empatado a puntos con la Ag.D. Parla quedándose con la miel en los labios para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División B. Mientras se aceleraban las obras del nuevo Campo Municipal de Las Veredillas, la campaña 91/92 se finalizó en octavo puesto resultando otra vez interesante y emocionante la sesión 92/93 al tener opciones de promocionar quedando frustradas en el último encuentro de Liga en casa al empatar con el C.D. Carabanchel y a puntos en la clasificación con la U.D. San Sebastián de los Reyes, cuarto.

A partir de este momento, la Ag.D. Torrejón dio un paso hacia atrás y no volvió en lo sucesivo a acercarse a los puestos de cabeza ni mucho menos a los que permitían promocionar, terminando el campeonato 93/94 en décimo puesto mientras que en la edición 94/95 concluyó decimocuarta en un curso en el que se vio de cerca el descenso. Octavo clasificado en la temporada 95/96, en 1996 accedió a la presidencia Domingo Piqueras teniendo una mala campaña 96/97 donde resultó decimocuarta pero sin pasar demasiados problemas, siendo nefasta la edición 97/98 en la que, decimonoveno y veinticinco derrotas, perdió la categoría descendiendo a Regional Preferente.

Al descender a la primera de las categorías regionales, los franjiblancos se encontraron con un rival local de escasa trayectoria deportiva pero gran ambición y en franca progresión como el Torrejón Club de Fútbol, una sociedad constituida en 1991 como Rhino Parque de Cataluña sin equipo amateur que, en 1994, al darse de alta en la Federación Madrileña para iniciar su andadura en Tercera Regional, había adoptado el nombre de la localidad. Vistiendo íntegramente de blanco, campeón de su grupo en la temporada 94/95 y ascendido por lo tanto a Segunda Regional, dispuesto a estrenarse en esta categoría tuvo la oportunidad de fusionarse con el madrileño Unarba-Rogusa C.F., un club de empresa constituido en 1991 que venía jugando en el getafense Campo de Uralita y conservaba plaza en Regional Preferente, trasladando su sede hasta Torrejón de Ardoz para, acuerdo mutuo, tomar el nombre del pujante Torrejón C.F.

Noveno en la campaña 95/96, decimoprimero en la sesión 96/97 y decimosegundo en la edición 97/98, llegó el momento de verse las caras resultando la temporada 98/99 apasionante en su duelo particular al imponerse los blancos 1-3 en casa de los franjiblancos y empatar ambos en el encuentro de vuelta, pero frustrante al estar los dos muy alejados de la cabeza. En cuanto a la campaña 99/00, segunda en la misma categoría, la Agrupación Deportiva ganó en casa por 3-1 finalizando decimocuarta, haciendo lo propio el Club de Fútbol en la vuelta con un 2-1 para concluir séptimo.

2000 – 2010

Rivales en aspiraciones y con la mente puesta en el ascenso, la temporada 00/01 fue magnífica para los blancos pues, primeros en Liga, consiguieron un histórico ascenso a Tercera División mientras que los franjiblancos tuvieron que conformarse con la cuarta plaza, resolviéndose los encuentros directos entre ambos con sendos empates 1-1. La campaña 01/02 fue dispar para los dos clubs torrejoneros aunque coincidieron en su fracaso, teniendo el Torrejón C.F. un amargo debut en el Grupo VII madrileño al quedar decimoctavo a dos puntos de la salvación perdiendo la categoría y estando perdida la Ag.D. Torrejón al ser decimotercera en su grupo.

A las puertas de coincidir por cuarta ocasión en Regional Preferente previo inicio de la sesión 02/03, durante el verano de 2002, siendo presidente Carlos Ruíz de la Ag.D. Torrejón desde 2001 e Ismael Monforte del Torrejón C.F., ambos clubs iniciaron conversaciones para unirse en un solo, aumentar las posibilidades de ascender a Tercera División y mantenerse habida cuenta que los dos compartían el Campo de Las Veredillas al igual que afición, llegándose al acuerdo de integrar el Club de Fútbol en la Agrupación Deportiva y así conservar los colores y antigüedad de esta siguiendo Carlos Ruíz al frente. Dicho y hecho, contando con la aprobación de la Federación Madrileña al no haber deudas pendientes, el nombre resultante fue el de Agrupación Deportiva Torrejón Club de Fútbol, terminando el campeonato en segundo puesto a un punto del S.A.D. Tornado Tres Cantos por lo que se ascendió a Tercera División como se deseaba.

El campeonato 03/04 fue notable rondando los puestos de Promoción aunque finalmente se ocupó la sexta plaza, sufriéndose un gran descalabro en la edición 04/05 al sumar tan solo cinco victorias, concluyendo decimonoveno y perdiendo la categoría. El descenso fue un gran palo para todos siendo sexto en la temporada 05/06 ya con Ismael Monforte en la presidencia, liderando su grupo en la campaña 06/07 con un plantel renovado y veintiuna victorias que le supuso ascender nuevamente a Tercera División. Cabeza de león en Regional Preferente y cola de ratón en el Grupo VII, la sesión 07/08 fue otro gran revés concluyendo vigésimo con siete victorias, descendiendo la Ag.D. Torrejón C.F. a una Regional Preferente de la que le costaba desprenderse. Aunque tercero en la edición 08/09, entre los torrejoneros y los dos primeros clasificados hubo muchos puntos de distancia, siendo algo peor el campeonato 09/10 al ser quintos cuando se esperaba algo mejor.

2010 – 2020

Con el cambio de década la meta de la Ag.D. Torrejón C.F. siguió siendo la misma, tratar de ascender a Tercera División, motivo que se le resistió al menos durante los primeros campeonatos al ser tercero en la temporada 10/11 y cuarto en la 11/12 cuando sólo ascendían los dos primeros clasificados. En la campaña 12/13 hubo algo más de fortuna y, segundo tras un inalcanzable Aravaca C.F., se pudo materializar el ascenso al Grupo VII de la Tercera División madrileña donde tuvo una corta estancia marcada por su presupuesto, terminando decimosexto en la sesión 13/14 y vigésimo y colista en la edición 14/15 sumando seis victorias y dos empates, siendo el resto de los encuentros derrotas por lo que regresó a Regional Preferente.

En esta categoría, quinto nivel nacional, su entrada estuvo protagonizada por los malos resultados concluyendo decimocuarto y estando a un paso de encadenar un nuevo descenso que lo habría llevado a Primera Regional, accediendo en 2016 José Martín Gallardo Otero a la presidencia para terminar decimotercero en la temporada 16/17. Con un club en horas bajas, los gestores tuvieron que esforzarse para revertir la situación incorporando nuevos jugadores que dieron un giro de ciento ochenta grados logrando finalizar quintos en la campaña 17/18 y asentar la base para tener posibilidades de éxito en el futuro más cercano. En la sesión 18/19 la plantilla respondió como se esperaba y en Liga se terminó en segundo puesto tras la Escuela Deportiva Moratalaz logrando el ascenso a Tercera División, finalizando decimocuarto en una complicada edición 19/20 en la cual, a causa de una crisis sanitaria, el campeonato fue suspendido restando todavía doce jornadas por disputar encontrándose los franjiblancos en decimocuarto puesto.

2020 – 2030

A lo largo de 2020 la Federación Española estableció un cambio radical en la estructura jerárquica de las categorías nacionales suprimiendo la Segunda División B y Tercera División que fueron reemplazadas por dos nuevas tituladas Primera División RFEF y Segunda División RFEF a las que se añadió un quinto nivel titulado Tercera División B. Para alcanzar este propósito hubo que emprender un complicado sistema clasificatorio en la temporada 20/21 al ser efectivos los cambios a partir del siguiente campeonato, quedando los torrejoneros sextos en el Subgrupo I de la Primera Fase y primeros en la Segunda Fase, séptimos en la general, clasificándose para las eliminatorias a encuentro único en terreno neutral para tratar de acceder a Segunda División RFEF donde eliminó en Cuartos al Rayo Vallecano de Madrid «B» por 1-0, no superando la Semifinal al empatar 1-1 con el C.D. Móstoles U.R.J.C. haciendo prevalecer el sistema competitivo el pase a la siguiente ronda del mejor clasificado en caso de empate. Perdida una categoría, la Ag.D. Torrejón C.F. se estrena durante la campaña 21/22 en Tercera División RFEF, quinto nivel donde décimo.

 

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Una historia del fútbol español: la A.D. Torrejón C.F. Juan Manuel Orquín Casas y Juan Orquín Nogales (2009).
  • Anuarios de la RFEF.
  • La Libertad. Diario.
  • Nueva Alcarria. Diario.
  • Flores y Abejas. Diario.
  • Pueblo. Diario.
  • www.lasfotosdetorrejon.es (Web local).
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial del Logroñés Club de Fútbol

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Logroñés Club de Fútbol
  • Ciudad: Logroño 
  • Provincia: La Rioja
  • Comunidad Autónoma: La Rioja
  • Fecha de constitución: 18 de julio de 2000
  • Fecha de federación: 28 de julio de 2000

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Club Deportivo Recreación de La Rioja (2000-2005)
  • Logroñés Club de Fútbol (2005-2008)

 

TÍTULOS NACIONALES:

0 Ligas de Categoría Nacional.

 

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal Las Gaunas
  • Año de inauguración: 28 de febrero de 2002
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal Las Gaunas (2002- )
  • Capacidad: 16.000 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo del Mundial 82 (2000-2005)
  • Estadio Municipal Las Gaunas (2005-2008)

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL LOGROÑÉS CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL LOGROÑÉS CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN LOGROÑO:

Situado en el norte peninsular y colindante con las provincias de Álava y Navarra, el municipio y ciudad de Logroño, bañado por el Río Ebro, es la capital de la comunidad autónoma uniprovincial de La Rioja del cual es su principal núcleo cultural, económico y de ocio. Tradicional cruce de caminos y frontera de diversas culturas, contando actualmente con ciento cincuenta mil vecinos la localidad experimentó a partir de los años ochenta un gran crecimiento poblacional a raíz de ser declarada capital administrativa de La Rioja, siendo su término municipal sede de importantes bodegas y asentamiento de varios polígonos industriales. Dedicado en gran parte a los servicios y bien comunicada, la ciudad ha transformado en los últimos tiempos su fisonomía creando, a la par, una red de municipios que giran a su alrededor siendo, gracias a su posición, cabeza de una importante industria vinícola que goza de gran fama mundial como es la denominación La Rioja.

La sociedad logroñesa de principios del s. XX no era ajena a los movimientos asociacionistas de carácter recreativo que circulaban entre los grupos más elitistas de todas las ciudades españolas, creándose el 11 de mayo de 1905 el Gran Casino de Logroño, una entidad que tenía en la organización de bailes, excursiones y promoción de juegos y espectáculos su modus vivendi. En 1910 la directiva de esta sociedad decide fomentar la práctica deportiva para cultivo de mente y espíritu siguiendo las corrientes higienistas tan de moda en la época, siendo un deporte que triunfa en las provincias vecinas de Vizcaya y Guipúzcoa donde se han alcanzado recientemente diversos títulos a nivel nacional, el fútbol, incorporado como pieza de relieve.

El 17 de agosto de 1910 queda registrada la Agrupación Deportiva Logroñesa teniendo a Isaac Romanos como primer presidente, entidad totalmente dependiente del Gran Casino que es conocida popularmente como “La Deportiva” y que desde la campa militar y el descampado de la Vuelta del Peine, tomará sus primeros contactos con este novedoso deporte. El primer encuentro oficial de “La Deportiva” o Agrupación Deportiva del Gran Casino como también es conocida, se disputa el 8 de junio de 1912 en una campa situada en la carretera de Villamediana teniendo como rival al Pamplona F.C., siendo un verdadero éxito de público y estrenándose con camisa rojiblanca y pantalón blanco, a imagen y semejanza del Athletic Club bilbaíno.

El impulso de la sección deportiva del Gran Casino no cae en saco roto y el 4 de julio de 1912 nace el Logroño Recreation Club, entidad presidida por Juan Díaz Quincoces que será una alternativa seria para aquellos jóvenes no socios del Gran Casino. Esta sociedad adquirirá gran notoriedad y entre ambas conseguirán en 1913 que el consistorio organice varios encuentros con motivo de las fiestas de San Mateo. Poco tiempo después surgen otras entidades de escasa perdurabilidad como el Logroño Foot-ball Club, convirtiéndose el Logroño Recreation Club en el máximo exponente local en cuestiones futbolísticas.

Esta sociedad, que viste camisa rojiblanca con pantalón negro aunque en ocasiones se la ve enteramente de blanco, tiene en sus instalaciones de la carretera de Zaragoza una verdadera base deportiva con pistas de atletismo y tenis que la convertirán en la más importante de la ciudad durante toda la década. El Logroño Recreation Club será inscrito en la Federación Guipuzcoana donde participan clubs de la tierra y navarros, compitiendo en distintas categorías hasta que al término de la campaña 23/24 y estando en Primera Categoría Grupo B, deja de hacerlo.

Antes de que llegue ese momento otra sociedad que tendrá una relevante importancia ha sido constituida previamente, el Club Deportivo España F.C., entidad creada el 28 de octubre de 1922 cuyo presidente es Bernardo Ardanaz. El conjunto españolista carece de terreno de juego en sus primeros instantes de vida, estrenando sede el 3 de febrero de 1923 frente al San Antonio, el Campo de La Trilladora, aunque oficialmente lo es el 2 de septiembre de 1923 frente al Arenas Club, de Guecho y ya bajo su nueva denominación de Club Deportivo Logroño. El club deportivista viste como sus antecesores, camisa rojiblanca con pantalón negro, haciéndose con un nombre dentro del panorama regional de la época y enfrentándose a club vascos, navarros, aragoneses y castellanos preferentemente, región esta última de la que por entonces formaba parte. El 15 de junio de 1924 inaugura el Campo de Las Gaunas, recinto más grande y con más condiciones que el anterior de La Trilladora que se convertirá en feudo futbolístico durante un buen número de décadas y por donde pasarán numerosísimos clubs de todo el estado. Fruto de su importancia y nivel deportivo, en los años treinta compite en Tercera División, categoría la cual no es sino una Fase de Ascenso entre campeones regionales para dilucidar qué clubs ascienden a Segunda División.

En estos campeonatos los componentes son pocos y suele clasificarse para la Final el campeón de cada uno de los diferentes grupos. El C.D. Logroño consigue pasar a una de estas finales en la campaña 32/33 después de ser Campeón, siendo eliminado por el Zaragoza F.C. en cuartos de final. En 1935, la fuerte carga económica de los desplazamientos y la difícil situación del momento en suma a una plantilla profesional, hacen mella en la entidad, causando que se abandone la competición y se retire de la vida deportiva desapareciendo como entidad. Pese a ello, posteriormente en los años de la Guerra, un grupo de ex jugadores seguirá empleando el nombre del desaparecido club para la disputa de encuentros amistosos en zonas no conflictivas.

Tras la Guerra el gran aficionado José Guillén lucha para rescatar el fútbol en la capital riojana y el 30 de mayo de 1940 se constituye el Club Deportivo Logroñés mediante una selección de los mejores jugadores locales. La nueva entidad se convierte en el máximo representante provincial y durante casi siete décadas aglutinará a la mayor parte de los seguidores logroñeses consiguiendo militar durante nueve temporadas en Primera División y dieciocho en Segunda División, resultando el final de los años ochenta y la década de los noventa su gran momento de gloria.

HISTORIA DEL CLUB:

2000 – 2008

Tras el descenso a Segunda División al término de la temporada 96/97, el C.D. Logroñés entró en una dinámica muy negativa puesto que, víctima de los excesos económicos para mantenerse en Primera División primero y para recuperar esta categoría después e intentar la continuidad, sus deudas fueron incrementándose a finales de los años noventa hasta descender deportivamente a Segunda División B una vez concluida la campaña 99/00, descenso traumático para la sociedad riojana la cual, además, fue denunciada por impago a los jugadores acarreando, al no satisfacer lo debido, un segundo descenso consecutivo en esta ocasión administrativo a Tercera División.

Acostumbrada la afición rojiblanca a competir dentro del fútbol profesional durante los últimos dieciséis años, encontrarse de repente en el cuarto nivel nacional fue un hecho muy duro, máxime cuando no había expectativas en esta categoría para hacer buenas taquillas y generar recursos suficientes con vistas a recuperar su maltrecha cartera. Estar incluido en el por entonces Grupo XV navarro-riojano junto a clubs modestos de la región causó gran malestar en gran parte de sus seguidores y, temiéndose una cercana desaparición del club, entre la primavera y verano del año 2000 empezaron a gestarse movimientos para constituir una nueva sociedad o bien invertir en una existente para catapultarla a superiores categorías.

Estando los más significativos clubs de la ciudad de Logroño en Regional Preferente, caso del C.D. Berceo constituido en 1948, Yagüe C.F. constituido en 1962 y Peña Balsamaiso C.F. constituido en 1954, ninguno de los tres reunía las condiciones suficientes para convertirse en heredero del C.D. Logroñés por lo que la iniciativa más destacada, la tomada por el empresario Miguel Ángel Alonso y con cierto respaldo del consistorio local, fructificó el 18 de julio de 2000 con la constitución del Club Deportivo Recreación de La Rioja, denominación adquirida en memoria del primitivo Logroño Recreation Club y del que fuera filial rojiblanco, C.D. Recreación de Logroño.

Presidido por Miguel Ángel Alonso, vistiendo íntegramente de granate y haciendo uso del Campo Mundial 82 como recinto de juego, el club fue dado de alta en la Federación Navarra quedando inscrito en Regional Preferente para estrenarse en la temporada 00/01, exitosa bajo el técnico Juan Carlos Herrero al quedar primero de grupo, ganar el título y ascender directamente a Tercera División mientras, de forma paralela, el C.D. Logroñés consiguió también cambiar de categoría pero en esta ocasión a Segunda División B pareciendo recuperar el aliento. En la campaña 01/02 el C.D. Recreación de La Rioja realizó significativos cambios en su plantilla incorporando nuevos jugadores y técnico llegando al banquillo granate José Ignacio Sarrías. Debutante en el Grupo XV navarro-riojano, su participación fue notable clasificándose en tercer puesto superado por C.D. Azcoyen, de Peralta y Peña Sport F.C., de Tafalla por lo que entró en la Promoción de Ascenso sin obtener premio dado que, dentro de su grupo, Real Racing Club de Santander «B» y U.D. Fraga estuvieron mejor quedando colista la S.D. Amorebieta.

La directiva recreativista, empeñada en alcanzar el tercer nivel nacional, se hizo para la sesión 02/03 con los servicios del técnico Rubén Galilea después de no materializar su deseo en el curso anterior, repitiéndose en el tercer puesto en Liga tras los pasos de un inalcanzable C.D. Mirándes y distante también con el C.D. Alfaro. Clasificados por segunda vez consecutiva para disputar la Promoción de Ascenso, los granates se mostraron de principio a fin muy sólidos encajando tan solo dos tantos por lo que, primeros con cinco victorias y un empate, pudieron ascender a Segunda División por la puerta grande tal cual deseaban terminando por delante de C.D. Basconia, U.D. Barbastro y S.D. Barreda Balompié. Acceder a Segunda División B era un salto cualitativo bastante importante requiriendo de mayor presupuesto, ayudas económicas y del soporte de una afición, remisa a prestar su colaboración con los granates, de hecho una media de quinientos seguidores eran los que le acompañaban habitualmente mientras que el histórico C.D. Logroñés solía arrastrar unos dos mil.

Perdida de momento la batalla por conquistar adeptos, la edición 03/04 fue ilusionante por varios motivos como estrenar categoría, competir en el Grupo I junto a navarros, riojanos, asturianos, vascos, cántabros y gallegos abarcando todo el norte peninsular y, sobre todo, por medir fuerzas con el C.D. Logroñés, conjunto con el que perdió en el Campo del Mundial 82 por 2-3 y al que devolvió la moneda en el Estadio de Las Gaunas al imponerse por 0-1. La ascendente trayectoria de los granates los dejó en quinto puesto a tan solo un punto de poder promocionar, evitando el club histórico gracias a un punto de ventaja disputar la Promoción de Descenso. Concluido el campeonato, el C.D. Logroñés fue denunciado por impago y, al no poder cubrir la deuda, descendido a Tercera División no habiendo servido de nada su lucha deportiva originando una vacante en Segunda División B que fue cubierta por el Club Haro Deportivo al no haber ascendido por los cauces deportivos.

El caos en el que entró el C.D. Logroñés no quedó ahí y, por acuerdo del ayuntamiento, le fue privado hacer uso del Estadio de Las Gaunas, concedido para el C.D. Recreación de La Rioja al militar en superior categoría, por lo que los rojiblancos invirtieron feudo con los granates pasando, gracias a la intermediación de la Federación Riojana, a jugar en el Campo del Mundial 82. Cruzados los papeles, los recreativistas actuaron en el Grupo II con vascos, cántabros, riojanos y castellano-leoneses primero bajo la batuta de Rubén Galilea y en los últimos diez encuentros entrenados por Nacho Martín obteniendo un meritorio sexto puesto a escasos dos puntos de poder promocionar, participando y finalizando terceros los rojiblancos en el subgrupo riojano de Tercera División al quedar fraccionado el Grupo XV en dos con vistas a que la Federación Riojana administrara en breve uno propio.

El desarrollo del verano de 2005 comportó más cambios en una ciudad de Logroño que empezaba a acostumbrarse a perder peso dentro del panorama futbolístico nacional y a no tomar consistencia sus dos principales representantes. Por si fuera poco, el C.D. Recreación de La Rioja consiguió del Juzgado de Primera Instancia Número 6 de la capital riojana autorización para cambiar su denominación a Logroñés Club de Fútbol, adoptando como nuevos colores una camiseta partida a dos mitades roja y blanca con pantalón rojo además de modificar completamente su escudo. Realizados los oportunos cambios, el Logroñés C.F. quedó ubicado durante la temporada 05/06 en el Grupo III junto a clubs valencianos, catalanes, riojanos, navarros y aragoneses teniendo más problemas de los previstos y debiendo sustituir a su entrenador Nacho Martín por Jesús Ángel Carazo transcurridas dieciséis jornadas y éste a su vez por Tito Bengoechea restando once para el final, técnico con el que eludió la Promoción de Descenso y el descenso directo empatado a puntos con la S.D. Huesca a quien aventajó con el gol average favorable. El C.D. Logroñés por su parte, terminó tercero a tres puntos de la A.D. Fundación Logroñés, club constituido en 1999 con el propósito precisamente de sustituirle, siendo eliminados los fundacionistas en Semifinales de la Promoción de Ascenso a Segunda División B por la U.D. Barbastro al perder en casa por 0-1 y empatar 1-1 en la localidad oscense mientras que el club histórico sí logró el ascenso después eliminar en Semifinales a la Unión Montañesa de Escobedo tras victoria en casa por 2-0 y derrota en la localidad cántabra por 2-1, superando al C.D. Universidad de Zaragoza en la Final con victoria rojiblanca por 4-0 en casa y derrota en la capital aragonesa por 2-1.

Con problemas financieros y deportivos tanto C.D. Logroñés como Logroñés C.F., a lo largo del torneo hubo intentos de aproximación entre ambas sociedades que no llegaron a fructificar en un posible acuerdo de fusión, iniciándose la campaña 06/07 con incertidumbre por lo que pudiera pasar y con C.D. Logroñés y Logroñés C.F. en el Grupo II junto a riojanos, navarros, vascos, castellano-leoneses y asturianos. Estando el morbo servido, Baltasar Sánchez dirigió al Logroñés C.F. con acierto dejándolo en décima plaza, siendo el C.D. Logroñés entrenado por Juan Carlos Herrero terminando en decimocuarto puesto. En cuando a los derbis entre ambos, el Logroñés C.F. se impuso en casa por 1-0, venciendo los históricos por 2-1 en el encuentro de la segunda vuelta. La A.D. Fundación Logroñés, que militó en el Grupo XVI de Tercera División exclusivamente riojano, concluyó segundo a tres puntos del Club Haro Deportivo no superando al Lucena C.F. en las Semifinales de la Promoción de Ascenso tras empatar 1-1 en la localidad cordobesa y perder en casa por 0-2.

La sesión 07/08 fue de ingrato recuerdo indistintamente para los aficionados de uno y otro club pues, ambos con las arcas vacías, deambularon por el Grupo II de la categoría sin pena ni gloria y sumidos en graves problemas también deportivos. El Logroñés C.F., dirigido por Baltasar Sánchez, no consiguió victoria alguna en las primeras trece jornadas siendo sustituido por Rafael Sáenz, técnico con quien mejoró pero no lo suficiente para esquivar el descenso al terminar decimoséptimo. Por su parte el C.D. Logroñés concluyó decimotercero con protestas continuas de su plantilla al no percibir sus emolumentos, temiéndose lo peor como así sucedió una vez terminado el torneo. Con un empate 1-1 jugando el C.D. Logroñés como local y empate 0-0 haciendo lo propio el Logroñés C.F., el club histórico fue denunciado por sus jugadores descendiendo administrativamente a Tercera División, mismo destino que sus rivales por lo que, presumiblemente, el Grupo XVI riojano sería su nuevo destino en el siguiente curso. A todo esto, la A.D. Fundación Logroñés era decimoprimera.

El verano de 2008 fue muy movido en los tres clubs citados no pasando un día en el que no estuvieran respectivamente en boca de todos los aficionados. Con plaza todos en Tercera División, la Junta Directiva del Logroñés C.F. hizo balance de su situación financiera y compromiso deportivo con el futuro decidiendo que el proyecto estaba en vía muerta y era inútil continuar en activo por lo que no hizo oficial su inscripción federativa desapareciendo. El C.D. Logroñés, de nuevo en el pozo del cuarto nivel nacional y sin perspectivas, fue inscrito para la edición 08/09 pero en la jornada dieciocho, después de no percibir la plantilla sus salarios y hartos de falsas promesas, no acudieron a su cita con el C.D. Tedeón siendo su segunda incomparecencia por lo que resultaron expulsados de la competición y descendidos. Para rematarlo todo, el modesto A.D. Fundación Logroñés no tuvo su año y concluyó decimonoveno descendiendo a Regional Preferente.

El escenario en agosto de 2009 fue, por lo tanto, dantesco con un club desaparecido en 2008 como el Logroñés C.F., otro que anunció su inmediata inactividad, caso de la A.D. Fundación Logroñés y un tercero, el histórico C.D. Logroñés al que, por culpa de las deudas, la Federación Riojana no permitió inscribirse en Regional Preferente. Sin embargo, no todo fue negro. El Club Deportivo Varea, una modesta sociedad constituida en 1967 radicada en el barrio del mismo nombre situado al este de Logroño junto a la desembocadura del río Iregua en el río Ebro, después de proclamarse campeón del Grupo XVI de Tercera división riojano con una sola derrota, ascendió a Segunda División B en un éxito sin precedentes al superar en la Eliminatoria de Campeones a la Ag.D. Cerro de Reyes Badajoz Atlético después de empatar 1-1 en la capital pacense y, una semana más tarde, repetir resultado llegando a la tanda de penaltis donde estuvo más afortunado.

Anticipándose a la desaparición de los dos últimos actores deportivos, la afición logroñesa empezó previamente desde el mes de mayo a manifestarse moviendo los cables necesarios para constituir un nuevo club que los representara. Esta iniciativa estuvo principalmente recogida en dos modos distintos de interpretar el fútbol pues, de un lado un numeroso grupo de aficionados empezaron a reunirse periódicamente en la puerta cero del Estadio de Las Gaunas para dar forma a un club donde los socios llevasen la voz cantante y, de otro, el empresario Félix Revuelta empezó a negociar con el presidente del club vareano Ángel Aguado, en el cargo desde 1996.

El primero en aparecer fue la Sociedad Deportiva Logroñés, constituido el 4 de junio con Rafael Álvarez en la presidencia y una filosofía donde el club pertenecía a todos los socios debiendo impedirse a toda costa que cayese en manos de uno o unos pocos. Elegidos como colores los clásicos rojiblancos para la camiseta y negro el pantalón, la nueva sociedad partió desde Regional Preferente al tratarse de la última de las categorías de la Federación Riojana con la idea de, poco a poco, teniendo como feudo el Estadio de Las Gaunas ir ascendiendo peldaños a nivel deportivo y atraer a una masa social desencantada con lo recientemente vivido. Su primera temporada de debut 09/10 fue impresionante al conseguir treinta y nueve victorias de las cuarenta posibles, siendo el otro resultado un empate además de anotar ciento setenta y siete tantos, recibir tan solo veintisiete y ascender a Tercera División.

El segundo, tuvo más miga. Tratándose el C.D. Varea de un club sin la estructura necesaria para dar el salto al profesionalismo, el empresario Félix Revuelta convenció al presidente arlequinado Ángel Aguado que lo mejor era hacerse él mismo cargo del club vareano al que iba a dotar de un presupuesto considerable mientras que, con el dinero percibido, podía constituirse un nuevo club en el barrio y, empezando desde cero, llegar a Tercera División. Firmado el acuerdo, Revuelta cambió el 24 de junio el nombre del recién ascendido a Unión Deportiva Logroñés y trasladó el club a la ciudad para jugar en el Estadio de Las Gaunas a compartir con la S.D. Logroñés, vistiendo igualmente camiseta rojiblanca con pantalón negro y estrenándose durante la campaña 09/10 en Segunda División B dentro del Grupo III junto a valencianos, catalanes y baleares ocupando el noveno puesto. En cuando a Ángel Aguado y el resto de aficionados arlequinados, constituyeron un segundo y nuevo C.D. Varea que partió esa misma temporada desde Regional Preferente ocupando el segundo puesto tras la S.D. Logroñés y por delante del nuevo U.D. Logroñés «B», dependiente del primer equipo, ascendiendo los tres a Tercera División.

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Álbum Nacional de Fútbol. Ediciones Álvarez y López (1947).
  • Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
  • Equipos con historia: C.D. Logroñés. Universo Editorial S.A. (1990).
  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Anuarios de la RFEF.
  • La Libertad. Diario.
  • La Rioja. Diario.
  • Heraldo Alavés. Diario.
  • La Voz de Aragón. Diario.
  • www.larioja.com Diario.
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

 

 

 

Historial del Bermeo Futbol Taldea

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Bermeo Futbol Taldea
  • Ciudad: Bermeo 
  • Provincia: Vizcaya / Bizkaia
  • Comunidad Autónoma: País Vasco / Euskadi
  • Fecha de constitución: 1 de julio de 1950
  • Fecha de federación: 31 de julio de 1950

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Bermeo Club de Fútbol (1950-2011)
  • Bermeo Futbol Taldea (2011- )

 

TÍTULOS NACIONALES:

0 Ligas de Categoría Nacional:

 

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal Itxas Gane
  • Año de inauguración: 25 de marzo de 1951
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal Itxas Gane (1951- )
  • Capacidad: 3.000 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo de Basozabaleta, Munguía (1950-1951)
  • Estadio Municipal Itxas Gane (1951- )

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL BERMEO FUTBOL TALDEA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL BERMEO FUTBOL TALDEA. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN BERMEO:

El municipio de Bermeo, situado en la comarca más septentrional de Vizcaya, Busturialdea y distante 34 kilómetros con la capital provincial, Bilbao, bañado por el mar Cantábrico y con una costa muy accidentada llena de acantilados presenta un puerto natural donde se asientan sus diecisiete mil vecinos contando con una importante flota pesquera de altura y la más importante de bajura vizcaína. Orbitando casi toda su economía entorno a la pesca y a la industria conservera ligada a ésta, la villa tiene un notable atractivo turístico destacando algunos edificios civiles, la isla de Ízaro y la ermita de San Juan de Gaztelugatxe.

Contando con algo más de diez mil habitantes recién empezados los años veinte del pasado siglo, el fútbol, después de ser practicado por jóvenes locales, adquirió un carácter más serio en julio de 1921 cuando un grupo de aficionados ligados a la Juventud Antoniana constituyó el Ízaro Club, una sociedad deportiva que logró mantenerse en activo llegando hasta 1925. Tras la desaparición del club antoniano, en 1926 surgió otra iniciativa titulada Lagun Etxea haciendo uso de un campo con la misma denominación, inscribiéndose en la Federación Vizcaína donde fue habilitado para competir en la Serie C, el tercer nivel regional en aquellos tiempos. Vistiendo camiseta roja con pantalón negro, el Lagun Etxea se retiró de la competición federada nada más empezar la década de los años treinta pasando su carrera a estar protagonizada por encuentros amistosos hasta que la Guerra Civil, en julio de 1936, le frenó en seco desapareciendo el club y también su campo.

Finalizado el conflicto bélico el fútbol pasó a un segundo plano, máxime al carecer el municipio de un campo reglamentario y en condiciones donde desarrollar de forma organizada esta práctica deportiva, reclamación que elevaron a las autoridades un grupo de jóvenes, algunos de ellos con experiencia en Segunda y Tercera División como Fabián y Pujana, quienes constituyeron en 1943 el Bermeo Club de Fútbol. Desoídas sus palabras, el Bermeo C.F. se limitó a disputar encuentros amistosos frente a clubs de localidades vecinas donde era invitado como rival por motivo de las fiestas patronales habiendo siempre un trofeo entre medio, teniendo una breve carrera al ver cortadas sus alas por tan significativo problema.

HISTORIA DEL CLUB:

1950 – 1960

Pasados los años la situación del fútbol bermeotarra no varió en absoluto ante la evidente frustración de todos los aficionados quienes veían desaprovechar una generación hasta que por fin, habiendo transcurrido varios meses de 1950, un grupo de jóvenes se propuso de una vez por todas constituir un club, inscribirlo en la Federación Vizcaína y conseguir financiación para disponer de un campo de fútbol reglamentario.

Los pasos dados fueron pocos, pero contundentes empezando por la constitución del Bermeo Club de Fútbol el 1 de julio con una Junta Directiva presidida por Pedro Fernández Arrien al que acompañaron Pedro Garay, José Ansoleaga, Daniel Ariztimuño, Ciriaco Gervasio, Guillermo Elgezábal, Mamerto Luzarraga, Manuel Fernández, Juan Mendizábal, Ramón Uriarte, Jesús Azkunaga y Félix Martínez. Vistiendo camiseta roja con pantalón blanco, el club hizo su debut ese mismo mes ante el C.D. Aurrerá Ondárroa en casa de éste empatando 2-2, siendo el segundo paso quedar inscrito en la Federación Vizcaína el 31 de julio. Una vez constituido y federado hubo que hacer frente a lo más complicado, conseguir un recinto donde jugar, entrevistándose la directiva bermeotarra con el presidente de la Vizcaína para, de este modo, presionar de alguna forma a las autoridades.

Asignada una plaza en Tercera Regional, el estreno competitivo de la temporada 50/51 se tuvo que hacer por lo tanto sin campo propio y debiendo recurrir a tomar prestado el Campo de Basozabaleta, cedido amablemente por el C.D. Munguía, terminando en segundo puesto dentro de su grupo y segundo igualmente en la Promoción de Ascenso por lo que accedió a Segunda Regional. Iniciadas paralelamente las obras del campo de deportes a finales de 1950, éstas dieron fin en marzo de 1951 siendo inaugurado el Campo de Itxas Gane el día 25 con un encuentro ante el C.D. Solocoeche, de Bilbao y oficialmente el 8 de abril en encuentro de Liga aplazado ante la S.D. Abanto Club con victoria de los locales por 5-3.

Empujado por la inmensa alegría de disponer al fin de un campo de deportes, el Bermeo C.F., conocido también como Bermeo Club, inició una rápida escalada que le llevó al primer puesto en la campaña 51/52 ascendiendo a Primera Regional, categoría de gran nivel en aquellos tiempos en la que fue cuarto en la sesión 52/53, segundo en la edición 53/54 igualado a puntos con el C.D. Villosa, de Llodio y primero, por lo tanto campeón, en la temporada 54/55 consiguiendo el ascenso a Tercera División una vez disputada la Promoción siendo presidente Jesús Recalde Yuste. Competir en el tercer nivel nacional exigió en la campaña de debut 55/56 un esfuerzo adicional de la sociedad bermeotarra al encontrarse, dentro del Grupo III, con importantes clubs vizcaínos y burgaleses pasando a estar presidida por José de Ansolega y Aguirrezábal realizando un torneo en el que tan sólo se obtuvieron cuatro victorias y cuatro empates terminando decimosegundo y colista debiendo defender su plaza en una Promoción donde, sexto, consiguió la permanencia. En la sesión 56/57, decimocuarto, no pudo agarrarse a la categoría descendiendo a Primera Regional.

A partir de este momento el Bermeo Club entró en regresión empezando por la edición 57/58 en la que ocupó el noveno puesto, siendo peor el curso 58/59 en donde, con tres puntos menos por sanción, concluyó decimotercero descendiendo a Segunda Regional, una categoría que no pisaba desde principios de década terminando octavo en el campeonato 59/60.

1960 – 1970

La década de los años sesenta fue convulsa desde el plano deportivo pues, a medida que fueron pasando los años, el club vizcaíno transitó por distintas categorías. La primera de las temporadas, 60/61, resultó exitosa al proclamarse campeón de Liga y lograr ascender a Primera Regional, categoría en la que fue octavo en la campaña 61/62 y decimotercero en la sesión 62/63 debiendo defender su plaza mediante una Promoción que superó para garantizarse, al menos, seguir un campeonato más en la primera de las divisiones regionales. En la edición 63/64 no hubo tanta fortuna y, decimoquinto, terminó descendiendo a Segunda Regional.

Inmerso de nuevo en la última de las categorías administradas por la Federación Vizcaína, la temporada 64/65 le fue favorable pues, segundo clasificado a dos puntos del bilbaíno C.D. Peña, pudo una vez disputada la Promoción ascender a Primera Regional. Acomodado en esta categoría, el Bermeo Club luchó en los sucesivo por tratar de ascender a Tercera División, sueño que se volvió infructuoso al ser cuarto en la campaña 65/66 y tercero en la sesión 66/67 repitiendo puesto en la edición 67/68. En 1968 la Federación Vizcaína creó un nuevo nivel, cuarto por orden jerárquico a nivel nacional titulado Regional Preferente teniendo la Tercera División por encima y la Primera Regional por debajo, categoría donde fueron a parar los clasificados entre los puestos segundo al decimoprimero, ambos inclusive, siendo el Bermeo Club uno de ellos debutando con una sexta plaza en la temporada 68/69. En la campaña 69/70 se dio un paso atrás terminando en noveno puesto.

1970 – 1980

Los años setenta no empezaron demasiado bien para el conjunto bermeotarra al quedar decimoctavo en la temporada 70/71 por lo que descendió a Primera Regional, categoría en la que se mantuvo muy poco tiempo pues, cuarto en la campaña 71/72, se impulsó de nuevo a Regional Preferente donde, con una plantilla muy ajustada, no pudo evitar el descenso en la sesión 72/73 al ser decimonoveno. El Bermeo Club no acababa de arrancar y, como un resorte, lo mismo era cabeza de serie en Primera Regional como candidato al descenso en Regional Preferente, una situación incómoda pero tangible a tenor del presupuesto que se manejaba. En la edición 73/74, arrastrando los problemas de los últimos tiempos, concluyó decimoquinto temiéndose encadenar un nuevo descenso en esta ocasión a Segunda Regional evitada por poco margen, iniciando una lenta recuperación en el curso 74/75 al finalizar noveno y transmitir buenas sensaciones a su afición.

La temporada 75/76 ofreció mejores resultados dentro del grupo único de Primera Regional y los rojillos, terceros en la clasificación, ascendieron a Regional Preferente volviendo con las pilas descargadas pues, vigésimo y colista en la campaña 76/77, pronto regresaron a Primera Regional. Certificando su cualidad de conjunto ascensor, una constante a lo largo de toda la década, la sesión 77/78 volvió a mostrar la cara buena de esta dinámica consiguiendo el primer puesto, título y con ello ascenso a Regional Preferente, siendo séptimo en la edición 78/79 y decimosexto en el curso 79/80 pendiente especialmente de los puestos de cola.

1980 – 1990

Al empezar los años ochenta el Bermeo Club adquirió una gran estabilidad, la necesaria para mantenerse durante toda la década en la misma categoría sin atravesar demasiados problemas como en el pasado y preparándose para acometer un mejor futuro que le estaba esperando a la vuelta de la esquina. Los grandes proyectos y, con ello, el acceso a categorías superiores, hay que cimentarlos desde raíz y los bermeotarras basaron su despegue forjándose desde Regional Preferente siendo décimos en la temporada 80/81 y sextos en la campaña 81/82. En la sesión 82/83, con un buen plantel, a punto estuvieron de dar el salto a Tercera División tras ser segundos en Liga igualados a puntos con el C.D. Munguía y a cuatro puntos de distancia del campeón, Arenas Club, de Getxo. Clasificado para la Promoción de Ascenso, éste se escapo ante la U.D. Aretxabaleta al perder 0-1 en casa y en la localidad guipuzcoana una semana más tarde por 1-0 quedando rotas sus esperanzas.

A partir de entonces, pese a sus buenas intenciones, no hubo oportunidades en los años inmediatos siendo noveno en la edición 83/84 y decimoprimero en la temporada 84/85, puesto que se repitió en la siguiente campaña 85/86 esfumándose con ello las opciones reales de hacer algo grande. La voluntad de las distintas Juntas Directivas que pasaban por el club vizcaíno era no perder la categoría y, si se podía, tratar de acceder a superior categoría u obtener la mejor clasificación posible, ocupando la decimosegunda plaza en la sesión 86/87 y la decimotercera en la edición 87/88. Con la llegada de nuevos directivos, a finales de década se produjo un salto cualitativo cambiando las miras del club al fijarse como meta el ascenso, algo que no ocurrió en la temporada 88/89 al terminar cuarto pero a tan solo tres puntos del objetivo, y sí en la campaña 89/90 cuando, después de ser segundo a tres puntos del C.D. Getxo, en la Promoción de Ascenso con una liguilla de tres aspirantes, consiguió superar a S.D. Beasain y C.D. San Ignacio, de Vitoria.

1990 – 2000

Logrado el ascenso a Tercera División después de treinta largos años de ausencia, el Bermeo Club se encontró con una categoría que mantenía el nombre del pasado pero, en lugar de ser el tercer nivel nacional era el cuarto tras la creación de la Segunda División B en 1977, algo que no molestó demasiado a los aficionados al poder reunirse con parte de los más destacados clubs vascos del momento. Ubicado en el Grupo IV, la temporada 90/91 tuvo cierta emoción por la igualdad predominante concluyendo los bermeotarras en decimosegundo puesto, discurriendo por cauces similares la campaña 91/92 saldada con una decimoquinta plaza.

La sesión 92/93 fue la de la eclosión del club costeño protagonizando un sensacional e histórico torneo en el que, con dieciocho victorias, catorce empates y seis derrotas, quedó segundo a cuatro puntos del Real Unión Club, de Irún, accediendo por méritos propios a la Promoción de Ascenso a Segunda División B. En esta fase, disputada bajo un sistema de liguilla con cuatro aspirantes, los vizcaínos no cedieron una sola victoria ganando los tres encuentros de casa y empatando los tres a domicilio, cifras suficientes para ascender de categoría un punto por encima de la U.D. Barbastro, tres sobre el Peña Sport F.C. y ocho sobre la S.D. Noja ante la alegría de su exultante afición.

Acceder al tercer nivel nacional supuso para los viejos aficionados tener la oportunidad de revivir los años cincuenta en Tercera División pero con un poco más de nivel al estar la categoría reducida a tan solo cuatro grupos, quedando los rojillos ubicados en el Grupo II durante la edición 93/94 junto a vascos, riojanos, navarros, castellano-leoneses y cántabros. Dirigidos por Juan Felipe Mintegui con gran acierto, los bermeotarras fueron la sensación del campeonato finalizando quintos a un solo punto de poder promocionar para intentar el ascenso a Segunda División, ofreciendo la temporada 94/95 la otra cara de la moneda al concluir decimocuartos a un punto de la Promoción de Permanencia y descenso necesitando de dos entrenadores, Tino Lamas cubriendo las veinticinco primeras jornadas y José Ramón Ibarra las trece últimas.

Siguiendo en el Grupo II, la campaña 95/96 ofreció otra imagen bajo la dirección del técnico Ricardo Moreno no sufriendo tanto y terminando en decimoprimero puesto, teniendo continuidad el mismo entrenador en la sesión 96/97 donde se pudo evitar en el último encuentro caer en la temida Promoción de Permanencia y, muy próxima también, en el descenso que se mantuvo a tres puntos. Siempre ubicado junto a los clubs limítrofes a la Cornisa Cantábrica y teniendo como presidente desde 1994 a Iosu Legarreta Etxebarría, la edición 97/98 fue de nuevo una lucha por evitar el descenso ocupándose Ricardo Moreno a lo largo de las veintinueve primeras jornadas de la plantilla y Bingen Arostegi en las nueve restantes, saldándose su participación con el decimocuarto puesto.

Cuando nadie lo esperaba, la temporada 98/99 resultó ser la mejor de su historia. Contratados los servicios del técnico Peio Aguirreoa, pese a su muy modesto presupuesto los bermeotarras sorprendieron a propios y extraños proclamándose subcampeones a dos puntos de la Cultural y Deportiva Leonesa escapándose el alirón en la última jornada al caer derrotados a domicilio ante la S.D. Lemona. Clasificados como era norma para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División, el sueño no se pudo conseguir pese a estar abarrotado en los encuentros de casa el Campo de Itxas Gane, ganándose un encuentro, empatando otro y cediendo cuatro derrotas para ser colista precedido por Levante U.D., Real Madrid C.F. «B» y Club Polideportivo Almería. Sin embargo, tras tan resonado éxito, vino la debacle. Alejadas sus máximas figuras al recalar en otros clubs, en la campaña 99/00 los vizcaínos no supieron reforzar la plantilla debidamente y hasta tres técnicos, Txomin García, Xabier Fradua y Pepín Cabezas se asomaron por Itxas Gane para intentar corregir la torcida trayectoria de un plantel roto que no pudo asirse a la Promoción de Permanencia terminando decimoséptimo y perdiendo la categoría.

2000 – 2010

La caída del Bermeo Club a Tercera División fue dura por lo inesperado de la misma y lo tocada que dejó a la afición después de entrar tan recientemente en la lucha por una plaza en la categoría de plata. El descenso, algo que era previsible ocurriera en algún momento, marcó en lo sucesivo la trayectoria del club costero que no pudo evitar alejarse de los puestos de cabeza en el Grupo IV vasco, empezando por una decimoprimera plaza en la temporada 00/01, decimotercero en la campaña 01/02 y decimocuarto en la sesión 02/03 a dos puntos de perder la categoría. Muy tocado en presupuesto y competitividad, la edición 03/04 fue desastrosa al sumar seis victorias y nueve empates, un balance que le llevó a ser vigésimo y colista descendiendo a División de Honor como se venía venir al observar su carrera en picado.

En División de Honor, nueva categoría por encima de la clásica Regional Preferente, el club no estuvo bien en la temporada 04/05 terminando en decimoquinta plaza, experimentando una gran reacción en la campaña 05/06 en la que fue segundo pero quedándose sin ascenso directo al proclamarse campeón el bilbaíno Santutxu F.C. Pareciendo que todo iba encaminado a luchar por el ascenso, la sesión 06/07 se concluyó en sexto puesto alejándose de las plazas de cabeza en los años posteriores al terminar decimosegundo en el curso 07/08 y decimoprimero en la edición 08/09, cerrando la década con un buen cuarto puesto en el campeonato 09/10.

2010 – 2020

La segunda década del siglo XXI significa la entrada de viento fresco en el club de Busturialdea después de tantos años alejado de competir en Categoría Nacional y en horas bajas. Cuarto en la temporada 10/11, en el verano de 2011 adopta el nombre de Bermeo Futbol Taldea ocupando en la campaña 11/12 el segundo puesto a un punto del C.D. Getxo quien asciende directamente a Tercera División tras un intenso duelo. Clasificado para disputar la Promoción de Ascenso donde se enfrentan los tres respectivos segundos de cada grupo provincial de División de Honor, los bermeotarras son segundos desperdiciando una segunda gran oportunidad para ascender, sonriéndole la fortuna una vez concluida la competición al desaparecer la S.D. Lemona y crearse una vacante en el Grupo IV.

De nuevo en Tercera División, la sesión 12/13 es notable al quedar en séptimo puesto, dando la de arena en la edición 13/14 al ser decimoséptimo a un paso del descenso. Decimocuarto en la temporada 14/15, el ya conocido como Bermeo F.T. realiza un gran torneo en la campaña 15/16 siendo capaz de finalizar segundo a siete puntos de la S.D. Zamudio, plaza que le da derecho a promocionar para intentar el asalto a Segunda División B. Provista esta fase de un nuevo sistema de eliminatorias directas a doble encuentro en lugar de las anteriores liguillas con cuatro aspirantes, son eliminados en Cuartos por el C.D. El Ejido 2012 después de perder 3-0 en la localidad almeriense y ganar en casa 3-2, no pudiendo de nuevo promocionar en la sesión 16/17 al concluir en sexto puesto.

La edición 17/18 se desarrolla por un peligroso camino donde le acecha el descenso continuamente, terminando afortunadamente para sus intereses decimoséptimo sin verse arrastrado por un descenso de un club de superior categoría. La tendencia mostrada en este campeonato, lejos de invertirse en el curso 18/19, se empeora al finalizar vigésimo y colista en una horrenda participación en la que se obtienen apenas dos victorias y trece empates descendiendo a División de Honor, categoría en la que no se acomoda bien concluyendo decimosegundo en un campeonato en el que la crisis sanitaria aparecida en marzo de 2020 supone la paralización de la actividad restando por disputar doce jornadas.

2020 – 2030

Con el cambio de década el club bermeotarra continua en División de Honor estrenándola con un cuarto puesto en la Liga 20/21 en un Campo de Itxas Gane prácticamente vacío a causa de la crisis sanitaria. Acostumbrada a los cambios con cierta frecuencia, en 2021 la Federación Española suprime tanto la Segunda División B como la Tercera División ocupando su espacio nuevas categorías tituladas Primera División RFEF y Segunda División RFEF a las que se añade una tercera denominada Tercera División RFEF convirtiendo la División de Honor en el sexto nivel dentro de la jerarquía futbolística. El Bermeo F.T., con nuevo formato en la División de Honor Vizcaína dividida en la campaña 21/22 en dos grupos, termina quinto en Liga y octavo en la Fase Final.

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Anuarios de la RFEF.
  • Archivo privado de Miguel Santos.
  • El Correo Español. Diario.
  • Excelsior. Diario.
  • www.elcorreo.com Diario.
  • www.deia.eus Diario.
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial del Motril Club de Fútbol, S.A.D.

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Motril Club de Fútbol, S.A.D.
  • Ciudad: Motril 
  • Provincia: Granada
  • Comunidad Autónoma: Andalucía
  • Fecha de constitución: 1 de julio de 1984
  • Fecha de federación: 1 de julio de 1984

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Motril Club de Fútbol (1984-2001)
  • Motril Club de Fútbol, S.A.D. (2001-2012)

 

TÍTULOS NACIONALES:

1 Liga de Segunda División B:

  • 2001/02

1 Liga de Tercera División:

  • 1996/97

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal Escribano Castilla
  • Año de inauguración: 21 de septiembre de 1969
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal Escribano Castilla (1969-1997)
  • Nuevo Estadio Municipal (1997-2003)
  • Estadio Municipal Escribano Castilla (2003- )
  • Capacidad: 4.500 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Estadio Municipal Escribano Castilla (1984-2012)

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL MOTRIL CLUB DE FUTBOL, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL MOTRIL CLUB DE FÚTBOL, S.A.D. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN MOTRIL:

Situado al sur de la provincia de Granada y bañado por el mar Mediterráneo, el municipio de Motril es la capital de la comarca de La Costa siendo su principal centro económico y cultural. Tradicionalmente dedicado a la agricultura donde destacó el cultivo de caña de azúcar, desde hace unas décadas ha sido sustituido por frutas de carácter tropical como el aguacate, mango, guayaba y chirimoya gracias a su especial microclima. Con sesenta mil vecinos asentados en su gran mayoría en el casco histórico, cuenta con puerto pesquero, comercial y deportivo siendo sus playas, de grava, foco de atracción turística.

Contando con dieciocho mil habitantes a principios del siglo XX, el fútbol fue introducido en el municipio granadino a raíz de la presencia de marineros de origen británico que desembarcaban en el puerto llamando la atención de los jóvenes locales atraídos por tan extraño juego. Adquirida cierta fama en la ciudad de Granada, en el puerto motrileño no quisieron ser menos y en 1907 quedó constituido el Sexi Foot-ball Club quien, a falta de contrincantes, en más de una ocasión tuvo que dividirse en dos mitades para que sus miembros pudieran jugar usando como recinto el Campo del Andén de Costa. Pasados unos años y, ante la desaparición de esta sociedad pionera, surgió en 1915 el Motril Athletic Club teniendo prácticamente los mismos problemas que la sociedad precursora e idéntico fin.

No fue, sin embargo, hasta 1923 cuando el fútbol adquirió cierta notoriedad. Tanto en las principales ciudades andaluzas como en el resto del país, el balompié era un fenómeno de masas que atraía por igual tanto a practicantes como aficionados, estabilizándose en la localidad granadina con la constitución del Athletic Club de Motril, sociedad que tuvo la fortuna de disponer de un terreno de juego conocido como Campo de La Fundición. Conseguido cierto prestigio a nivel provincial y regional, el Athletic Club de Motril se erigió como un club importante tirando de la cuerda para que en 1924 surgieran otros como el Motril Foot-ball Club, el Sporting Comercial y el C.D. Mediterráneo y, ya en 1925, el Racing Club de Motril y el Deportivo Motrileño, siendo el Sporting un segundón que se mantuvo a la sombra de los athléticos mientras los otros dos no perduraron demasiado.

Acabada la aventura de todos los mencionados en 1926, a partir de esta fecha se abrió una profunda brecha donde el fútbol cayó en un vasto letargo careciendo Motril de un representante no sólo a nivel regional, sino también local hasta que, en 1931, una nueva generación dio pie a la constitución de la S.D. Athletic Club con el ánimo de inscribirse en la Federación Regional del Sur y competir a nivel federado. Vistiendo camiseta rojiblanca con pantalón negro, transcurrido un año de actividad y habiendo adquirido la suficiente práctica, la S.D. Athletic Club se dio de alta a nivel federativo siendo considerada como de Segunda Categoría por lo que, previamente a la disputa del campeonato del distrito Málaga-Granada 32/33 a empezar en noviembre, tuvo tiempo para inaugurar el 15 de octubre de 1932 el Campo del Majuelo trayendo como invitado al Córdoba Sporting Club quien le derrotó por 0-2.

A la sombra de la iniciativa rojiblanca y contando con el nuevo recinto deportivo, surgieron paralelamente otros clubs de escasa trayectoria que se beneficiaron o mudaron a esta instalación como el Sporting Club de Motril en 1931, el Marítimo, el Club Recreativo de Motril y el C.D. Obrero, los tres constituidos en 1932, el Betis Club y el Racing Club en 1933, apareciendo en 1935 el Gimnástico y el politizado Juventudes de Acción Popular. En julio de 1936, con la Guerra Civil todo se fue al traste y Motril, aunque alejado del frente bélico, no fue ajeno al desastre que se vivió en todo el país.

Finalizado el conflicto en abril de 1939, la actividad futbolística se hizo esperar pues había un gran número de actividades más trascendentes que eran de obligado cumplimiento arreglar, no siendo hasta 1941 cuando, siendo administrado el uso del Campo del Majuelo desde el Frente de Juventudes, quedó constituido el Frente de Juventudes Motril. Compuesto en su totalidad por jóvenes amateurs, la espera de un club sénior que compitiera a nivel federado todavía se hizo esperar más pues, con pocos medios y escasa financiación los distintos proyectos que se emprendieron como la Sociedad Olímpica Motrileña constituida en 1943 y el Club Deportivo Motrileño constituido en 1948 no tuvieron el viento de cara y ambos se quedaron en nada.

El momento deseado llegó en 1950 con la constitución del Motril Club de Fútbol, una sociedad que, vistiendo camiseta blanquiazul con pantalón azul y partiendo desde Tercera Regional en la temporada 50/51, al fin dispuso del apoyo institucional tan necesario para abrirse camino. Tomando como base el Campo del Majuelo, el crecimiento del Motril C.F. fue explosivo situándose en Segunda Regional en la campaña 51/52 y en Primera Regional en la sesión 52/53 para, segundo clasificado en la edición 53/54 tras el C.D. Linares, ascender a Tercera División.

La Tercera División de mediados los años cincuenta era el tercer nivel nacional de la época reuniendo hasta dieciséis grupos distribuidos por todo el país administrando en algún momento la Federación Andaluza un total de tres con diez participantes respectivamente. En la temporada 54/55 de debut, los motrileños debutaron en el Grupo XI ocupando el sexto puesto con desplazamientos a las provincias vecinas de Málaga, Almería y Jaén, repitiendo puesto en la campaña siguiente 55/56 donde fue incluida Córdoba. Los gastos ocasionados por los viajes rápidamente hicieron mella en su economía y en la sesión 56/57, recién empezado el torneo, no se acudió a la cita que se tenía ante el Guadix C.F. Como se pudo, el domingo siguiente sí se logró jugar y así fue sucediendo hasta la jornada dieciocho cuando, sin un duro, tuvo que retirarse de la competición para poco después desaparecer arruinado.

El hueco originado por el Motril C.F. no fue cubierto a nivel federado de inmediato pues, también desaparecida la Juventud Deportiva Motrileña constituida en 1952, en lo sucesivo tan sólo el Club Deportivo Clarín constituido en febrero de 1956 y presidido por el entusiasta José Vinuesa Terón pudo, de alguna manera, arrastrar aficionados al Campo del Majuelo, especialmente a partir de la temporada 61/62 cuando se inscribió la sección de fútbol en Primera Regional terminando decimosegundo. En la campaña 62/63, compitiendo con jugadores locales, se llegó a disputar la Promoción de Acenso a Tercera División aunque con resultado negativo, renunciando a seguir compitiendo en la edición 63/64 debido a los elevados costes y temor a desaparecer que se originó entre la directiva apostando claramente por la natación.

Administrador de un campeonato local de infantiles y juveniles, la labor del C.D. Clarín no quedó en saco roto creándose a caballo entre los años cincuenta y principios de los sesenta un buen número de clubs, muchos de ellos ayudados por el Frente de Juventudes quienes, jugando en el Campo de La Junquera sito en los terrenos de la actual refinería de aceite,  algunos de ellos no llegaron a federarse caso del Juvenil Motrileño nacido en 1956 y el Motril Frente de Juventudes creado en 1957. Prendida la semilla futbolística, otros sí se federaron como el C.D. Varadero, nacido en 1956, el C.D. Rayo Motrileño, el Club Atlético Capuchinos y el San Fernando C.F., constituidos los tres en 1964, y el Tiburón C.F., constituido en 1966.

El año 1969 fue clave en el desarrollo del fútbol en Motril pues, viejo y anticuado el antiguo Campo de El Majuelo, el consistorio empezó las obras de un nuevo recinto al noreste del casco urbano para que los distintos clubs existentes tuvieran cabida. Este hecho dio pie a la constitución de una nueva sociedad que representara a todo el municipio, surgiendo el Club Deportivo Motril presidido por Francisco Bustos Béjar que fue inscrito en la Federación Andaluza partiendo desde Regional Preferente. Vistiendo camiseta blanquiazul con pantalón azul, el conjunto motrileño inauguró oficialmente el denominado Estadio Municipal Escribano Castilla el 21 de septiembre con victoria por 1-0 ante el C.D. Churriana, iniciando una prometedora carrera en la que se pensaba recuperar el tiempo perdido.

Animado por disponer de nuevo terreno de juego, la afición local se volcó con el C.D. Motril estrenándose con un décimo puesto en la temporada 69/70 y pasando bastantes apuros en la campaña 70/71 para terminar decimoquinto, dando un brusco cambio sus aspiraciones deportivas a partir de 1971 cuando se apostó claramente por el ascenso a Tercera División. Segundo en la sesión 71/72 a cinco puntos de la Ag.D. Amería quien ascendió, por la merma de puntos no pudo promocionar volviendo a ser subcampeón con idénticas condiciones en la edición 72/73 ahora a un punto del Club Atlético Marbella. El C.D. Motril acechaba el ascenso y en el curso 73/74 hizo su tercer intento frustrado por el Granada C.F. «B», consiguiendo por fin el primer puesto en la temporada 74/75 y disputándose una plaza directa en el Grupo IV de Tercera División ante el campeón del otro grupo de Regional Preferente, el Jerez Industrial C.F. quien le superó después de vencer los motrileños en casa 1-0 y caer derrotados en la localidad gaditana por 3-0. El sistema competitivo le dio una nueva oportunidad mediante la Promoción de Permanencia en la que se enfrentó como aspirante ante la S.D. Éibar, perdiendo en tierras guipuzcoanas por 2-0 y empatando 0-0 en casa por lo que no pudo materializar su ascenso.

Tercero en la campaña 75/76, el acceso a Tercera División llegó al término de la sesión 76/77 pero con una categoría convertida en cuarto nivel nacional tras la creación en 1977 de la nueva Segunda División B, una competición atractiva donde se estrenó en la edición 77/78 dentro del Grupo VI formado por andaluces, extremeños y norteafricanos con un meritorio octavo puesto mientras en la temporada 78/79, siguiendo en el mismo grupo, concluyó decimoctavo en un torneo muy irregular. Sexto en la campaña 79/80, en 1980 la Federación Española concedió a la Federación Andaluza la administración de dos grupos en Tercera División recalando los clubs de la zona oriental en el Grupo IX. Decimosegundo en la sesión 80/81 y decimoquinto en la edición 81/82, el C.D. Motril empezó a tener serios problemas económicos en estos años temiéndose por su continuidad pero cumpliendo en el curso 82/83 al ser decimosexto esquivando el descenso. La temporada 83/84 se presentó con numerosísimos contratiempos de índole económica y los blanquiazules terminaron hundidos en la tabla clasificatoria vigésimos con cuatro victorias y cuatro empates. En Asamblea Extraordinaria realizada el 1 de julio de 1984, confirmándose que se debían cinco millones de pesetas de la época, se aprobó la disolución de la sociedad y la constitución de una nueva.

HISTORIA DEL CLUB:

1984 – 1990

Bajo el título de Motril Club de Fútbol, presidido por Manuel Gómez Ruiz y ocupando la plaza que dejaba el C.D. Motril en Regional Preferente, en la Asamblea Constituyente se aprobó que la nueva sociedad vistiese íntegramente de azul iniciando su carrera deportiva con un cuarto puesto en la temporada 84/85. En la campaña 85/86, a voluntad de los aficionados, se cambiaron los colores adoptándose los clásicos blanquiazules para la camiseta continuando con el pantalón azul en un curso donde se empezó a pagar a la plantilla y conceder primas pero sin éxito pues, tercero en la clasificación, el ascenso a Tercera División fue para U.D. San Pedro, de Marbella y Atlético Benamiel C.F., de Benalmádena, una suerte similar a la que se corrió en la sesión 86/87 cuando, de nuevo tercero, los clubs que promocionaron fueron Guadix C.F. y C.D. Santa Fe.

Tras tres intentos fallidos por ascender, en la edición 87/88 se apostó por el refuerzo de la plantilla con jugadores forasteros consiguiendo el primer puesto con dos puntos sobre la U.D. Maracena por lo que ambos se clasificaron para disputar la Promoción de Ascenso a Tercera División yendo los motrileños directamente a la Eliminatoria Final a doble encuentro mientras los blanquinegros debieron jugar una liguilla quedando segundos. Este puesto permitió que los dos se vieran nuevamente las caras sentenciando los blanquiazules el ascenso en la ida al imponerse por 0-3, siendo la vuelta en casa más sosegada con derrota 0-1. Debutante en Tercera División, meta trazada desde su constitución, los granadinos quedaron ubicados en el Grupo IX durante la temporada 88/89 con un octavo puesto mientras en la campaña siguiente, 89/90, muy similar a la anterior se acabó en novena plaza.

1990 – 2000

La década de los años noventa estuvo caracterizada por la inestabilidad dentro de un club en el que tan pronto se estuvo arriba como, de forma repentina, se perdió efectividad para volverla a recuperar, y de qué manera alcanzándose las cotas deportivas más elevadas en la historia del fútbol motrileño. La primera temporada, 90/91, fue novedosa en cuando al nuevo sistema competitivo implementado por la Federación Española donde los cuatro primeros clasificados de cada grupo de Tercera División, quedaban clasificados para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División B en lugar de los dos primeros como se hacía hasta la fecha. Motivado por esta medida federativa el Motril C.F. salió a por todas en el campeonato del Grupo IX pero, aunque lo intentó, hubieron rivales más capacitados quedando quinto a las puertas del éxito. En la campaña 91/92 se volvió a intentar pero, con una plantilla menos competitiva, se cerró el campeonato en octavo puesto llegando a continuación una deplorable sesión 92/93 en la que, lejos de los esperado por sus seguidores, se obtuvieron dos victorias y nueve empates finalizando decimonoveno y con un billete para Regional Preferente.

Regresar al quinto nivel nacional de la época fue un serio revés para los blanquiazules quienes, en la edición 93/94, al ser terceros se vieron privados de poder promocionar para intentar regresar a Tercera División, debiendo esperar a la temporada 94/95 para lograrlo después de ser primero en su grupo y no realizar una buena Promoción de Ascenso en la que fue tercero pero, debido a movimientos en superiores categorías, de rebote se vio catapultado al Grupo IX. Para tener cierta garantía de éxito y no perder la categoría recién conquistada, en la campaña 95/96 se reforzaron todas las líneas de los blanquiazules realizándose un excelente torneo en el que fueron cuartos pero a tan solo cuatro puntos del Club Polideportivo Ejido, accediendo a una Promoción de Ascenso a Segunda División B en la que, sin demasiadas opciones reales, concluyeron terceros superados por el ciudarealeño C.D. Manchego y Moralo C.P., obteniendo el cuarto puesto el C.D. San Fernando.

No conseguido el ascenso, en la campaña 96/97 el Motril C.F. reforzó todas sus líneas para acercarse más al objetivo dando de pleno pues, aunque con tres puntos sobre la U.D. Maracena, se consiguió el campeonato y título en la categoría clasificándose por segunda vez consecutiva para disputar la Promoción. En esta oportunidad a los blanquiazules les acompañó la fortuna pues, en un intenso duelo con el C.D. Torrijos en el que ambos empataron a quince puntos, una victoria en casa por 2-0 ante los toledanos les proporcionó en bandeja el acenso a Segunda División B ante la gran alegría de sus seguidores siendo tercero el C.D. Burguillos y cuarto el Algeciras C.F. Competir en el tercer nivel nacional exigió una profunda remodelación del Estadio Municipal Escribano Castilla que fue dotado de nuevas gradas y asientos invitándose el 9 de octubre al Real Madrid C.F. realizando Alfredo Di Stéfano el saque de honor.

Acomodado en el Grupo IV junto a andaluces, murcianos y norteafricanos, el debut en Segunda División B de la sesión 97/98 se llevó a cabo con Wilder Barcos en el banquillo no obteniéndose buenos resultados por lo que, en la jornada dieciséis, fue sustituido por Enrique Montero obteniendo la decimosexta plaza, un puesto que según el sistema competitivo de la época le obligó a disputar una Promoción de Permanencia tocándole en Semifinales el conjunto canario C.D. Mensajero. Después empatar 0-0 en Santa Cruz de La Palma, una victoria en casa 2-1 zanjó de raíz males mayores asegurando la continuidad. Para el campeonato 98/99 se contrataron los servicios del técnico José Ramón Corchado siguiendo en el Grupo IV pero con la novedad de sumarse los representantes extremeños sustituyendo a los murcianos asegurando los blanquiazules con bastante antelación la permanencia concluyendo finalmente en un notable décimo puesto. En el curso 99/00, tercero de lo motrileños en la categoría, el Grupo IV incorporó a andaluces, murcianos, extremeños, castellano-manchegos y norteafricanos con grandes distancias y exigencia presupuestaria confiándose el proyecto nuevamente al técnico Corchado quien repitió en la décima plaza otra vez sin excesivos problemas.

2000 – 2010

Con el cambio de siglo los hubo también en el banquillo llegando en la temporada 00/01 Miguel Novo quien, teniendo continuidad en el Grupo IV jugando con andaluces, extremeños y norteafricanos, tuvo un campeonato movido viendo de reojo siempre los últimos puestos dentro de un torneo muy igualado donde las distancias eran mínimas. Al final, tras una victoria en casa ante el C.D. San Fernando, se esquivó tanto el descenso como la temida Promoción de Permanencia saliendo airoso de una comprometida situación. .

Siendo presidente José Antonio Murado, muy distinta, sin embargo, resultó la campaña 01/02 con el entrenador Antonio Montero «Nené». Con bastantes caras nuevas y un nuevo sistema de juego que fue asumido a la perfección, el Motril C.F. dio un giro de ciento ochenta grados a su trayectoria convirtiéndose en un serio aspirante al título como asís sucedió terminando primero igualado a puntos con la A.D. Ceuta. Este puesto, todo un éxito sin precedentes y difícil de imaginar en pretemporada, le permitió promocionar para intentar el ascenso a Segunda División encontrándose con un grupo donde tuvo sus opciones pero en el que destacó el Getafe C.F., conjunto que se llevó el premio absoluto siendo los granadinos segundos, C.E. L’Hospitalet tercero y Cultural y Deportiva Leonesa cuarto. En esta precisa temporada y con fecha 22 de octubre de 2001, el club granadino se transformó en Sociedad Anónima Deportiva pasando a ser conocido como Motril Club de Fútbol, S.A.D., nuevo estatus con el que siguiendo el pensamiento que se argumentaba en la época se pretendía profesionalizar toda la institución y así garantizar u buen funcionamiento, algo que años después se pudo comprobar de primera mano que no era así ni de lejos.

Del éxito al fracaso en ocasiones hay un solo paso y al Motril C.F. le vino a toda velocidad en la sesión 02/03 cuando, dirigido por Juan Carlos Hontoria, el traspaso de buen número de sus jugadores más destacados a otros clubs dejó a la plantilla muy mermada hasta el punto de sumarse tan solo cuatro victorias y diez empates, números que le condenaron al último puesto y a perder la categoría descendiendo a Tercera División. La caída de los motrileños fue dura e inesperada, pero aun así la edición 03/04 dentro del Grupo IX andaluz fue destacable pues, segundo en Liga a un solo punto del histórico Granada C.F. con quien mantuvo un intenso duelo, logró clasificarse para la Promoción de Ascenso a Segunda División B, torneo que había cambiado con un sistema de eliminatorias directas en lugar de las clásicas liguillas. Tocándole el Club Hellín Deportivo en Semifinales, los albaceteños les infringieron un serio correctivo al derrotarlos 3-0 en la ida, repitiendo derrota de nuevo en casa aunque con el resultado de 0-1 por lo que fueron eliminados.

Tras la frustración del año anterior, en la sesión 04/05 los blanquiazules perdieron parte del potencial que todavía arrastraban de su paso por la categoría de bronce y el plantel se resintió ocupándose la octava plaza, mejorándose considerablemente en la temporada 05/06 donde fue tercero manteniendo un reñido duelo con los representantes de la capital provincial, Granada C.F. y Granada Atlético C.F. de quienes les separó un solo punto. Clasificado por méritos propios para la Promoción de Ascenso, el Motril C.F. superó en Semifinales al C.D. San Fernando con fortuna después de vencer en casa por 1-0 y repetir resultado en la localidad gaditana llegándose al lanzamiento de penaltis, punto crucial que superaron accediendo a la Final. En esta decisiva eliminatoria los granadinos se encontraron con un poderoso C.F. Villanovense con el que empató 0-0 en casa cayendo ampliamente derrotado en el encuentro de vuelta por 3-0 y perdiéndose toda esperanza de ascenso.

En la campaña 06/07 se obtuvo de nuevo pase para disputar la Promoción de Ascenso, en esta ocasión de manera apurada al ser cuarto en Liga en reñido duelo con el Arenas de Armilla Cultura y Deporte que fue quinto, careciendo de fortuna en Semifinales donde, después de imponerse 1-0 a la Real S.D. Alcalá, en el encuentro de vuelta fueron vapuleados por 3-0 quedando eliminados. La sesión siguiente, 07/08, fue de transición con un plantel que no estuvo a la altura ocupándose el noveno puesto, volviendo a la carga en la temporada 08/09 en la que, muy activo, terminó tercero precedido de Unión Estepona C.F. y U.D. Almería «B». La promoción de Ascenso, con nuevo formato, le emparejó en Cuartos con el C.F. La Nucía, rival alicantino que le derrotó en la ida por 3-1 y con el que empató 1-1 en casa quedando apeado de la competición. En la campaña 09/10 el Motril C.F. pugnó por el título y a un paso estuvo de conseguirlo yendo a parar a manos del Atlético Mancha Real por dos puntos de margen. En la Promoción consiguió superar los Cuartos imponiéndose al cántabro Ct.D. Bezana tras victoria en la ida por 0-1 y empate en casa 1-1, accediendo a Semifinales donde fue eliminado sin perder puesto que, tras empatar 1-1 ante el Peña Sport F.C. en Tafalla, una semana más tarde no pasó del empate 2-2 haciendo prevalecer los navarros el valor doble de los goles anotados a domicilio.

2010 – 2012

Al empezar la segunda década del nuevo siglo, después de un sinfín de años invirtiendo importantes sumas de dinero para conseguir el ascenso a Segunda División B, la economía del club granadino empezó a mostrar signos preocupantes de estar asfixiada y que, de no revertir su tendencia, pronto lo iban a pasar mal o tener serios problemas de supervivencia. A trancas y barrancas se logró reunir una plantilla para la temporada 01/11 que ocupó el octavo puesto de forma honrosa, siendo muy distinta la campaña 11/12 en la que las cuentas preocuparon más que el aspecto deportivo saldado con éxito al concluir decimoquinto conservando la categoría con mucho esfuerzo.

Finalizado el campeonato la Tesorería de la Seguridad Social, a la que se debían 170.000 euros fruto de la paupérrima gestión de las Juntas Directivas anteriores, no aplazó ni quiso prorrogar más la deuda contraída y la Junta Gestora provisional que había heredado tan envenenada carga no pudo hacer frente a la situación como tampoco el ayuntamiento al ser el montante muy elevado. El 26 de julio de 2012, fuerzas vivas del fútbol local al contarse con una importante cantera y jugadores en cartera para seguir jugando al fútbol, constituyeron el Club de Fútbol Motril a la espera del desenlace final del Motril C.F., club histórico que desapareció oficialmente la noche del 31 de julio al no hallarse ninguna solución para su continuidad. Vistiendo camiseta blanquiazul con pantalón azul y haciendo uso del Estadio Municipal Escribano Castilla, el C.F. Motril inició su andadura deportiva desde Segunda Regional, la última de las categorías administradas por la Federación Andaluza, comenzando una carrera que en lo sucesivo lo llevaría hasta Tercera División.

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BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial del Yeclano Club de Fútbol

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Yeclano Club de Fútbol
  • Ciudad: Yecla
  • Provincia: Murcia
  • Comunidad Autónoma: Región de Murcia
  • Fecha de constitución: 28 de noviembre de 1954
  • Fecha de federación: 28 de noviembre de 1954

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Club Deportivo Hispania del Frente de Juventudes (1954-1958)
  • Club Deportivo Hispania (1958-1960)
  • Yeclano Club de Fútbol (1960-2004)

 

TÍTULOS NACIONALES:

1 Liga de Tercera División:

  • 1989/90

 

ESTADIO:

  • Nombre: Campo de Fútbol Municipal La Constitución
  • Año de inauguración: 1944
  • Cambios de nombre:
  • Campo Municipal de Deportes (1944-1992)
  • Campo de Fútbol Municipal La Constitución (1992-)
  • Capacidad: 4.000 espectadores

OTROS ESTADIOS:

  • Campo de La Constitución (1954-2004)

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL YECLANO CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL YECLANO CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN YECLA:

El municipio y ciudad de Yecla, situado al noreste de la Región de Murcia, lindante al este con Alicante y al norte con Albacete, tiene un extenso término superior a los seiscientos kilómetros cuadrados donde destacan, además de varios yacimientos de arte rupestre e ibérico, la presencia del Monte Arabí, elevación testigo del paso de varias culturas. Capital de la comarca del Altiplano y con treinta y cinco mil vecinos, su economía ha girado tradicionalmente alrededor del cultivo de cereales y vid contando con denominación de origen propia, siendo la industria del mueble y derivados desde hace ya bastantes años su principal motor contando además, entre su patrimonio, de un interesante conjunto de arquitectura religiosa.

Contando con veinticinco mil habitantes a principios de los años veinte, apareció el fútbol en la localidad al ser practicado por entusiastas jóvenes quienes, atraídos por este novedoso deporte, se daban cita habitualmente en el paraje conocido como La Lomica. Fruto de este interés y con el acuerdo de enfrentarse a otros clubs de su entorno geográfico, quedó constituido en 1923 Club Deportivo Yeclano, sociedad pionera en estas lides que tomó la iniciativa no siendo la única pues, ya en 1924, se vio acompañada de un segundo grupo de aficionados quienes dieron lugar a la constitución del Yecla Foot-ball Club rivalizando en su cometido ante la atenta expectación de aficionados y curiosos.

Usuarios ambos del Campo de La Lomita, habilitado según los cánones con las medidas reglamentarias, debido a su fraterna rivalidad en febrero de 1925 llegaron a diputarse una copa de plata que fue sobradamente conquistada por los representantes del Yecla F.C. al imponerse por 4-0 ante la consiguiente frustración del C.D. Yeclano, manteniéndose las dos sociedades al margen de la novel Federación Murciana nacida el 24 de junio de 1924. El tirón del fútbol no pasó desapercibido para la juventud yeclana y, a principios de 1925, quedó constituido el Rayo, tercero en discordia.

Avanzado el año 1925 el C.D. Yeclano entró en un profundo declive y se disolvió naciendo de sus cenizas el Club Deportivo Español, siendo las perspectivas de futuro las mismas y manteniendo una gran rivalidad con el Yecla F.C. al que se pudo derrotar como sucedió el 17 de mayo con resultado de 2-0. Siguiendo con la tónica de disputar encuentros amistosos frente a clubs de su entorno y de la ciudad de Murcia preferentemente, el ritmo descendió considerablemente a partir de 1926 llegando a desaparecer por completo en 1927, hallándose la localidad vacía de un representante a la espera de tiempos mejores.

escudo CD Hispania de Yecla

Alcanzado 1928 y después de un año sin fútbol, la Sociedad Artístico-Musical Santa Cecília decidió crear una sección deportiva con equipo de fútbol impulsada por el reverendo José Contreras bajo el nombre de Club Deportivo Hispania, entidad que poco a poco fue aglutinando a jóvenes locales con deseos de jugar y a aficionados que empezaron a reclamar una no muy lejana inscripción en la Federación Murciana para competir oficialmente. Vistiendo camiseta rojiblanca con pantalón azul, el Campo de La Lomita pronto se quedó pequeño buscándose un nuevo recinto que se concretó en las inmediaciones de la estación del ferrocarril, quedando inaugurado el titulado Campo de la Estación el 7 de octubre de ese mismo año con derrota por 1-3 ante el Imperial F.C., de Murcia.

El Campo de la Estación sirvió como trampolín para inscribir el club en la Federación Regional Murciana, debutando durante la temporada 28/29 en Tercera Categoría con un meritorio primer puesto empatado a puntos con el Betis F.C., de Murcia, que le valió ascender a Segunda Categoría. El empuje del C.D. Hispania cautivó en 1930 a un grupo de muchachos que decidieron constituir el Atlántico Foot-ball Club, destacando algunos de ellos con quienes se reforzó la plantilla rojiblanca durante la temporada 31/32 para competir en Segunda Categoría. La llegada masiva de jugadores foráneos al club hispanista, todos ellos profesionales, convulsionó en exceso las arcas del club yeclano provocando que, ante la falta de fondos, no se pudiera en encuentro de Liga acudir a la cita como visitante ante el C.D. Cieza, siendo denunciado por éste que, en unión a otros deslices financieros, provocó que la Federación Murciana les sancionara con una multa de seiscientas pesetas de la época y la expulsión durante un año no pudiendo ser readmitido hasta que no abonase lo adeudado.

La decisión federativa supuso la muerte anunciada del club rojiblanco y, ya en el mes de abril, los que fueran jugadores del Atlántico F.C. reorganizaron esta sociedad integrada plenamente por yeclanos, quedándose prácticamente el C.D. Hispania sin jugadores aunque se repuso al cabo de los meses pero sin el peso de antaño.

A principios de 1933 el fútbol adquirió de nuevo auge con la aparición de nuevos clubs vinculados a movimientos políticos o religiosos como el de la F.U.E. y el de los Estudiantes Católicos, siendo gran protagonista el renovado acuerdo que alcanzaron en abril los directivos de C.D. Hispania y Atlántico F.C. para constituir una nueva sociedad donde sólo tuvieran cabida jugadores locales para no caer en errores del pasado reciente. Nacido de la unión de ambos el nuevo Yecla Foot-ball Club, segundo club en adoptar esta denominación, vistiendo camiseta roja con pantalón blanco hizo este club su encuentro de presentación el 7 de mayo ante el Plus Ultra Lisvert, de Cartagena con victoria por 5-1, quedando inscrito en el Registro de Asociaciones provincial en el mes de agosto y con sede en el número 67 de la calle de San Antonio.

La nueva sociedad permitió superar la crisis desatada en 1932 en un breve espacio de tiempo, regresando nuevamente un club yeclano a la competición federada en la campaña 33/34 cuando quedó inscrito el Yecla F.C. en Tercera Categoría. El torneo resultó beneficioso a sus intereses y como campeón, consiguió ascender a Segunda Categoría, debutando en la edición 34/35 donde conservó su plaza hasta que la Guerra Civil estalló durante julio de 1936. Durante este año pervivieron en la ciudad, además del mencionado Yecla F.C., otras sociedades como el Estrella Foot-ball Club, entidad constituida en abril de 1936 que pugnó fuerte con los rojiblancos a la hora de atraer a la afición estando formada, una vez más, con jugadores locales; el modesto C.D. Estudiante, el Betis Club y el equipo representativo de la Federación Cultural y Deportiva Obrera.

Desde el inicio del conflicto hasta 1937 algunas de estas sociedades jugaron encuentros en beneficio de las milicias del frente pero, a partir de este punto, su actividad se redujo considerablemente hasta desaparecer en 1938. Finiquitada la guerra, Yecla había perdido cuatro mil vecinos en su censo permaneciendo, al menos en el quinquenio siguiente, sumida en una profunda depresión económica de la que le costó bastante salir. No obstante, el fútbol siguió su cauce natural en una localidad donde la afición había prendido mecha surgiendo varias sociedades como el Yecla Frente de Juventudes en 1940, acompañado de clubs estrictamente amateurs como el Orense F.C. y el Cruzados.

Desfasado y poco apropiado el Campo de la Estación para congregar a un buen número de aficionados, desde diferentes foros se reclamó la construcción de un campo de deportes donde se pudieran llevar a cabo distintas prácticas, algo fácil de entender pero difícil de plasmar para una corporación municipal ocupada en temas de más trascendencia, aunque no por ello se renunciaba a nada.

En 1941, con la colaboración de antiguos futbolistas procedentes de los antiguos Estrella F.C. y del Yecla F.C. a los que se les unieron las figuras más emergentes del Yecla F.J., se constituyó el Club Deportivo Español, sociedad que vistiendo camiseta azulgrana con pantalón azul nacía con la etiqueta de heredera y depositaria de la tradición futbolística iniciada años antes. El C.D. Español, usuario del Campo de La Estación, fue en su origen un modesto club que no disponía de los medios necesarios para inscribirse en la Federación Murciana y, tal cual sucedía con otros clubs de su entorno, se vio privado de jugar en competición oficial. Los años de posguerra fueron tiempos realmente duros transcurriendo el paso del tiempo lentamente por lo que, a pesar del deseo de muchos, el fútbol federado todavía debía esperar a que se reunieran todas las circunstancias a su favor.

Transcurrido 1941 y 1942 sin pena ni gloria, el esperado momento para todos se materializó en 1943 cuando, después de nombrarse una Junta Gestora encargada de localizar un sitio apropiado y recaudar fondos, el ayuntamiento pudo al fin adquirir unos terrenos al final de la calle Cruz de Piedra por entonces a las afueras avanzándose aceleradamente las obras para disponer de un flamante Campo de Deportes lo antes posible. Arrastrado por la consolidación del proyecto municipal, el conocido hasta la fecha como C.D. Español inició rápidamente los trámites para darse de alta en la Federación Murciana con vistas a la siguiente temporada, haciéndolo como Club Deportivo Yeclano para que todos sus rivales supieran de inmediato cuál era su procedencia y siendo ubicado en Segunda Categoría.

Consolidado el campo, el C.D. Yeclano en cuya Junta Directiva participaban Pedro Muñoz Ibáñez, Benjamín Lorenzo, Hermógenes Azorín y Juan Candela entre otros, debutó durante la temporada 43/44 quedando en primer puesto por lo que consiguió el ascenso a Primera Categoría, repitiendo el primer puesto en la campaña 44/45 aunque no pudo ascender a Tercera División. En el transcurso de este campeonato, el 16 de abril de 1944 se invitó al Valencia C.F. proclamado campeón de Primera División apenas una semana antes para estrenar oficialmente el Campo de Deportes, hoy Estadio de La Constitución, perdiendo lo locales por 4-8 en un encuentro anecdótico.

Consolidado el campo, el C.D. Yeclano en cuya Junta Directiva participaban Pedro Muñoz Ibáñez, Benjamín Lorenzo, Hermógenes Azorín y Juan Candela entre otros, debutó durante la temporada 43/44 quedando en primer puesto por lo que consiguió el ascenso a Primera Categoría, repitiendo el primer puesto en la campaña 44/45 aunque no pudo ascender a Tercera División. En el transcurso de este campeonato, el 16 de abril de 1944 se invitó al Valencia C.F. proclamado campeón de Primera División apenas una semana antes para estrenar oficialmente el Campo de Deportes, hoy Estadio de La Constitución, perdiendo lo locales por 4-8 en un encuentro anecdótico.

HISTORIA DEL CLUB:

1954 – 1960

Domiciliado en el número 23 de la calle San Francisco, el C.D. Yeclano anduvo a lo largo del resto de los años cuarenta inmerso en la Primera Regional murciana tratando de ascender o, al menos, conseguir llegar lo más alto posible dentro de sus posibilidades en unos tiempos donde la economía no era precisamente su punto más fuerte. Atravesando la frontera de los años cincuenta, a la par que la ciudad, después de una gris temporada 50/51 donde fueron noveno, los azulgranas acometieron el asalto a Tercera División, tercer nivel nacional no consiguiéndolo en la temporada 51/52 donde fueron segundos, pero sí en la campaña 52/53 después de alcanzar el título.

Comenzada la temporada 54/55 y siendo presidente del C.D. Yeclano Pedro José Martínez Martínez, debido a la carestía que suponía para el club azulgrana fichar a jugadores forasteros procedentes en gran medida de la región murciana y de las provincias de alrededor, surgió la idea de constituir uno nuevo donde, con carácter juvenil, fueran forjándose jóvenes jugadores con el objetivo de incorporar a aquellos más destacados. La iniciativa resonó entre los aficionados yeclanos y el 28 de noviembre, a pocos días de empezar el campeonato de Aficionados, quedaba constituido el Club Deportivo Hispania del Frente de Juventudes al contar con el soporte económico de este organismo.

Vistiendo camisa rojiblanca con pantalón blanco y tomado el nombre en recuerdo del añorado club de principios de los años treinta que tan buen sabor de boca dejó, la primera Junta Directiva estuvo formada por Aurelio Roses en la presidencia acompañado de Antonio Martínez como vicepresidente, Pedro Andrés secretario, Pedro Medina vicesecretario y Celestino Abellán como tesorero incorporando a Miguel Soriano en el puesto de secretario técnico, sumando dos títulos a nivel regional en la categoría de juveniles que fueron muy bien recibidos por todos los aficionados de la localidad.

Después de pasadas cuatro temporadas compitiendo en Tercera División, en la 57/58 la merma económica de la caja azulgrana presentaba un buen agujero desconociéndose si se iba a inscribir el club o no, o tal vez se renunciaba a la categoría para competir en una inferior, paso que no se produjo significando la precipitación de su desaparición. Avanzado el campeonato y habiendo disputado veintinueve jornadas, el 7 de abril de 1958 la Junta Directiva del C.D. Yeclano anunció la retirada descontándose federativamente y en cumplimiento del Reglamento los puntos acumulados en la clasificación. Los azulgranas dejaban de existir arruinados y con multitud de deudas.

Desaparecido el máximo representante local, el C.D. Hispania F. de J. fue designado como su inmediato sucesor, dándose los pasos oportunos para formalizar su situación en la Federación Murciana y empezar a competir en categoría sénior dentro de Segunda Regional en el siguiente curso. Desprendido del soporte del Frente de Juventudes y convertido en Club Deportivo Hispania, su debut en Segunda Regional fue exitoso al quedar segundo a un punto del C.D. Lorquí por lo que ascendió a Primera Regional, cerrando la campaña 59/60 con un discreto decimotercero puesto.

1960 – 1970

Con el cambio de década y comenzado el segundo campeonato consecutivo del C.D. Hispania en Primera Regional, durante la temporada 60/61 y a consecuencia de la presión popular ejercida para que el principal club de la ciudad recuperara el nombre del apenas unos años antes desaparecido, los dirigentes aprobaron el cambio de nombre a Yeclano Club de Fútbol siendo consentido por la Federación Murciana pero efectivo a partir del 1 de enero de 1961, cambio que no sólo repercutió en la denominación, sino en el escudo y colores que pasaron a ser azulgranas para la camiseta y azul el pantalón concluyendo en decimocuarta plaza.

Decimosegundo en la campaña 61/62 siendo presidente Francisco Chinchilla, el nivel mostrado en la sesión 62/63 no fue mucho mejor terminando en decimosexto lugar, accediendo a la presidencia Emilio Díaz Muñoz con quien las expectativas mejoraron y para bien al ser segundo en la edición 63/64 a un punto del C.D. Aspense quien ascendió a Tercera División directamente. El C.D. Yeclano se tuvo que conformar con disputar la Promoción de Ascenso sin fortuna, teniendo una temporada 64/65 menos acertada al finalizar octavo. Siendo presidente Pedro Muñoz García, el desarrollo de la campaña 65/66 fue sobresaliente pugnando por el ascenso a Tercera División, meta que se consiguió por primera vez en su corta historia al ser segundo tras un inalcanzable Benidorm C.F. en un curso donde los dos primeros clasificados obtenían el pase a Categoría Nacional.

Ubicado en el Grupo X administrado por la Federación Murciana con clubs de Murcia, Albacete y Alicante, el debut del curo 66/67 se vivió con tensión al estar acechado por el descenso, algo que finalmente se evitó al concluir decimosegundo. Llegados al verano de 1967, la Federación Española anunció importantes cambios en Tercera División reduciendo, en varios años, la cantidad de grupo y participantes en la categoría siendo la sesión 67/68 la primera de la criba. Contemplado que lo últimos siete clasificados perderían la categoría, el Yeclano C.F. luchó por ser uno de lo beneficiados, cosa que no ocurrió lamentablemente para sus intereses al concluir decimotercero. Descendido a Primera Regional, en la temporada 68/69 e hizo un buen papel al terminar cuarto en Liga, mejorándose este puesto en la temporada 69/70 al ser segundo a tan solo tres puntos del C.D. Español de San Vicente quien, además de ganar el título, ascendió directamente a Tercera División.

1970 – 1980

Al comenzar los años setenta, la Federación Murciana anunció su intención de crear una nueva categoría intermedia entre la Tercera División por arriba y la Primera Regional por debajo titulada Regional Preferente para la que se iban a clasificar un buen número de clubs. El Yeclano C.F., noveno en la temporada 70/71, fue uno de ellos estrenándose en la campaña 71/72 con una décima plaza. El campeonato presentaba la novedad de que el primer clasificado ascendía directamente a Tercera División mientras que el segundo tenía una oportunidad en una eliminatoria a doble encuentro como aspirante ante un club de la categoría superior. Conocido el sistema, en la sesión 72/73 nada se pudo hacer al terminar noveno pero, ya en la edición 73/74, se echó el resto para conseguir el primer puesto aventajando en cinco puntos al segundo clasificado, Villena C.F., por lo que el ascenso era suyo.

A diferencia de la Tercera División de los años sesenta donde los numerosos grupos eran administrados respectivamente por una federación territorial, en los primeros setenta sólo había cuatro cubriendo un amplio espectro geográfico de modo que el conjunto del Altiplano fue a parar en la temporada 74/75 al Grupo III donde se reunían los representantes murcianos, valencianos y baleares teniendo escasa fortuna pues, decimoséptimo y empatado a puntos con la S.D. Huesca, tener el gol average desfavorable le costó el descenso. De nuevo en Regional Preferente, la campaña 75/76 fue otro éxito dado que, conservando gran parte de la plantilla del curso anterior, logró obtener el primer puesto con bastante holgura cediendo tan solo tres derrotas obteniendo el billete a Tercera División.

La sesión 76/77 fue la última ocasión en la cual la Tercera División ostentó el título de tercero nivel nacional para el cual fue creado anunciando la Federación Española que, a partir de la siguiente, pondría en activo una nueva categoría denominada Segunda División B que sustituiría en orden jerárquico la Tercera División. Con los cambios los clasificados entre los puestos segundo y décimo, ambos inclusive, accedieron a esta nueva categoría pero, como ya pasara apenas unos años antes, el Yeclano C.F. no pudo subirse al carro al concluir decimocuarto manteniendo su participación en una Tercera División convertida ahora en cuarto nivel nacional. La edición 77/78, con menos soporte económico, fue un desastre para los azulgranas ubicados en el Grupo V junto a baleares, valencianos y representantes de la Federación Murciana al concluir vigésimo y colista teniendo la salvación a escasos puntos por lo que encadenó de facto un segundo descenso, en esta ocasión a Regional Preferente, quinto nivel, que supuso un mazazo para la afición.

Desmoralizados por lo recientemente sucedido pero con el firme objetivo de ascender, la temporada 78/79 no resultó como se esperaba puesto que, de las dos plazas que había en juego para ascender a Tercera División, ninguna fue a Yecla al quedar en cuarto puesto. Distinta fue en cambio la campaña 79/80 pues, la Federación Española, en su propósito de que cada federación territorial administrara nuevamente un grupo de Tercera División, concedió uno a la Federación Murciana a partir de la nueva década clasificándose lo primero quince, Sextos en la general, el Yeclano C.F. consiguió no desaprovechar la oportunidad.

1980 – 1990

Con el paso en 1976 de gran parte de los clubs alicantinos a la Federación Valenciana tras muchas décadas de ausencia, tan solo los de la Vega Baja del Segura y la comarca de Elche no lo hicieron, la Federación Murciana quedó limitada a clubs murciano, albaceteños y los citados administrando a partir de la temporada 80/81 el Grupo XIII de Tercera División. El Yeclano C.F. se convirtió en uno de los aspirantes a todo y en este curso inicial dio muestras de ello al quedar tercero en el estreno de un nuevo sistema competitivo donde los dos primeros clasificados, si querían ascender, debían superar dos eliminatorias mediante una Promoción de Ascenso. Sin embargo nada es fácil ni obedece a las previsiones y, después de tan buen inicio, la competición puso a los azulgranas en la zona media quedando decimoprimero en la campaña siguiente 81/82 y decimosegundo en la sesión 82/83 mejorando ostensiblemente en la edición 83/84 al ser cuartos. En el curso 84/85 se luchó por el primer puesto pero un C.D. Eldense intratable y un C.D. Cieza entonado lo dejaron en tercera posición borrándose de un plumazo sus aspiraciones.

Copartícipe en el Grupo XIII junto a otros aspirantes al ascenso, dicho objetivo se convirtió en una quimera máxime cuando pasaban los años y, bien había clubs más en forma, bien pinchaban los azulgranas. En este sentido la temporada 85/86 no fue buena ocupándose el noveno puesto, siendo peor la campaña 86/87 en la que, decimoprimero, anduvo muy alejado de lo puestos de cabeza. Cambios de directivos, entrenador y jugadores mejoraron el rendimiento de la edición 87/88 al ser séptimos, contratándose en la sesión 88/89 los servicios de buenos futbolistas que elevaron el nivel de la plantilla al quedar segundos yendo el premio del ascenso a mano de un Orihuela Deportiva C.F. que fue inalcanzable. Despejado el camino con el ascenso de los escorpiones, el Yeclano C.F. apostó fuerte en la temporada 89/90 para obtener el primer puesto, meta que no le resultó demasiado complicada puesto que, con una excelente plantilla, además de llevarse el título por primera vez en su historia de la categoría, lo hizo encajando una sola derrota.

1990 – 2000

La década de los años noventa fue sin duda una de las más productivas en la historia del fútbol yeclano pues su máximo representante, el Yeclano C.F., fue protagonista de un periodo excepcional en el que supo mantenerse hasta diez temporadas consecutivas en la categoría de bronce teniendo incluso la oportunidad de acceder a la de plata. Y eso que no se empezó del todo bien. La temporada 90/91 de debut se llevó a cabo en el Grupo IV donde militaban valencianos, murcianos, baleares, catalanes y castellano-manchegos, un exigente marco en el cual, de la mano de Silvio Villaescusa durante las primeras veinticuatro jornadas y Mario Eduardo Leardi hasta el final, se luchó por conservar la categoría finalizando en decimoquinto puesto. Después de ocupar tan lejana plaza de los puestos de cabeza, nadie supuso lo que ocurrió en la campaña 91/92 puesto que, entrenados por José Víctor Rodríguez, los azulgranas terminaron sorprendente y merecidamente en tercero puesto a seis puntos del Cartagena F.C. y uno del Villarreal C.F., colándose con el nuevo sistema competitivo en la Promoción de Ascenso a Segunda División. Ilusionada toda la afición por la posibilidad de competir en la categoría de plata, en esta fase extra los azulgranas se encontraron a un Club Atlético Marbella algo mejor que les superó pese a sus esfuerzos, siendo segundos mientras A.E.C. Manlleu y C.D. Endesa As Pontes fueron tercero y cuarto respectivamente.

El conjunto murciano había tocado techo deportivamente, pero aun así en la sesión 92/93, siguiendo José Víctor, se obtuvo el sexto puesto quedando la Promoción a cuatro puntos. Transcurridas ocho jornadas de la edición 93/94 en la cual se accedió al Grupo IV donde estaban lo club andaluces, extremeños, castellano-manchegos y norteafricanos, José Víctor dejó la disciplina azulgrana y llegó Nemesio Martín con quien se ocupó la décima plaza, siendo la temporada 94/95 dirigida completamente por el técnico José Fernando Rovira en el mismo grupo donde, sextos en Liga, un solo punto les separó de poder promocionar por segunda vez a Segunda División.

En la campaña 95/96, repitiendo grupo los yeclanos no empezaron bien siendo el técnico Joaquín Carreras relevado en la jornada seis por José Luis García con quien no se mejoró volviendo José Víctor en la jornada diecisiete para revertir tan complicada situación con acierto pues se ocupó finalmente el decimotercero puesto. La sesión 96/97, con José Víctor al mando, se disputó en el Grupo III junto a catalanes, valencianos, murcianos y el F.C. Andorra concluyendo décimos, ingresando en la edición 97/98 en el Grupo IV sureño donde lo pasó mal al no poder revertir José Víctor la cadena de deficientes resultados obtenidos hasta el punto de, restando ocho jornadas, ser relevado por Paco Polo con quien se evitó disputar la Promoción de Descenso por un solo punto cerrando el campeonato en decimotercera plaza.

La temporada 98/99 se empezó con Paco Polo compitiendo en el Grupo III junto a valencianos, catalanes y murcianos pero, nuevamente, los malos resultados se llevaron por delante al técnico siendo sustituido en la jornada veinticinco por José Fernando Rovira obteniendo el decimotercero puesto pero con do punto de ventaja obre el Club Gimnástic de Tarragona quien promocionó para no descender. La campaña 99/00, tras muchos años de desgaste económico, certificó lo que muchos aficionados se temían en los últimos tiempos a temor de los resultados obtenidos y el padecimiento creado no pudiéndose evitar el descenso en un mal campeonato donde se invirtieron lo papeles en el banquillo pues, si bien empezó José Fernando Rovira, en la jornada veintiuno fue relevado por Paco Polo quedando la continuidad a cuatro puntos.

2000 – 2004

Regresar al Grupo XIII murciano de Tercera División fue una decepción para sus seguidores acostumbrados a Segunda División B y después de haber vivido en primera persona una Promoción de Ascenso a Segunda División pero, con unas deudas que empezaban a aflorar, había que ponerse manos a la obra e intentar el ascenso para captar más ingresos. El desarrollo de la temporada 00/01 fue como se esperaba existiendo una enorme diferencia entre los cinco primeros clasificados y el resto saliendo beneficiado el Yeclano C.F. quien terminó cuarto y con plaza para diputar la Promoción de Ascenso a Segunda División B. En esta fase el Valencia C.F. «B» ganó los seis encuentros y poco e pudo hacer salvo ser tercero empatado a punto con el C.F. Gavá, siendo colista el C.D. Constancia, de Inca. En la campaña 01/02 el Orihuela C.F. le arrebató el primer puesto al concluir con nueve puntos de ventaja, clasificándose los azulgranas por segunda vez consecutiva para la Promoción donde, en esta ocasión, fue el C.F. Reus Deportiu el primero con holgura, segundo el Villajoyosa C.F. mientras los yeclanos terceros y C.D. Atlético Baleares, cuartos, cerraron la clasificación.

En la sesión 02/03 se puso nuevamente dinero para intentar el ascenso contratando a futbolistas que dejaron a los del Altiplano en segundo puesto a cuatro puntos del Lorca Deportiva C.F., accediendo a la Promoción de Ascenso en la que en esta tercera oportunidad consecutiva sí destacaron llevándose el primer puesto con una sola derrota en el último encuentro ascendiendo a Segunda División B en un grupo compartido con el mallorquín C.F. Vilafranca, U.D. Levante «B» y U.E. Sant Andreu. Con preocupantes problemas financieros, la edición 03/04 les ocupó en el Grupo III junto a valencianos, baleares, murcianos y catalanes empezando el torneo José Víctor quien fue relevado en la jornada doce por Casimiro Torre y éste, a su vez, en la jornada dieciocho por José Ramón Corchado quien no pudo evitar el desenlace final al ser decimonoveno, muy descolgado por lo que perdió la categoría.

Al descenso deportivo le acompañó el descenso administrativo pues, finalizado el campeonato, el club fue denunciado por impago a los jugadores adeudándose 140.000 euros por lo que, en lugar de perder una categoría perdía dos para competir en Regional Preferente, un destino trampa que hacía inviable su continuidad como club al generarse pocos recursos. Reunidos dirigentes y aficionados, lamentablemente para sus intereses se llegó a la triste conclusión de que la única alternativa era la desaparición al no poder afrontar la deuda acumulada acabando así la historia de un club que representó a la ciudad de Yecla durante cincuenta años.

En el mes de agosto de 2004, Pedro Romero junto a otros aficionados de la localidad toman el mando del fútbol en la ciudad y constituyen el Yeclano Deportivo, una nueva sociedad que empieza desde cero y desea devolver el prestigio recientemente perdido. El conjunto murciano, que viste camisa azulgrana y pantalón negro, debutará durante el campeonato 04/05 en Primera Regional, la más baja de las categorías de la Región de Murcia consiguiendo el ascenso e iniciando una nueva etapa en el fútbol local.

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
  • Segunda División B “Historia de los clubs que nunca la sobrepasaron”. Vicent Masià Pous (2007).
  • Archivo privado de Juan Antonio Garre Clemente.
  • Archivo privado de Álvaro García Belando.
  • Archivo privado de Félix Martínez Martínez.
  • Archivo privado de Alfonso Hernández Cutillas.
  • Anuarios de la RFEF.
  • La Defensa. Semanario.
  • Patria Chica. Semanario.
  • Adelante. Semanario.
  • La Nación. Diario.
  • El Tiempo. Diario.
  • El Liberal. Diario.
  • ABC. Diario.
  • El Debate. Diario.
  • Murcia Deportiva. Semanario.
  • El Luchador. Diario.
  • La Correspondencia de Valencia. Diario.
  • www.elmundodeportivo.es/hemeroteca Diario deportivo.
  • www.marca.com Diario deportivo.
  • www.laverdad.es Diario.
  • www.laopinióndemurcia.es Diario.

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

 

 

Historial del Tomelloso Club de Fútbol

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Tomelloso Club de Fútbol
  • Ciudad: Tomelloso 
  • Provincia: Ciudad Real
  • Comunidad Autónoma: Castilla-La Mancha
  • Fecha de constitución: 8 de junio de 1979
  • Fecha de federación: 1 de septiembre de 1979

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Club de Fútbol Atlético Tomelloso (1979-1995)
  • Tomelloso Club de Fútbol (1995-2015)

TÍTULOS NACIONALES:

5 Ligas de Tercera División:

  • 1987/88
  • 1995/96
  • 1996/97
  • 1998/99
  • 2001/02

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal Pepe Gálvez
  • Año de inauguración: 12 de septiembre de 1948
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal (1948-2016)
  • Estadio Municipal Pepe Gálvez (2016- )
  • Capacidad: 5.000 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Estadio Municipal Pepe Gálvez (1979-2015)

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL TOMELLOSO CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL TOMELLOSO CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN TOMELLOSO:

Situado en un relieve casi completamente llano al noreste de la provincia de Ciudad Real y atravesado por lo ríos Záncara y Córcoles, el municipio de Tomelloso alberga una población de treinta y seis mil habitantes contando con un extenso término próximo a lo doscientos cincuenta kilómetros cuadrados. Tradicionalmente dedicado a las labores agrícolas donde la vid era prácticamente un monocultivo destinándose la mayor parte de la producción a la destilación de alcoholes, desde hace unas décadas ésta ha evolucionado con la implementación de bodegas y su suelo diversificado contando con regadíos y zonas de cereales, girando actualmente la economía de la localidad en torno a la industria metalúrgica, alimentaria y textil teniendo relevancia el sector servicios.

Contando con veintidós mil habitantes a principios de los años veinte del pasado siglo, la práctica del fútbol que venía desarrollándose en la localidad desde hacías varios antes tal cual venía sucediendo en muchas otras de todo el país, tuvo que esperar al 20 de abril de 1921 para ver la constitución del primer club organizado para este fin, la Sociedad Athlética Castellana, presidido por Antonio Fernández Amores. Vistiendo camiseta rojiblanca con pantalón blanco y haciendo uso del Campo de Perales, este club pionero y de amplia repercusión en la provincia al contender frente a los representantes de municipios próximos, debido a las vicisitudes de la época no tuvo gran recorrido desapareciendo en 1926, pero sí en cambio el privilegio de asentar el fútbol entre sus conciudadanos y plantar la semilla entre los aficionados para que germinaran otros en el futuro.

La aparición de otra sociedad no se hizo de rogar y apenas un año después, en 1927 surgió el Tomelloso Foot-ball Club con inusitada fuerza empleando, como ya hiciera la Sociedad Athlética Castellana, el Campo de Perales para sus encuentros no ejerciendo en solitario durante mucho tiempo pues en 1929 quedó constituido el Huracán Foot-ball Club y en 1930 el Club Deportivo Tomelloso. La coexistencia de tres sociedades en 1930 junto a la inscripción del Tomelloso F.C. en la Federación Castellana para competir de forma organizada, fue motivo para inaugurar ese año el nuevo Campo de San Isidro, conocido popularmente como de «Los Peinado», estrenándose los del Foot-ball Club en la temporada 30/31 en un Campeonato Regional manchego con la presencia de sociedades como el C.D. Manchego, de Ciudad Real, C.D. España, de Alcázar de San Juan, Sociedad Deportiva Unión Criptanense, de Campo de Criptana y C.D. Mora.

La evolución del Tomelloso F.C. a nivel federado tuvo la vida corta pues, una vez concluido el campeonato 31/32 en el que se había mantenido un nivel muy alto, las deudas contraídas con la Federación Castellana obligaron a ésta última a tomar la decisión de darle de baja mientras no abonase lo debido y a prohibir que cualquier club de la localidad tomara parte de los torneos federativos en el plazo de lo tres años siguientes, una dura medida que tumbó la esperanza de que Tomelloso tuviera un representante de entidad en lo sucesivo. A partir de 1933 el fútbol quedó en manos de aficionados y jóvenes manteniéndose viva la llama futbolística con sociedades de escaso empuje, muchas de ellas juveniles, como el Racing Club, el Unión Sporting, el Industrial, el de Los Once Colorines, el Español y el Sonoro que compitieron en los campeonatos locales puestos en funcionamiento antes de la Guerra Civil.

Con la irrupción de la guerra en julio de 1936, estando Tomelloso bajo control del Bando Republicano y muy alejado del frente bélico durante todo el conflicto hasta su finalización en abril de 1939, la práctica del futbol se mantuvo en pie sobre todo hasta 1938 formándose nuevas iniciativas muy politizadas que llevaron adelante bastantes encuentros amistosos con el fin de recaudar fondos para las milicias, surgiendo equipos como el Batallón Etapas, el Asalto y el de la Juventud Socialista Unificada.

Terminada la guerra el Campo de San Isidro pasó a mejor vida motivo por el cual la reorganización del fútbol local se demoró uno años hasta que el 22 de marzo de 1944 quedó constituido el Tomelloso Club de Fútbol. Presidido por Juan Torres Grueso y vistiendo camiseta con pantalón blancos, la nueva sociedad halló en el Campo de Los Espinosa situado en el Paseo de Circunvalación su nuevo feudo, inscribiéndose en la Federación Castellana para competir en la Primera Regional de la delegación de Ciudad Real, estrenándose en la temporada 44/45. En 1945 el Tomelloso C.F. fue incluido desde los despachos en el Grupo IX de Tercera División por motivos políticos reuniendo un buen plantel con muchos jugadores procedentes de otros lares que resultaron quintos en la campaña 45/46, disfrutando de una memorable sesión 46/47 en la que fueron subcampeones de Liga a dos puntos del Albacete Balompié. Esta clasificación le permitió luchar por alcanzar la Segunda División accediendo a la Fase Intermedia donde fue quinto compitiendo con Real Valladolid Deportivo, U.D. Salamanca, Pontevedra C.F., C.D. Fábrica Nacional, de Palencia, Sociedad Gimnástica Lucense, Albacete Balompié y Cultural y Deportiva Leonesa.

El Tomelloso C.F. se mantuvo ininterrumpidamente en Tercera División a lo largo de ocho temporadas descendiendo a Primera Regional al término de la 52/53, contando debido al incremento de la afición de un nuevo terreno de juego titulado Estadio Municipal inaugurado el 12 de septiembre de 1948 en el primer encuentro de la Liga 48/49 disputado ante la U.D. Salamanca con derrota por 1-2. Tras el descenso a Primera Regional, una vez concluido el campeonato 54/55 nadie en la localidad quiso asumir la dirección del club, permaneciendo éste inactivo durante dos temporadas hasta que en la 57/58 volvió a la actividad partiendo igualmente desde Primera Regional, categoría desde la cual en la campaña 59/60 al quedar primero promocionó sin éxito para ascender a Tercera División, consiguiéndolo en la siguiente 60/61.

De nuevo acomodado en el tercero nivel nacional, la pasión por el fútbol se apoderó de los aficionados acudiendo en masa al Estadio Municipal donde, en un segundo ciclo que se prolongó de forma continua durante ocho temporadas, por Tomelloso pasaron innumerables clubs madrileños, castellano-manchegos, castellano-leoneses y extremeños. Al término de la temporada 68/69 el club manchego descendió a Primera Regional, siendo el comienzo de una etapa convulsa en la que la crisis económica por la que se atravesó a punto estuvo de causar su desaparición inmediata, paso que no se cumplió gracias a la iniciativa de algunos aficionados que tomaron el timón aunque, concluida la campaña 69/70, no pudieron evitar encadenar un segundo descenso consecutivo, en esta ocasión a Segunda Regional. Al margen del Tomelloso C.F., cabe mencionar que la localidad manchega contó en estos tiempos con el Club Atlético Tomelloso, sociedad encargada de promocionar a los más jóvenes valores de la ciudad que no tenían todavía cabida en el primer club ejerciendo de filial en Tercera Regional y con escasa trayectoria.

Al iniciarse los años setenta ubicado el Tomelloso C.F. en una categoría tan poco atractiva, quinto nivel nacional de la época, la afición se resintió hasta el punto de que, terminada la temporada 71/72 y pese a conservar la categoría, nadie quiso asumir el relevo de la Junta Directiva por lo que en la siguiente edición no fue inscrita la sociedad para seguir compitiendo. Los años posteriores fueron bastante duros sin un club representativo limitándose la práctica futbolística federada a los juveniles Tomelloso E. y D. presidido por José Andrés López Vázquez y C.D. Tomelloso O.J.E. presidido por Alfonso Conde Ruiz que vestía camiseta roja con pantalón azul.

Tras la desaparición de la Obra Sindical de Educación y Descanso en 1977, muchos jugadores presuntamente se iban a quedar sin club por lo que, el gran aficionado Francisco Soria Córcoles junto a otros acompañantes, adelantándose a los acontecimientos formaron una nueva Junta Directiva que inscribió al aletargado Tomelloso C.F. en Tercera Regional Ordinaria, la última de las categorías regionales al haber estado inactivo tanto tiempo.

HISTORIA DEL CLUB:

1979 – 1980

Nutrido el club blanco por jugadores juveniles en gran parte, su participación en las temporadas 77/78 donde fue décimo y 78/79 con un quinto puesto no fue demasiado destacada por lo que, temiendo que esta sociedad se estancara o bien no progresara como debiera, otro grupo de aficionados liderados por Alejandro Carretero Galera quienes contaban con más medios económicos decidieron constituir en junio de 1979 el Club de Fútbol Atlético Tomelloso, nueva sociedad que, vistiendo camiseta roja con pantalón azul, hizo con motivo de las fiestas patronales de agosto su encuentro de debut frente a una selección se jugadores locales enrolados en otros clubs forasteros de superior categoría ganando los veteranos por 0-2.

Inscrito el 1 de septiembre en la Federación Castellana y ubicado en el mismo grupo que el Tomelloso C.F., durante la temporada 79/80 de estreno se vivieron dos apasionados duelos en los que los atléticos se impusieron en ambas ocasiones por 3-0, consiguiendo al término del campeonato ser cuartos mientras que los blancos fueron decimoséptimos. Concluido el torneo no quedó todo en ese punto puesto que, debido a una reestructuración, el C.F. Atlético Tomelloso fue ascendido administrativamente a Tercera Regional Preferente separándose deportivamente el camino las dos sociedades.

1980 – 1990

Distanciados por una sola categoría, el C.F. Atlético Tomelloso centró el interés de los aficionados marginando la labor del histórico Tomelloso C.F. quien se vio muy perjudicado, club que habiendo completado catorce jornadas de la temporada 80/81, se retiró del campeonato desapareciendo mientras, paralelamente, los atléticos se proclamaron campeones de su grupo ascendiendo a Segunda Regional. Sin rival en la ciudad y con toda la afición a su disposición, en la campaña 81/82 quedó en segundo puesto precedido del C.D. Mota del Cuervo por un solo punto encadenando un segundo ascenso, en esta ocasión a Primera Regional aunque bien es cierto que también lo hicieron los diez primeros clasificados en una nueva reestructuración de las categorías, éxito muy valorado por sus seguidores que se volcaron plenamente con la plantilla.

Tras el ascenso hubo cambio en la presidencia accediendo Vicente García Sánchez con quien se pasó a vestir íntegramente de blanco como ya lo hiciera el Tomelloso C.F., preparando un plantel de mayor nivel para la sesión 82/83 que, en franca disputa con el C.D. Pedroñeras, logró el primer puesto y consiguiente título obteniendo un nuevo ascenso, el tercero consecutivo, que le catapultó a Regional Preferente, categoría en la época subdividida en dos grupos que aglutinaba a gran parte de los mejores clubs madrileños, castellano-manchegos junto a abulenses y segovianos. El debut de la edición 83/84, sin embargo, fue un freno a sus aspiraciones después de la marcha que llevaba al finalizar en décima plaza, resultado esperable que no desanimó a la sociedad deportiva tomellosera en absoluto que en la temporada 84/85, con un equipo reforzado, salió a por todas logrando el primer puesto con bastante holgura respecto al segundo clasificado, U.D. San Sebastián de los Reyes, al separarles ocho puntos.

El C.F. Atlético Tomelloso estaba en Tercera División, cuarto nivel nacional en aquellos tiempos y una categoría ya exigente donde circulaban bastantes jugadores profesionales. Era para la campaña 85/86 dentro del Grupo VII, por lo tanto, necesario reforzar la plantilla pero no fue lo suficiente como se pudo comprobar dado que, muy próximo a los puestos de descenso durante todo el torneo, al final terminó decimoséptimo a escasos puntos de la salvación perdiendo la categoría recién adquirida. El descenso era el primero en su carrera pero, todavía conservando un buen bloque, con algunos fichajes acertados pronto se pudo recuperar el terreno perdido protagonizando una gran sesión 86/87 en la que, por primera vez en su historia, la recién constituida Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha tenía competencias con do grupos de Regional Preferente. Sabiéndose de antemano que para el siguiente campeonato la territorial dispondría de un grupo propio en Tercera División y los cinco primeros clasificados respectivamente de cada grupo ascendían directamente, el C.F. Atlético Tomelloso arrasó con unos registros históricos pues, además de ceder dos empates y una derrota, sumó ciento sesenta y ocho goles, todo un derroche.

De nuevo en Tercera División, ahora en el Grupo XVII castellano-manchego, la Junta Directiva encabezada por Vicente García se propuso llevar al club hasta Segunda División B, una categoría soñada apenas unos años antes que ahora estaba perfectamente a su alcance. Para ello tenía que terminar primer clasificado puesto que el campeón ascendía directamente sin mediar Promoción, algo que sucedió en la edición 87/88 en franca pugna con C.P Villarrobledo y C.D. Toledo a los que aventajó en tres y cinco puntos respectivamente ante la alegría de su afición que iba de la mano de su equipo.

Saltar al tercer nivel nacional donde se centraban ochenta participantes repartidos en cuatro grupos no era tarea sencilla, incorporándose a la plantilla caras nuevas muchas de ellas procedentes de Madrid para hacer un buen papel en la temporada 88/89. Bajo la dirección de Gonzalo Hurtado, los tomelloseros formaron parte del Grupo III junto a madrileños, castellano-manchegos, andaluces, extremeños, castellano-leoneses y canarios, exprimiendo bien la cartera para afrontar los desplazamientos peninsulares e insulares, cuajando un magnífico torneo en el que fueron quintos a seis puntos del primer clasificado, Club Atlético Madrileño, quien ascendió directamente a Segunda División. Repitiendo Hurtado en el banquillo, la campaña 89/90 se vivió en el mismo grupo pero con la ausencia de madrileños y castellano-leoneses, incorporando a los representantes norteafricanos con buen sabor de boca al concluir decimoprimeros.

1990 – 2000

Después de una década sin duda recordada por toda la afición tomellosera tras ver nacer un nuevo club de la nada y ser testigo de su espectacular crecimiento, al empezar los años noventa el C.F. Atlético Tomelloso continuaba acomodado en Segunda División B iniciando una nueva en la que se esperaba al menos fuese igual de fructífera. Ubicado en el Grupo IV durante la temporada 90/91, el conjunto manchego cambió totalmente de rivales encontrándose con clubs valencianos, catalanes, murcianos y baleares pasándolo realmente mal pues los malos resultados primero se llevaron a Jozsef Toth después de doce jornadas, a Jesús Úbeda con seis más aguantando Juan Carlos Rodríguez como pudo para salvar la situación quedando todo sentenciado a tres jornadas del final finalizando decimosexto. En la campaña 91/92 se pasó al Grupo III junto a murcianos, valencianos y madrileños continuando Juan Carlos Rodríguez en el banquillo quien dirigió con acierto la plantilla al concluir decimosegundo y no pasar tantos apuros.

Consciente la afición de que la continuidad era complicada, en la sesión 92/93 se salió a competir con ganas de hacerlo lo mejor posible confiando la dirección nuevamente al mismo entrenador, ocupado ahora en el Grupo I con gallegos, asturianos, castellano-leoneses, madrileños y castellano-manchegos en un torneo donde fue decimosexto, aunque con la permanencia en el bolsillo varias jornadas antes de su término. Siguiendo en el Grupo I, la edición 93/94 fue muy similar a la anterior pero con desenlace final muy distinto pues, si bien en las precedentes salió siempre airoso, bajo la dirección de Manuel Romero cesado en la jornada trece y Manuel Fernández después, no se pudo eludir el descenso al finalizar decimoctavo.

Tras seis temporadas consecutivas en Segunda División B los manchegos se despidieron de la categoría con la idea de volver lo antes posible, anhelo que se iba a retrasar más de lo esperado pese a que oportunidades no le faltaron. De nuevo en el Grupo XVII castellano-manchego de Tercera División, el curso 94/95 fue muy emocionante al mantener una intensa lucha con Hellín Deportivo y Puertollano Industrial C.F. siendo segundo igualado a puntos con los albaceteños, accediendo a una Promoción de Ascenso a Segunda División B en la que no tuvo suerte puesto que, a pesar de terminar igualado a puntos con el Vélez C.F., éste ya tenía garantizado el éxito sobrándole una jornada. Acompañaron en la Liguilla C.D. Badajoz «B» y C.D. Pozoblanco. En la temporada 95/96 Higinio Ponce Morales tomó la presidencia de la sociedad cambiando de denominación a Tomelloso Club de Fútbol, protagonizando un gran e histórico campeonato en el que fue primero indiscutible ocho puntos por encima del C.D. Manchego y la heroicidad de concluir imbatido al sumar veintiseis victorias y doce empates. Esta plaza le permitió disputar la Promoción por segunda ocasión consecutiva con mucha moral pero una derrota inesperada ante el Guadix C.F. le privó del merecido ascenso, siendo tercero el Jerez C.F. y cuarto el Chiclana C.F.

No ascender fue muy duro, una gran frustración, pero había que seguir adelante e intentarlo de nuevo, como sucedió en la campaña 96/97 en la repitieron título de Liga con seis puntos de ventaja respecto al C.D. Torrijos pero in la fortuna necesaria en la Promoción pues, en esta ocasión, fue el Moralo C.P. quien le privó del ascenso acompañándoles en la Liguilla C.D. Linares y Ayamonte C.F. La sesión 97/98 ofreció una cara bien distinta puesto que, a pesar de finalizar empatado a puntos con Puertollano Industrial C.F. y C.D. Guadalajara en un torneo igualadísimo que se resolvió por pequeños detalles, quedó fuera de la Promoción al ser quinto al tener peor gol average respecto a los dos mencionados. El conjunto tomellosero no dio su brazo a torcer y en la edición 98/99 volvió a la carga conquistando el título regional y una sola derrota en todo el torneo, afrontando una Promoción de Ascenso a Segunda División B en la que no estuvo acertado siendo tercero precedido de Coria C.F. y C.P. Ejido mientras colista resultó el C.P. Mérida «B». El campeonato 99/00 fue un punto y aparte, nada salió bien, hubieron muchos cambios y se rozó el ridículo al terminar decimoséptimo con el agua al cuello viendo más de cerca los puestos de cola que los de cabeza.

2000 – 2010

No ascender terminó agotando a Higinio Ponce quien fue relevado por Ángel Montejano, teniendo un inicio de siglo medianamente tranquilo al concluir la temporada 00/01 en octavo puesto. La campaña 01/02, con renovada plantilla e ilusión, fue nuevamente exitosa al proclamarse campeón de Liga por quinta ocasión en la categoría, accediendo a una Promoción en la que se llenó el Estadio Municipal en cada encuentro pero se fracasó estrepitosamente al sumar un solo empate perdiendo cinco, concluyendo colista por detrás de Moralo C.P., C.D. Mármol Macael y Jerez Industrial C.F.

En 2002 Ambrosio Armero cogió el testigo presidencial estrenándose con la cuarta plaza en la sesión 02/03 por lo que se dispuso de una nueva oportunidad para intentar ascender a Segunda División B, teniendo una luchada Promoción en la que se batió el cobre con el C.D. Don Benito y C.P. Granada 74 en la que los tres tenían opciones de ascender en la última jornada cerrando el Club Atlético Lucentino sin ninguna. Jugando en casa ante los pacenses, sólo les valía la victoria, consiguiendo un 2-1 que les catapultó hasta la división de bronce tras muchos intentos fallidos. Bajo la dirección técnica de Pedro Sánchez de la Nieta, los blancos quedaron ubicados en el Grupo II junto a castellano-manchegos, madrileños, aragoneses, castellano-leoneses y el gallego S.D. Compostela, terminando la edición 03/04 decimoquintos y eludiendo la temida Promoción de Descenso con el técnico Juan Carlos Álvarez en las últimas diez jornadas. En la temporada 04/05 José Ramón Corchado fue designado entrenador pasando al Grupo IV con andaluces, extremeños, murcianos, castellano-manchegos y norteafricanos siendo relevado el técnico por Jesús Úbeda en un intento de salvar la categoría, algo que no se pudo al terminar decimoséptimo.

Descendido a Tercera División, Higinio Ponce volvió a la presidencia en la campaña 05/06 en un momento delicado donde la economía no era demasiado buena, concluyendo el curso en noveno puesto y mejorando en la edición 06/07 al ser sexto. En la sesión 07/08 se ocupó el cuarto puesto aunque muy alejado en puntos del campeón C.D. Toledo, teniendo acceso a una Promoción que había cambiado de formato siendo dos las eliminatorias que debían superar los aspirantes si querían ascender. Con eliminatorias directas a ida y vuelta, en Semifinales el rival fue el C.F. Atlético Ciudad, de la localidad murciana de Lorquí, empatando en casa 1-1 y cayendo derrotado 2-1 en la vuelta por lo que resultó apeado. La edición 08/09 pasó sin ton ni son concluyendo en séptimo puesto, siendo decepcionante y preocupante el campeonato 09/10 en el que decimoséptimos en Liga, lograron eludir el descenso por tan sólo dos puntos.

2010 – 2015

Con el cambio de década los problemas económicos del Tomelloso C.F. comenzaron a aflorar y, pese a percibir cien mil euros anuales desde el ayuntamiento, el conjunto blanco sólo pudo ser decimosegundo en la temporada 10/11. En la campaña 11/12, con Francisco Muñoz en la presidencia, el club pasó a percibir la quinta parte en ayudas teniendo que recurrir a la Agencia Brokers Sport para fichar jugadores terminando el campeonato en decimoséptimo puesto. Al no ascender a Segunda División B ninguno de los cuatro primeros clasificados del Grupo XVIII y descender de esta categoría U.B. Conquense y C.D. Toledo, los tomelloseros se vieron arrastrados hasta Regional Preferente, siendo este su destino en la sesión 12/13 en la que concluyeron en séptimo puesto.

Paralelamente, viéndose los peligrosos derroteros en los que estaba entrando el Tomelloso C.F., un grupo de aficionados liderados por Cristóbal Moraga decidió tomar su propia iniciativa constituyendo el 12 de julio de 2012 el Atlético Tomelloso Club de Fútbol, vistiendo como colores los de la bandera local con camiseta amarilla y pantalón verde y estrenándose esa misma sesión en Segunda Regional consiguiendo la tercera plaza y un posterior ascenso a Primera Regional. Tomelloso contaba con dos clubs federados y todo apuntaba a que sólo sobreviviría uno de los dos entendiéndose que la materialización era cuestión de tiempo. La sesión 13/14 dejó al Tomelloso C.F. en octavo puesto dentro de Regional Preferente y al Atlético Tomelloso C.F. campeón en su grupo de Primera Regional consiguiendo el ascenso directo de categoría por lo que, para la edición 14/15, la coincidencia y duelo entre ambos en Regional Preferente estaba a priori garantizada.

El desarrollo de los acontecimientos fue drástico con un Tomelloso C.F. agonizante que logró inscribirse y formar equipo, aunque una vez iniciado el campeonato no logró pagar los emolumentos arbitrales hasta en cuatro ocasiones por lo que fue expulsado de la competición decretándose sus encuentros de la segunda vuelta perdidos por 0-2. En la jornada sexta, jugando los blancos de titulares en el primer y único duelo del Estadio Municipal, lo amarillos consiguieron imponerse por 0-4.

Tras la expulsión federativa, el Tomelloso C.F. fue descendido a Primera Regional, sancionado económicamente y prohibido el ascenso durante las dos siguientes temporadas, algo que nunca se produjo al desaparecer antes este histórico club que tantas alegrías dio a la afición local.

 

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BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial del Club Deportivo As Pontes

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Club Deportivo As Pontes
  • Ciudad: As Pontes de García Rodríguez 
  • Provincia: La Coruña/A Coruña
  • Comunidad Autónoma: Galicia
  • Fecha de constitución: 8 de septiembre de 1960
  • Fecha de federación: 28 de septiembre de 1960

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Club de Fútbol Calvo Sotelo (1960-1973)
  • Club Deportivo Endesa (1973-1983)
  • Club Deportivo Endesa As Pontes (1983-2002)
  • Club Deportivo As Pontes (2002- )

 

TÍTULOS NACIONALES:

2 Ligas de Tercera División:

  • 1986/87
  • 1994/95

 

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal O Poboado
  • Año de inauguración: 18 de julio de 1961
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal El Poblado/O Poboado (1961- )
  • Capacidad: 2.500 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo da Feira (1960-1961)
  • Estadio Municipal O Poboado (1961- )

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL CLUB DEPORTIVO AS PONTES. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL CLUB DEPORTIVO AS PONTES. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN AS PONTES DE GARCÍA RODRÍGUEZ:

El municipio coruñés de As Pontes de García Rodríguez, en castellano Puentes de García Rodríguez y situado en la comarca de Eume, al noreste de la provincia y el más extenso colindante con la de Lugo, se caracteriza por la presencia de minas de lignito en su término, materia prima que sirve desde los años cuarenta del pasado siglo para alojar la principal central térmica de nuestro país con una alta capacidad energética. Residencia de diez mil vecinos, aunque cuenta con explotaciones agrícolas y ganaderas, la gran mayoría de su economía gira alrededor de la industria siendo sede de varias empresas de calado nacional, centrando sus tierras vario parques eólicos y disponiendo de una gran riqueza forestal.

Contando con cinco mil vecinos, avanzados los años treinta y en plena expansión del fútbol por todo el país, As Pontes de García Rodríguez carecía de un club donde la juventud y aficionados de la localidad pudieran reunir sus inquietudes para poner en práctica este afamado deporte, siendo en junio de 1934 cuando bajo la iniciativa del cronista local y gran aficionado Ramón Rebollar, quedó constituido el Fuentes Foot-ball Club contando con una Junta Directiva formada por Francisco Penabad en la presidencia, Dictino Carro vicepresidente, Jesús Castro tesorero y Nazario Piñeiro secretario con la inusual y poco habitual presencia en aquellos tiempo de dos mujeres como vocales, las señoritas María del Carmen Lens y Lucila Castro.

Como terreno de juego se habilitó una campa existente en lo que hoy en día es ayuntamiento y parte del espacio que ocupa el parque denominado Campo da Feria, teniendo el Fuentes F.C. actividad deportiva hasta la llegada de la Guerra Civil en julio de 1936. Finalizado el conflicto, por unas y por otras el fútbol quedó en segundo margen no convirtiéndose en prioridad siquiera del Frente de Juventudes local, siempre abonado a estos menesteres, siendo en 1944 cuando un grupo de jóvenes reemprendieron la actividad constituyendo el Club Deportivo Juvenil Puentes vistiendo camiseta con pantalón blancos y haciendo uso del Campo da Feria.

En 1946, tras el beneplácito de la administración del Estado cumpliendo con un plan estratégico trazado un par de años antes, la vida del municipio empezó a cambiar con la construcción de una central térmica que emplearía como combustible fósil el lignito procedente de las fecundas minas de su término, llegando a la localidad técnicos y trabajadores de la Empresa Nacional Calvo Sotelo (ENCASO) quienes, paulatinamente, transformaron su paisaje.

Alcanzado el año 1947 y empleando como base a parte de los muchachos del C.D. Juvenil Puentes que tan buen rendimiento estaban ofreciendo, quedó constituido el Club Deportivo Puentes vistiendo camiseta azulgrana con pantalón azul, sociedad con jugadores sénior que, alejada del fútbol federado, dedicó desde su nacimiento todo su esfuerzo a jugar encuentros amistosos manteniéndose distante incluso de las competiciones que se organizaban en la capital provincial, La Coruña. La política deportiva del C.D. Puentes no varió un ápice en los sucesivos años cincuenta pese a disponer de mejor armario económico y estar el municipio experimentando un notorio aumento poblacional, siendo el Campo da Feria su baluarte frente a clubs vecinos mediante la disputa de amistosos cuando no acudiendo a distintas localidades de su marco geográfico más próximo.

HISTORIA DEL CLUB:

1960 – 1970

Al empezar los años sesenta y habiendo aumentado la población hasta los ocho mil quinientos habitantes, la empresa Calvo Sotelo, tal cual venía haciendo en otras localidades del país donde estaba asentada como la turolense Andorra, la zaragozana Escatrón, la ciudadrealeña Puertollano, la berciana Ponferrada o en la cartagenera Escombrillas, decidió apostar por el fútbol local constituyendo el 8 de septiembre de 1960 el titulado Club de Fútbol Calvo Sotelo, sociedad presidida por Ramón Tobar Ochoa de Alba quien, en colaboración con el consistorio local, llegó al acuerdo de emplear provisionalmente el Campo da Feira mientras se emprendía la construcción de uno nuevo jugando también en las instalaciones de la propia Calvo Sotelo. La decisión fabril supuso la desaparición del C.D. Puentes al considerarse más conveniente disponer de un club donde volcar y gestionar de una forma directa su economía que no patrocinar uno existente controlado por terceros.

Siendo que el ánimo de la empresa pasaba por inscribir el club en la Federación Gallega, rubricado el 28 de septiembre y competir dentro del fútbol organizado, empleando como colores iniciales camisa rojiblanca con pantalón negro se partió desde Primera Regional, conocida en Galicia como Serie A, concluyendo la temporada 60/61 en sexto puesto. El 18 de julio de 1961, como se había acordado, se inauguró el Estadio Municipal O Poboado provisto de pista de atletismo invitándose al Arsenal C.F., de Ferrol, al que se derrotó por 2-1, siendo primero en la campaña 61/62 aunque, en la Promoción de Ascenso, no se consiguió el objetivo de acceder a Tercera División al ser tercero. Convertida esta categoría en la meta a conquistar, en la sesión 62/63 habiendo permutado el pantalón negro por uno azul y luciendo el logo de la empresa como escudo, fue segundo en Liga precedido por la S.D. Compostela escapándose nuevamente el ascenso en la Promoción al resultar otra vez tercero, reforzándose la plantilla en la edición 63/64 con el propósito de no errar, como así sucedió pues, primero en Liga, luego en la Promoción fue primero ascendiendo a Categoría Nacional junto al C.D. Arenteiro.

En la temporada 64/65, siendo presidente Fernando Alarcón Hernández, se debutó en Tercera División compitiendo en el Grupo I junto a parte de los más distinguidos clubs gallegos en un campeonato igualadísimo donde, empatado a puntos con seis rivales, tuvo la mala fortuna de tener el peor balance goleador perdiendo la categoría. De nuevo en Primera Regional, en la campaña 65/66 la empresa decidió cambiar los colores pasando a vestir íntegramente de azul quedando segundo tras igualar a puntos con el ferrolano Arsenal C.F. por lo que, en aplicación del nuevo sistema competitivo, logró ascender a Tercera División. En el Grupo I gallego, por entonces tercer nivel nacional con jugadores profesionales, los coruñeses terminaron decimosegundos la campaña 66/67, anunciando la Federación Española en 1967 un ambicioso plan a desarrollar durante varios años por el cual la Tercera División pasaría de quince a cuatro grupos con veinte participantes respectivamente. Esta medida condicionó la sesión 67/68 sabiéndose que los clasificados desde el puesto decimoprimero al último descenderían a Primera Regional, no pudiendo el conjunto pontés aguantar el tipo al quedar decimotercero.

El retorno a la Serie A se vivió con consternación pero mirando hacia adelante, luchando durante la edición 68/69 para ser primero y ascender directamente, sueño que no se cumplió al concluir tercero. En el curso 69/70 al C.F. Calvo Sotelo le faltaron pilas y se mantuvo alejado de lo primeros puesto finalizando en decimoprimero puesto.

1970 – 1980

Con plaza en la Serie A equivalente en la Federación Gallega a la Regional Preferente de otras federaciones territoriales, el C.F. Calvo Sotelo no tuvo un arranque de década excesivamente brillante concluyendo decimotercero en la temporada 70/71 y decimoséptimo en la campaña 71/72, puesto que le condenó a la pérdida de la categoría descendiendo a Primera Regional, el segundo nivel regional ante la decepción lógica de sus aficionados. Durante el verano de 1972 urgía salir a flote lo antes posible y para el torneo 72/73 se preparó una plantilla adecuada para tal fin saliendo campeón con cierta holgura y sin perder un solo encuentro de los dieciséis disputados por lo que regresó a la Serie A, cambiando en 1973 de nombre a Club Deportivo Endesa como consecuencia de la reorganización de esta empresa dependiente del Estado que pasó a ser la administradora de la explotación de las minas locales y de la central térmica.

El desarrollo de la sesión 73/74 mantuvo en vilo a lo azules quienes, finalizando decimoctavos empatados a puntos con el Ribadavia Atlético, se libraron del descenso gracias al gol average favorable, algo que no se pudo evitar en la siguiente edición 74/75 al repetir en la decimoctava plaza a tres puntos de la salvación. Los años setenta se estaban presentando duros con un club ascensor que, tan pronto como ascendía volvía a descender, siendo la Segunda Regional de la temporada 75/76 un destino amargo que no pudo abandonar una vez terminado el curso al ser subcampeón tras la S.D. Cedeira y sólo ascender el primer clasificado.

El panorama deportivo del C.D. Endesa no mejoró lo suficiente en la campaña 76/77 ocupando finalmente el cuarto puesto, consiguiendo el ascenso de categoría al término de la sesión 77/78 cuando la Federación Gallega, aprovechando la inercia de la Federación Española también en plena reestructuración de las categorías, creó un grupo único de Primera Regional al que accedieron los fabriles al ser terceros en Liga. El salto supuso un aliciente para sus seguidores al contender frente a clubs de toda la región y no sólo coruñeses, afrontándose la edición 78/79 con franco optimismo que se vio refrendado con un quinto puesto muy distinto al conseguido en el campeonato 79/80 donde quedó relegado a la decimocuarta posición.

1980 – 1990

Los años ochenta supusieron para el club pontés un cambio radical en sus expectativas de crecimiento y el alcance de cotas insospechadas apenas unos años atrás aunque, antes de conseguirlas, todavía debieron pasar muchas cosas. Al estar previsto que, para 1981 quedase desdoblado el grupo único de Regional Preferente, la Federación Gallega aprobó el ascenso de los trece primeros clasificados de Primera Regional durante la temporada 80/81, siendo los ponteses unos de los beneficiados al quedar decimosegundos, debutando en esta categoría a lo largo de la campaña 81/82 con buen pie al ser sextos. Siendo presidente Ricardo Barredo González, la sesión 82/83 fue un poco mejor alcanzándose el quinto puesto, aumentándose el presupuesto para la edición 83/84 que resultó exitosa pues, además de cambiar de nombre a Club Deportivo Endesa As Pontes vistiendo ya pantalón de color blanco, fueron segundos en Liga a dos puntos del C.D. Boiro quien logró ascender directamente. Clasificados para la Promoción de Ascenso a Tercera División, en esta fase se echó el resto logrando imponerse a los orensanos del C.D. Rúa después de empatar 0-0 en casa y, una semana más tarde, vencer 1-2 en el encuentro de vuelta, resultados que le catapultaron hasta Categoría Nacional.

La Tercera División de estos años, cuarto nivel nacional desde que en 1977 se implementara la Segunda División B, fue un gran atractivo tanto para el club como para sus seguidores aportando la empresa energética el suficiente capital con vistas a reunir un buen plantel que no defraudara deportivamente. La temporada 84/85 dentro del Grupo I gallego, sin embargo, no fue brillante, se sumaron tan solo ocho victorias y quince empates, pero se sentaron las bases para, sobre esa plantilla, asentar un proyecto más ambicioso.

Cumpliendo con el objetivo de mejorar en gran medida lo existente, durante el verano de 1985 llegaron hasta As Pontes nuevos jugadores que aumentaron el nivel considerablemente hasta el punto de mantener un apasionado duelo con el C.D. Lugo por el título que fue a parar a manos de los rojiblancos por apenas cuatro puntos, alimentando con ello la posibilidad real de hacer algo grande. Según el sistema competitivo de la época, tanto primero como segundo accedían a disputar la Promoción de Ascenso para tratar de alcanzar la Segunda División B, categoría de renombre a la que no se deseaba renunciar; todo lo contrario. La eliminatoria de Semifinales fue ante la Cultural y Deportiva Leonesa empatando ambos clubs en el Estadio de O Poboado 1-1, resultado incierto con el que se afrontó el encuentro de vuelta donde se empató 0-0 llegándose hasta los lanzamientos de penalti favorables a los ponteses. Superado este escollo, en la Final se vieron las caras con el Club Polideportivo Almería, venciendo los azules en casa por 1-0 con una muy dolorosa derrota en la vuelta por 2-0 que les apeaba por el merecido ascenso.

En 1986, viendo la Federación Española el fracaso que había supuesto reducir los dos grupos de Segunda División B a uno único, comunicó a todas las federaciones territoriales cambios para 1987 donde esta categoría contaría con cuatro grupos de veinte participantes respectivamente, otorgando a la Federación Gallega cinco plazas para los cinco primeros clasificados en la temporada 86/87. El conjunto coruñés no quiso en absoluto perderse tal cita y, con un equipo de garantía, conquistó el campeonato y correspondiente título con tes puntos de ventaja sobre el C.D. Arenteiro, obteniendo un histórico ascenso a la categoría de bronce donde ansiaba encontrare con clubs históricos del fútbol nacional.

Siendo presidente Fermín Gil Alonso y entrenador José López Rodríguez, el C.D. Endesa As Pontes quedó ubicado en la campaña de su debut en Segunda División B 87/88 dentro del Grupo I junto a rivales gallegos, asturianos, vascos, cántabros y castellano-leoneses consiguiendo una meritoria décima plaza sin pasar apuro, siendo bastante mejor la siguiente sesión 88/89 en la que, prácticamente con lo mismos rivales, salió airoso con un séptimo puesto sumando diecisiete victorias dirigido primero por López Rodríguez a lo largo de treinta y seis encuentros ocupando el banquillo los dos últimos Víctor Pellón «Calpita». Después de tan notable torneo la edición 89/90 fue bien distinta incorporándose al grupo clubs madrileños y no lográndose despegar de los puestos de cola por lo que, después de doce jornadas, el técnico Elías Noval fue sustituido provisionalmente por «Calpita» haciéndose cargo las últimas veinticuatro Luis Rodríguez Vaz con quien se terminó decimocuarto eludiéndose el descenso por dos escasos puntos.

1990 – 2000

Con el cambio de década el C.D. Endesa As Pontes siguió acomodado en Segunda División B compitiendo en el Grupo I compartiendo el torneo 90/91 con gallegos, asturianos, madrileños y castellano-leoneses estando dirigido por Luis Rodríguez Vaz terminando en decimocuarto puesto pero con la salvedad de disfrutar de un margen considerable de puntos respecto a las plazas de descenso. La temporada 91/92, nuevamente con Rodríguez Vaz en el banquillo, fue la mejor de su historia en esta categoría siguiendo en el Grupo I pero con rivales de diferente procedencia geográfica pues, a los habituales gallegos, asturianos y cántabros, se sumaron castellano-leoneses, riojanos y navarros concluyendo en un magnífico cuarto puesto precedido por U.D. Salamanca, C.D. Lugo y Real Sporting de Gijón «B» por lo que, aplicando el sistema competitivo de la época, conquistó merecidamente un puesto para disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División. Con la lógica ilusión para los aficionados ponteses, esta liguilla supuso una guinda a tan sobresaliente campeonato aunque luego, obre el terreno de juego, tan solo se obtuvieron dos empates terminando colista superado por Club Atlético Marbella, Yeclano C.F. y A.E.C. Manlleu ascendiendo lo malagueños.

La campaña 92/93, sexta consecutiva en el tercero nivel nacional, fue sin embargo un drama. A la marcha de importantes jugadores y muchas caras nuevas hubo de añadir la de Rodríguez Vaz que fue sustituido por José López Rodríguez, concluyendo decimoséptimo empatado a puntos con el Tomelloso C.F. quien logró salvarse. Descendido a Tercera División, el conjunto pontés se reencontró con el Grupo I gallego conservando parte de la plantilla del curso anterior y cierto potencial económico con el que quedó tercero en la Liga 93/94 tras Bergantiños F.C. y Fabril Deportivo. Este puesto le permitió disputar la Promoción de Ascenso a Segunda División B, siendo su participación débil al sumar tres empates concluyendo colista tras C.D. Móstoles, Caudal Deportivo y C.D. Salmantino.

En la sesión 94/95 el C.D. Endesa As Pontes fue el gran dominador del Grupo I gallego conquistando su segundo título en la categoría aventajando al Viveiro C.F. en cinco puntos, disputando por segunda vez en poco tiempo la Promoción de Ascenso a Segunda División B en esta ocasión con mayor fortuna al comandar el grupo que le correspondió, marcando un punto de distancia respecto al C.D. Leganés «B» por lo que obtuvo el ansiado ascenso siendo tercero y cuarto respectivamente C.D. Lealtad, de Villaviciosa y C.D. Salmantino. Ilusionada su afición y engalanado el Estadio de O Poboado para reencontrarse con el tercero nivel nacional, el regreso al Grupo I durante la temporada 95/96 se vivió junto a gallegos, castellano-manchegos, madrileños y la gran novedad de enfrentarse a clubs canarios, estando los coruñeses dirigidos por Francisco Delgado Melo a la altura al finalizar decimoterceros conservando la categoría además de eludir la Promoción de Descenso de la que le separó un punto.

En la campaña 96/97, siguiendo en el Grupo I, los clubs canarios fueron sustituidos por asturianos obteniendo los ponteses unos registros muy similares a los del torneo anterior, obteniendo la permanencia de manera muy justa al ser decimoquinto con un punto más que el Getafe C.F. quien jugó la Promoción de Permanencia. Estando el objetivo conseguido, en este segundo ciclo en la categoría de bronce y siguiendo Delgado Melo al frente del banquillo azul, se afrontó la sesión 97/98 con idénticas condiciones a los años anteriores pero distinto lance final pues, decimoséptimo clasificado, descendió a Tercera División separándole un punto de disputar la Promoción de Permanencia. Tras el varapalo que significó no conservar su plaza, la edición 98/99 no fue tan exitosa como su anterior comparecencia en la categoría permaneciendo alejado de los puestos de cabeza y finalizando en noveno puesto, recuperándose un tanto en el campeonato 99/00 al ser séptimo.

2000 – 2010

La primera década del nuevo siglo trajo cambios importantes en la entidad coruñesa, fundamentalmente económicos con la merma en los presupuestos al no aportar la empresa Endesa las mismas cantidades que otrora, a pesar de que la temporada inicial 00/01 fue bastante buena al quedar segundo en Liga tras un inalcanzable Real Club Celta de Vigo «B» que le permitió promocionar para tratar de ascender a Segunda División B. En esta fase, dentro del grupo que le tocó, consiguió dos victorias en la liguilla insuficientes para ser primero, quedando este puesto para la Real S.D. Alcalá seguida de la U.P. Langreo mientras el C.F. Palencia fue cuarto y colista. En la campaña siguiente, 01/02, vino la debacle al ser decimoctavo por lo que descendió a Regional Preferente, una categoría que no se pisaba desde hacía dieciocho años.

Coincidiendo con el descenso y en correspondencia a un cambio estratégico, en el verano de 2002 la empresa Endesa decidió prescindir de mantener el club después de haberlo constituido y patrocinado durante cuarenta y dos años transmitiendo su férrea decisión a las autoridades locales quienes, al ver su carácter irrevocable, buscaron constituir una nueva Junta Directiva que se hiciera cargo de la sociedad y evitar así su desaparición. Halladas las personas adecuadas y asegurada su continuidad, se adoptó el nombre de Club Deportivo As Pontes conscientes de que los presupuestos no serían los de antaño y se iba a sufrir más de lo acostumbrado para acceder el día de mañana a Tercera División.

Con estas premisas los azules fueron séptimos en la sesión 02/03 y sextos en la 03/04, ocupando el tercero puesto en la temporada 04/05 tras Atlético Mineiro, de Santa Comba y Club Lemos por lo que pudo promocionar para tratar de ascender a Tercera División, eliminatoria en la que no tuvo suerte ante el Ponte Ourense C.F. puesto que, después de imponerse 1-2 en la capital ourensana, una semana más tarde perdió 1-2 en casa cediendo también desde el lanzamiento de penaltis por lo que se esfumó el objetivo. En la campaña 05/06 se repitió la tercera plaza teniendo una nueva oportunidad para ascender al promocionar frente al Porriño Industrial F.C., conjunto que le apeó al derrotarle en casa por 0-1 y empatar 0-0 en el encuentro de vuelta.

Tras estas dos promociones fallidas en las que no se pudo materializar el ascenso, el conjunto coruñés se alejó un tanto de los puestos de cabecera siendo octavo en la sesión 06/07 y quinto en la edición 07/08, concluyendo noveno en un mal curso 08/09 que fue considerado como un pésimo resultado. En la temporada que cerraba tan cambiante década, el C.D. As Pontes recuperó su autoestima al ser segundo en Liga empatado a puntos con el Mesón do Vento C.F., de Ordes, no requiriendo disputar de Promoción según el sistema competitivo por lo que ascendió a Tercera División, una categoría a la que se antojaba complicado regresar tras la marcha de Endesa.

2010 – 2020

La vuelta al Grupo I gallego de Tercera División fue como reencontrarse en casa de nuevo y, aunque se carecía del presupuesto que se disfrutó en otros tiempos, estar en la primera de las categorías regionales era todo un premio. Decimoprimero en la temporada 10/11, en la campaña 11/12 estuvo a un paso de perder la categoría pues, en un mal curso, quedó decimosexto empatado a puntos con el C.D. Estradense salvándose grasa al gol average favorable. Después del susto, en la sesión 12/13 se reforzaron las líneas y la plantilla mejoró ostensiblemente hasta alcanzar la sexta plaza, puesto que fue mejorado en la edición 13/14 al concluir quinto igualado a puntos con el Pontevedra C.F. quien sí pudo promocionar a Segunda División B quedándose los coruñeses con la miel en los labios.

La progresión del conjunto de la comarca de Eume parecía ir hacia arriba pero, nada más lejos de la realidad. La temporada 14/15 fue un regreso a la zona media siendo decimocuarto mientras que en la campaña 15/16 se concluyó en décima plaza, resultando un mal sueño la edición 16/17 en la que, pese a todos sus esfuerzos, no se evitó el descenso a Regional Preferente al terminar decimoctavo. El traspiés deportivo tuvo visos de ser reparado de inmediato en la Liga 17/18 al quedar tercero a dos puntos de Polvorín F.C., de Lugo y U.D. Paiosaco, de Laracha quienes ascendieron directamente, debiendo esperar los coruñeses a la Promoción donde se enfrentaron a la U.D. Atios, de O Porriño, empatando 0-0 en la ida y venciendo 4-1 en casa por lo que, según el Reglamento, le correspondía ascender. El descenso sin embargo de Racing Club Ferrol y C.C.D. Cerceda de Segunda División B a Tercera División y el no ascenso de ninguno de los cuatro primeros clasificados gallegos a la categoría de bronce acabó malogrando sus méritos. Despejado el camino, en la temporada 18/19 no se erró ocupándose el primer puesto por lo que se ascendió directamente a Tercera División, regresando al Grupo I gallego de forma titubeante al ser decimoséptimo en una campaña 19/20 que no se cerró a causa de una crisis sanitaria que obligó a detener el torneo restando todavía por disputar once jornadas.

2020 – 2030

La tercera década del nuevo siglo empieza con cambios en la temporada 20/21 puesto que, desde la Federación Española, se emprende una reestructuración competitiva en la que se decide suprimir la Segunda División B y la Tercera División creando dos nuevas categorías con vistas a la temporada 21/22 tituladas Primera División RFEF y Segunda División RFEF a las que se añade otro nivel denominado Tercera División RFEF. Mientras se modifica el sistema, la crisis sanitaria aleja a los aficionados de los estadios. El C.D. As Pontes ocupa la décima plaza en el Subgrupo II durante la Primera Fase lo que supone perder de facto una categoría, accediendo a la Segunda Fase junto a otros once rivales donde los cuatro primeros clasificados ingresan directamente en Tercera División RFEF, la nueva denominación del quinto nivel nacional. Debilitados deportivamente y ante un complicado reto, los coruñeses son decimoprimeros y vigésimo tercero en la general descendiendo dos categorías para instalarse en Regional Preferente, un duro revés para un club que había luchado por recomponerse.

La campaña 21/22 es dura y se concluye en octavo puesto.

 

Copyright Texto historiales LaFutbolteca.com

BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Club Deportivo As Pontes. 50º aniversario da sua federación. Antón Ferreiro (2011).
  • Anuarios de la RFEF.
  • El Correo Gallego. Diario.
  • El Ideal Gallego. Diario.
  • www.amigus.org (Web).
  • www.farodevigo.es Diario.
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

 ENLACES RELACIONADOS CON EL CLUB:

 

 

Historial del Real Aranjuez Club de Fútbol

 

DATOS GENERALES:

  • Nombre completo: Real Aranjuez Club de Fútbol
  • Ciudad: Aranjuez 
  • Provincia: Madrid
  • Comunidad Autónoma: Comunidad de Madrid
  • Fecha de constitución: 4 de agosto de 1948
  • Fecha de federación: 14 de septiembre de 1948

 

CAMBIOS DE NOMBRE:

  • Aranjuez Club de Fútbol (1948-1999)
  • Real Aranjuez Club de Fútbol (1999- )

 

TÍTULOS NACIONALES:

4 Ligas de Tercera División:

  • 1980/81
  • 1982/83
  • 1993/94
  • 1997/98

 

ESTADIO:

  • Nombre: Estadio Municipal El Deleite
  • Año de inauguración: 18 de febrero de 1996
  • Cambios de nombre:
  • Estadio Municipal El Deleite (1996- )
  • Capacidad: 6.000 espectadores

 

OTROS ESTADIOS:

  • Campo de Palacio o de la Cuerda (1948-1957)
  • Campo Municipal (1957-1996)
  • Estadio Municipal El Deleite (1996- )

 

TRAYECTORIA EN LIGA:

ESCUDOS DEL REAL ARANJUEZ CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

UNIFORMES DEL REAL ARANJUEZ CLUB DE FÚTBOL. EVOLUCIÓN HISTÓRICA:

ORÍGENES DEL FÚTBOL EN ARANJUEZ:

Situado en un apéndice al sur de la provincia de Madrid y lindante con la de Toledo, el municipio y ciudad de Aranjuez se enmarca en la confluencia entre los ríos Tajo y Jarama siendo desde hace varios siglos lugar de descanso de la Corona Real, motivo por el cual goza de un importante patrimonio histórico-artístico en el que destacan el Palacio Real, los jardines ornamentales, una considerable arquitectura cívica, militar e hidráulica por lo que su conjunto cultural ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad convirtiéndose en un gran centro de atracción turística. Con sesenta mil vecinos y tradicionalmente dedicadas sus tierras a la labranza, desde hace varias décadas su economía gira en torno al sector servicios y a la industria siendo su término municipal sede de destacadas empresas.

Iniciada la relación con el deporte desde finales del s.XIX cuando las carreras ciclistas se convirtieron en el máximo atractivo, contando con doce mil vecinos y una red de cuarteles militares al servicio de la Casa Real, la práctica del fútbol se originó en 1905 cuando un grupo de jóvenes empezó a jugar en la explanada de la Plaza de San Antonio, próxima al Palacio Real, decidiendo constituir el Aranjuez Foot-ball Club.

La existencia del Aranjuez F.C. no se alargó demasiado dada la inconsistencia de tan novel deporte entre la sociedad de aquellos tiempos, naciendo una nueva iniciativa en 1915 cuando, ya con cierta fama en todo el país, quedó constituido el Aranjuez Sporting Club. Vistiendo camiseta roja con pantalón azul y haciendo uso del Campo de la Plaza de San Antonio, esta sociedad logró ganarse más adeptos que su antecesor gozando del beneplácito del ayuntamiento local y de la creciente afición, siendo nuevamente los rivales ubicados en la ciudad de Toledo de índole cívico-militar y en menor medida Madrid, sus principales adversarios.

La trayectoria del Aranjuez Sporting Club, pese a nacer con gran fuerza, tampoco se alargó demasiado en el tiempo y, después de unos años de bastante actividad, se diluyó a finales de década ante la falta de interés de socios, practicantes y aficionados quedando quebrado su futuro en unos tiempos donde Aranjuez, con hipódromo inaugurado el 24 de mayo de 1917, tenía en las carreras de caballos un gran oponente. Comoquiera que el fútbol a principios de los años veinte ya había adquirido cierta solera, en 1923 surgió una tercera empresa con más empaque que las anteriores y dispuesta al fin a consolidarse entre la ciudadanía quedando constituida la Sociedad Deportiva Aranjuez.

Provista de una Junta Directiva con las ideas claras presidida por Deodoro Valle Grijalba, a su vez alcalde de la localidad y necesitados de un espacio mayor acorde a las dimensiones necesarias para jugar a nivel reglamentario, se solicitó permiso a Patrimonio Real para emplear la Plaza de Parejas cuyo trazado, paralelo al Palacio Real y con mayor amplitud, era idóneo para la práctica balompédica. Conseguida la autorización, la evolución de la S.D. Aranjuez fue rápida vallando con tablas de madera todo el perímetro y acordonando el área de juego para no ser invadida por los aficionados, decidiéndose casi de inmediato formalizar su ingreso en la Federación Regional del Centro con sede en Madrid donde quedó catalogado como club de Segunda Categoría, el tercer nivel federativo de la época.

En 1928, gracias a una solicitud cursada ante la Mayordomía de la Casa Real, se consiguió la presidencia de honor por parte de S.M. El Rey D. Alfonso XIII pasando a denominarse Real Sociedad Deportiva Aranjuez, siendo desde entonces este su nombre hasta que en 1931, a consecuencia de la implementación de la Segunda República, fueron prohibidas las referencias a la Casa Real y se volvió a Sociedad Deportiva Aranjuez. La trayectoria deportiva de este club que gozó de gran reputación durante los años treinta, especialmente entre los clubs toledanos de su más inmediato entorno geográfico a los que se enfrentó en numerosas ocasiones, se vio truncada con la Guerra Civil, paralizándose su actividad en julio de 1936 y no teniendo continuidad en los años siguientes.

HISTORIA DEL CLUB:

1948 – 1950

Finalizada la guerra el Campo de la Plaza de Parejas, conocido popularmente como Campo de la Cuerda o también de Las Tablas, quedó iniciado el año 1941 en poder del Sindicato de Educación y Descanso quien lo acondicionó para las prácticas deportivas de los muchachos del Frente de Juventudes y diversos clubs que, subvencionados por la Obra Sindical, necesitaran de su uso. Entidades y clubs locales como el EISA de la empresa Experiencias Industriales, el equipo de El Castillo, el CEPA, el Imperial F. de J., el equipo de Acción Católica o, más tarde, ya a mediados de los años cuarenta el Colegio Loyola se convirtieron en asiduos formándose incluso un campeonato con equipos de empresa que se disputaban una copa por ver quién era el mejor.

En una de estas, situados en 1948 y acabada la guerra hacía ya nueve años, aficionados de siempre se reunieron con la firme voluntad de dar forma a un club de fútbol que representara al municipio tras muchos años de intentos frustrados esperando el momento oportuno. Liderados por el que iba a ser su primer presidente, Mariano Martín Sosa, el 4 de agosto quedó constituido al fin el Aranjuez Club de Fútbol, eligiéndose como colores el rojo para la camiseta y el azul para el pantalón contándose en su primera plantilla con un buen número de jugadores procedentes de la empresa Gálvez, campeón de la Liga local de la temporada 47/48, quienes sirvieron de base y replicando el escudo de la ésta con ligeros retoques. En cuanto al recinto donde desarrollar su actividad, inscrito el club en la Federación Castellana en fecha 14 de septiembre y ubicado en Segunda Regional Ordinaria, el Campo de la Cuerda fue arreglado deprisa y corriendo para afrontar con un mínimo de garantías la temporada 48/49, terminando el club en primer lugar por lo cual ascendió a Segunda Regional Preferente.

Durante el otoño de 1949 el Campo de la Cuerda cambió su sentido y, en lugar de tener una disposición paralela al Palacio Real, se hizo una perpendicular teniendo conexión desde la Calle San Antonio hasta mitad de la plaza que fue inaugurada oficialmente el 9 de octubre, teniendo el Aranjuez C.F. una campaña 49/50 cómoda en la que fue tercero en Liga y, debido a una reestructuración de las categorías regionales, impulsado a Primera Regional lo cual significó su segundo ascenso consecutivo.

1950 – 1960

Al iniciarse los años cincuenta Aranjuez había duplicado su población superando los veinticinco mil habitantes, estrenándose durante la temporada 50/51 con un cuarto puesto en una Primera Regional que por entonces era el cuarto nivel nacional y donde competían clubs de solera domiciliados en la ciudad de Madrid dentro de un grupo único. En la campaña siguiente, 51/52, la categoría fue dividida en dos grupos luchando los ribereños por el primer puesto que conducía a la Promoción de Ascenso a Tercera División, objetivo que se escapó por poco en beneficio de una superior U.D. Girod. Interesados en el ascenso, en la sesión 52/53 siendo presidente José Jacoste Donate se consiguió el primer puesto en franca disputa con el Club Getafe Deportivo, posición que le valió el ansiado ascenso a Tercera División logrando además proclamarse campeón de la Copa Ramón Triana, aunque el título de la categoría fue a parar a manos del líder del otro grupo, el C.D. Marconi madrileño.

La Tercera División de aquellos años era refugio de clubs con importante pasado deportivo y nuevos, como el Aranjuez C.F. que, surgidos después de la guerra, deseaban seguir creciendo y hacerse un hueco entre los más destacados. Con carácter interregional, el debut de la edición 53/54 se llevó a cabo en el Grupo IV donde competían clubs extremeños, aragoneses y de la Federación Castellana que englobaba a clubs madrileños, castellano-manchegos y de las provincias castellanas de Ávila y Segovia, concluyendo el torneo en un honroso noveno puesto. En el curso 54/55 la Federación Española decidió duplicar los grupos de la categoría reduciendo la cantidad respectiva de participantes para aminorar las distancias, compitiendo los ribereños en el Grupo XVI limitado a diez clubs todos ellos vinculados a la Federación Castellana concluyendo en tercer puesto.

El Aranjuez C.F. apuntaba hacia un soñado ascenso a Segunda División y esa era la verdadera ilusión al competir, realizando una excelente temporada 55/56 en la que se clasificó en segundo puesto a un solo punto de la Ag.D. Rayo Vallecano. Esta plaza le permitió, como se perseguía, entrar en la Promoción para intentar ascender a la categoría de plata del fútbol nacional, fase extra donde, junto a otros siete rivales, aspiraba a dar la campanada y obtener el primer puesto que daba el ascenso directo. Envuelto en un grupo complicado, el Gerona C.F. fue quien se llevó el premio seguido de Ag.D. Rayo Vallecano, Ct.D. Manresa, Arenas S.D., de Zaragoza, C.D. Elgoibar y C.D. Ordizia, siendo lo rojillo séptimo con tres victorias, tres empates y ocho derrotas mientras colista resultó la U.D. Amistad zaragozana.

Demostrándose ser el Campo de la Cuerda, denominado oficialmente como Palacio, insuficiente para albergar a una creciente afición, en 1957 después de ser gestionado por el ayuntamiento presidido por el alcalde Carlos Richel López quien, a su vez, también era presidente del club, se construyó un nuevo recinto titulado Campo Municipal de Deportes situado en la calle del Foso, inaugurándose en la campaña 56/57 mientras lo rojillos terminaron octavos alejados de lo primero puestos. En la sesión 57/58 se repitió la octava plaza aunque mirando de reojo lo puestos de descenso en un Grupo XIV muy igualado y veinte participantes, misma situación que se repitió en la edición 58/59 rubricada con la decimosegunda posición, siendo más llevadero el curso 59/60 al ser sexto clasificado y no pasar tantos apuros.

1960 – 1970

Los años sesenta comenzaron siguiendo en el Grupo XIV jugando frente a clubs castellanos más la incorporación de extremeños, exigente prueba que requirió de más dinero para afrontar los desplazamientos al margen de disponer de una buena plantilla. Los ribereños no defraudaron y, después de ser noveno en la temporada 60/61, alcanzaron un notable séptimo puesto en la campaña 61/62. La sesión 62/63 adquirió otro cariz, más negativo recibiendo en ocasiones severas goleadas, no estando el equipo fino hasta el punto de terminar decimoquinto y penúltimo, evitando el descenso gracias a una ampliación de la Tercera División en la cual los clubs de la Federación Castellana fueron repartidos en dos grupos. Siguiendo en el Grupo XIV pero limitado a club castellanos, la tendencia mostrada en el último curso no varió un ápice resultando la edición 63/64 un desatino al encajar ochenta y tres goles en treinta encuentro, un guarismo que le hizo ocupar el decimosexto y último puesto descendiendo a Primera Regional.

Reencontrarse con la primera de las categorías regionales después de muchos años de ausencia fue recibido por la afición con la lógica frustración que ocasionan estos deslices deportivos, preparándose en la temporada 64/65 un plantel con el cual revertir la situación que salió a pedir de boca pues, como primer clasificado, suyo fue el ascenso directo a Tercera División. De regreso al Grupo XIV, el desarrollo de la campaña 65/66 fue tranquilo quedando en decimoprimero puesto, plaza idéntica a la conseguida en la sesión 66/67.

Antes de empezar la edición 67/68 la Federación Española anunció su plan para reestructurar la Tercera División queriéndola dejar en menos grupos y participantes para aumentar su calidad, decisión tras la cual se iba a pasar de quince a ocho grupos y más tarde a cuatro. Advertidos todos los clubs de que los clasificados más allá del decimoprimero puesto inclusive perderían la categoría, lo rojillos intentaron sobrevivir a esta sangría in suerte pues, decimosegundos, el descenso a Primera Regional fue inevitable. El curso 68/69 se vivió pues en Regional lo mejor que se pudo terminando en décima plaza sin opciones de estar arriba, cerrando la década con una sexta plaza en el campeonato 69/70 en espera de tiempos mejores.

1970 – 1980

Los años setenta fueron un periodo de inestabilidad deportiva, institucional y federativa con continuos cambios que no sentaron bien en el club de la ribera del Tajo. Compitiendo en Primera Regional, la temporada 70/71 finalizó con un octavo puesto al que le siguió una decimoprimera plaza en la campaña 71/72, anunciando en 1972 la Federación Española dar prioridad a los equipos de aficionados de los grandes clubs a los que se deseaba promocionar por delante de los modestos. Como resultado de esta polémica decisión federativa, en la edición 72/73 los clasificados desde el decimoprimero puesto incluido perderían la categoría ante la inminente creación de la Regional Preferente, no superando la prueba los rojillos quienes, decimosextos, se vieron directamente afectados. La sesión 73/74 se afrontó siguiendo en Primera Regional ahora convertida en el quinto nivel nacional concluyendo en octavo puesto, misma plaza que se obtuvo en el curso 74/75.

La crisis deportiva y económica que se vivió en el club a lo largo de aquellos años no tuvo fin en este campeonato y peor resultó la temporada 75/76 en la que fue decimoquinto descendiendo a Segunda Regional, una categoría convertida en sexto nivel del que había de salir lo antes posible como así fue ya que, una vez concluida la campaña 76/77, los rojillos consiguieron el primer puesto retornando a Primera Regional. La entrada de una nueva directiva estaba dando sus frutos y la sesión 77/78 fue de nuevo exitosa al liderar uno de lo dos grupos en los que quedó dividida esta categoría, ascendiendo con ello directamente a Regional Preferente. El estreno en esta categoría de la edición 78/79 condujo a los ribereños hasta el séptimo puesto, siendo igualmente fecundo y provechoso el curso 79/80 cuando, después de anunciar la Federación Española una ampliación de grupos en Tercera División para la primera de las temporadas de la siguiente década concediendo la administración de uno a la Federación Castellana, los rojillos fueron subcampeones a un solo punto de la U.B. Conquense ascendiendo a Categoría Nacional.

1980 – 1990

Presente en el Grupo VII y lanzado como venía desde años atrás sumando varios ascensos, de grato recuerdo fue la temporada 80/81 al conquistar su primer título en la categoría aventajando en seis puntos al C.D. Colonia Moscardó, obteniendo el pase a una Promoción de Ascenso a Segunda División B que por entonces se disputaba con eliminatorias directas a doble encuentro ascendiendo quien superase las dos que había. Ilusionada toda la afición ante la posibilidad real de tomar una plaza en la categoría de bronce, todo quedó en nada pues en su enfrentamiento de Semifinales ante el C.F. Reus Deportiu, nada salió bien y a una derrota en casa por 0-2 le siguió otra en tierras catalanas por 1-0 quedando apeados.

Tras el mazazo que supuso no ascender, el desarrollo de la campaña 81/82 fue muy diferente terminando en la decimosegunda plaza, puesto que no se esperaba después de lo momentos vividos en el curso anterior, resultando la sesión 82/83 la otra cara de la moneda al conquistar su segundo título de la categoría. En esta ocasión, con cinco puntos de ventaja sobre el C.D. Manchego, de Ciudad Real, de nuevo brotaron las esperanzas ante la posibilidad de ascender máxime tras eliminar al Club Atlético Marbella en Semifinales con un 0-1 en tierras malagueñas y un empate 0-0 en casa que les plantó en la Final. En esta segunda oportunidad en un corto espacio de tiempo, el rival fue el C.D. Ensidesa de la localidad asturiana de Avilés, conjunto fabril que se impuso en la ida por 3-1 y a quien en casa, una semana después, sólo se le pudo derrotar por 2-1 yendo el ascenso a parar hacia los astures ante la frustración de lo aficionados rojillos.

El destino se estaba mostrando cruel con los madrileños y en las siguientes ediciones se anduvo lejos de las primeras plazas terminando décimo en la 83/84 y octavo en la 84/85. En el verano de 1985 la Federación Española manifestó su voluntad de reducir los dos grupos de Segunda División B existentes a uno sólo ocasionando, una vez concluido el torneo 85/86, el descenso de numerosos clubs a Tercera División, siendo varios los de la Federación Castellana que se vieron afectados habilitándose un lógico hueco en el Grupo VII por lo que los clasificados a partir del puesto decimocuarto inclusive, terminaron con sus huesos en Regional Preferente, entre ellos el Aranjuez C.F. que había quedado decimoquinto.

La mala fortuna parecía cebarse con los ribereños y, una vez más, hubo que echar toda la carne en el asador en la temporada 86/87 para recuperar el puesto perdido, consiguiéndolo de forma plácida al ser segundo precedido por el C.D. San Fernando pero con la ventaja que, ante la constitución de la Federación Madrileña y la Federación Castellano-Manchega, a ambas les fue concedido respectivamente un grupo propio en Tercera División admitiendo con ello más participantes. El regreso por la vía rápida del Aranjuez C.F. al cuarto nivel nacional fue vivido con intranquilidad en la campaña 87/88 concluyendo decimocuarto pero a escasos puntos del descenso, siendo más preocupante incluso la sesión 88/89 en la que, igualado a puntos con el C.D. Fuencarral, se salvó del descenso gracias al gol average favorable. En la edición 89/90, en cambio, el octavo puesto les devolvió la confianza.

1990 – 2000

La década de los años noventa es, hasta la fecha, la mejor del conjunto rojillo pues, casi sin esperarlo, se consiguió alcanzar el tercer nivel nacional identificado como Segunda División B en una categoría subdividida en cuatro grupos con veinte participantes respectivamente que consiguió atraer a las gradas del Campo de Deportes a grandes masas de aficionados. Y eso que no se empezó nada bien pues, después de un noveno puesto en la Liga 90/91, pocos esperaban lo que iba pronto a ocurrir. Más grata e indudablemente histórica resultó la temporada 91/92 cuando, segundo tras el Real Madrid C.F. «C» del que le separaron cinco puntos, clasificado para participar en la Promoción de Ascenso mantuvo un fuerte duelo con el Bergantiños F.C., de la localidad coruñesa de O Carballiño del que salió airoso terminando empatados a puntos pero siéndole favorable el ascenso gracias a haber vencido y empatado con los gallegos en su doble enfrentamiento quedando tercero y cuarto respectivamente, U.P. Langreo y Club Atlético Bembibre.

Conseguida una plaza en Segunda División B llegaba lo más duro, mantenerla, estrenándose en la categoría de bronce durante la campaña 92/93 dentro del Grupo I junto a clubs madrileños, gallegos, castellano-leoneses, castellano-manchegos y asturianos con poca fortuna dado que ninguno de los cuatro entrenadores con los que contó, fueron capaces de levantar la moral de un conjunto que finalmente terminó decimonoveno a cuatro puntos de la salvación. Descendido a Tercera División, la sesión 93/94 ofreció otra cara con un club claro aspirante al ascenso que no dejó lugar a dudas puesto que, primero en el Grupo VII con cuatro puntos de ventaja sobre el C.F. Fuenlabrada, en la Promoción de Ascenso ratificó su buen estado de forma comandando una liguilla donde le acompañaron C.D. Lealtad, de Villaviciosa, Fabril Deportivo y Club Atlético Bembibre que le devolvió rápidamente a Segunda División B como deseaban.

Ubicado nuevamente en el Grupo I con la novedad de enfrentarse a club canarios, la temporada 94/95 fue complicada y estresante con un plantel que veía el descenso muy de cerca todo y pese a la gran igualdad reinante. Contando con el técnico Ángel Jaráiz, al final se terminó en decimocuarto puesto distanciándole dos escasos pero vitales puntos de perder la categoría recién adquirida. En la campaña 95/96, con Máximo Hernández en el banquillo y segunda consecutiva en este segundo ciclo en la categoría de bronce, los ribereños consiguieron la mejor clasificación histórica en esta categoría al finalizar en octavo puesto para satisfacción de sus seguidores aunque no fue la única alegría del campeonato pues en fecha 18 de febrero de 1996, aprovechándose la visita en Liga de la U.D. Las Palmas, se inauguró el flamante Estadio Municipal El Deleite con amplia tribuna cubierta, gradas en todo el perímetro y capacidad para seis mil localidades aunque con derrota por 0-3. La pérdida de sus mejores pilares en la sesión 96/97 fue determinante para no tener continuidad en el tercero nivel nacional pues, primero con Tomás Fernández y luego José Antonio Fernández en el banquillo desde la jornada veintiséis, un solo punto de diferencia les hizo perder la categoría al concluir decimoséptimos.

El regreso al Grupo VII madrileño de Tercera División durante la edición 97/98 se hizo conservando gran parte de la plantilla del curso anterior quienes, junto a unos cuantos refuerzos, se proclamaron campeones de Liga con amplia ventaja respecto a sus rivales. Clasificados para disputar la Promoción de Ascenso donde había depositadas grandes esperanzas, una inesperada derrota ante el pontevedrés C.D. Lalín en tierras gallegas con el que igualaron a puntos les apeó del merecido ascenso siendo acompañados en el grupo por U.D. Salamanca «B» y Navia C.F. Desaprovechada tan importante oportunidad, en la temporada 98/99 no se pasó del séptimo puesto destacando en el aspecto institucional bajo la presidencia de Emilio Donoso la aprobación en enero de 1999 de la solicitud enviada a la Mayordomía Real para ser el club presidido honoríficamente por S.M. El Rey D. Juan Carlos I. Cambiada la denominación a Real Aranjuez Club de Fútbol, la campaña 99/00 se concluyó en una mediana decimoprimera plaza que no satisfizo a nadie.

2000 – 2010

Después de vivir los mejores momentos de su historia deportiva, el cambio de siglo ofreció una cara totalmente diferente para el club ribereño. Inmerso en una crisis deportiva y, sobre todo, económica, las cuentas no daban para más iniciándose la década con plantillas ajustadas para lo que era la Tercera División y conscientes de que su continuidad en la categoría estaba amenazada. Después de ser décimo en la temporada 00/01, el descenso no se hizo mucho de rogar llegando en la campaña 01/02 cuando, con un plantel de circunstancias, se concluyó vigésimo primero y colista sumando tan solo tres victorias. Descendidos a Regional Preferente, los rojillos pudieron salir del bache rápidamente en la sesión 02/03 con bastante fortuna dado que, cuartos en Liga, el ascenso de tres clubs madrileños a Segunda División B originó unas vacantes que fueron completadas por los mejores clasificados de Regional Preferente no ascendidos siendo el Real Aranjuez C.F. uno de los beneficiados.

Este golpe de suerte sin duda fue aprovechado por los ribereños enlazando tres temporadas consecutivas en el Grupo VII madrileño de Tercera División, siendo la mejor y más holgada la 03/04 con un decimoquinto puesto pero a gran distancia en punto del descenso, más apurada la 04/05 al ser decimosexto pero con un colchón importante respecto a los últimos clasificados y desastrosa la 05/06 en la que terminó vigésimo y colita con seis victorias descendiendo a Regional Preferente.

El descenso no hizo sino reafirmar que no eran buenos tiempos y en la campaña 06/07, decimosexto, se encadenó un segundo descenso consecutivo yendo a parar a Primera Regional, una categoría que no pisaba desde hacía muchísimos años ahora convertida en sexto nivel nacional. El tropiezo se agrandó todavía más en la sesión 07/08 cuando, favorito para el ascenso, terminó tercero no pudiendo consolidar su recuperación hasta la edición siguiente 08/09 al ser primero con bastantes puntos de holgura respecto al segundo clasificado. Conseguido el ascenso a Regional Preferente, tan oscilante década se cerró en el curso 09/10 terminando séptimo.

2010 – 2020

La segunda década del s. XXI no trae demasiados cambios en el club madrileño y su futuro pasa por constantes altibajos moviéndose entre el cuarto y quinto nivel en un panorama regional donde, a nivel futbolístico, existen un gran número de clubs con sus mismos intereses y bastantes por encima de su potencial económico. Estas dificultades provocan que los rojillos se estanquen y acomoden en unas categorías alejadas de la élite siendo escasa la presencia de aficionados en unas gradas del Estadio Municipal El Deleite casi vacías.

La primera temporada, 10/11, siguiendo en Regional Preferente se salda con el quinto puesto, consiguiendo en la campaña 11/12 el ascenso directo a Tercera División al proclamarse campeón de la categoría. Militar en el Grupo VII madrileño es el techo deportivo para los del Tajo y, después de concluir la sesión 12/13 en un satisfactorio décimo puesto, en la edición 13/14 vuelven a descender al resultar decimonovenos. El regreso a Regional Preferente vuelve a ser un hueso duro de roer en una categoría donde es relativamente fácil caer pero muy complicado salir de ella. Conscientes de sus aspiraciones reales, el Real Aranjuez C.F. deambula por la categoría sin oportunidades de ascenso, alejado de los primeros puestos terminando decimosegundo en la edición 14/15 y décimo en el curso 15/16.

Séptimo clasificado en la temporada 16/17, esta plaza será repetida en la campaña 17/18 teniendo, de nuevo, un bajón deportivo en la sesión 18/19 al concluir decimosegundo. En la edición 19/20, yendo bien en la clasificación segundo tras el Móstoles C.F., la crisis sanitaria destapada en marzo de 2020 provoca que la Federación Española cese las competiciones restando en el grupo de los rojillos todavía once jornadas por diputar, llegándose casi a la finalización de la temporada y sin visos de cambiar la situación a que la Federación Madrileña tome la decisión de ascender a los ribereños a Tercera División arreglo al puesto en la tabla.

2020 – 2030

El regreso del conjunto ribereño a Tercera División durante la temporada 20/21 coincide con una etapa de amplios cambio donde la Federación Española, con vistas a una importante reestructuración de las categorías nacionales, suprime la Segunda División B y Tercera División tradicionales creando dos nuevas categorías con vistas a la temporada 21/22 tituladas Primera División RFEF y Segunda División RFEF a las que se añade otro nivel denominado Tercera División RFEF que establecen cambios en el sistema competitivo. Alojado en el Subgrupo II, la actuación del Real Aranjuez C.F. es deficiente y termina décimo y penúltimo por lo que disputa la Promoción de Permanencia siendo noveno en esta fase y vigésimo primero en Liga descendiendo a Regional Preferente. En la campaña 21/22 contando con una plantilla reforzada el objetivo es ascender a la recién creada Tercera División RFEF, quinto nivel que se consigue no sin dificultades pues, en un cuádruple empate a puntos, el madrileño R.S.C. Internacional F.C. y los rojillos -segundos- salen beneficiados a costa de Móstoles C.F. y Club Atlético de Pinto que se quedan con la miel en los labios.

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BIBLIOGRAFÍA Y HEMEROGRAFÍA:

  • Enciclopedia Fútbol 1950/51. Ángel Rodríguez y Francisco Narbona (1951).
  • Historia básica de los principales clubs de fútbol españoles. Vicent Masià Pous (2009).
  • Anuarios de la RFEF.
  • La Correspondencia de España. Diario.
  • El Eco Toledano. Diario.
  • La Noche. Diario.
  • El Avisador Numantino. Diario.
  • Archivo privado de José Luis Lindo Martínez.
  • Historia estadística del Aranjuez CF. (Facebook).
  • www.as.com Diario.
  • www.marca.com Diario.

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